Miriam Ileana Maldonado Batres Profesora e Investigadora de
la Escuela de Trabajo Social USAC Directora del Instituto Universitario de la Mujer de la USAC Resumen La ponencia tiene como objetivo, reflexionar sobre la responsabilidad de la educación superior con el desarrollo de las ciencias, la recuperación de la dignidad individual y colectiva del ser humano desde una ética-solidaria, para la formación de ciudadanas/os que contribuyan al fortalecimiento de las identidades; la autonomía, pluralidad, reconocimiento y respeto a la diversidad; el reconocimiento de las subjetividades, saberes y experiencias de los pueblos y sujetas/os emergentes, desde un pensamiento complejo. En la actualidad el Estado de Derecho se considera fallido por la manipulación de la verdad, el clientelismo, la incompetencia y mediocridad de sus funcionarios/as, la corrupción, los fundamentalismos, la militarización del gobierno, la violación a los derechos humanos, el crimen organizado; la agudización de la pobreza, exclusión, discriminación, racismo y las nuevas esclavitudes. Esta realidad requiere que las ciencias y sus aportes contribuyan a recuperar la dignidad y el sentido humano, a través de la formación de profesionales, particularmente de Trabajo Social desde una visión alternativa, para la construcción de políticas públicas y acciones para el empoderamiento ciudadano, el buen vivir, la convivencia pacífica entre pueblos y la madre tierra Presentación El XI Congreso Nacional de Trabajo Social, promueve la oportunidad de reflexionar desde la academia, el profesorado, el sector estudiantil, así como las organizaciones que promueven el desarrollo, los derechos humanos y la justicia social; sobre los avances y desafíos de la comunidad del conocimiento, las ciencias sociales a través de las universidades formadoras de profesionales del Trabajo Social en la sociedad guatemalteca. La presente ponencia pretende reflexionar, sobre los compromisos de la educación superior, la comunidad del conocimiento, las ciencias, las ciencias sociales y el Trabajo Social para el desarrollo integral y plural del ser humano desde su diversidad, la cosmovisión y la autonomía de los pueblos originarios para una convivencia digna y pacífica Las Escuelas y Carreras de Trabajo Social en Guatemala, han generado esfuerzos y alianzas para formar profesionales que contribuyan al desarrollo social, la vigencia de los derechos humanos y el acceso a la justicia social, como lo establece la Constitución Política de la República de Guatemala, en su Artículo No. 82, el cual indica que para el caso de la Universidad de San Carlos de Guatemala, “en su carácter de única universidad estatal, le corresponde con exclusividad dirigir, organizar y desarrollar la educación superior del Estado y la educación profesional universitaria estatal, así como la difusión de la cultura en todas sus manifestaciones. La Educación Superior en el Siglo XXI Las universidades son un bien público y actoras de la sociedad, contribuyen a la consolidación de la dignidad de los seres humanos, la convivencia con paz y justicia en la sociedad, a través del desarrollo de las ciencias, la tecnología, las humanidades, la ética y estética. La Declaración Universal de Derechos Humanos, indica que “toda persona tiene derecho a la educación. La cual debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental… será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para [todas y todos], en función de los méritos respectivos. La educación tendrá por objeto, el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz”. (Asamblea de Naciones Unidas 1948) Garantiza a la sociedad guatemalteca, que sus intelectuales y profesionales egresados estén suficientemente capacitados con conocimientos, habilidades, métodos, técnicas y valores para un ejercicio profesional con excelencia, eficiencia, calidad y calidez humana, en las instituciones y organizaciones que requieran sus servicios en los diferentes campos 5 profesionales y con capacidades para trabajar en equipos multidisciplinarios, La Investigación y la interdisciplinariedad La investigación científica y sus aplicaciones, pueden ser de gran beneficio para el crecimiento económico y el desarrollo humano sostenible, comprendida la mitigación de la pobreza, y que el futuro de la humanidad dependerá más que nunca de la producción, la difusión y la utilización equitativa del saber…es una fuerza motriz fundamental en el 6 campo de la salud y la protección social y que una mayor utilización del saber científico, podría mejorar considerablemente la salud de la humanidad”. (UNESCO 1999) Esto requiere que la ciencia sea aplicada, para resolver los grandes problemas sociales como lo son: la acumulación de capitales, las grandes desigualdades, las exclusiones y enfrentar las nuevas esclavitudes del Siglo XXI; así como el crimen organizado y la corrupción de los gobiernos, funcionarios/as de turno que han aplicado las ciencias y los valores universales de forma perversa y cínica para beneficio individualista, de élite y enriquecimiento ilícito que trastoca la dignidad, desarrollo colectivo y autonomía de los pueblos originarios. La interdisciplinariedad es una exigencia de la extraordinaria proliferación de conocimientos y técnicas. …insta a las instituciones de enseñanza superior a que, con el apoyo de los gobiernos y la comunidad académica, adapten sus métodos docentes y de investigación a la incorporación de un enfoque interdisciplinario, encaminado a abordar las cuestiones relativas al desarrollo sostenible... Alienta la constitución y consolidación de alianzas, asociaciones y redes regionales e internacionales entre universidades y otras instituciones de enseñanza y capacitación y órganos profesionales en todos los países. Destaca la necesidad de mejorar los procesos de generar, compartir y utilizar la ciencia para el desarrollo sostenible y para una investigación interdisciplinaria más orientada a la acción, haciendo mayor hincapié en la prevención y en la identificación temprana de los nuevos problemas y oportunidades La Educación El Trabajo en Trabajo Social es una disciplina Social de las ciencias sociales, que aporta con sus principios, fundamentos teóricos, métodos y técnicas al desarrollo integral del ser humano desde su autonomía y diversidad. A nivel internacional, se enmarca en una Agenda Global de Trabajo Social y Desarrollo Social: compromisos para la acción del año 2012, desarrollada por la Federación Internacional de Trabajadores Sociales (FITS), la Asociación Internacional de Escuelas de Trabajo Social (AIETS), y el Consejo Internacional de Bienestar Social (CIBS), en la cual se comprometieron en su período 2012-2016 a centrar sus esfuerzos en las siguientes áreas: promoción de la equidad social y económica. Promoción de la dignidad y la valía de las personas. Trabajar hacia la sostenibilidad ambiental. El fortalecimiento del reconocimiento de la importancia de las relaciones humanas”. (Federación Internacional de Trabajadores Sociales 2013, p. 2)
Esta Agenda Global de Trabajo Social, la Declaración Universal de los
Derechos Humanos el Convenio 169 de la OIT (Pueblos Indígenas y Tribales), la Declaración Mundial de Educación Superior, los principios y fines de las ciencias, los compromisos de los Estados, los problemas y desafíos del sistema económico, político, social y cultural En la Agenda Global, declaran lo siguiente: - “Nos comprometemos a apoyar, influir y permitir a las estructuras y sistemas que permiten que las personas tengan poder sobre sus propias vidas. - Nos comprometemos a apoyar, influir y permitir a las estructuras y sistemas que de manera positiva hagan frente de raíz a las causas de la opresión y la desigualdad. - Nos comprometemos de todo corazón y con urgencia a trabajar juntos, con las personas que utilizan los servicios y con aquellos que comparten nuestros objetivos y aspiraciones, para crear un mundo más justo socialmente en el que se sientan orgullosos para dejar a las generaciones futuras”. (Federación Internacional de Trabajadores Sociales Las Ciencias Sociales en el Siglo XXI Las ciencias sociales, estudian el comportamiento del ser humano, sus relaciones en la sociedad, entre las instituciones y el Estado, así como sus formas de organización a través de la historia, el presente y su proyección hacia el futuro; con una rigurosidad científica que minimice la incertidumbre del desarrollo de las personas, grupos, comunidades, los pueblos y los Estados. Actualmente las sociedades en América Latina están en crisis, por la recomposición del modelo globalizador y neoliberal que sustenta en los niveles de explotación, desigualdad, pobreza, corrupción, injustica, racismos, discriminación y criminalización de la ciudadanía; que es una estrategia estructural del Estado indignante y perverso, en contra de los derechos y el bienestar de los pueblos originarios, las mujeres, las juventudes y la niñez. El triunfo global del capitalismo, es en gran medida atribuible al desarrollo de las tecnociencias y de las ciencias de la complejidad. Ambas permitieron a las clases dominantes, una nueva forma de imperio mundial y de colonias regionales y empresariales conocidos como “neoliberalismo”, como “globalización” y como “neocolonialismo” o “poscolonialismo”.
La combinación de la cultura del poder con las tecnociencias y con las
ciencias de la complejidad de los sistemas autorregulados, adaptativos y creadores fue la base de las megatransformaciones que se realizaron con la manipulación de personas, grupos, informaciones y tendencias para la redefinición de relaciones, estructuras, sistemas y contextos humanos y ecológicos que mejoraran las posiciones de fuerza, represión y negociación de las clases y países dominantes, y debilitaran la de los dominados y dominables El pensar y el hacer requiere esfuerzo, disciplina y ética El pensar y el hacer, son funciones esenciales de las universidades y la comunidad de conocimiento para el desarrollo de la humanidad, el sociólogo mexicano Pablo González Casanova, Premio Internacional José Martí (por su defensa de la identidad de los pueblos indígena), indica que la responsabilidad teórica y el pensamiento propio, son categorías y conceptos de pensar y hacer. Para su desarrollo requiere un compromiso de la comunidad del conocimiento y del ejercicio ciudadano, además un posicionamiento ético que debe preceder al trabajo teórico, por lo cual no se debe confundir el pensar, con la acción técnica y un saber instrumental ajena a la creación intelectual. Pensar y hacer requiere esfuerzo y disciplina. Es una facultad cuya práctica exige responsabilidad. En el ámbito del saber científico, implica un compromiso con los valores éticos que deben preceder al trabajo teórico. Sin este límite, la facultad de pensar se confunde con la acción técnica de un saber instrumental ajena a la creación intelectual. Pensar no es pensar sobre algo: es facultad creadora, una praxis teórica. De su realización emerge el pensamiento propio. Pero elaborar pensamiento propio no es habitual. Requiere ahuyentar miedos inquisitoriales, despojarse de la autocensura. Es fácil topar con intelectuales que asumen una concepción pragmática del mundo, sometida a los requerimientos del poder político. Las Nuevas Alternativas Los paradigmas de las ciencias sociales, nos proponen nuevas alternativas para actuar y pensar, de una manera distinta y que responda a los desafíos emergentes de la sociedad, los pueblos y la ciudad Los conocimientos de las nuevas ciencias, se difundirán cada vez más como cultura universal dominante. Tarde o temprano será parte de la cultura universal crítica y alternativa. Como nuevas formas de investigar y construir, las ciencias de la complejidad y las tecnociencias, plantean una enorme cantidad de problemas y soluciones al pensamiento crítico alternativo… para perfeccionar la capacidad de comprensión y de lucha de las fuerzas emergentes; eventualmente capaces de crear una nueva historia humana o menos inhumana.” Las nuevas formas de investigar, construir, pensar, comprender y hacer, Pablo González Casanova nos propone: Primero: El objeto que es sujeto, en las “ciencias humanas tienen la palabra y la usan en los modelos de las nuevas ciencias. Comparten, critican y crean los conocimientos. Defienden las posibilidades de usarlos en forma autónomas, en composiciones distintas, no deterministas. Los conocimientos no son exclusivos de los investigadores “especializados”. (González 2009, p. 364) Segundo: Conocimiento y acción autorregulados: “en todas partes aparecen sistemas complejos adaptativos y autorregulados, o fenómenos análogos, isomórficos. Entre sus características destacan los procesos de interdefinición de las partes o actores que los componen y de interdefinición de las relaciones que guardan entre sí”. (González 2009, p. 365) Tercero: Conocimiento y acción autorregulados. “Las nuevas ciencias dan una importancia primordial a la autonomía en relación al pensamiento y la acción de las organizaciones 13 complejas dominantes”. (González 2009, p. 370) “La conservación de identidades por las organizaciones o sistemas dominantes puede subordinar todos los cambios a un núcleo de valores y relaciones constantes.” (González 2009, p. 371) Cuarto: Los efectos más que las causas. “la búsqueda de la verdad no idealiza o mistifica la observación ni la formalización matemática, tampoco descansa sólo en el experimento y en la simulación. Viene y va de situaciones de conflicto a cambios a manipulaciones, a superación de situación que son punto de partida” (González 2009, p. 376) Quinto. Pensar y hacer interactivo. “Las nuevas ciencias han acercado la organización del pensamiento a la organización de las actividades hasta volver casi equivalentes las interdefiniciones y las interacciones”. (González 2009, p. 382) Sexto: Los conocimientos eficaces. “La creación de nuevas relaciones y estructuras por las organizaciones dominantes determina un conocer-hacer articulado, cuya eficacia merece especial atención por parte de las organizaciones y los movimientos alternativos, ya sea para afrontarlo, para adaptarlo o al menos, para tomar en cuenta.” (González 2009, p. 386) Séptimo: La creación de nuevas relaciones sociales, amerita una atención especial. “El conocimiento para la creación de nuevas relaciones sociales, que lleguen a reestructurar y redefinir la sociedad y el Estado tiene elementos a la vez imaginativos y pragmáticos. Esos elementos necesitan ser desmenuzados si se quiere comprender-expresar-construir un marco mínimo para la creación de sistemas sociales”. (González 2009, p. 395) A manera de conclusión Uno de los compromisos de las universidades, es su contribución al desarrollo del pensamiento, la creatividad y la ética con sentido humano; para la convivencia armónica, en paz y con justicia social de los pueblos. Las universidades además deben contribuir, a formar profesionales que aporten al desarrollo eficiente y con pertinencia cultural, desde la institucionalidad y el reconocimiento de las organizaciones, desde su especificidad y diversidad; con el apoyo de las ciencias y las tecnologías para la búsqueda de la verdad y el bien común