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LA CORTESÍA LINGÜÍSTICA

PLAN DE EXPOSICIÓN
1.La cortesía un problema de
pragmática
2.Modelos de Lakoff y de Leech
3.Teoría de Brown y Levinson
4.Ejercicios de aplicación
1.La cortesía un problema de pragmática
Una tesis central de las teorías sobre la
interpretación es que los hablantes tienen
una serie de expectativas (por ejemplo, que
el hablante diga la verdad o que sea
relevante), gracias a las cuales pueden
descifra los significados intencionales
transmitidos en los intercambios
lingüísticos.
Algunas de estas estas
expectativas, las que se
relacionan con el modo, más
concretamente, con la cortesía,
pueden entrar en conflicto con
las que suelen asociarse a la
transmisión eficiente de
información.
Por ejemplo, decir
la verdad, puede
ser descortés en
determinadas
circunstancias.
La cortesía lingüística no es
solo un problema de normas
sociales, apto para ser
estudiado por la sociología o
la sociolingüística, sino
también un problema de
pragmática general,
puesto que es
imprescindible dar su
lugar a la cortesía en la
descripción de los
principios que guían la
comunicación humana.
2. Modelos de Lakoff y de Leech
Lakoff reduce el conjunto de
máximas conversacionales a
dos: 1. Sea claro, 2. Sea cortés,
donde la claridad se relaciona
con las máximas de Grice, y la
cortesía con tres normas
básicas:
1.No haga imposiciones,
2. Dé opciones,
3. Haga que su
interlocutor se sienta
bien.
Leech agrega al conjunto
de máximas del principio
de cooperación de Grice
otro conjunto de
máximas, las del
“principio de cortesía”.
Una acción es más descortés
cuanto mayor es el coste y
menor el beneficio de los
actos de habla para los
interlocutores: “Reduzca al
mínimo la expresión de
creencias descorteses”. Se
desglosa en varias máximas:
Máxima de tacto: Reduzca al mínimo el
coste para el otro. Suba al máximo el
beneficio para el otro.
Máxima de aprobación: Reduzca al
mínimo el desprecio hacia el otro. Suba el
máximo el elogio al otro.
Máxima de generosidad: Reduzca al
mínimo el beneficio propio. Suba al
máximo el coste propio.
Máxima de modestia: Reduzca al mínimo el
elogio a sí mismo. Suba al máximo el
aprecio hacia el otro.
Máxima de armonía: Reduzca al mínimo el
desacuerdo con el otro. Suba al máximo el
acuerdo con el otro.
Máxima de simpatía: Reduzca al mínimo la
antipatía entre usted y el otro. Suba al
máximo la simpatía entre usted y el otro.
Las máximas se aplican se
aplican de manera diferente en
cada tipo de acción. Por
ejemplo, hay acciones
intrínsecamente descorteses,
como pedir, y, otras
inherentemente corteses,
como ofrecer.
3. Teoría de Brown y Levinson
Esta teoría propone un marco teórico
abstracto que da cuenta de datos
interlingüísticos e interculturales. Está
basada en dos nociones: la
comunicación es una actividad racional
orientada hacia alguna meta y la
noción de que cada individuo desea
conservar su face o imagen pública.
La imagen pública consiste en dos
tipos de deseo: el deseo de
autodeterminación, de no recibir
imposiciones (imagen negativa) y el
deseo de ser aprobado (imagen
positiva). La imagen está
constantemente amenazada por los
actos lingüísticos.
Tres factores sociológicos establecen el
nivel de cortesía: el poder relativo del
oyente sobre el hablante, la distancia
social entre ambos, y el grado de
imposición del acto mismo (establecida
también socialmente). El riesgo de una
acción se calcula sumando los valores
de estos tres factores sociales.
Brown y Levinson han
estudiado qué recursos
lingüísticos, gramaticales y
discursivos entran en juego
en la realización de
estrategias de cortesía en
diferentes lenguas y culturas.
Distinguen una serie de
estrategias destinadas a mitigar
las acciones amenazantes, que
van desde evitarlas por completo
hasta realizarlas de diferentes
maneras, atendiendo a la imagen
positiva o negativa del
interlocutor;
cuanto más indirecto el
acto, menos
amenazante, ya que
permite mayor espacio
de negociación.
EJERCICIOS
1.Diálogo entre María, estudiante
española, y Alfredo, compañero
argentino, a la salida de una clase
en una universidad de Chicago.
Observe que Alfredo pasa del
tuteo al voseo, e intente
determinar qué refleja el cambio o
qué intenta crear, considerando
que ambos jóvenes se conocen
muy poco.
María: -¿Así que te gusta la
fonología?
Alfredo: -Sí. Lo que no me gusta
mucho es la sociolingüística, la
pragmática, esas cosas…
María: -Vaya.
Alfredo: -Es precisamente lo que a ti
te gusta, ¿no?
María: -Pues sí. Pienso hacer la tesis en
pragmática… Oye, ¿por qué no nos
reunimos para estudiar fonología, ya que
sabes tanto y me puedes ayudar?
Alfredo: -No te creas que sé mucho, pero
por supuesto me encantaría estudiar con
vos. Pensaba juntarme el sábado con
Carlos. ¿Por qué no venís?
María: -Bueno, pues muy bien.
Alfredo: -A las dos en “La oruga”. Vení
2. Imagine contextos en
los cuales los siguientes
enunciados, que
parecen descorteses, no
lo sean:
a)Cierre la boca.
b)¡Cállese!
c)No toques.
d)No seas boludo.
e)Qué fea estás.
3. Camila: -¿Otra copita de vino?
Natalia: -Bueno… Ah, no, no abras una
botella por mí.
Camila: - Pero sí, por favor… (Abre la
botella)
Natalia: -¿Me vas a acompañar, no?
Camila: Claro. Este es un buen vino, un
malbec que traje de Mendoza.
a)¿Por qué Camila utiliza el diminutivo
copita?
b)¿Por qué se contradice Natalia en su
primera intervención?
c)¿Por qué insiste Juana? ¿Realmente quiere
que Natalia pruebe el vino?
d)¿Cómo interpreta en enunciado “Me vas a
acompañar, no?”
4. Reescriba el diálogo
anterior, quitándole todo
rasgo de cortesía. Recuerde
que la falta de cortesía no
significa necesariamente que
se vuelvan groseras y
desconsideradas.

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