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LA CREATIVIDAD
 EL CONCEPTO DE CREATIVIDAD

A lo largo de la historia, el ser humano ha evolucionado permanentemente y ha

logrado grandes progresos y avances en todos los terrenos. Todo ello ha sido
posible gracias a la creatividad.
El término creatividad es un neologismo procedente del inglés creativity que
comenzó a utilizarse en los años 1950. El término equivalente en español es de
reciente incorporación al diccionario de la Real Academia Española (RAE). De
hecho, su incorporación tuvo lugar en el año 1984 como reflejo de su rápida
generalización tanto en el ámbito académico y científico como en el lenguaje
cotidiano.
El psicólogo norteamericano Joy Paul Guilford es considerado el pionero en el
análisis de la creatividad. De hecho, tituló “Creatividad” su primer discurso como
presidente de la Asociación Psicológica Americana (APA)  en 1950
Cada autor que teoriza sobre creatividad añade nuevos matices a las definiciones
existentes. En la siguiente figura recogemos las definiciones más relevantes:
1967 - MORRIS I. STEIN
Proceso que tiene como resultado una obra personal, aceptada como útil o satisfactoria
por un grupo social en un punto cualquiera del tiempo.
1969 - NORBERTH SILLAMY
La disposición para crear que existe potencialmente en todos los individuos y en todas las
edades, en estrecha relación con el medio sociocultural.
1976- GUNTHER WOLLSCHÄGER
Aptitud de señalar nuevas interrelaciones, de cambiar significativamente normas
tradicionales contribuyendo así a la solución general de problemas de la realidad social.

1987- ERIKA LANDAU

La capacidad de descubrir relaciones entre experiencias antes no relacionadas, que se
manifiestan en forma de nuevos esquemas mentales como experiencias, ideas y procesos
nuevos.
Se puede observar, tanto en éstas como en otras definiciones aparecen los siguientes
elementos comunes: Persona Proceso Resultado y Sociedad  
La creatividad es paradójica. Para crear, una persona debe tener conocimientos pero
olvidarse de ellos; ver las conexiones inesperadas entre las cosas, pero no tener un
trastorno mental; trabajar duro, pero pasar tiempo sin hacer nada mientras procesa la
información; crear muchas ideas pero aceptar que la mayoría son inútiles; mirar a las
mismas cosas que los demás, pero ver algo diferente; desear el éxito, pero aceptar el
fracaso; ser persistente, pero no obstinarse (…)
 
Creatividad e Innovación

Están estrechamente relacionadas ya que la creatividad es la habilidad para concebir

ideas encaminadas a la solución de un problema, mientras que la innovación es la
capacidad para hacer realidad dichas ideas en un contexto determinado. Es decir, la
innovación es la aplicación práctica de una idea que se ha generado gracias a la capacidad
creativa individual o colectiva.

Como afirma Juan Pastor Bustamante, la creatividad debe ser difundida, reconocida y
valorada para considerarse innovación. Y lo ejemplifica argumentando que Enric Bernat
fue un innovador no tanto por idear en 1957 una nueva forma de comer caramelo
cogiéndolo con un palito, sino por ser el primero en darlo a conocer y comercializarlo
dando lugar a un producto mundialmente conocido: el Chupa Chups.
Precisamente, el hándicap de las organizaciones en general, y de las empresas en
particular, es lograr que la creatividad se transforme en innovación y no se quede en
meras ideas, es decir, que la creatividad logre transformarse en servicios, productos,
procesos, etc. que aporten valor y permitan a la organización ser más competitiva.
 
 1. CARACTERÍSTICAS Y RASGOS DE LAS PERSONAS CREATIVAS
 
La creatividad es una capacidad del ser humano que, según Eugenia Trigo Aza, todas las
personas poseemos en mayor o menor medida. En la misma línea, Francisco Menchén Bellón
sostiene que se trata de una característica natural y básica de la mente humana que se
encuentra potencialmente en todas las personas.
 
Los estudios sobre creatividad coinciden en destacar que las personas creativas se caracterizan
por poseer su flexibilidad y capacidad de adaptación, tienen gran determinación y capacidad
para alcanzar los objetivos que se fijan. En cuanto a su personalidad, tienen en común los
siguientes rasgos:
 
Existe consenso en cuanto a que las personas creativas tienen la capacidad de encontrar
nuevos modos de enfocar un problema o de hallar una solución aplicando mecanismos
lógicos complejos no convencionales. Es decir, su actuación y su modo de pensar son el
resultado de aplicar una diversidad de lógicas que ellas logran aunar y que les permite ver
un problema, o una situación, desde diferentes ópticas y encontrar soluciones originales e
innovadoras.

En el Manual de la Creatividad Empresarial editado en el marco del proyecto transnacional

Crea Business Idea financiado con fondos FEDER, se plasma esta complejidad de las
personas creativas que son capaces de aunar un rasgo de personalidad y su antagonista en
un decálogo de la dualidad de las personas creativas:
Decálogo de la dualidad en la persona creativa
 
• Tiene una gran energía física que derrochan en el desarrollo de las tareas que
emprenden, pero a la vez son capaces de controlarla y utilizarla de manera focalizada
en trabajos que requieren de gran concentración.
• A pesar de ser personas vivas y con un alto Cociente Intelectual, pueden mostrar signos
de ingenuidad e, incluso, de inmadurez emocional (quizás Mozart sea uno de los
ejemplos más conocidos).
• Son personas que combinan altas dosis de disciplina y responsabilidad con conductas
irresponsables y lúdicas. Este carácter lúdico tiene que ver con su capacidad para jugar
durante largo tiempo con ideas de las que tal vez no se obtenga ningún resultado,
siendo esta búsqueda de la idea una tarea que requiere de altos grados de tenacidad y
perseverancia.
• Tienen una gran capacidad de abstracción e imaginación para crear novedades
aplicables en una realidad a la que, paradójicamente, se sienten fuertemente
arraigados y perciben con extremada claridad.
• Muestran tendencias opuestas a la introversión y la extraversión. Lo cual no deja de
tener su lógica ya que, por un lado, la comprensión de determinados contenidos
simbólicos requiere de una cierta capacidad de introspección y, por otro, la puesta en
relación con otras personas permite enriquecerse con sus pensamientos e ideas.
• Las empresas que afrontan este tipo de personas requieren de confianza en su
capacidad para conseguirlo, pero a la vez de la humildad suficiente para asumir los
errores cometidos que impiden el avance.
Son personas dominantes, duras, con una fuerte y marcada personalidad, pero a
la vez con una sensibilidad superior a la media que les permite apreciar aspectos
del entorno que otros se les escapan o desechan por considerarlos superfluos.
• Su predisposición a correr riesgos, a la rebeldía, requiere de la interiorización y
aprendizaje previo de los valores y reglas tradicionales en su ámbito de
actuación.
• La implicación por el trabajo que realizan es fruto de la pasión que ponen en su
trabajo, pero para evitar perder rigor han de realizar valoraciones objetivas de
sus avances.
• La excitación y disfrute de descubrir cosas nuevas resulta estimulante, y sin
embargo esta sensación nace del desasosiego de no dar con el resultado
esperado.
 2. EL PROCESO DE CREATIVIDAD
 
El proceso creativo de generación de ideas está integrado por una serie de etapas que
se suceden de forma ordenada y que numerosos autores han analizado. El primero de
ellos fue Graham Wallas, el cual distingue cuatro etapas:
 
1.    Preparación: La fase de preparación hace referencia al periodo de identificación y
diagnóstico del problema, así como todas las actividades de investigación y análisis que
se ejecutan de forma consciente para lograr comprender el problema desde todas las
perspectivas posibles.

2.    Incubación: La fase de incubación consiste en desconectar y tomar distancia

respecto al problema. Cualquier actividad que propicie esa liberación de nuestra mente,
como pasear, dormir, dibujar, meditar, escuchar música, etc., puede ayudarnos a
liberarnos de la presión de encontrar una solución al problema y ofrecernos tanto las
circunstancias como los estímulos necesarios para concebir ideas y/o soluciones.
3.    Iluminación: En la fase de iluminación empiezan a aparecer ideas y soluciones al
problema identificado.
4.    Verificación .La etapa de verificación consiste en analizar y evaluar nuestra idea
para perfeccionarla y, así, poder ratificar que efectivamente es la solución idónea a
nuestro problema.

 3. EL PROCESO DE CREATIVIDAD QUE CULMINA EN INNOVACIÓN

 
Creatividad y conocimientos son los elementos centrales del proceso de innovación.
 
Teniendo como referencia las etapas del modelo de Wallas, el siguiente gráfico
representa las etapas del proceso creativo de generación de ideas que logran hacerse
realidad en forma de innovación:
• Identificación del problema
• Generación y selección de ideas
• Propuesta de solución
• Aceptación de la propuesta
• Oportunidad
• Solución del problema
En el ciclo anterior hay tres etapas cruciales para que el proceso de creatividad culmine en
innovación:

Etapa 1: Identificación del problema

El elemento desencadenante del proceso creativo es la identificación de un problema que
requiere solución.
Esta primera etapa del proceso es fundamental, ya que un análisis y diagnóstico
incorrectos del problema no nos permitirá identificar qué estrategias son las más
adecuadas para solucionarlo. En este sentido se recomienda recopilar y analizar toda la
información posible acerca del problema (testimonios, opiniones, expectativas,
necesidades, datos cuantitativos, etc.) recurriendo a la información disponible o
recopilándola mediante técnicas de diagnóstico como el método DAFO, el método DELPHI,
etc.
 
Etapa 2: Generación y selección de ideas

La etapa de generación y selección de ideas es esencial en el proceso creativo pues es la

que conduce al diseño de una propuesta de solución al problema diagnosticado en la etapa
anterior.
 
Esta etapa comprende dos procesos:
 
• El pensamiento divergente estimula la creatividad y propicia la generación de ideas. No
se trata de realizar juicios ni valoraciones sino de proponer ideas. Cuantas más ideas
surjan mejor porque así tendremos más alternativas.
• El pensamiento convergente nos permite poner orden, priorizar, agrupar, establecer
criterios de selección y seleccionar la(s) idea(s) que se presentan como opciones
idóneas para solucionar el problema.
Etapa 3: Aceptación de la propuesta y aplicación de la idea

La innovación implica la aplicación de la propuesta de solución seleccionada entre

todas las ideas que se generan gracias a la creatividad. Y esta selección es posible
cuando se llega al consenso acerca de cuál es la idea más adecuada, por ejemplo entre
quienes ostentan la responsabilidad de la toma de decisiones, o entre los miembros
de  un grupo de trabajo.
 
Acto seguido, la implementación de la idea requiere el diseño de una estrategia que
nos permita superar el problema detectado. Es de este modo como las ideas que se
generan en el proceso creativo se convierten en un proyecto que puede culminar en
una innovación como una nueva creación (producto o servicio), una nueva utilidad no
contemplada anteriormente, un nuevo proceso, una reforma organizativa, etc.
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