Procesos cognitivos básicos: atención

Mabel González Díaz

Octubre-noviembre 2013
1. Fundamentación

1.1. ¿Qué es la atención?

1.2. ¿Cómo funciona?
1.3.¿Qué implica?
1.4. Clasificación: mecanismos implicados y grados
de control.
1.5. Determinantes: externos e internos.
1.6. Características.
1.7. Desarrollo evolutivo.
1.8. Variables que favorecen la aparición de
problemas.
1.1. ¿Qué es la atención?

La atención la podemos definir como un proceso psicológico

implicado directamente en los mecanismos de selección,
distribución y mantenimiento de la actividad psicológica.

Tudela la describe como «un mecanismo central cognitivo, no

sensorial o motor, cuya función principal es controlar y orientar
la actividad consciente del organismo de acuerdo a un objetivo
determinado»
1.2. ¿Cómo funciona?
Para entender cómo funciona la atención hay que tener en cuenta los mecanismos que
la regulan:

1.Mecanismo de selección o filtro. Elige una fracción relevante del estímulo, el resto
de la información irrelevante queda “amortiguado” y recibe procesamiento mínimo o
nulo. Es un mecanismo de control activo que permite una toma de posición ante los
estímulos.

2.Mecanismo de capacidad limitada. No puede realizar al mismo tiempo dos tareas

complejas ya que se producen interferencias y bajo rendimiento. Se cambia el foco de
atención alternativamente de un estímulo.

3.Mecanismo de alerta. Es una disposición general del organismo para procesar

información. Una persona en estado de vigilia es capaz de responder a mensajes y
ejecutar multitud de tareas, mientras que un sujeto con nivel bajo de alerta o
dormido presenta una conducta desorganizada y poco eficaz, o no responde.

Los tres están estrechamente relacionados, por lo que se puede

concluir que la atención es un sistema de capacidad limitada que
realiza operaciones de selección de información y cuya
disponibilidad o estado de alerta fluctúa considerablemente.
1.3. ¿Qué implica?

1. Centrarse en lo que es más importante en ese momento: focalizar

voluntariamente la atención en un único objeto o actividad de forma

selectiva y voluntaria (concentración).

2. También implica ignorar aquella información que no es útil para

nuestro objetivo (ignorar distractores).

A nivel escolar pedimos al niño que se centre en lo que se está

planteando en clase (explicación del profesor, tarea a realizar…)
e ignore lo que sucede ajeno a esa tarea (ruidos de sus
compañeros, de la calle…).
1.4. Clasificación: mecanismos implicados.

.
1.4. Clasificación: grado de control.
1.5. Determinantes: externos

 Modificaciones en el medio: normalmente los cambios en nuestro

entorno suelen captar la atención (ej: ruidos fuertes, silencios
repentinos...).
 Movimiento: en general los objetos móviles captan más la atención que
los estáticos, pero depende del contexto ya que si todos los objetos se
mueven excepto uno atenderemos a éste.
 Tamaño: se suele atender más a los objetos grandes, pero también hay
que considerar el contexto como en el caso anterior.
 Repetición: cuando un estímulo se repite suele captar la atención; no
obstante este efecto deja de producirse a determinados niveles porque
la habituación es uno de los factores que determinan de forma más
directa la pérdida de atención.
 Novedad.
1.5. Determinantes: internos.

 Físicos: por ejemplo, si tengo hambre atenderé al olor de una comida.

 Intelectuales: por ejemplo, curiosidad ante un fenómeno.

 Emocionales: los estímulos que se encuentran dentro del campo de

interés de una persona se perciben antes y mejor. Cuando estamos
motivados por hacer una tarea somos capaces de esforzarnos más para
ejecutarla.

 Emocionales y sociales, por ejemplo según cuales sean nuestros valores

atenderemos más a una persona que a otras.
1.6. Características

1.No es una habilidad innata sino que se desarrolla como consecuencia

de la interacción del ambiente.
2.Existen diferencias individuales a la hora de utilizarla.
3.Puede mejorarse con la práctica.
1.7. Desarrollo evolutivo
 Las investigaciones sobre la atención concluyen que es un proceso
que se desarrolla de forma gradual desde el nacimiento y que avanza
a medida que van madurando las diferentes estructuras cerebrales
implicadas.
 El nivel de dificultad de la tarea es fundamental.
fundamental Cuando se trata
de algo muy sencillo, no hay diferencia en la atención entre los niños
de dos años y los de siete; en cambio, cuando la tarea se hace más
compleja, existen variaciones significativas: los pequeños de dos
años tienen más dificultades para mantener la atención que los de
siete.
1.7. Desarrollo evolutivo: EI
Los niños menores de cuatro años atienden más a ciertos aspectos destacados
de un objeto que a lo que se les pide que atiendan globalmente. El niño se
concentra sólo mientras no decaiga su interés la aparición de un nuevo objeto
implica el traslado instantáneo de la atención hacia él. Por eso raras veces,
logran ocuparse de una misma cosa por tiempo prolongado.
Aunque los niños de etapa infantil comienzan a dominar la atención voluntaria, en
el transcurso de la infancia predomina permanentemente la atención
involuntaria.
A los dos años el niño es capaz de atender eficazmente a una tarea hasta siete
minutos, y a los cinco años puede prestar atención durante un cuarto de hora
seguido.
Por todo eso en EI es imprescindible:
Emplear el juego.
Llevar a cabo actividades que permitan el movimiento.
Cambiar frecuentemente de actividad.
Incluir actividades novedosas frecuentemente.
1.7. Desarrollo evolutivo: EP
Aunque a partir de los 6 años ya se va consiguiendo un mayor control de la
atención, aún en el primer ciclo suelen distraerse con estímulos irrelevantes, que
no tengan que ver con la tarea.
Sin embargo, la variación fundamental de la atención consiste en que los niños
comienzan, por primera vez, a dirigir su atención, a guiarla conscientemente y a
mantenerla dirigida hacia determinados objetos y fenómenos.
Podemos desarrollar la atención en esta etapa:
1.A través del control estimular del ambiente: evitando distractores (ruidos,
objetos innecesarios sobre la mesa)…
2.A través del lenguaje: al principio, los adultos organizan la atención del niño
mediante indicaciones verbales y recordatorios acerca de la necesidad de
realizar la acción dada. A medida que se desarrolla la función planificadora del
lenguaje, el niño se hace capaz de organizar su atención, de expresar
verbalmente hacia qué se debe orientar.
A partir de los siete años son capaces de saber que no siempre están
atendiendo a una tarea y pueden identificar algunas causas de su distracción.
En torno a los 10 u 11 años se perfeccionan los mecanismos de atención, se van
automatizando determinadas prácticas hasta que se convierten en hábitos.
1.8. Variables que favorecen la aparición de los problemas
de atención.

1.Orgánicos.
- Déficits visuales, auditivos no corregidos.
- Niños que se alimentan mal, con enfermedades, con dificultades
respiratorias.
2.Presencia de estímulos distractores.
3.Características de la tarea: las actividades poco variadas pueden
propiciar la dispersión de la atención, pero otras veces los déficits se
inician porque se le exige rendimientos superiores a las habilidades
que presentan.
4.Características personales: impulsividad, inquietud motora,
autocontrol, motivación, orden, organización…
5.Estados transitorios: fatiga, sueño, mala alimentación, estrés…
2. Intervención

2.1. Nivel de activación o arousal.

2.2. Curva de trabajo: definición, tipos e
implicaciones.
2.3. Estrategias de aula.
2.4. Bancos de actividades.
2.5. Estrategias metodológicas.
2.1. Nivel de activación o arousal.
Es un concepto hipotético que mide el grado de activación fisiológica y
psicológica de un cuerpo
Los niveles de activación son un factor crucial. Cuanto mayor es el nivel de
activación, mejores resultados se obtienen, siempre que no sobrepase el punto
óptimo. La ansiedad o el estrés y la baja activación conllevan un descenso de los
procesos atencionales y por tanto un rendimiento bajo.
2.2. Curva de trabajo: definición y tipos.
La curva de trabajo es la evolución que una persona experimenta cuando
hace una actividad y en la que su capacidad de concentración pasa por
períodos de mayor y menor rendimiento debido a la aparición de la fatiga.
2.2. Curva de trabajo: implicaciones.

1. Organizar las actividades y asignaturas atendiendo las características

del alumno individual o a los modelos predominantes en la clase.
2. Utilización de los descansos:
 No conviene hacerlos en el momento de máximo rendimiento, ya que
es el momento óptimo de estudio.
 Hay que hacerlos cuando el rendimiento y concentración decaen.
 No hay que aprovechar el descanso para actividades que hagan
perder la concentración completamente.
 Con algunos niños es muy recomendable emplearlos en hacer algunos
ejercicios de relajación y concentración.
2.4. Estrategias de aula: colectivas.
Concepción Jiménez García plantea una serie de estrategias en el aula:
1.No comenzar las explicaciones mientras no estemos seguros de que
todos están atentos.
2.Realizar breves ejercicios de concentración antes de abordar la tarea o
iniciar la sesión de estudio (localizar letras y números, proseguir una
serie, describir un objeto, etc).
3.Habituar al/la alumno/a a la realización de ejercicios de respiración
antes de ejecutar una actividad que exija un nivel elevado de atención.
4.Cuando un alumno no presta atención, llamarle por su nombre y pedirle
que atienda.
5.Detectar qué es lo que distrae a los alumnos e intentar eliminar los
distractores.
6.Situar a los niños que tienen problemas de atención cerca del maestro.
7.Presentar las actividades de formas distintas utilizando diferentes
recursos (verbales, gráficas…)
8. Motivar en todo momento: cambiar la modulación de la voz, hacer
preguntas directas e indirectas, equivocarse para que ellos nos
corrijan…
9. Sacar a la pizarra y hacer partícipe de la explicación a aquellos niños
más distraídos.
10. Si es necesario, explicar desde la mesa de estos niños, pidiéndoles que
vayan señalando los elementos de la ficha o libro.
11. Utilizar agendas.
12. Realizar evaluaciones orales/escritas, individuales/grupales…
2.4. Estrategias de aula: individuales.
1. Variar las actividades y situaciones para facilitar el mantenimiento de la
atención.
2. Modificar los espacios de trabajo para los diferentes tipos de actividad.
3. Actividades de corta duración con un ambiente estimular limitado.
4. Mostrar afectividad al pedirle las cosas, a la vez que se le exige.
5. Actividades de corta duración con un ambiente estimular limitado.
2.5. Bancos de actividades.
Los bancos de actividades son conjuntos de tareas graduadas por
dificultad, edad y nivel educativo. Se suelen desarrollar teniendo en
cuenta las siguientes consideraciones:
1.Los ejercicios que se proponen en los bancos suelen tener un grado medio
de dificultad, que se puede aumentar o disminuir de acuerdo con las
capacidades y necesidades propias de los alumnos a los que vayan
dirigidos.
2.Muchos ejercicios van acompañados de variantes que se entienden como
posibilidades de plantear nuevas actividades.
3.Con el fin de mantener el interés del alumno sin provocar cansancio, los
ejercicios se presentan secuenciados. La secuencia se puede ampliar o
reducir según las circunstancias individuales.
4.Es necesario corregir las actividades realizadas. Esta necesidad viene
derivada tanto de aspectos motivacionales como para la rectificación de
errores.
Actividades para la atención selectiva.
Identificar estímulos dentro de conjuntos.
Comparar estímulos dentro de conjuntos.
Identificar estímulos dentro de series.
Reconocer estímulos.
Reconocer palabras o frases que cumplan unas condiciones dadas.

Actividades para la atención sostenida:

Reproducir totalmente o en parte modelos iguales u opuestos a otros
dados.
Retener mentalmente elementos o modelos para reproducirlos o
asociarlos con otros.
Colocar en un orden determinado los elementos de un conjunto conocido.
Establecer relaciones entre elementos de acuerdo con unas condiciones.
Actividades para la atención simultánea:
sopa de letras,
ante diferentes sonidos realizará movimientos diferentes, presentando
los sonidos al azar,
con los ojos cerrados, reconoce en una conversación a dos de las
personas que están hablando,
ejecutar una serie de al menos 4 acciones enunciadas previamente.
Los materiales que encontramos en el mercado, en internet… que
pretenden la mejora de los procesos atencionales son del tipo de:

Unir parejas.
Asociación de sombras a su imagen.
Completar dibujos a los que falta algo.
Completar la parte simétrica de un objeto.
Relacionar objetos iguales.
Identificar el elemento intruso en una serie dada.
Solucionar el trayecto de un laberinto.
Seguir caminos de un elemento hacia otro relacionado con él.
Sustituir unas palabras por otras, unas imágenes por otras, que sean
semejantes o contrarios.
Identificar o localizar partes concretas de una imagen u objeto.
Seguir instrucciones secuenciadas.
2.6. Estrategias metodológicas.
Extraídas del PIIAR.
1.Demora forzada.
Consiste en obligar a los alumnos a tomarse el tiempo necesario antes de dar la
respues­ta al problema, ejercicio o estímulo presenta ­do. Así, se exige un tiempo
mínimo, si es posible previa­mente fijado, para la realización de cada uno de los
ejercicios antes del cual no se puede emitir la respuesta o no se puede dar por
concluido el ejercicio.
1.Enseñanza de estrategias cognitivas adecuadas de escudriñamiento y
análisis de detalles (scanning).
No se trata sólo de que el sujeto emplee más tiempo en resolver la tarea sino de
que también saque más rendimiento a ese mayor periodo de latencia. Hay que
enseñarle a atender cuidadosamente a los detalles, presentándole de manera clara
las estrategias pertinentes para ello.
Una posibilidad es la planteada por Egeland:
Mirar el modelo y las copias.
Fragmentar el dibujo o palabra en partes.
Seleccionar cada uno de los fragmentos y comparar buscando semejanzas y diferencias.
Eliminar sucesivamente las copias que difieran del modelo.
3. Autoinstrucciones.
Se trata de enseñar a los niños a usar el lenguaje interno como regulador de la conducta y como
estrategia de autocontrol.
Procedimiento:
a) Un modelo adulto realiza la tarea mientras se habla a sí mismo en voz alta.
b) El niño realiza la misma tarea bajo la dirección de las instrucciones del modelo.
c) El niño realiza la tarea mientras se da instrucciones a sí mismo en voz alta.
d) El niño se va diciendo las instrucciones a sí mismo en voz baja mientras realiza la tarea.
e) Por fin, el niño realiza la tarea mientras guía su actuación por medio del habla interna.
Una vez aprendida la técnica de las autoinstrucciones deben intercalarse autorefuerzos
también verbalizados inicialmente y luego encubiertos como: “esto me sale bien “,
“correcto, así es “, “ya pensaba yo que sería así “. También las autoinstrucciones deben
contener alternativas de dominio del fracaso: “No he recordado llevarme una en esta
columna, bueno, no importa, la repasaré y prestaré mayor atención en las siguientes “y
también autoelogio por el nuevo intento: “He sido capaz de rectificar y eso me alegra.
Voy a continuar con mayor atención “
Esta técnica está especialmente indicado para instaurar en el repertorio conductual del/la
alumno/a respuestas contrarias a la falta de atención y está especialmente indicado
para:
• tareas escolares que necesiten atención concentrada en su resolución.
• otras tareas sensoriomotrices más simples: recortar, pegar, colorear...
• habla interna para controlar la impulsividad, la agresividad y la destructividad.
4. Entrenamiento en solución de problemas.
Se plantea problemas hipotéticos (normalmente sencillas situaciones
tomadas de la vida cotidiana) y se enfatiza la producción de múltiples
alternativas de solución y el análisis de consecuencias antes de
quedarse con la solución que se considere mejor.

5. Modelado participativo.
El adulto ejemplifica ante el alumnado la realización de las tareas y los
corrige verbalizando las estrategias de solución.

6. Reforzadores.
Mediante economía de fichas, refuerzos sociales, de actividad… ante la
ejecución de distintas tareas.