Sei sulla pagina 1di 5

Saludo del sacerdote y comienza la Misa.

Monición entrada
Consagración a la virgen

Niño1: Siempre que celebramos la Misa, celebramos el en-


cuentro con el mejor amigo que tenemos los hombres y las muje-
res: Jesucristo.
Hoy nuestra celebración tiene, además un motivo grande
de alegría: algunos niños de nuestra Parroquia vamos a recibir
por vez primera a Jesús hecho Eucaristía.

Niño 2: Durante dos años nos hemos ido preparando con


mucha ilusión para poder recibir la primera comunión. Nuestros
catequistas nos han enseñado quién es Jesús, como vivió y todo
lo bueno y grande que hizo y hace por nosotros.

Niño 3: Hoy nos vamos a acercar a la mesa de los


mayores para participar así del mismo Cuerpo de Cristo. Para
que su ali- mento nos llene de paz y alegría cristiana.
Que nuestra manera de estar en esta celebración refleje lo
que llevamos en el corazón, que participemos con nuestra pre-
sencia, nuestro silencio y nuestra plegaria.
Después que los padres han consagrado sus hijos a la
Virgen todos los niños rezan juntos:
Liturgia de la palabra
Oh Señora mía, Oh Madre mía, yo me entrego
enteramente a Ti, y en prueba de mi filial afecto
te consagro en este día: mis ojos, mis oídos, mi
len- gua, mi corazón; en una palabra: todo mi ser.

Ya que soy todo tuyo, Madre de bondad, guár- Escuchamos y meditamos


juntos la Palabra que Dios
dame y defiéndeme como cosa y posesión tuya.
nos dirige hoy.
AMEN.

8
Después que el Sacerdote ha comulgado y que una
Renovación Promesas bautismales catequista lee la monición antes de la comunión todos dicen juntos,
antes de comulgar:

Yo quisiera, Señor, recibiros con aquella


pureza, humildad y devoción, con que os recibió
vuestra Santísima Madre, con el espíritu y fervor de
los Santos.

Después cada niño pasa delante del sacerdote y recibe


reverentemente en la boca el Sacratísimo Cuerpo del redentor:

Sacerdote: El cuerpo de Cristo.


¿Renunciáis al pecado para vivir en la libertad de los hijos de Dios?
Niño: AMEN

Sí, renuncio
Después cada niño vuelve a su sitio y en silencio da gracias a
¿Renunciáis a todas las seducciones del mal, para que no domine en Dios por la Eucaristía. Después todos juntos cantamos:
vosotros el pecado?
Buenos días Señor Adiós Jesús, adiós,
Sí, renuncio te vengo a visitar Me tengo que marchar
Y a hacerte compañía Pero el corazón mío
¿Renunciáis a Satanás, padre y príncipe del pecado? Ya que tan solo estás. Aquí se ha de quedar.

Sí, renuncio Aquí mi corazón Mañana volveré,


Aunque es tan chiquitín Mañana con más fe
¿Creéis en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra? te cantará mi amor Y con mayor fervor
Cuál tierno serafín. te cantará mi amor
Sí, Creo
Qué bien que se está aquí Adiós Jesús, adiós,
¿Creéis en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que nació de Santa Cerquita de tu altar Toma mi corazón,
María Virgen, murió, fue sepultado, resucitó de entre los muertos y está Y al pie de tu sagrario Adiós Jesús, adiós,
sentado a la derecha del Padre? Donde tan solo estás Dame tu bendición.

Sí, Creo “Ven a mi Jesús querido


Y únete a mi corazón
¿Creéis en el Espíritu Santo, en la Santa Iglesia Católica, en la comunión Ya que buscando mi amor
de los Santos, en el perdón de los pecados, en la resurrección de los Al sagrario te has venido,
muertos y en la vida Eterna? Si es tu deseo mayor
Que estén los niños contigo,
Sí, Creo. Que tú siempre estés conmigo
Es lo que más quiero yo.”

2 7
la muerte y resurrección de Jesús, el Salvador del
mundo.
Él se ha puesto en nuestras manos peticiones
para que te lo ofrezcamos como sacrificio nuestro
y junto con él nos ofrezcamos a ti.

Todos aclaman : ¡Te alabamos, te bendecimos, te damos gracias!

Escúchanos, Señor Dios nuestro;


danos tu Espíritu de amor
a los que participamos en esta comida, 1.- Por el Papa Francisco, por nuestro Obispo, nuestros sacerdotes y todos
para que vivamos cada día
los sacerdotes del mundo, para que no se cansen de entregarnos
más unidos en la Iglesia,
con el santo Padre, el Papa Francisco, diariamente a Jesús en el Altar. ROGUEMOS AL SEÑOR.
con nuestro Obispo Vicente
los demás obispos,
y todos los que trabajan por tu pueblo. 2.- Por nuestros padres, abuelos, hermanos y amigos para que sean siempre
para nosotros ejemplo de cómo se debe seguir a Jesús. ROGUEMOS AL
Todos aclaman: ¡Que todos seamos una sola familia para gloria tuya! SEÑOR.

No te olvides de las personas que amamos


ni de aquellas a las que debiéramos querer más. 3.- Por nuestros catequistas, por todos los que nos enseñan cosas sobre
Acuérdate de estos niños Jesús, para que el Señor premie sus esfuerzos por enseñarnos la fe.
que por vez primera invitas en este día
ROGUEMOS AL SEÑOR.
a participar del pan de vida y del cáliz de salvación,
en la mesa de tu familia.
Concédeles crecer siempre en tu amistad.
Acuérdate también de los que ya murieron 4.- Por nosotros, que hoy nos acercamos por primera vez a comulgar para
y recíbelos con amor en tu casa. que Jesús sea siempre alimento en nuestro camino, y a él vengamos a
saludarlo muchas veces en el Sagrario. ROGUEMOS AL SEÑOR.
Todos aclaman: ¡Que todos seamos una sola familia para gloria tuya!

Y un día, reúnenos cerca de ti 5.- Por los pobres, los enfermos y los ancianos para que los cristianos seamos
con María, la Virgen, Madre de Dios y Madre nuestra, para ellos un signo de la cercanía de Dios a los que más lo necesitan.
para celebrar en tu reino la gran fiesta del cielo. ROGUEMOS AL SEÑOR.
Entonces, todos los amigos de Jesús, nuestro Señor, podremos cantarte sin
fin.
6.- Para que nunca falten en la Iglesia Sacerdotes que nos celebren la
Todos aclaman: ¡Que todos seamos una sola familia para gloria tuya! Eucaristía y nos perdonen los pecados, para que haya vocaciones de
nuestra parroquia. ROGUEMOS AL SEÑOR.
Por Cristo, con él y en él,
a ti, Dios Padre omnipotente, 7.- Pidamos por aquellos miembros de nuestras familias que han muerto
en la unidad del Espíritu para que estén en el cielo celebrando esta fiesta. ROGUEMOS AL
Santo, todo honor y toda SEÑOR.
gloria
por los siglos de los siglos.

Todos aclaman: Amén.

6 3
Plegaria eucaristica cómo debemos amarte a Ti
4

V. El Señor esté con vosotros.


R Y con tu espíritu.
V. Levantemos el corazón.
R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
R. Es justo y
necesario. En verdad,
Padre bueno, hoy
estamos de fiesta:
nuestro corazón está lleno de agradecimiento
y con Jesús te cantamos nuestra alegría:

Todos aclaman: ¡Gloria a ti, Señor, porque nos amas!

Tú nos amas tanto,


que has hecho para nosotros
este mundo inmenso y maravilloso.
Por eso te aclamamos:

Todos aclaman: ¡Gloria a ti, Señor, porque nos amas!

Tú nos amas tanto,


que nos das a tu Hijo, Jesús,
para que él nos acompañe hasta ti.
Por eso te aclamamos:

Todos aclaman: ¡Gloria a ti, Señor, porque nos amas!

Tú nos amas tanto,


que nos reúnes con Jesús,
como a los hijos de una misma familia.
Por eso te aclamamos:

Todos aclaman: ¡Gloria a ti, Señor, porque nos amas!

Por ese amor tan grande,


queremos darte gracias
y cantarte con los ángeles
y los santos que te adoran en el cielo.
Santo, Santo Santo…

Bendito sea Jesús, tu enviado


el amigo de los niños y de los pobres.
Él vino para enseñarnos
5
y amarnos los unos a los otros. QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
Él vino para arrancar
de nuestros corazones Muestra el pan consagrado al pueblo, mientras todos aclaman:
el mal que nos impide
ser amigos ¡Señor Jesús, tú te entregaste por nosotros!
y el odio que no
nos deja a ser Después, tomó el cáliz lleno de
felices. Él ha vino y, dándote gracias de nuevo,
prometido que su lo pasó a sus discípulos, diciendo:
Espíritu Santo
estará siempre TOMAD Y BEBED TODOS DE ÉL,
con nosotros PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI
para que vivamos
SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA
como verdaderos hijos tuyos.
Todos se ponen de rodillas NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ
A Ti, Dios y Padre nuestro, DERRAMADA POR VOSOTROS
te pedimos Y POR TODOS LOS HOMBRES
que nos PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS .
envíes tu HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MIA
Espíritu para
que este pan Muestra el cáliz al pueblo, mientras todos aclaman
y este vino
sean el ¡Señor Jesús, tú te entregaste por nosotros!
Cuerpo
+ y la Por eso, Padre bueno, recordamos ahora
Sangre
de
Jesucri
sto,
Nuestr
o
Señor.
El
mismo
Jesús,
poco antes de morir,
nos dio la prueba de tu Amor.
Cuando estaba sentado a la mesa
con sus discípulos, tomó el pan,
dijo una oración para
bendecirte y darte gracias,
lo partió y lo dio a sus
discípulos, diciéndoles:

TOMAD Y
COMED
TODOS DE
ÉL, PORQUE
ESTO ES MI
CUERPO,
5

Potrebbero piacerti anche