LA PROBLEMÁTICA MERCANTIL DEL SECTOR AGRICOLA EN

COLOMBIA.

LAURA CAMILA PORRAS VILLAMIL

UNIVERSIDAD COOPERATIVA DE COLOMBIA

LEGISLACIÓN COMERCIAL

2018

VILLAVICENCIO/META.

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LA PROBLEMÁTICA MERCANTIL DEL SECTOR AGRICOLA EN
COLOMBIA.

En la historia de Colombia, es importante hablar que su

economía, empezando desde las más pequeñas sociedades
comerciales: nuestros campesinos y agricultores.
Los campesinos y agricultores colombianos han influido
considerablemente en la economía y la principal y más
importante actividad mercantil hasta el momento. Es una
historia de más de un siglo en el cual mediante la
producción de la tierra, y sin contar con los recursos
petroleros, el campo y la agricultura también influyen y
hacen parte del sostenimiento de la economía colombiana.
Siempre se ha tenido en cuenta a nuestros campesinos y
agricultores, ya que, siendo parte fundamental de la
economía colombiana, se les había garantizado la
protección y seguridad necesaria para que ellos
realizaren sus distintivas actividades.
Hace más de 60 años, con la cogida de fuerza tan
“verraca” de los grupos al margen de la ley, de las
farc, de las autodefensas unidas de Colombia, y de los
pequeños grupos delincuenciales; los campesinos se han
visto inmensamente afectados, ya que en medio del
desplazamiento forzado, las masacres ocurridas en sus
territorios, los asesinatos y secuestros de sus líderes,
generan una controversia social y económica, los
conflictos entre la guerrilla y el gobierno, dejando
vulnerados a los campesinos y agricultores de nuestro
amado país, vulnerándoles también la seguridad que se
les había prometido y la protección a sus territorios,
hogares y zonas agrícolas (fruto necesario para su
subsistencia).
Este sistema agrícola colombiano ha venido en decadencia
principalmente a los problemas de la guerra.

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Actualmente, mediante los acuerdos de paz, estos
conflictos entre la guerrilla colombiana y el gobierno
han disminuido, pero esto no es suficiente; actualmente
en Colombia hay más de 5.850 personas afiliadas al
programa de la unidad de reparación integral a las
victimas (UARIV), en el que más del 70% de las personas
afiliadas a este programa son campesinos y por ende,
agricultores; si, agricultores y campesinos, los que
hace más de un siglo venían influyendo seriamente en la
economía del país.

Pero los problemas de la guerra no han sido el único

inconveniente para nuestros campesinos y agricultores
colombianos, también lo ha sido el TRATADO DE LIBRE
COMERCIO, firmado por el gobierno colombiano hace más de
5 años.

El TRATADO DE LIBRE COMERCIO, lo que hace es que al

abrir las puertas a otros países con mayor economía y
potencial económico y gubernamental, influyendo en el
factor de competitividad de las grandes empresas
internacionales, de las multinacionales, de empresas
competitivas y microempresas; generando a las
microempresas colombianas, a los campesinos y
agricultores – que sin apoyo del mismo gobierno
nacional- tienen que entrar a competir con los productos
de otros países, como otro tipo de economía, generando
en algunos casos mayor productividad, y en otros las
perdidas suficientes para entrar en crisis y en el casos
de algunas empresas y sociedades: la insolvencia
económica.
Pero no solo el TLC, que a la mayoría de los colombianos
campesinos y agricultores ha afectado, sino también las
tarifas, las rentas y los impuestos que impone el
gobierno anualmente a nuestros empresarios, campesinos y
agricultores colombianos.

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A este factor le incluimos también el sistema de
gobierno, más explícitamente: el congreso colombiano,
que están facultados para hacer las leyes mercantiles
colombianas, y es que es innegable decir que diariamente
expiden 11 decretos, al año más de 4.000 leyes y
decretos en el todos los campesinos y agricultores, como
también los empresarios que viven del comercio, esperan
que una de esas leyes o decretos les brinde una
preferencia a este sector; y es que aunque en medio de
los “paros” (agrícolas y de campesinos), el gobierno no
cumple con los acuerdos de brindar esta protección y
garantías al sector del campesino y agricultor.

La solución a toda esta problemática la tiene que dar el

gobierno nacional, y es que solo el gobierno nacional
(Presidente Juan Manuel Santos), tiene que tomar
responsabilidades y también fomentar los diálogos con
los campesinos y agricultores, empresarios y sociedades,
en donde se les de preferencias con respecto a las leyes
mercantiles, a la seguridad y protección, para que así
Colombia vuelva a ser ese país en el que el principal
sostenimiento sea el sistema petrolero, sino que también
lo sea la agricultura y el comercio Colombiano.

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