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M I GUEL
NGEL
El
M i cr opr osopus
de la K abbalh
LA RESTAURACIN DE
MOISS
El Moiss de Miguel ngel es el
Zeir Anpn o Microprosopus de
la K abbalh
Michelangelo Buonarroti (1475 - 1564).
La figura de Miguel ngel domina toda mi vida, y no
en vano se ha hablado de mi titanismo. Soy viejo
ahora, apenas veo con el ojo derecho, pero la voz de
mi juventud no me deja descansar. Escribo la vida de
Miguel ngel y me siento revivir . (Giovanni Papini).
en g r an d ec i d o y ex al t ad o , y se el ev ar
inmensamente' (Isaas 52, 13), (l ser) 'prspero' ms
que Abraham, 'exaltado' ms que Isaac, 'elevado' ms
que Jacob, e 'inmenso' ms que Moshh. Esta es la
explicacin, de por qu el Mashiah Ben David (el
Mesas Hijo de David) merecer la Nesham de la
Nesham [Alma Superior], la cual Moiss no alcanz a
recibir. (En la poca del xodo de Israel). Encontramos
as que el Primer Pastor, Moshh, l mismo ser el
Pastor final... Por lo tanto 'Shiloh', que es el Mashiah y
Moshh, tienen un valor numrico igual. Porque ellos
son uno, (la nica diferencia) es que el Mashiah (Mesas)
es l a N esh a m h d e l a N esh a m h d e
Moshh..." (Enseanzas deIsaac Luria).
El Talmudista Shelomoh ben Yishaq (Rashi), del siglo
X I, interpreta a Shilh en el Rey Mesas y lo llama "el
Terrible":
"... 'Hasta que venga Shilh': el rey Mesas, a quien
pertenece el reino, y as lo tradujo Onqelos, explicacin
segn el derash [Interpretacin] 'shay lo', 'un presente
para l', pues est escrito: 'traern presentes al terrible' ".
(Salmos 76.12).
"El Terrible", aplicado a Miguel ngel, es aplicable
igualmente a M oiss o Shilh, de acuerdo a la
interpretacin del Salmo 76, como hemos visto.
A Vittoria Colonna
Imposibleparecey nos lo advierte
empero la experiencia, quems dura
demrmol insensibleuna figura
quesu autor, presa en brevedela muerte.
Ms quela causa es el efecto fuerte,
por el artees vencida la natura:
lo syo a quien da gloria la escultura,
y ya meacerco a la vejez inerte.
Tal vez a ti y a m dar larga vida
puedo con el cincel o los colores,
adunando mi amor y tu semblante.
Y mil aos despus dela partida,
severn tus hechizos vencedores,
y cunta razn tuveen ser tu amante.
M i chel angel o B uonar r ot i .
"Cuando le conoc [a Miguel ngel] ninguno de los dos
estbamos ya en esa edad en que los corazones corren
libres sin sentir las frreas ligaduras de la razn, su
lastre, su efecto disolvente, su injerencia disuasoria, su
prudencia, o su miedo suma de todos los miedos
incrustados en la experiencia... No, nada de eso. Yo, ya