HISTORIA DEL

MANICURE
Manicura
Se refiere al cuidado de las manos y uñas. El término viene del francés y se
puede derivar de las palabras “manu” para la mano y “cura” para cuidado o cura.
Las uñas están hechas de queratina y proporcionan una protección para las
puntas de los dedos.
Se componen de hasta 150 láminas de células córneas y pueden llegar a tener
un grosor máximo de 0,75 mm. Cada semana las uñas de los dedos crecen hasta
1 mm

Antiguo Egipto
Los faraones utilizaban henna para pintar sus uñas, tanto el color como la
longitud señalaban el nivel social en esta civilización. Durante el reinado
de Nefertiti se creó una ley según la cual únicamente la nobleza podía
llevar las uñas de color rojo.

Dinastía Ming, China

Desde 1368 a 1644, durante la dinastía Ming, los hombres y las mujeres
cuidaban del aspecto de sus uñas y manos. De hecho, para darles color
mezclaban cera, huevos, tintes vegetales y otros productos para crear
diferentes colores.
Las uñas largas era el símbolo de aristocracia, pues demostraba poder y
riqueza. Solían utilizar férulas para proteger y destacar la longitud de las
uñas. Además, los colores favoritos eran el oro, la plata y el rojo brillante.

París y Estados Unidos, siglo XIX

Son tendencia las uñas puntiagudas, en forma de óvalo y con la punta fina. Se
utilizaban aceites aromáticos y se utilizaban tonos claros para dar un aspecto
más natural y cuidado a las manos.En 1830, el Doctor Sits utilizó la primera
lima de árbol de naranjas para cuidar las uñas de sus pacientes.
En el año 1870 se inaugura el primer salón de manicura para mujeres y hombres
en París. Se utilizaban cremas, aceites y polvos para dar brillo a las uñas.

Principios del siglo XX

De la mano de la industria del automóvil, la manicura se popularizó en los años 20,
pues las mujeres pintaban sus uñas con la pintura de los coches.
En los años 30, una empresa americana comercializó un esmalte con pigmentos (en
lugar de tintes) que se podrían adquirir en las droguerías.
Coco Chanel introdujo la uña corta y colorida en las clases sociales acomodadas,
mientras que para las clases populares triunfaban los colores vivos y brillantes.
Además, se popularizó la técnica de medialuna y la manicura francesa.

Años 40 y 50, el boom de la manicura

Entre los años 40 y 50 el sector de la manicura se convierte en el más fuerte de la
cosmética. La costumbre de pintarse las uñas en casa o en los salones de belleza se
expande, así como las masterclass impartidas por esteticistas y peluqueros americanos
reconocidos.
Se desarrolla y se comercializan el quitaesmalte, los fortalecedores de uñas y las uñas
postizas. Max Factor y Revlon empezaron a comercializar esmaltes de diferentes colores,
aunque el color rojo siguió siendo popular, sobre todo entre las estrellas de Hollywood.

Años 60 y 70, el movimiento hippie

Resurge la manicura francesa, que el largo del borde blanco característico de esta
técnica se acortará, pues ya no solo será un estilo propio de las mujeres adineradas.
¿Y las uñas de acrílico? Pues bien, también surgieron a lo largo de esta década y a
causa de un accidente.
Fue el dentista Frederick Slack quien se rompió una uña en una de sus consultas y
tuvo la idea de reponérsela a partir de un material moldeable y resistente que
utilizaba para reconstruir los dientes de sus pacientes.

Años 80 y 90, el nacimiento del nail art

A lo largo de esta década la experimentación en colores, estampados, texturas y
decoraciones lleva al surgimiento de lo que conocemos como nail art. Los
esteticistas y manicuristas empiezan a dar forma cuadrada a las uñas largas.
En los años 90, en plena época grunge, las mujeres y los hombres afines a este estilo
apuestan por pintar sus uñas en tonos oscuros, sobre todo en negro.

Actualidad
La expansión de tiendas y salones especializados en manicura y pedicura se han
convertido en un auténtico negocio, así como el surgimiento de nuevas técnicas de
uñas.
También disponemos de todo tipo de esmaltes libres de compuestos químicos
tóxicos y agresivos, esmaltes semipermantenes, uñas de gel, de porcelana, etc.
El interés por el cuidado de las uñas de manos y pies generado el desarrollo de
diferentes herramientas profesionales, como son los pulidores, las limas de vidrio
templado, y cosméticos especializados, como mascarillas y guantes
ultrahidratantes.