Jerusalem,.? ANO IL jHa muerto Jesus! ms 29 TESUS, EN CUANTO HA TOMADO EL VINAGRE, HA EXCLAMADO: TODO ESTA CONSUMADO"” , INCLINANDO LA CABEZA, HA ENTREGADO RITU: su Al ver morir a Jesus, el centuri6n ha reconocido que este hombre era Hijo de Dios sc08 15, 38-41 El velo del templo se ha rasgado en dos partes, de arri- ba abajo. El centuri6n, que estaba frente a Jess, al ver Ja manera como ha muerto, ha reconocido: Verdaderamente, este hombre era Hijo de Dios!”. Se encontraban allf, mirando desde lejos, algunas muje- res, entre ellas Maria Magdalena, Marfa la madre de San- tiago el Menor y de José y Salomé, quienes, cuando esta- ba en Galilea, le habfan seguido y le prestaban sus servi- cios. Y otras muchas que habi salén, “|VERDADERAMENTE, ESTE ES HIJO DE DIOS!” plirse lo anunciado por desis: “Cuando sea le- vantado sobre la tierra jAtraeré a mi todas las, Por eso todas las gon- tes que habian acudido at Calvario, “ala vista de lo que est sucediendo, re- gresan golpeandose el echo", Indudablemente, segin escribié el profeta Zaca- rias, desde ahora en ade- lante, todos “habrin de volver fa vista hacia el Los estes sxtaor narios que se han | Producido at morir Jesus, hhan movido al centurién ue ha dirigido la ejecu clén a reconocer que ‘Verdaderamente, éste es <1 Hijo de Dios”. El torror que les ha so- brecogido puede inter pretarse como miedo a tuna venganza divina por haber ejecutado a un hombre inocente y de na turaleza superior. Pero también es ver- dad que comienzaacum- que han traspasado" Palestina 2 22 jHa muerto Jesus! ens 23,46 JESUS, DANDO UNA GRAN VOZ, HA EXCLA- MADO: —";PADRE, A TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPIRITU”, 'Y, DICIENDO ESTO, HA EXPIRADO. a No rompen las piernas a Jesus por encontrarlo ya muerto suse 19,3137 ‘Como es Parasceve la preparacién de la Pascua para que durante el sibado, pues es muy solemne este sabado, no permanezcan los cuerpos en la cruz, 10s judfos han pedido a Pi- lato que se les rompan las piernas y los re- tiren. Han venido los soldados y, en primer lugar, hhan roto las piernas de uno y otro que estaban crucificados con El. ‘Cuando se han acercado a Jesis, al ver que ya estaba muerto, no le han roto las piernas, pero uno de los soldados le ha roto el costado con una lanza y, al instante, han brotado san~ re y agua Esto lo testifica quien lo ha visto y su test ‘monio es verdadero. Y él sabe que dice la ver- dad para que vosotros cred Todo esto ha sucedido para que se cumpla la Escritura: “No le romperéis ningxin hueso” yy, de nuevo otra Escritura que afirma: “Mira- ‘rin al que traspasaron”,n? 22 __ Jerusalem ,,ov$ Pilato comprueba que Jesus ha muerto ya y autoriza retirar su cadaver de la cruz ancos 15, 42-47 Al atardecer, por ser la Parasceve, es decir, la vispera del sébado, ha llegado José de Arimatea, senador noble, que también espera el Reino de Dios y, valientemente, se ha presentado delante de Pilato y le ha pedido el cuer- po de Jestis Pilato se ha admirado de que ya haya muerto y ha he- ccho venir al centurién y le ha préguntado si, efectivamen- te, habfa muerto ya ¢, informado por el centurién, le ha concedido el cadaver a Jos José ha comprado una sabana, lo ha bajado de la cruz, Jo ha envuelto en la sfbana, lo ha colocado en un sepul- cro, que esté excavado en una roca, y ha rodado una pie- dra hasta cubrir la puerta del monument, Maria Magdalena y Marfa la madre de Jo contemplando donde io colocaban. staban Dan sepultura a Jess en un sepulcro nuevo excavado en la roca tweas, 23, 50-56 ‘Un hombre Hamado José, que era senador, varén bueno y justo, natural de la ciudad de Arimatea, en Judea, que ‘no habia dado su asentimiento a la sentencia y a las actua- ciones de los demas y que espera el Reino de Dios, se ha presentado ante Pilato y Ie ha pedido el cuerpo de Jestis. Una vez descolgado, Io ha envuelto en una sébana y 10 ha colocado en un sepulcro, labrado en una roca, donde nadie ha sido enterrado todavia. Es el dia del Parasceve y va a comenzar el sabado. Lo han seguido las mujeres que habian venido con El desde Galilea y han observado el sepulero y cémo han co- Tocado su cuerpo. ‘A la vuelta, han preparado aromas y perfumes para ob- servar el descanso del sibado conforme a la ley Embalsaman el cuerpo de Jesus y lo colocan en un sepulcro nuevo sua 19, 98-42 José de Arimatea, que era discipulo de Jests, aunque en se- creto por miedo a los judios, ha pedido a Pilato que le dejara retirarel cuerpo de Tests Pilato Ie ha dado permiso para hacerlo. Ha venido y ha tomado el cuerpo de Jest. ‘También se ha presentado Nicodemo, quien anteriormente hhabfa ido de noche al encuentro de Jests,trayendo unas cien libras de una mezcla de mirra y Aloe. Han tomado el cuerpo de Jestis lo han atado con vendas empapadas de aromas, segiin es la costumbre de sepultar de los judi. En el lugar donde han crucificado a Jest hay un huerto y, dentro del huerto, un sepulero nuevo en el que, hasta el mo- ‘mento, no ha sido sepultado nadie. Alli, con motivo del Parasceve de los judios y, por estar el sepulcro cerca, han depositado a Jest Los principes de los sacerdotes y los fariseos precintan el sepulcro de Jesus y montan vigilancia ante él Al dia siguiente, pasado ya el Parasceve, se han reunido los principes de los sacerdotes y los fariseos en casa de Pilato y le han dicho: feior, nos hemos acordado de que este seductor dijo cuando atin vivia: ‘Después de tres dias resucitaré”. Orde- na por tanto vigilar su sepulcro hasta el terver dia, no sea que vengan sus diseipulos, Io roben y digan a la gente: “Ha resucitado de entre los muertos’. ¥ este tiltimo enga- fio sera atin peor que el primero”. Pilato les ha contestado: fenéis a vuestra disposicién una guardia. Marchad y aseguradlo como sabéis”. Ellos han ido y han asegurado el sepulero, precintando la piedra y poniendo guardias.