Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Una parte del cuerpo lo constituye el sistema nervioso, del que una de sus características
más prevalentes es la sensibilidad que posee ante las necesidades corporales. El sistema
nervioso como Ello, traduce las necesidades del cuerpo a fuerzas motivacionales llamadas
pulsiones. Freud también los llamó deseos. Esta traslación de necesidad a deseo es lo que se
ha dado a conocer como proceso primario.
El Ello tiene el trabajo particular de preservar el principio de placer, el
cual puede entenderse como una demanda de atender de forma
inmediata las necesidades. Imagínese por ejemplo a un bebé
hambriento en plena rabieta. No "sabe" lo que quiere, en un sentido
adulto, pero "sabe" que lo quiere…¡ahora mismo!. El bebé, según la
concepción freudiana, es puro, o casi puro Ello.Y el Ello no es más que
la representación psíquica de lo biológico.
Aunque el Ello y la necesidad de comida puedan satisfacerse a través
de la imagen de un filete jugoso, al cuerpo no le ocurre lo mismo.
La necesidad solo se hace más grande y los deseos se mantienen aún
más. Ustedes se habrán percatado de que cuando no han satisfecho
una necesidad, como la de comer por ejemplo, ésta empieza a
demandar cada vez más su atención, hasta que llega un momento en
que no se puede pensar en otra cosa. Este sería el deseo irrumpiendo
en la consciencia
El Yo se apoya en la realidad a través de su consciencia, buscando objetos para
satisfacer los deseos que el Ello ha creado para representar las necesidades
orgánicas. Esta actividad de búsqueda de soluciones es llamada proceso secundario.
No obstante, aunque el Yo se las ingenia para mantener contento al Ello (y
finalmente al cuerpo), se encuentra con obstáculos en el mundo externo. En
ocasiones se encuentra con objetos que ayudan a conseguir las metas. Pero el Yo
capta y guarda celosamente todas estas ayudas y obstáculos, especialmente aquellas
gratificaciones y castigos que obtiene de los dos objetos más importantes del
mundo de un niño: mamá y papá. Este registro de cosas a evitar y estrategias para
conseguir es lo que se convertirá en Superyo. Esta instancia no se completa hasta
los siete años de edad y en algunas personas nunca se estructurará.
Hay dos aspectos del Superyo: uno es la consciencia, constituida por la
internalización de los castigos y advertencias. El otro es llamado el Ideal del
Yo, el cual deriva de las recompensas y modelos positivos presentados al
niño. La consciencia y el Ideal del Yo comunican sus requerimientos al Yo con
sentimientos como el orgullo, la vergüenza y la culpa.
El Test del dibujo de la figura humana, es una prueba, que a pesar de ser antigua, sigue en
vigencia. El material de aprendizaje está organizado de tal manera que aprendas a realizar la
calificación e interpretación del dibujo desde los aspectos formales a los detalles del mismo.
Es importante que entiendas cada aspecto de este instrumento, porque es versátil y te
servirá durante tu ejercicio profesional en cualquiera de las áreas de desarrollo de la
psicología, llámese clínica, área educativa, organizacional, forense, etc.
Insistiremos constantemente en que aprendas a realizar adecuadamente cada uno de los
procesos denominados de aplicación, calificación e interpretación del dibujo de la figura
humana.
De ser así, te servirá para que tengas un marco lógico y consistente con el cual elaborar el
reporte escrito de resultados de evaluación del test y sustentarlo de manera escrita a
través del reporte de evaluación de esta prueba psicológica.
Antecedentes Históricos
Desde tiempos muy remotos el dibujo ha sido utilizado como forma de
comunicación entre los seres humanos a través del cual se puede expresar
su mundo interno.
Entre diciembre de 1885 y enero de 1886, los artículos de Ebenezar Cooke
en Inglaterra, sobre el estudio evolutivo del dibujo infantil se citan como la
primera aportación al tema. Marin, R. (1988)
Fue Goodenough quien a través del dibujo de la figura humana determina la
inteligencia en niños, pero ya en 1926 explica que estos dibujos permiten
información para la comprensión de la personalidad.
Posteriormente Machover, al realizar estudios en niños con el
Stanford-Binet y el test de Goodenough, notó que había niños que
tenían el mismo nivel intelectual, pero sus dibujos evidenciaban algunas
veces diferencias muy marcadas, las mismas que tenían coherencias
con datos conocidos a través de la anamnesis u observadas en su
conducta actual. Así comprende que la imagen corporal era un modo
natural de realizar proyección de ansiedades, sentimientos,
aspiraciones, etc.; de este modo en 1949, el dibujo de la figura humana
empieza a formar parte de las Técnicas Proyectivas
Karen Machover dedica varios años a realizar estudios comparativos
entre los rasgos de dibujos y juicio clínico, Mirotti,M. y Liendo, P.
(2009). Explican que: “va siguiendo las características evolutivas según
se expresan en los dibujos, y estableciendo explicaciones dinámicas,
demostrando así que como Goodenough partía de suponer que el
niño dibuja de la figura humana “lo que sabe”, según su evolución
intelectual, cualquiera reaccionará ante el pedido de dibujar una
persona “dibujando lo que siente y como lo siente”
Nombre de la prueba Dibujo de la figura humana de Machover
Ficha técnica
Autor Karen Machover