Tomando como base el rendimiento en los Juegos Panamericanos Lima 2019 y la Copa Verona, la selección nacional de Venezuela, en siete duelos preparatorios al Mundial de China 2019, nada más ganó dos. Es tácito: las preocupaciones a pocos días de la justa mundialista, son cada vez mayores.
Jorge Hernández Fernández
La defensa… En promedio, Venezuela recibió 73.0 unidades por partido, números decentes que pasan a alarmantes si se cosecha una media de 66 unidades por cotejo. Una ofensiva estancada, sumada a una defensa que, por lapsos, suele ser permisiva con el rival, es razón para ajustar piezas de forma imperante. Aunque no siempre aplica, anotar 70 puntos contando con una defensa top, puede otorgar una victoria. Sin embargo, un férreo sistema defensivo no es suficiente aval para triunfar.
Jorge Hernández Fernández
El calendario no pasa en vano… No es secreto para nadie que la mejor generación de jugadores, con permiso de los héroes de Portland 1992, está llegando a su final. La merma en el rendimiento influye de tal forma que Venezuela sólo acertó el 23% (49/214) de tiros de tres, alegando que todos fueron en momentos donde ejecutar esta clase de tiros daba baja posibilidad de acierto. El ataque no está siendo efectivo, al menos en las fases preparatorias y si Venezuela suele terminar lanzando con incomodidades, es decir, con el defensa rival marcando el disparo, no se avizora un buen panorama en el mundial.
Jorge Hernández Fernández
Venezuela ha sido fiel a su filosofía de rotación veloz del balón, pese a que ello no implica tomar clara ventaja ante sus rivales. Tanto pase y nada de eficacia, lanzando al borde del reloj de posesión de 24 segundos, sólo invita al contrario a ejecutar quiebres rápidos que pueden perjudicar seriamente las aspiraciones criollas. Además, al ser Venezuela un conjunto de estatura baja, los contrarios pueden rotar las marcas sin verse inferiores a Venezuela. No ha empezado el mundial, y la vinotinto ya está condicionada.