Del libro “Metafísica” de Aristóteles

“Hemos hablado del ser primero, de aquel al que se refieren todas las
demás categorías; en una palabra, de la sustancia. A causa de su relación
con la sustancia los demás seres son seres, y en este caso están la
cuantidad, la cualidad y los atributos análogos. Todos estos seres, como
hemos dicho en los libros precedentes, contienen implícitamente la
noción de la sustancia. El ser no sólo se toma en el sentido de sustancia,
de cualidad, de cuantidad, sino que hay también el ser en potencia y el
ser en acto, el ser relativamente a la acción”
Del libro “Enciclopedia de las ciencias filosóficas”
de Hegel

“La categoría de Existencia consta de los momentos que a continuación expondremos:

Identidad: Esta identidad es identidad formal o sea del intelecto, en cuanto se detiene
en ella y se abstrae de la diferencia, o más bien, la abstracción es el poner esta
identidad formal, la transformación de una cosa en sí concreta en esta forma de la
simplicidad, ya que se prescinde de lo múltiple existentes en concreto...; ya sea que,
abandonando sus variedades, se reúnan en una de los múltiples determinaciones”

Diferencia: Diferencia inmediata, la diversidad en la cual los distintos son cada uno de
por sí lo que son, y son indiferentes en su referencia a otros, referencia que por lo
mismo es extraña a ello... Esta diferencia exterior, como identidad de lo referido, es
igualdad; como no identidad es desigualdad”
 Del libro “Ser y el tiempo” de Martin Heidegger

“El ser-ahí no es tan sólo un ente que se presenta entre otros entes. Lo que lo
caracteriza ónticamente es que a este ente le va en su ser este mismo ser. La
constitución de ser del ser-ahí implica entonces que el ser-ahí tiene en su ser
una relación de ser con su ser. Y esto significa, a su vez, que el ser-ahí se
comprende en su ser de alguna manera y con algún grado de explicitud. Es
propio de este ente el que con y por su ser éste se encuentre abierto para él
mismo. La comprensión del ser es, ella misma, una determinación de ser del
ser-ahí1. La peculiaridad óntica del ser-ahí consiste en que el ser-ahí es
ontológico.”
Del libro “Bienvenido al desierto de lo Real” de
Slavoj Žižek

“hoy en día asistimos al florecimiento de nuevas y múltiples subjetividades políticas (de clase, étnicas, gay,

ecológicas, feministas, religiosas...) y la alianza entre ellas es el producto de la abierta lucha contingente en

hegemonía. Sin embargo, filósofos tan distintos como Alain Badiou y Fredric Jameson han señalado, a propósito

de la actual celebración de la diversidad de estilos de vida, cómo este crecimiento de las diferencias reposa en

un subyacente Uno, es decir, en la radical obliteración de la Diferencia, de la brecha antagonista. Lo mismo vale

para la crítica postmoderna standard de la diferencia sexual como “oposición binaria” a ser deconstruida: “no

sólo hay dos sexos, sino una multitud de sexos, de identidades sexuales...”. En todos estos casos, en el momento

en que introducimos la “creciente multitud”, lo que estamos diciendo en efecto es exactamente lo opuesto, la

subyacente Igualdad que lo invade todo, es decir, la noción de una brecha radical antagonista que afecta al

cuerpo social entero es obliterada: la sociedad no antagonista es aquí el “contenedor” realmente global en el

cual hay suficiente espacio para toda la multitud de comunidades culturales, estilos de vida, religiones,

orientaciones sexuales....”