Universidad Galileo

Doctorado en Administración con especialidad en Alto Desempeño

Curso: Alto Desempeño
Docente: Dra. Zulma Violeta Florian Carbonel

Bioética y su relación en el Alto Desempeño Empresarial

Velvlet Elizabeth Sandoval López

Carné: 9811814

Guatemala 19 de agosto de 2021

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Contenido

Introducción.......................................................................................................................................2
Cuadro Sinóptico................................................................................................................................3
¿Cómo surge la bioética?...................................................................................................................4
Orígenes del término.........................................................................................................................4
Liderazgo Bioético..............................................................................................................................6
Empresa, bioética y responsabilidad..................................................................................................8
Los cuatro principios de la bioética....................................................................................................9
 El principio de autonomía....................................................................................................10
 El principio de no maleficencia.............................................................................................10
 La beneficencia es la obligación...........................................................................................11
 El principio de la justicia.......................................................................................................11
Lecciones Aprendidas.......................................................................................................................12
Referencias.......................................................................................................................................13
Anexos..............................................................................................................................................14
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Introducción
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Cuadro Sinóptico
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Bioética y su relación en el Alto Desempeño Empresarial

¿Cómo surge la bioética?

La manifestación más antigua de la bioética data del siglo V a.C, cuando el médico griego
Hipócrates redactó junto a sus discípulos el juramento que llevaba su nombre.
El juramento hipocrático es un texto ético que recoge las obligaciones morales de los
médicos para con sus pacientes, con el objetivo de orientarlos en su labor profesional.
Todavía hoy en día, cuando un estudiante de medicina termina sus estudios debe
enfrentarse a este último ritual.

Otros dos documentos clave que sentaron las bases de lo que posteriormente sería la
bioética moderna son el Código de Núremberg y la Declaración de Helsinki.

Orígenes del término

Van Rensselaer Potter empleó por primera vez el término bioética en 1970 en su artículo
“Bioética: la ciencia de la supervivencia”. Un año más tarde, reafirmó su uso con la
publicación del libro Bioética, un puente hacia el futuro. En ambos textos, el bioquímico
estadounidense pretendió unificar en una única disciplina tanto la biología, como la
ecología y la filosofía.

De acuerdo con lo propuesto por Rensselaer, la bioética obliga, a nivel mundial, a

establecer un vínculo entre la ciencia experimental y las humanidades, para que la
responsabilidad se tome como eje principal, tanto en la toma de decisiones como en los
procedimientos, siempre en beneficio del hombre y de su entorno natural.

Esta relación registra un despunte con el auge de las tecnologías, ya que posibilita que los
seres humanos alteren su entorno y decidan sobre sus iguales, lo que puede
desencadenar resultados adversos. Debido a la relevancia del tema, el 19 de octubre de
2005, en París, la Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la
Educación la Ciencia y la Cultura adoptó la Declaración Universal sobre Bioética y
Derechos Humanos. Desde entonces, las industrias dedicadas al ámbito de la salud han
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hecho propias las demandas de la bioética en el desarrollo de sus actividades productivas,

con miras a que sus procesos cumplan con este elemento, pues garantiza en gran medida
el respeto por la vida en todos los niveles.

La bioética surge por tanto como un intento de establecer un puente entre la ciencia
experimental y las humanidades (Potter, 1971). De ella se espera una formulación de
principios que permitan afrontar con responsabilidad también a nivel global las
posibilidades enormes, impensables hace solo unos años, que hoy nos ofrece la ciencia y
la tecnología.

En el mismo orden de ideas, la bioética se despliega en una nueva asignatura que sirve de
reflexión profunda para el juicio de toda acción humana. Actualmente, la bioética “es
clave para trabajar por un cambio de paradigma que transforme las bases de la cultura y la
educación predominantes en el mundo global en el que vivimos” (Cantú, 2014).

La bioética, lejos de definirse por unos contenidos, quedaría mejor identificada como una
forma de usar las deliberaciones morales para articular y fundamentar principios que son
aplicados en circunstancias específicas en la identificación de núcleos dilemáticos en la
vida social. De esta manera, la bioética es concebida para estimular el sentido humano, a
través del enfoque de todos nuestros actos en favor del pensamiento altruista con
nuestros semejantes, permitiendo la interrelación con el mundo que habitamos,
consolidando de forma relevante el sentido de respeto y preservación de la humanidad.

El pregonar bioético, incita desde una cosmovisión gerencial/organizacional, fomentar una

nueva consciencia gerencial, que garantice la supervivencia de la especie humana en
todas sus manifestaciones de vida.

En este punto, la bioética contempla los principios de las personas juntamente con la
manera de hacer las cosas, tratando de orientarlas en un sentido racional hacía el entorno
como un espacio de confluencia de saberes en el que se subraya la necesidad de respetar
la multiplicidad de las voces, así el diálogo y la tolerancia son ingredientes fundamentales
para un impacto favorable en la sociedad. De modo que es imperativo incorporar la
formación bioética en las organizaciones actuales, de esta forma los valores de
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conservación ambiental, respeto al prójimo como al medio ambiente, serán insertados en

todos los procesos, bienes o servicios, los cuales pretenden potenciar a la sociedad con el
devenir de los años.

Liderazgo Bioético

El Liderazgo, la Bioética y los Sistemas Orgánicos Complejos, como las diferentes

categorías taxonómicas para relacionarse con los diferentes grupos u organismos a lo
interno/externo de las empresas, así como con la sociedad y demás subsistemas
compuestos por instituciones, organizaciones, comunidades, entre otros; se procede a
identificar el enfoque sobre el Liderazgo Bioético, destacando la importancia del uso de la
perspectiva del Pensamiento Complejo.

En general, las organizaciones son complejas, refiriéndose a las múltiples lógicas y

diversidad de fuerzas, es decir, a las racionalidades subyacentes de cada sujeto que
interactúa en y con la organización.

La reflexión que, internalizada en nuestro proceder cotidiano, genera conceptos

entrelazados de percepción en cada uno de nosotros sobre cómo es el mundo que
convivimos, los juicios e inferencias concurrentes al evento bioético y al liderazgo,
configuran una actividad aprehensible, unida al núcleo del pensamiento personal, el cual
concibe una representación del mundo complejo, multiversal.

Tomando en cuenta las relaciones entre la complejidad y la organización, al propio estilo

de Prigogine (2004:192), los sistemas organizativos pueden encontrarse en cualquiera de
los tres estados: en equilibrio, cerca del equilibrio o lejos del equilibrio, son estos últimos
los que pueden disiparse y evolucionar, es decir, aquellos que potencialmente se
autoorganizan, transformándose en estructuras de gran complejidad, en los cuales, los
lideres potencian las relaciones dialógicas indispensables para llegar a acuerdos de
funcionamientos que contribuyan en la adquisición de ese nivel evolutivo con la
consecuente mejora de procesos decantados en productos de bienes o servicios.
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El liderazgo es una herramienta fundamental para las organizaciones, en lo referente a

brindar las opciones precisas ordenadas en el ámbito gerencial, las cuales inciden
apropiadamente en obtener el mejor provecho del conocimiento, así como de las
condiciones de los trabajadores, ello se realiza por medio de las relaciones dialógicas
basadas en el respeto individual/colectivo inmersos en la visión y los objetivos
organizacionales, con la finalidad de obtener el mayor beneficio basado en los resultados
productivos y económicos.

Las particularidades mencionadas evocan el sentido bioético que debe preponderar en las
características del nuevo liderazgo, tomando en cuenta el deterioro ambiental, social,
político, económico en el cual se está desarrollando la humanidad. Las sociedades actuales
requieren que las organizaciones incluyan en su complejidad el sentido bioético, con
planes bien estructurados, consolidados no sólo a la producción de bienes, servicios, sino
también enfocados con la armonía del planeta.

Para lograr dicha inclusión, las directivas deben considerar la creación de planes de
formación de líderes bioéticos, de esta forma se pueda contar con personal altamente
capacitado, con un grado de conocimiento acorde con las nuevas tendencias gerenciales,
incentivando o potenciando las innovaciones científicas/tecnológicas necesarias para el
desarrollo particular de cada sociedad, conformando una sinergia bio/socio/organización.

A la bioética como valor fundamental a lo interno y a lo externo, primero contribuyendo

con el mejoramiento de las intersubjetividades propias de los miembros de la empresa,
generando un clima de respeto y reciprocidad. En el segundo plano, favoreciendo el
desarrollo sustentable de la sociedad, lo que hasta ahora es conocido como
“responsabilidad social”, ahora con un sentido real de corresponsabilidad con todos los
organismos interconectados, incluido el medio ambiente.

El Liderazgo Bioético asume un diálogo crítico, donde se cuestionan los propósitos, fines e
intereses, hurgando en los fundamentos y acuerdos que sostienen a la organización, este
proceso es parte de un evento sinérgico, donde la producción de cambios en la estructura
organizativa, pueden ser manejados para el mejoramiento constante del sistema.
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Esta fundamentación organizacional permite la inclusión de la nueva cosmovisión bioética

organizacional, como principal base de valores, acoplándose con aquellos liderazgos de
tipo humanista y transformacionales, que por esencia motiven al logro personal y
profesional, así como potencien la cultura innovadora individual/colectiva, lo que incide
en nuevos procesos que confeccionen productos cargados de valores en pro del bienestar
del entorno, contribuyendo con la nueva sociedad.

Empresa, bioética y responsabilidad

El debate sobre el rol de los negocios en la sociedad ha tomado un mayor auge,
cambiando la percepción tradicional de ver a las empresas como entes estrictamente
económicos a ser vistas como organizaciones con obligaciones sociales. De igual forma, los
desarrollos científicos y tecnológicos plantean nuevos conflictos éticos impensables para
las generaciones del siglo pasado. Servicios que antes eran prestados a la ciudadanía
amparados por el sentido de justicia social de los estados, hoy son prestados por
organizaciones movidas por el lucro.

La ética empresarial ha dirigido sus esfuerzos a examinar los principios y la conducta de

individuos y organizaciones empresariales.

La responsabilidad social empresarial es un movimiento que cobró mucho interés en los

noventa, se trata de un modelo de gestión empresarial que incorpora las dimensiones
económica, social y ambiental en sus operaciones, actuando en beneficio de los diferentes
grupos con los que se relaciona, así como del cuidado y preservación del entorno
mediante el cumplimiento de sus obligaciones legales y éticas.

La bioética comenzó estudiando las implicaciones morales y sociales de las tecnologías

que resultaban de los avances de las ciencias biológicas. Si bien, en un principio, los temas
de interés de estas áreas del conocimiento parecían no tener mucha vinculación, los
conflictos éticos de hoy (contaminación ambiental, pobreza, iniquidad, acceso a servicios
médicos, etc.), parecen ser una invitación a su integración. De hecho, en muchas escuelas
de negocios los temas de ética empresarial y de responsabilidad social empresarial ya son
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parte del currículo, no así la bioética, que sigue mayoritariamente en las escuelas de
medicina.

Por un lado, la bioética pretende ofrecer un norte para el manejo de los conflictos éticos
de las profesiones de la salud; por otro, la responsabilidad social pretende promover una
conducta justa y socialmente deseable de las empresas, en particular aquéllas con fines de
lucro. Pero hasta el momento, la bioética ha sido estudiada en forma aislada de la ética
empresarial y la responsabilidad social. Esta realidad no considera que las decisiones de
acceso a servicios de salud están directamente ligadas a las decisiones empresariales de
aquellas organizaciones que producen estos servicios; es imprescindible prestar atención a
ambos aspectos de la práctica empresarial. Todo esto plantea nuevos conflictos éticos de
una complejidad nunca vista, los cuales requieren una reflexión interdisciplinaria para su
posible solución.

Algunos autores han hecho el ejercicio teórico de demostrar la utilidad de los principios
bioéticos en el análisis de situaciones empresariales, pero hasta el momento no se ha
medido el razonamiento bioético ni su posible vinculación con la responsabilidad social
empresarial. Otros han estudiado la percepción de los estudiantes y administradores
sobre el vínculo entre la responsabilidad social empresarial y la efectividad de las
empresas, pero ninguno ha establecido un vínculo entre la responsabilidad social
empresarial y el razonamiento bioético. La mayor parte de los estudios sobre
responsabilidad social se han basado en el modelo propuesto por Carroll (1979), que
establece que las empresas funcionan en cuatro dimensiones: la económica, la legal, la
ética y la de libre discreción.

Los cuatro principios de la bioética

Los experimentos médicos realizados con prisioneros de los campos de concentración de
la Alemania nazi y otras investigaciones con procedimientos poco o dudosamente éticos,
como las prácticas del Hospital Judío de Enfermedades Crónicas (Brooklyn, 1963) o la
Escuela de Willowbrook (Nueva York, 1963) y el Estudio de Sífilis de la Universidad de
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Tuskegee (1972) van creando la necesidad de regulación o, al menos, declaraciones a

favor de las víctimas de estos experimentos. Las primeras declaraciones de bioética surgen
de los esfuerzos para regular la investigación y la experimentación médica, tales como, el
Código de Nuremberg (1947), la Declaración de Helsinki (1964) y el Informe Belmont
(1979).

En 1979, los bioeticistas Beauchamp y Childress definieron los cuatro principios de la

bioética en el libro Principles of Bioethical Ethics: autonomía, no maleficencia,
beneficencia y justicia.

 El principio de autonomía tiene sus raíces en la moral liberal y la tradición

política, en las cuales es importante la libertad y el derecho de elegir de los
individuos. Autonomía es cuando la persona tiene un entendimiento adecuado que
le permite gobernarse a sí misma, libre de restricciones externas o limitaciones
personales que se lo impidan, lo que le permite actuar de acuerdo con el plan
personal que elija. Por lo tanto, respetar la autonomía de las personas implica
reconocer y valorar las capacidades y posturas de los individuos, incluyendo su
derecho a tener sus propias opiniones, tomar sus propias decisiones y actuar de
acuerdo con sus valores y creencias (Beauchamp, 2007).
 El principio de no maleficencia se refiere a abstenerse de realizar acciones que
puedan causar daño o perjudicar a otros. Este es un imperativo ético válido no sólo
en el ámbito biomédico sino en el que se basan muchas reglas básicas de la moral
común, como no matar, no causar dolor, no romper promesas, etc. (Beauchamp,
2007). El principio de no maleficencia aplica en el campo de la medicina porque en
la relación médico-paciente hay una parte con la capacidad de infringir daño, aun
cuando no sea intencional, y hay otra parte que sufre daño y tiene menos
capacidad para defenderse de él.

En las actividades comerciales, una empresa tiene la capacidad potencial de

causarle daños a miles de individuos simultáneamente. Los daños pueden ser
desde económicos hasta mortales, ya sea por productos defectuosos, condiciones
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laborales inadecuadas o contaminación ambiental. Los daños podrían ser tan

devastadores que podrían afectar a generaciones no nacidas como podría ser el
caso de contaminación de cuerpos de agua o terrenos. Muchas de estas
obligaciones hacia diversos grupos están codificadas legalmente en algunos países,
tal es el caso de las leyes de protección al consumidor, seguridad e higiene en el
trabajo o protección ambiental.

 La beneficencia es la obligación de actuar en beneficio de otros, promoviendo

sus legítimos intereses y suprimiendo perjuicios. Este principio requiere que se
maximicen los beneficios, se minimicen los posibles daños y se balanceen los
beneficios contra los riesgos. Una de las motivaciones para separar la no
maledicencia de la beneficencia es que estos principios pueden entrar en conflicto,
requiriendo que se sopesen según la situación, pues no hay una forma mecánica
de establecer su importancia (Beauchamp, 2007).
 El principio de la justicia destaca que se debe tratar a cada uno como
corresponda, con la finalidad de disminuir las situaciones de desigualdad
(ideológica, social, cultural, económica, etc.). El mismo puede dividirse en dos: un
principio formal (tratar igual a los iguales y desigual a los desiguales) y un principio
material (determinar las características relevantes para la distribución de los
recursos y las cargas.

Beauchamp argumenta que este marco conceptual de cuatro principios provee una guía
general para resolver los conflictos éticos que puedan surgir en el campo de la medicina,
pero eso no implica que sean absolutos. Todos los principios generales tienen excepciones
y tanto las conclusiones morales que de ellos se derivan (como los propios principios)
siempre están sujetos a modificaciones y reformulaciones. Es mediante este proceso que
los principios adquieren valor práctico. El criterio ético fundamental que regula esta
disciplina es el respeto al ser humano y su dignidad.
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Lecciones Aprendidas
Uno de los grandes retos de la humanidad es distribuir los beneficios y las cargas entre
todos sus constituyentes.

Las empresas poseen y manejan recursos diversos, por lo que su distribución debe ser
justa.

El lucro desmedido, la contaminación ambiental y la competencia desleal son algunos

conflictos éticos en el área de los negocios que podrían ser analizados a la luz del principio
de justicia.

El tema de la bioética ha estado presente en las industrias desde hace varios años, aun así,
existe una gran brecha entre la innovación sustentable y la protección a la integridad del
ser humano.

Debemos entender la bioética en las empresas pues va más allá en el tema de la

sostenibilidad y el respeto por la vida.
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Referencias
(s.f.).

Antonio Nieto. (Junio de 2014). mundohvacr.com-mx. Obtenido de

https://www.mundohvacr.com.mx

Danel, K. (s.f.).

Dora García Fernández. (s.f.).

Dra. Beatriz Rivera Cruz, D. S. (1 de Noviembre de 2010). Bioética. Parte Integral de la

Responsabilidad Social Empresarial. Puerto Rico, Recinto del Rio Piedras, Puerto Rico.

Enfermeriacelayane. (28 de Febrero de 2018). blogs.ugto.mx. Obtenido de

https://blogs.ugto,mx/enfermeriaenlinea/unidad-didacta-3-bioetica

García, D. (2014).

María Peana Chivite, S. G. (2014). La Bioética en la empresa: el caso particular de la

Responsabilidad Social Corporativa. 27.

Rivas Peña, P. y. (6 de Julio de 2017). Liderazgo Bioético. Una Cosmovisión Sistémica en las
Organizaciones Complejas". Venezuela.
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Anexos

Entrevista a la Doctora Dora García Fernández. Directora Ejecutiva de El Consejo para la

Distinción de Empresa Bioéticamente Responsable (Coebio), Asociación Civil formada por
especialistas en Bioética, explica en entrevista con Mundo HVAC&R la importancia que
tiene la bioética para la industria HVACR en México.

En la actualidad, en México, el Consejo para la Distinción de Empresas Bioéticamente

Responsables (Coebio) sólo ha reconocido a una empresa de la industria HVACR (empresa
de aires acondicionados y refrigeración)

por apegarse a las exigencias de la bioética, antecedente que refleja el oasis informativo
que existe en el sector.

“Una empresa bioéticamente responsable basa sus actos en el respeto a la dignidad e

integridad del ser humano y el ambiente” (García, 2014)

¿En qué términos se define la bioética? La bioética es el estudio sistemático de la

conducta humana en el ámbito de la vida, la salud y el medioambiente, a la luz de los
valores y del bien intrínseco del ser humano. En pocas palabras, la bioética es la ética
aplicada a todos los aspectos de la vida.

¿Qué es una empresa bioéticamente responsable?

Es aquella que basa sus actuaciones en el respeto a la vida, la salud los valores, la dignidad
e integridad del ser humano y el medioambiente. Es una empresa que vive la bioética y la
ética en su diario actuar.

¿Cuál es la importancia de que una empresa sea bioéticamente responsable?

En la actualidad, la bioética está constituida como una nueva profesión, que debe
integrarse en el ámbito de la responsabilidad empresarial para estar a la vanguardia y
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establecer una necesaria vinculación entre el razonamiento bioético y la responsabilidad

social de la empresa. Una empresa bioéticamente responsable vive la bioética y la ética en
su diario actuar, y está comprometida con la vida, los valores, la salud y el
medioambiente.

¿Cómo se vincula la bioética con la industria de la refrigeración y la climatización?

La bioética se vincula con esta industria en el aspecto humano, en el que se da un peso
importante al respeto y a la dignidad de la persona humana, la vida, a los valores y la salud
de los empleados que integran las empresas. También se vincula en el aspecto del
medioambiente, donde se evalúan programas de ahorro energético, reciclaje, políticas
ambientales, etcétera.

¿Sabe de alguna empresa de la industria HVACR que ya trabajé bajo el esquema de la

bioética?

La primera empresa en México en obtener el distintivo de empresa Bioéticamente

Responsable es Refrigeración Ojeda, empresa líder en el ramo de la refrigeración, quienes
ya trabajan bajo este esquema.

¿Qué entidades de gobierno evalúan a las empresas y solicitan a los fabricantes que se
apeguen a las regulaciones?

Al tratarse de un distintivo y no de una certificación, las empresas se someten a un

proceso de autodiagnóstico a través de indicadores y evidencia y a una capacitación en
temas de bioética. Todo esto ante Coebio, que es un consejo fundado y dirigido por
Lorena Malpica, como directora General, y por mí, como directora Ejecutiva. Nos
apoyamos y asesoramos por medio de un consejo consultivo, constituido por
personalidades de los sectores civil, académico, empresarial y de la salud; especialistas en
bioética y otras disciplinas. Además, estamos respaldados por la Cátedra de Bioética y
Derechos Humanos de la UNESCO.

¿De qué manera y a través de qué medios Coebio promueve una cultura bioética en
México en las empresas del sector HVACR?
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La cultura bioética la promovemos en las empresas principalmente a través de los cursos

que impartimos a sus integrantes. Esto permite que la bioética se permee en toda la
empresa. Coebio asesora y capacita a las empresas para que logren implementar en su
plan de trabajo los principios bioéticos que son válidos para la toma de decisiones y
comportamientos individuales.

¿Qué beneficios ofrece a una empresa del sector contar con un distintivo de este tipo?
Los beneficios que conlleva obtenerlo son diversos. En primera instancia, ser reconocida
como una empresa con valores, vanguardista y dentro de los lineamientos bioéticos
acordes a los estándares nacionales e internacionales. Conformar las bases para
consolidarse con una buena reputación es otro de los beneficios, al igual que brindar
capacitación en formación humana y bioética a su personal. Por otro lado, aumentar la
satisfacción, el compromiso, el sentimiento de pertenencia y la lealtad de los empleados
hacia la empresa. Genera confianza en los clientes. Asimismo, el costo de la inversión para
la obtención del distintivo es deducible de impuestos. Finalmente, impulsa a México como
pionero en la distinción de empresas comprometidas con la ética y la bioética.

¿Qué tan extendida está la cultura de la bioética en el ámbito empresarial, en general, y

en el sector HVACR, en particular?

Aunque existen diferentes distintivos actualmente, en estricto sentido se puede afirmar

que es el primer distintivo en bioética a nivel nacional e internacional. Hace dos años que
empezamos a otorgar este distintivo; actualmente, ocho empresas ya cuentan con él y dos
más están en proceso de obtenerlo. En cuanto al sector HVACR, únicamente Refrigeración
Ojeda cuenta con el distintivo, pero esperamos poder difundir más la cultura bioética en
las demás empresas de este sector.

¿Cuáles son las recomendaciones para que una empresa de la industria HVACR logre ser
bioéticamente responsable?

Para que una empresa sea bioéticamente responsable es recomendable que esté
sensibilizada con el recto actuar, los valores éticos y que cumpla con un esquema
encaminado al bien común. Asimismo, deberá cumplir con la normatividad legal, seguir un
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código ético, promover y proteger la salud de sus empleados, respetar la vida y la dignidad
de la persona humana, así como ser responsable con el medioambiente e involucrar y
promover entre su personal y socios programas de mejora continua, capacitación y
concientización de la ética en su diario actuar.

¿Qué retos ha enfrentado la Bioética respecto de la industria HVACR?

La capacitación y difusión de la cultura bioética en las empresas es un gran reto al que nos
hemos enfrentado, pero que hemos superado con éxito a través de la primera industria en
este ramo que obtuvo el distintivo.

¿Qué aspectos toma en cuenta Coebio para decidir que una empresa de la industria
HVACR resguarda la seguridad de los usuarios?

Coebio toma en cuenta que la empresa brinde constante capacitación a sus empleados en
todas las áreas, incluyendo la de producción. Se pone especial énfasis en que la empresa
cuente con un sistema de gestión ambiental que garantice el cumplimiento regulatorio en
la materia, provea un espacio limpio y sano para sus empleados, cuente con un plan de
manejo de residuos para su minimización y reciclaje, y que elabore productos que
protejan al medioambiente y brinden seguridad a los usuarios.

¿Qué significa para Coebio ser el organismo encargado de distinguir a las empresas en
este rubro?

Para Coebio es de suma importancia difundir la cultura bioética en todas las empresas.
Primeramente, nos preocupa la persona humana, quien forma parte de la empresa. Nos
enfocamos principalmente en sus valores, su dignidad, su salud; en general, en su
bienestar como ser único, individual, e irrepetible, y en el cuidado del medioambiente, lo
que conlleva a la salud de la corporación y, en consecuencia, al bienestar de la sociedad.

¿En qué regiones del país se está promoviendo el distintivo que ofrece Coebio?

El distintivo se está promoviendo en todas las regiones del país, pero principalmente en
las empresas situadas en el Distrito Federal y en el Estado de México.

¿Cuáles son los mayores retos en este tema?

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Nuestro mayor reto es lograr aplicar la cultura bioética en las empresas. La ética es
universal y sus principios se basan en el derecho natural intrínseco en la persona humana.
Coebio parte de esta premisa para la difusión y aplicación de la bioética en las empresas
como un proceso continuo.

¿Qué líneas de acción tienen delineadas?

Promover el distintivo en cada sector de nuestro país, con miras a llegar a organismos del
sector público. Asimismo, llevar este distintivo a otros países.

¿La bioética se posicionará en el desarrollo empresarial?

Sí. La bioética tomará una posición importante en México y en el extranjero.