Pastor Juanki nos ilustró el interesante pasaje del arca del pacto cuando causó tánto miedo y pavor

a David al
fulminar a Usa cuando era trasladada el arca de pacto la presencia de Dios a Jerusalén, en cambio fue llevada a
casa Obed Edon quien entendió lo que era tener la presencia de Dios en casa. La presencia de Dios para unos
fue causa de miedo para otros se convirtió en una bendición.

El día de hoy nuestro punto de partida será también un episodio de miedo, de pavor, de terror frente a la
presencia de Dios. Pienso que sí, la presencia de Dios nos da terror en ocasiones cuando no estamos
preparados, cuando vamos en la dirección equivocada, cuando nuestra vida es contraria al deseo de Dios, sí da
miedo, da temor, da terror.

Este episodio es particular porque tal vez sea la primera vez que se registra el miedo en un ser humano.

Gn. 3:8 para este entonces Dios ya había establecido a un hombre llamado Adan y su mujer Eva en el Jardín
del Edén dándole instrucciones muy claras y concretas verso 15 que lo labraran y lo guardasen, de todo árbol
podrás comer, más del árbol de la ciencia del bien y el mal no, ese no, porque el día que de él comieres
ciertamente morirás.

Ustedes conocen el desenlace, fue como decirle a mi hijo la primera vez que vio la llama de una vela o los
huecos del tomacorriente, o la plancha encendida, no eso no, y lo que después vino fue un lloro desconsolado
acompañado de dolor.

Bueno en el verso 8 del capitulo 3 Adán y Eva no han cumplido las expectativas, han desobedecido y ahora
tienen una actitud muy peculiar, que hasta el día de hoy la vemos reflejada en el ser humano

8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se
escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto. 9 Mas Jehová Dios llamó al hombre, y
le dijo: ¿Dónde estás tú? 10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me
escondí.

Este acontecimiento cambió radicalmente la historia, el ser humano al sufrir fracaso, pecado, errores,
circunstancias dolorosas, instintivamente se esconden, se aíslan, huyen de Dios, los invade el temor, el miedo,
han fracasado, no han cumplido con las expectativas, ahora toman hojas, quieren esconder su vergüenza, su
pecado, sus fallas sus errores y empiezan a construir otra identidad, ya no se sienten hijos de Dios, su
identidad ha sido distorsionado, producto de su pecado y su miedo.

Saben hermanos ya han pasado varias semanas desde que cortamos las cuerdas que nos ataban, y si el 90%
tenía que ver con los miedos, hemos explorado lo largo y ancho de nuestros temores, pero hay uno que ha
estado ahí desde hace mucho tiempo y a veces es difícil descifrarlo, entenderlo, aceptarlo, uno que no tiene
que ver con arañas, alturas, tiene que ver con nuestro día, día.

Miedo a la desaprobación, sí Adan y Eva estaban escondidos, tenían vergüenza y su terror tenía que ver con la
desaprobación de Dios, claro habían fracasado, afloró su humanidad, su débil humanidad y esta nos ha venido
acompañando desde entonces, lo más terrible es que distorsiona quienes somos, construirnos otro yo, otra
identidad, que no es la que Dios tenía para nosotros.

Como se siente enfrentar un divorcio?

Cómo se siente enfrentar un desengaño, una infidelidad?
Como se siente enfrentar un despido, quedarse sin el sustento para la familia
Cómo se siente lidiar con un pecado de moralidad
Cómo se siente lidiar con problemas de adicción en un ser querido, en un hijo.

Déjame preguntarte ¿Cómo te sientes delante de Dios? ¿Cómo queda nuestra autoestima?

Esto cambia la historia, esto cambia la historia bella del jardín del Edén, esto cambió de manera radical la
identidad y autoestima de cualquier persona. Ya no te sientes el hijo o la hija amada de Dios.

Pero este temor a buscar la aprobación no sólo de Dios sino de los demás, aún de la gente que amamos, es
como una trampa, muchos viven atrapados en un bucle en la búsqueda de aprobación, de validación.

Y entonces nos hacemos de hojas que cubran nuestra vergüenza, no queremos que nos vean, no queremos
defraudarlos, queremos cumplir las expectativas, nos hacemos mascaras de complacencia, dejamos de ser
quien somos y nuestra identidad es deformada porque esperamos complacer la probación de alguien más.

Esa esposa que renunció a sus sueños y anhelos porque su esposo le prohíbe, compórtate así, no rías así, no
hables así, no te vistas así, calla.

Ese hijo esa hija que tuvo que renunciar a sus sueños y tal vez a su propósito de vida por estudiar la carrera
que papá dice, porque para un hijo es importante la aprobación de su padre.

Esa persona que teme a su pastor y al que dirán los hermanos de la iglesia, y si debemos reconocerlo y decirlo
la iglesia se ha ganado la fama, mucha gente no viene porque dicen la iglesia evangélica está llena de gente
hipócrita, es una en la iglesia pero otra cuando va en su auto, otra en su casa, otra en su trabajo, cuando sólo
somos personas rotas y necesitadas que venimos aquí buscando del Señor porque no nos hemos dado por
vencidos y creemos que en Dios hay esperanza para lo que vivimos, pero creer que somos superiores a los que
están allá afuera ¡no! de ninguna manera.

Muchos han dejado de congregarse o vienen muy de vez en cuando porque no se sienten dignos o dignas y
“que dirán los hermanos de la iglesia”, pastor Juanki lo dice a menudo yo soy el primero que necesito, algunos
podrán decir hay el pastor no debiera decir eso, pero es que es verdad todos lidiamos con cosas, todas las
familias estamos aquí buscando del señor que nos sane de algo, que nos restaure de algo, no importa que
sonriamos a la entrada, que nuestra respuesta más simple a la pregunta ¿cómo estas? En lugar de bien sea no
estamos bien, estamos luchando, estamos necesitados del Señor, necesitamos el acompañamiento de alguien
y no debería ser razón de vergüenza.

Lo cierto es que desde que somos niños aprendemos del temor a la desaprobación, a la falta de validación y
eso distorsiona nuestra identidad, a muchos se les dificulta el ¡No! para muchas decisiones en su vida, otros se
esconden en un lugar oscuro de su interior y se acostumbran a llevar una mascara de todo esta bien. Pero hoy
el Señor nos hace la misma pregunta del jardín ¿Dónde estas? Frente a la calamidad, el dolor, la confusión
muchos preguntan ¿Dónde esta Dios? Sobre todo en situaciones como las que vive nuestro Ecuador ¿Dónde
esta Dios? Pero la verdadera pregunta la hace Dios ¿Dónde esta el hombre? ¿Dónde estas tú? Y nuestra
respuesta sigue siendo la misma tengo miedo Señor, tengo miedo que la gente vea realmente quien soy,
tengo miedo a mostrar mis heridas, mis pecados, mis errores.

Eso nos paraliza, nos impide ver lo que quiere Dios hacer en nosotros en nuestra familias, en nuestra iglesia, la
culpa, el fracaso nos impide escuchar a Dios diciendo cuanto nos ama.

Pero el Señor te toma de la mano te lleva a la Luz y hace algo que quiero ilustrar con la siguiente historia
Bíblica.
Es la historia de un niño, tiene un hermano mayor, es más alto que él, es más fuerte que él, es suco, él es
morenito, su hermano es el mimado el preferido de papá, papá va casar con su hermano mayor, a él no lo
determina, es más siempre le dice que esta bajo las faldas de su mamá, porque las mamás vemos a nuestros
hijos más indefensos, más frágiles y tratamos de sobreprotegerlos a toda costa.

Cuando su padre ya anciano esta a punto de morir y darle la bendición y herencia a su hermano mayor según
la costumbre, se le ocurre secundar el plan de su madre, que no quiere que su padre lo deje sin la bendición,
porque es el más frágil según ella, es indefenso, ha tenido que lidiar con tanto de parte de su padre, nunca ha
podido cumplir sus expectativas, ha sido tan difícil la validación de su padre que lo quiere ayudar, así es una
madre, preparan un guiso de cordero y le pone unas hojas de vergüenza, una mascara, lo disfraza de su
hermano mayor para presentarse delante de su padre y así obtener la bendición que nunca según mamá
obtendría por cuenta propia. Madre e hijo logran engañar a su padre se hacen de la bendición del patriarca
con un disfraz, una mentira, un engaño. Y cuando el hermano mayor llega a casa a preparar el guiso para su
padre su alegría se convierte en rabia, odio y deseo de venganza por su hermano menor, quien arrebató su
bendición y derechos de primogenitura.

A su madre se le olvida que de parte de Dios este segundo hijo tiene una promesa, se le olvida que hay
propósito para su hijo llamado Jacob el tramposo, el usurpador, el mentiroso, el engañador, que al principio
cuestionaba su nombre pero ya se acostumbró, aunque muchas veces le dijo mamá yo no soy eso, de a poco
se acostumbró.

Este joven a causa de su engaño y el deseo de venganza de su hermano debe huir, dejar su casa, a su madre,
su vida, y la identidad que hasta ahora había forjado, ahora es un errante, un forastero que arrastra su pasado,
su vergüenza, sus engaños y sus mentiras.

Llega a casa del pariente Laban, y bueno un engaño lleva a otro engaño, una mentira a otra mentira, su suegro
lo hace trabajar 7 años por su esposa Rebeca y 7 años más un total de 14 años por el engaño de su suegro al
darle primero a su hija menor Lea, la de los ojos consentidos, sin embargo hay una promesa y una bendición, a
este hombre a pesar de ser engañador, la bendición lo sigue, después de 20 años de salir de casa, ahora tiene
2 esposas, 2 siervas y 11 hijos, cientos de cabras, machos cabríos, ovejas, carneros, camellas, vacas, novillos en
fin se ha convertido en hombre rico que hace mucho. Y Como su nombre es engañador esa fue su identidad
por mucho tiempo, a el le agrada más que lo identifiquen como el hombre que tiene mucho, el hacendado, el
ganadero. Ingeniero, doctor, abogado, coronel, apóstol,

A menudo confundimos lo que somos con los que hacemos y muchas personas cuando preguntan quienes
eres responden con su profesión o con lo que hacen, pero que gran error.
Porque si se basa la identidad en lo que se hace, qué pasa cuando lo despiden del trabajo de ingeniero, que
pasa cuando le quitan la licencia de abogado, que pasa cuando el doctor se enferma, que pasa cuando le dan
de baja o se jubila y ya no es parte del glorioso ejercito del ecuador, que pasa cuando llega la pandemia y ya
no podemos hacer lo que hacíamos supuestamente para Dios, mucha gente en la pandemia entró en crisis,
muchos se divorciaron, otros empezaron a morir en una cama sin querer levantarse, se postraron en una silla
viendo maratones de netflix, otros que servían en la iglesia y creían que su servicio era su identidad y su carta
de presentación para Dios, ahora andan por ahí, se fue el ímpetu, se fue la pasión, se fueron la ganas de servir,
se fue el primer amor y no saben como regresar, no saben como volver a encender la llama, ya no se sienten.

Pero volvamos a la historia de este hombre llamado Jacob el usurpador, un día toma a sus esposas, siervas
hijos y posesiones y huye de su suegro el tramposo va de regreso a casa, ya esta harto de ser quien hasta
ahora ha sido, esta cansado de las mentiras y engaños con su suegro, ya esta cansado de la pesada carga de su
pasado, no es feliz, sabe en su interior que donde esta, no es para lo que Dios lo llamo, trabajar, proveer,
dormir, abrazar a sus hijos, pelear con el suegro, recordar con tristeza las memorias de su infancia, recordar a
su padre, que será de la vida de su hermano, y si no hubiera hecho eso, y si hubiera actuado de otra forma, en
fin algo más lo llama desde su interior, pero este hombre no es feliz, ve a sus hijos a sus esposas y no es el
legado que les quiere dejar, no es la herencia que se merecen, hay una promesa de Dios a su abuelo Abraham,
hay una promesa que Dios a su padre Isaac y sabe que donde esta no es.

Cuando ves a tu esposa a tu esposo tus hijos, que vez? Estas donde crees Dios quisiera, realmente es lo que
Dios quiere para ti y para tu familia, yo y mi familia no estábamos donde Dios nos quería no hace mucho,
tuvimos que venir delante del Señor y nuevamente hacer una evaluación de nuestras vidas, de nuestra
espiritualidad, de nuestra familia y alinear nuevamente que quiere Dios y que estamos haciendo nosotros,
hemos tenido que tomar decisiones y las seguiremos tomando porque definitivamente no estamos dispuestos
a ir por la vida sin propósito, creo que esta bien, porque de otra forma hacia dónde vamos iglesia.

Jacob se encamina a casa, a Canaan con toda su familia y su spertenencias es una gran mudanza, va en busca
de su pasado pero también de su propósito.

Cuando va llegando a Jaboc se le informa que viene a su encuentro su hermano mayor Esau el rojo el chacal
del desierto con 400 hombres montados y con cara de pocos amigos, eso si da miedo.

Pero Jacob es quien es sabe de tretas, de engaños, de manipulación, le envió de obsequio unos cuantos
cientos, de ovejas, asnas, camellos, carneros y vacas a su hermano mayor el chacal del desierto como para ir
tentando el terreno. Esta tratando de hacer lo que hacemos todos los seres humanos, “ponernos en control”
voy monitoreando de atrás como va la cosa, si viene con sed de venganza después de tantos años entonces no
querrá nada, luego le envió los siervos y otros regalitos y así voy viendo la marea, ese era su plan.

Pero no puede seguir así toda la vida, necesita ser valiente y enfrentarse, primero así mismo, debe luchar con
sígo mismo, deberá luchar con Dios y luego podrá luchar contra lo que venga.

Así que hace pasar a su familia siervos y ganado el arrollo en Jaboc, y el se regresa al otro lado a estar sólo,
Jaboc, significa forcejear, lucha, es en la soledad cuando realmente nos encontramos con ese niño, esa niña,
con los miedos de antaño, porque lo que somos hoy tiene que ver con ese niño o niña que fuimos, con la
carencias emocionales, los miedos, la desaprobación, la represión, la falta amor, tantas cosas que dañaron
nuestra identidad, que nos han hecho desviarnos del propósito de Dios. Y para luchar con nosotros mismo
tenemos que estar sólos, en esa soledad Dios se hará presente, tendremos que mostrar la heridas, esas que
hemos ocultado, esos errores, fallas, pecados que a nadie hemos mostrado, tendremos que mostrarnos tal
cual somos, como Adan y Eva para dejar que la gracia de Dios nos cubra, y no sientas miedo, vergüenza o
temor, eso es lo que le enemigo quiere, que nunca las saques, que ocultes la vergüenza, el pasado los errores
las carencias, por que qué vergüenza no cumplir las expectativas de los demás uy si eso da miedo.

Hoy por hoy estamos cursando el segundo curso de restauración, más de 40 mujeres. Qué sería de nosotras
con heridas, lastimadas, si alguien valiente no nos hubiera mostrado sus heridas primero, sus flaquezas, su
pasado, y todo lo que el señor ha hecho en su vida y darnos tanta esperanza.

Nadie podrá mostrar mayor empatía, gracia y favor a un matrimonio en proceso de divorcio, que alguien que
ya pasó por ese proceso. Nadie podrá entender mejor a un padre que perdió su hijo que alguien que ya
transitó por tan duro valle de sombre de muerte.
Sabes los alcohólicos anónimos esta organización que nunca ha buscado institucionalizarse ni identificarse con
alguna institución religiosa o social, sino que se reúnen en cualquier edificio, sala de escuela, colegio u hogar
para mostrar sus heridas, se presentan yo soy Pepito Perez y soy alcohólico, ese primer paso de aceptación si
tengo problemas, si tengo una gran herida es su primer paso reconocer quienes son, no se andan con rodeos,
soy un alcohólico y llevo 5 10 12 meses sobrio, es su identificación. Muestran sus heridas, sus falencias, se
muestran vulnerables, sí son exitosos, nadie ha tenido tanto éxito ayudando a gente con tan grandes yugos y
cadenas de adicción como esta gente. Han decidido quitarse las mascaras, las hojas de vergüenza, se muestran
tal cual son.

Así que Jacob esta allí sólo, se postra en tierra, acongojado, angustiado, no sabe que hacer, le recuerda a Dios
su promesa, pero no logra tener intimidad fácilmente con Dios, y claro es difícil lograr una comunicación
íntima con Dios cuando no somos sinceros con nosotros mismos y con Dios, tal vez te ha pasado, te has
acostumbrado a las oraciones de la mesa o orar cuando sales de viajes no mas de 1 minuto pero entrar en un
tiempo de oración profunda, que difícil más de uno a los 5 minutos se queda dormido, y es que Dios no tendrá
una conversación intima con alguien que tiene mascaras, que se muestra tal cual es, con alguien que no esta
dispuesta a mostrar sus errores, Dios no habla con impostores.

No le queda más a Jacob que mostrarse tal cual es, empieza la oración más sentida, más sincera, más intensa,
más dramática, más extensa una que pasan las horas y no termina hay tanto que decirle a papá Dios, hay
tanto exponer, Jacob quiere excusarse, quiere argumentar, pero es Dios con quien habla, Dios por su lado
empieza a mostrarse, a revelarse, Jacob experimenta una faceta de Dios que nunca había visto, esta
experiencia, cara a cara con Dios lo tiene extasiado y no quiere que termine, eso es intimidad.

El angel le dice déjame que raya el alba, no hasta que me bendigas, hasta que el angel le hace la gran pregunta
¿Cuál es tu nombre? Cual es tu identidad, y no porque Dios no sepa, algo va a hacer el Señor con este hombre
que viene arrastrando su pasado, sus pecados, sus errores, pero esa no es su identidad, Señor le dice soy
Jacob el engañador, el mentiroso el usurpador he cargado esta dura carga toda mi vida. Y Dios le contesta:
Pues ya no serás eso, recuerdas la promesa que hice a Abraham tu abuelo

Esa promesa la cumplo hoy en tu vida por lo tanto ya no se dirá tu nombre Jacob, engañador, usurpador, sino
que a partir de hoy será Israel, esta es tu verdadera identidad, serás padre de muchas naciones, Y haré de ti
una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3 Bendeciré a los que te
bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.

Hay propósito del Señor para tu vida para tu familia.

Es Dios mostrando su amor, no importa de donde vengas, no importa en el lugar que has estado Dios no te ha
dejado de amar, no ha dejado de pensar en ti, Dios no ha claudicado el plan y propósito que tiene para ti, el te
ama, te estará esperando en el Peniel de tu vida, para que luches contigo mismo, con él, pero también para
que salgas bendecido.

Pastor JUaki nos invito a poner la casa en orden, bueno el primer paso es poner nuestra identidad en orden
con Dios, alinear mis propósitos con los de Dios, Mateo 3:13 dice después subió al monte, y llamó a sí a los
que él quiso; y vinieron a él. 14 Y estableció a doce, para que estuviesen con él, y para enviarlos a predicar, 15
y que tuviesen autoridad para sanar enfermedades y para echar fuera demonios: 16 a Simón, a quien puso por
sobrenombre Pedro

Mira lo que él dice que eres, que lo escuche tu corazón, tu familia, escúchalo con oídos espirituales, siente el
amor de Dios, porque el perfecto amor hecha fuera el temor.