Estudios en contextos socialmente vulnerables muestran que la identificación con el entorno

social inmediato tiene efectos positivos en el bienestar. Estas relaciones cobran relevancia en
contextos en los que las estrategias colectivas son fundamentales para la supervivencia y el
desarrollo familiar y comunitario. Esta investigación exploró la relación entre el sentido de
comunidad y las expresiones subjetivas, psicológicas y sociales del bienestar en una muestra
intencionada de mujeres y varones de comunidades urbano-marginales.

Al realizar una experiencia de campo (Téllez, 2010) menciona, “En la experiencia fueron
reconocidas prácticas y vivencias comunitarias en las que se dieron formas solidarias y de
apoyo como salidas que nutren las relaciones humanas y afianzan el vivir en comunidad”,
indicando lo que diversos autores mencionan con distintas palabras y criterios pero que nos
llevan a una conclusión lógica, y es que la relación obtenida con nuestra comunidad es lo que
nos permite como seres humanos crecer y tener un sentido de vida satisfactorio.

Según (Maya Jariego, 2004), “el sentido psicológico de comunidad es una experiencia subjetiva
de pertenencia a una colectividad mayor, formando parte de una red de relaciones de apoyo
mutuo en la que se puede confiar”, teniendo esto en mente podemos deducir que el estar
inmerso en una relación a nivel comunitario ayuda a influir en gran medida nuestra calidad de
vida.

El sentido de comunidad es un término en torno al cual se hallan discusiones relevantes en la

actualidad. Los estilos de vida, prácticas de consumo y cambios a nivel cultural en las ciudades,
cuestionan las ideas tradicionales de comunidad y abordan el reto de una reestructuración
teórica. Las nociones tradicionales del sentido de comunidad no resultan ser consonantes con
las percepciones de la gente y su manera de relacionarse con los demás.

Las características de aquellos que nos rodean en el transcurso de nuestra vida pueden influir
como estrategias de afrontamiento o patrones de regulación de la comunidad que influyen en
la satisfacción con el entorno y la calidad de vida.

(Hombrados) menciona que “los diferentes investigadores han concluido que la calidad de vida
se refiere tanto a indicadores objetivos de las condiciones de vida como a indicadores
subjetivos de satisfacción con la vida”, mostrándonos una idea más clara en relación a nuestra
calidad de vida, teniendo como ejemplo un adulto diagnosticado con alguna enfermedad, esto
hará que decaiga su estado de ánimo, sin embargo también le mostrara otra perspectiva y
aumentara su manera de ver la vida y vivirla de modo positivo.

En mi opinión el sentido de comunidad se relaciona positivamente con la calidad de vida, el

bienestar a nivel psicológico y la salud. Para muchas personas el lugar en el que se vive resulta
fundamental para su sentido de pertenecer a algo y de enlace con los vecinos. Sonreír o
saludar: un simple gesto de cortesía ayuda en el convivir con aquellas personas que nos
rodean, con los vecinos se puede organizar fiestas, ya sean de cumpleaños, una boda, incluso
fiesta de aniversario del barrio etc. En la comunidad se puede llevar a la práctica muchas
actividades en conjunto con los vecinos, tener un excelente ambiente laboral y vecinal, siempre
promoviendo un estado positivo en la comunidad puede depender al menos en parte de los
pequeños comportamientos que están al alcance de todos los que la conforman. Pueda que
hoy más que nunca valoramos el estar rodeados de personas, amigos, familiares; la posibilidad
de poder saludar a un amigo y darle un caluroso abrazo. El habitar un lugar nos brinda un
sentido de pertenencia, es poseer un lugar al cual poder llegar, aun cuando hay momentos en
los que nos sentimos autosuficientes y abrumados, las personas disfrutan más cuando tienen
gente que los acompaña a lo largo de su vida.

A través de un estudio se pudo observar que incluso aquellos individuos que pertenecen a
comunidades en situaciones precarias pueden sobresalir a través de la cooperación mutua
teniendo objetivos en común como es el cambio positivo del entorno. (Cueto, Espinosa,
Guillén, & Seminario, 2016)

Así mismo se hace mención que como comunidad se debe incentivar a un cuidado general del
entorno permitiendo conservar características del mismo que ayuden a mantener un óptimo
estado de salud ya sea con la recolección de residuos o mantenimiento de áreas verdes, pues
de esto dependerá una favorable convivencia con los diferentes miembros de la comunidad y
favorecerá con una correcta calidad de vida como también el apoyo a nivel emocional entre los
miembros de la comunidad permitiendo colaborar y brindar ayuda a aquellos que lo necesitan.
(Carbo & Páez, 2017;Velásquez & Sañudo, 2016)

Referencias
Carbo, J., & Páez, N. (2017). La promoción de salud para la creacion de entornos saludables en
América Latina y el Caribe. Guayaquil. Obtenido de
http://scielo.sld.cu/pdf/san/v21n12/san162112.pdf

Cueto, R., Espinosa, A., Guillén, H., & Seminario, M. (Mayo de 2016). Sentido de comunidad
como fuente de bienestar en poblaciones socialmente vulnerables de Lima, Perú.
Obtenido de https://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0718-
22282016000100004&script=sci_arttext&tlng=en

Hombrados, M. I. (s.f.). Calidad de vida y sentido de comunidad en la ciudad. Obtenido de

https://riuma.uma.es/xmlui/bitstream/handle/10630/4057/38_revistauciencia03.pdf?
sequence=1&isAllowed=y

Maya Jariego, I. (2004). Sentido de comunidad y potenciación comunitaria. España. Obtenido

de https://idus.us.es/bitstream/handle/11441/56219/sentido%20de
%20comunidad.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Téllez, E. (2010). El sentido del tejido social en la construcción de comunidad. Bogotá. Obtenido
de https://revistas.uniminuto.edu/index.php/POLI/article/view/170/169

Velásquez, A., & Sañudo, J. (2016). Apoyo social y sentido de comunidad en desplazados y
damnificados. Barranquilla. Obtenido de
https://revistas.unimagdalena.edu.co/index.php/duazary/article/view/1735/1222