Sei sulla pagina 1di 69

EL PACIFICADOR

Objetivos
• Como usar el conflicto como una
oportunidad para demostrar el amor y el
poder de Jesús.
• Cuando corresponde pasar por alto una
ofensa.
• Como modificar actitudes y hábitos que
conducen al conflicto.
• Como confesar ofensas sincera y
eficazmente como perdonar a otros y
lograr una auténtica reconciliación.
Ejercicio
Definir conflicto – causas y áreas
conflictivas.
• ¿Cómo hemos manejado el conflicto en
nuestras vidas?
• ¿Que emociones he experimentado?
• ¿Como he expresado mi malestar?
• ¿ Cuáles han sido mis pensamientos,
como ha sido mi lenguaje, cuales han sido
mis reacciones?.
Conflicto – Diferencia de opinión
ó propósito que frustra las metas
o deseos de una persona
Causas principales de conflicto:
1. Productos de la mala comunicación
malentendidos.
2. Diferencias de valores, metas, dones,
llamados, prioridades, intereses u opiniones.
3. Competencia por recursos limitados, como
tiempo y dinero.
4. Nuestras actitudes y hábitos pecaminosos que
conducen a palabras y acciones pecaminosas
(Santiago 4: 1-2).
La Loma Resbalosa

Manteniéndonos Encima del Conflicto


El conflicto puede hacer la vida más incómoda. Nos coge de sorpresa y nos
causa decir o hacer cosas de la cuales más tarde nos arrepentimos.
Cuando alguien nos ofende, podemos reaccionar sin pensarlo. De repente
es como si estuviéramos deslizándonos por una loma resbalosa, y las
cosas van de mal en peor. Como la ilustración muestra, esta loma
resbalosa puede hacernos caer en dos direcciones.
1. RESPUESTA DE ESCAPE

Las personas tienen la tendencia de usar


respuestas evasivas cuando hay más
interés en evitar un conflicto que en
buscar resolverlo.
La Negación: Una forma de escapar del conflicto es fingir que
no existe el problema. Otra manera es rehusar hacer lo
necesario para resolver el conflicto. Estas respuestas sólo
dan alivio temporal generalmente permiten que los asuntos
se empeoren (ver 1 Samuel 2:22-25).
La Huida: Otra manera de escapar de un conflicto es huir.
Ésta podrá tomar la forma de terminar una amistad, renunciar
a un trabajo, solicitar un divorcio, o cambiar de una iglesia a
otra. El huir puede ser una acción de legítima en
circunstancias extremas (ver 1 Samuel 19:9-10), pero en la
mayoría de los casos sólo atrasa la solución apropiada del
problema.
El Suicidio: Cuando las personas pierden esperanza de
resolver un conflicto, puede que busquen un escape a la
situación atentando contra su propias vidas (ver 1 Samuel
31:4). El suicidio nunca es la acción correcta para resolver el
conflicto.
2. RESPUESTA DE ATAQUE

Las personas tienen la tendencia de atacar


cuando tienen más interés en ganar un
conflicto que en conservar la relación.
El Litigio: Algunos conflictos legítimamente podrán ser
presentados a la justicia para una decisión (ver Romanos 13:1-5).
Sin embargo, las demandas legales muchas veces destruyen las
relaciones y frecuentemente no logran la justicia total. Por eso,
cuando sea posible, los cristianos deben hacer un máximo
esfuerzo para resolver los conflictos fuera de los tribunales (ver
Mateo 5:25-26; 1 Corintios 6:1-8).
La Agresión: Algunos tratan de vencer al oponente utilizando
varias formas de fuerza o intimidación, tales como ataques
verbales (incluyendo las difusión de chismes y calumnias),
violencia física, o esfuerzos para destruir una persona
monetariamente o profesionalmente (ver Hechos 6:8-15). Tal
conducta siempre empeora el conflicto.
El Asesinato: Algunos podrán estar tan desesperados por ganar
una disputa que trataron de matar a los que se les opongan (ver
Hechos 7:54-58). Aun si no atacamos físicamente, somos
responsables de asesinato ante los ojos de Dios, cuando
abrigamos en nuestros corazones el enojo y el resentimiento hacia
otros (ver Mateo 5:21-22).
3. RESPUESTA DE CONCILIACIÓN
Hay seis maneras en que podemos
responder bíblicamente a los conflictos y
encontrar soluciones justas para resolver
nuestras diferencias.
CONCILIACIÓN PERSONAL
Pasar por alto una ofensa. El buen juicio hace al hombre paciente; su
gloria es pasar por alto la ofensa (Proverbios 19:11, NVI). Se podrán
resolver muchas disputas pasando por alto discretamente una ofensa
y perdonando a la persona que haya sido injusta contigo (ver
Proverbios 12:16; 17:14; 1 Pedro 4:8).
Dialogar. ...si ... Tu hermano tiene algo contra ti ... Ve primero y
reconcíliate con tu hermano (Mateo 5:23-24, NVI). Si tu hermano peca
contra ti, ve a solas con él y hazle ver su falta (Mateo 18:15ª, NVI).
Ofensas personales que son demasiado serias para ser ignoradas
deben ser resueltas a través de la confesión o de una confrontación
que se dé en amor (ver Proverbios 28:13; Mateo 5:23-24; Gálatas
6:13).
Negociar. Cada uno debe velar no sólo por sus propios intereses sino
también por los intereses de los demás (Filipenses 2:4, NVI). Las
cuestiones relacionadas con el dinero, propiedades y otros derechos
deberán ser resueltas negociando soluciones que contemplen los
intereses de todos los involucrados (ver Daniel 1:1-16; Mateo 7:12).
CONCILIACIÓN ASISTIDA
La Mediación. Pero si no, lleva contigo a uno o dos más... (Mateo
18:16ª, NVI). Si tú no puedes resolver una disputa en privado, debes
pedirle a una o más personas que se reúnan contigo y la otra
persona para ayudarles a comunicar de manera más efectiva y a la
vez explorar posibles soluciones. Los mediadores pueden
recomendar soluciones, pero no imponerlas.
El Arbitraje. Si alguno de ustedes tiene un pleito con otro, ¿como se
atreve a presentar demanda ante los inconversos, en vez de acudir
a los creyentes? (1 Corintios 6:1, NVI). Cuando tú y un oponente no
pueden llegar a un acuerdo voluntario sobre cualquier asunto
concreto, podrán nombrar árbitros quienes escucharán sus
argumentos y tomarán una decisión obligatoria sobre el asunto.
La Disciplina de la Iglesia. Si se niega a hacerles caso a ellos,
díselos a la iglesia... (Mateo 18.17-20, MVI). Si un individuo que
profesa ser cristiano rehusa reconciliarse y hacer lo que es correcto,
deben intervenir los líderes de la iglesia para promover justicia,
arrepentimiento y perdón.
LA PROMESA DE LOS
PACIFICADORES
Como un pueblo reconciliado con Dios por la
muerte y resurrección de nuestro Señor y
Salvador Jesucristo, creemos que hemos sido
llamados a responder a los conflictos de una
manera marcadamente distinta a la forma que
utiliza el mundo. También creemos que los
conflictos proveen oportunidades para
glorificar a Dios, servir a otras personas, y
crecer para llegar a ser como Cristo. Por eso,
en respuesta al amor de Dios y confiando en
Su gracia, nos comprometemos a responder a
los conflictos de acuerdo a los siguientes
principios.
4 PILARES DE LA
PACIFICACIÓN
Glorifica a Dios
 En lugar de concentrarnos en nuestros propios
deseos u ocuparnos con lo que otros puedan
decir o hacer, buscaremos agradar y honrar a
Dios: dependiendo de Su sabiduría, poder y
amor; obedeciendo fielmente Sus mandatos; y
tratando de mantener una actitud de amor,
misericordia y perdón.

1 Corintios 10:31, Salmo 37:1-6, Marco 11:25


Saca la viga de tu propio Ojo
 En lugar de atacar a otros o de ocuparnos de
sus errores, tomaremos la responsabilidad por
nuestra propia contribución a los conflictos:
confesando nuestros pecados; pidiéndole a Dios
que nos ayude a cambiar cualquier actitud o
costumbre que promueva el conflicto; y
buscando reparar cualquier daño que hemos
causado.

Mateo 7: 3-5, Proverbios 28: 13, Lucas 19: 8


Vé y Muestra a Tu Hermano
Su Falta
En vez de fingir que el conflicto no existe, o de
hablar de otros a sus espaldas, elegiremos
pasar por alto cualquier ofensa menor, o
hablaremos directa y gentilmente con aquellos
cuyas ofensas parecen demasiado serias para
pasarlas por alto. Cuando no se puede resolver
un conflicto con otro cristiano en privado,
pediremos a otros en el cuerpo de Cristo que
nos ayuden a resolver el asunto de una manera
bíblica.

Mateo 18: 15-20, 1 Corintios 6: 1-8, Efesios 4:


29, Santiago 5: 9.
Vé y Reconcíliate
 En lugar de aceptar acuerdos prematuros o permitir que
las relaciones se marchiten, buscaremos activamente la
paz genuina y la reconciliación, perdonando a otros como
Dios, por el amor de Cristo, nos ha perdonado, y
buscando soluciones justas y mutuamente beneficiosas
para resolver nuestras diferencias.
Por la gracia de Dios, aplicaremos estos principios como
una cuestión de buena administración, reconociendo que
el conflicto es una tarea y no un accidente. Recordaremos
que el éxito, en los ojos de Dios, no es asunto de
resultados específicos, sino de obediencia fiel y
dependiente en Él. Y oraremos que nuestro servicio como
pacificadores sea de alabanza a nuestro Señor y guíe a
otros a conocer su infinito amor.
Mateo 5: 23,24; Mateo 6:12; Mateo 7:12 ;
Efesios 4:1-3 y 32
Los Siete Elementos de la
Confesión
Mateo 7:3-5; 1 Juan 1:8-9; Proverbios 28:13
1. Dirigirse a Cada uno de los involucrados. (Todos a
quienes has afectado.)
2. Evita el “si”, el “pero” y el “quizás”.
3. Admite asuntos específicos. (Tantos actitudes como
acciones).
4. Pide disculpas. (Expresa arrepentimiento por la
manera en que has herido a alguien).
5. Acepta las consecuencias. (Tales como la restitución).
6. Cambia tu conducta. (Cambia tus actitudes y
acciones).
7. Pide perdón a la otra persona.
Las Cuatro Promesas del
Perdón.
Mateo 6:12; 1 Corintios 13:5; Efesios 4:32

- No pensaré más sobre este incidente


- No mencionaré este incidente ni lo
utilizaré en contra tuya.
- No hablaré con otros sobre este incidente.
- No permitiré que este incidente nos
separe ni obstruya nuestra relación.
“La Pausa” Como Principio de la
Negociación
Filipenses 2:3-4; Mateo 7:12

Prepárate.
Afirma tus relaciones.
Un entendimiento de los intereses
involucrados es indispensable.
Soluciones creativas: búscalas.
Al fin, evalúa las opciones objetivamente y
razonablemente
VIVA EN PAZ
“Si es posible y en cuanto dependa de
ustedes, vivan en paz con todos”.
Romanos 12:18.

Las 3 dimensiones de la paz:


1. Paz con Dios: Colocenses 1, 19, 20.
Romanos 5 ,1 ,2.
2. Paz con los demás: Efesios 2, 11, 18.
Salmo 133, 1.
Mateo 22,39.
3. Paz dentro de usted: Isaías 26,3.
Isaías 32,17.
Salmo 85:10.
Salmo 119, 165.
Isaías 48:18.

Por diseño de Dios, las 3 dimensiones de la


paz están unidas inseparablemente, por tanto si
queremos experimentar paz interior, debemos
confiar en Cristo para ser reconciliados con el
Padre y tener relaciones armoniosas.
Preguntas
1. ¿Esta usted en paz con las demás personas?
Si no ¿Con quienes está enemistado?
2. Hay alguna persona que podría tener algo
contra usted? ¿Qué ha hecho para
reconciliarse?
3. ¿Por qué y como Satanás podría estar
agarrando estas disputas?
4. ¿Ha estado esforzándose para resolver esta
disputa, o haciendo esfuerzos solo parciales
para lograr la paz?
¿Cómo puedo agradar y honrar a
Dios en mis situaciones de
conflicto?

En conclusión, ya sea que coman o beban


o hagan cualquier cosa, háganlo todo para
la gloria de Dios.

1 Corintios 10:31.
¿Vale la pena realmente pelear
por esto?
El buen juicio hace al hombre paciente, su
gloria es pasar por alto la ofensa.
Proverbios 19:11.
Actitudes ante los conflictos:
• Exageradamente sensibles, por lo cual
se ofende fácilmente.
• Usted contribuye al conflicto a través de
su comportamiento.
¿Que Hacer?
1. Defina los temas que los separan de los
demás.
a) Temas Materiales:
- Propiedades
- Dinero
- Derechos
- Responsabilidades.
b) Temas Personales: Estos involucran a
nuestras actitudes y sentimientos hacia los
demás que son producto de cómo nos hemos
tratado unos a otros.
Los temas materiales se resuelven a
través de una negociación cooperativa.
Los temas personales se resuelven o bien
pasando la ofensa por alto o a través de la
confesión, corrección amorosa y perdón.
Generalmente las disputa incluyen ambos
tipos de tema.
- Una Vez identificando el tema y deje de incorporar
otros viejos o nuevos.
- Céntrese en el tema, póngase de acuerdo en esto.
- Identifique los temas personales de ambos.
- Páselo luego por este lente. Vale la pena pelearse por
esto?
- Si la respuesta es NO, usted esta siguiendo el enfoque
bíblico que nos dice:

“Iniciar una pelea es romper una represa, vale mas


retirarse que comenzarla”.
Proverbios 17,14 y 26:17.
“Sobre todo, ámense los unos a los otros
profundamente, porque el amor cubre multitud
de pecados”.
1 Pedro 4,8.
“Siempre humildes y amables, pacientes,
tolerantes unos con otros en amor”.
Efesios 4,2.
“ De modo que se toleren unos con otros y se
perdonen si alguno tiene queja contra otro. Así
como el Señor los perdonó, perdónense
ustedes”.
Colocenses 3:13 y Efesios 4;32.
Cuando pasamos por alto los agravios de
otros, estamos imitando el extraordinario
perdón de Dios para con nosotros:
“El Señor es clemente y compasivo, lento
para la ira y grande en amor. No sostiene
para siempre su querella, ni guarda rencor
eternamente. No nos trata conforme a
nuestros pecados, ni nos paga según
nuestras maldades”.
Salmos 103:8-10
Pasar por alto es apropiado bajo 2 condiciones:
1. La ofensa no debe haber creado una pared
entre usted y la otra persona, ni debe haber
hecho que usted se sienta de forma diferente
hacia ella durante mas que un breve período de
tiempo.
2. La ofensa no debe estar causando un daño
serio a la reputación de Dios, a otras personas o
al ofensor.

Recuerda: Pasar por alto no es un proceso


pasivo en el cual uno permanece en silencio
pero la archiva, la guarda, la mantengo para
usarla mas adelante. Esto es una forma de
negociación que conduce a la amargura y
resentimiento y terminará explotando.
Si somos exageradamente sensible, el apóstol Pablo nos enseña una
excelente formula para examinar nuestras actitudes durante un conflicto.
4. Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!
5. Vuestras gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor
está cerca.
6.Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones
delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
7.Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará
vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.
8.Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo
honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es
de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en
esto pensad.
9.Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto
haced; y el dios de paz estará con vosotros.
Filipenses 4: 4-9
1. Alégrese siempre en el Señor – 2 veces insiste
alégrense, pero ¿Qué habrá para regocijarse
cuando uno está involucrado en una disputa?
Si abres tus ojos y piensas en la infinita bondad
de Dios contigo, en su misericordia, en su
perdón, elevarías una adoración gozosa.
2. Que su amabilidad sea evidente a todos. La
palabra griega que se traduce como amabilidad
significa: Benigno, longánimo, amable, cortes
considerado, generoso, indulgente, moderado,
es decir, distintos a irritabilidad, groseria y
aspereza.
3. Reemplace la ansiedad por oración. La
palabra griega que traducimos como inquietud o
angustia significa: cargado de preocupación y
problemas, presionado, comprimido, bajo
presión.
El nos insta a usar la técnica de
reemplazo preocupación por oración y
ruego y peticiones, es decir sustituir
pensamientos negativos por
pensamientos más constructivos, la
ansiedad va siendo reemplazada
continuamente por seguridad y confianza
y comenzará a experimentar una Paz que
sobrepasa todo entendimiento humano,
que se convertirá en una Paz externa o
reconciliación que también sobrepasará la
compresión del otro.
5. Ponga en práctica lo que ha aprendido... No ser
oidores sino hacedores de la palabra.

4. Vea las cosas como son: aprenderá a


desarrollar una visión más precisa de los demás,
al pensar deliberadamente en aspectos que son
verdaderos, respetables, justos, puros, amables,
dignos de admiración excelentes o que
merezcan elogio. Así, Pablo nos esta enseñando
a contrarrestar nuestra tendencia natural a
centrarnos solo en lo malo de quienes se
oponen a nosotros.
Preguntas
1. Defina los temas materiales en este
conflicto.
2. Defina los temas personales de este
conflicto.
3. ¿Cuáles temas personales están
teniendo la mayor influencia en usted?
¿Y en su oponente?
4. ¿Qué ha ahecho la otra persona que lo
haya ofendido?.
Preguntas
5. Verifique su actitud:
a. ¿Acerca de qué puede regocijarse en el Señor con relación
a este conflicto?
b. ¿Ha sido usted amable, o irritable y grosero hacia los
demás? A partir de ahora, ¿de qué forma podría hacer que
la amabilidad de Cristo sea mas evidente para los demás?
c. ¿Acerca de qué cosas ha estado preocupado o ansioso?
¿De qué forma Dios se ha mostrado como amoroso,
poderoso y fiel para con usted en conflictos o dificultades
anteriores? ¿Qué cosas le gustaría que hiciera o lograra Él
a través de este conflicto?
d. ¿Qué tiene de bueno la persona con la que usted está en
conflicto? ¿Qué aspectos de las preocupaciones de esa
persona son correctos? ¿Tiene algún recuerdo bueno de su
relación con ella? ¿De qué forma Dios lo ha ayudado a
través de esa persona?
e. ¿Qué principios que se enseñan en la Biblia le resultan más
difícil de practicar en esta situación? ¿Aplicará usted esos
principios? ¿De que forma?
Preguntas
6. ¿Qué efecto está teniendo o probablemente
tenga esta disputa sobre
a. Su testimonio a favor de Cristo?
b. Su vida familiar?
c. Su ocupación?
d. Sus finanzas o propiedades?
e. Sus amistades?
f. Su relación con Dios?
g. Su servicio en su iglesia y su comunidad?
EL CONFLICTO EMPIEZA EN EL ….
El conflicto empieza en el corazón:

“¿De donde surgen las guerras y los conflictos


entre ustedes?
¿No es precisamente de las pasiones que luchan
dentro de ustedes mismos?.
Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de
envidia, y no podéis alcanzar; combatís, y
lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque
no pedís.
Pedís , y no recibís, porque pedís mal, para
gastar en vuestros deleites”.
Santiago 4:1-3
Mateo 15, 19

Lucas 12 -13, 15
Estos pasajes describen la causa fundamental
del conflicto los deseos no satisfechos en
nuestro corazón y entonces estos deseos
comienzan a controlarnos y estos deseos se
convierten en un Ídolo.

La progresión de un Ídolo:

Yo deseo
Yo exijo
Yo juzgo
Yo castigo
“La Progresión de un ídolo”

DESEO CASTIGO

EXIJO YO: EL ÍDOLO JUZGO


“La Progresión de un ídolo”

¿Qué es Juzgar?

Reprochar, señalar.

Tildar de inservible

Diferenciar entre dos personas.

Someto a mi juicio los actos y acciones del otro.

Reprobar de tal manera que no se permite defensa.

Condenar.

Voluntad no dirigida por la razón sino por el capricho.


“La Progresión de un ídolo”
¿Qué es Castigar?

FUSTIGO

INFLIJO

ATORMENTO

AFLIJO

MORTIFICO
“La Progresión de un ídolo”
¿Cómo Juzgo indebidamente?

“Tú no tienes la razón, yo la tengo” “No te perdono”

(Árbitro) (Enjuicio)

“Tú no me sirves para nada”


“Mi papá si me atendía bien, no como tu…”
YO
(Sentencio)
(Comparo)

Tú no debes ser así, debes ser como yo quiero” “Cada vez que te necesito, tú te la pasas
distraído, eres un idiota”
(Censuro)
(Critico)

“Cuaima, Inservible, insensible, dura…”

(Califico)
“La Progresión de un ídolo”
¿Cómo Castigo Indebidamente?
Agrediéndose a sí mismo para echarle la Soy sufrido, sufro y todo me parece
culpa al otro sufrimiento si no obtengo lo que quiero.

(Mortifico) (Aflijo)

YO
Quiero, quiero, quiero, quiero… Altanería, soberbia, retrechería, etc…

(Atormento) (Infrinjo)

Denigro a la persona, le considero sin


valor, por no cumplir lo que quiero.

(Fustigo)
“La Progresión de un ídolo”
Razones por las cuales juzgamos y castigamos indebidamente

1. Juzgamos indebidamente cuando no satisfacen nuestros deseos

2. Juzgamos cuando nos creemos superiores a los demás

3. Juzgamos cuando medimos según nuestra conveniencia

4. Juzgamos cuando no cumplen nuestras condiciones

5. Castigamos y lastimamos para que cedan a nuestra voluntad

6. Castigamos para controlar a otros

7. Castigamos cuando no se inclinan a nuestra voluntad y orgullo


“La Progresión de un ídolo”
¿Qué nos dice la Escritura con respecto a esto?

Santiago 4:12
“Uno solo es el dador de la ley, que puede salvar y perder; pero tú, ¿quién eres para que juzgues a otro?”

Romanos 14: 10 y 13
“Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos
compareceremos ante el tribunal de Cristo”
“Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de
caer al hermano.”

Mateo 7:1
“No juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la
medida con que medís, os será medido.”
LA CURACIÓN PARA
UN CORAZÓN Deseo tener una carrera para
sentirme realizada, quisiera
IDÓLATRA tener una familia como la de
Rosa y así me sentiría feliz,
desearía que mi papá
estuviera aquí conmigo para
sentirme segura.

Es todo deseo que ha crecido


hasta volverse una IDOLO
exigencia absorbente que algo que
gobierna nuestro corazón, amamos
es algo que tenemos que tenemos o
tener para ser felices, confiamos
realizados o seguros.
* Carros- Casa – Familia –
Trabajo- amigos, etc.
LA CURACIÓN PARA UN
CORAZÓN IDÓLATRA

AMOR TEMOR CONFIANZA


• “Palabras de Adoración” las cuales Jesús nos
ordena hacer. Amar a Dios, temer a Dios y confiar
en Dios. Mt.22:37/Lc.12:4,5/Jn.14:1
LIBERACIÓN DEL JUICIO
“Por lo tanto ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a
Cristo Jesús, pues por medio de él la ley del Espíritu de vida me ha liberado
de la ley del pecado y de la muerte (Rom. 8: 1,2)

AMOR: Amigos –
familiares, etc.

Confianza: No
estarás sólo, pues todo
lo puedo en Cristo que
me fortalece

Seguridad: En ti
soy más que
Para recibir este perdón y vencedor
esta libertad, debemos
reconocer nuestro pecado,
arrepentirnos de él y poner
nuestra confianza en
Jesucristo
Preguntas
¿Cómo está juzgando a quienes no satisfacen sus
deseos? ¿Está sintiendo indignación, condenación,
amargura, resentimiento o ira?
¿De qué forma está castigando a quienes no
satisfacen sus deseos?
¿Qué ha hecho Dios para librarlo de sus ídolos?
¿Qué puede hacer usted para recibir esta
liberación?
¿Cómo puede usted cultivar un amor y una
adoración más apasionados por Dios?
Preguntas
¿De qué forma estoy castigando a otros?
¿De qué forma estoy juzgando a otros?
¿Qué estoy exigiendo tener?
¿Cuál es el deseo raíz de esa exigencia?
¿Qué me hace pensar que necesito satisfacer
algunos de esos deseos?
¿De qué forma sus expectativas de otros están
magnificando sus exigencias sobre ellos y su
desilusión porque no satisfacen sus deseos?
LIBERACIÓN DE ÍDOLOS ESPECÍFICOS

• Dios no sólo quiere librarnos de nuestros problemas generales


con el pecado y la idolatría, sino de aquellos que a diario nos
quieren controlar, consumir y causar conflictos con quienes
nos rodean.
Para esto debo identificarlos y confesarlos uno por uno y luego
trabajar con Él mientras el trabaja en mí.
¿Cómo es este proceso? Dios trasmite su gracia para ayudarnos
en este proceso a través de tres medios:
Pues, la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda
espada de doble filo… (Hebreos 4:12)

Nos asiste en este proceso de liberación de nuestros ídolos


ayudándonos a entender la Biblia, identificar nuestro pecado y
seguir una vida piadosa (1 Cor. 2:10-15)

Dios ha establecido la iglesia para canalizar su gracia hacia


Usted. (Rom. 15:14)
REEMPLACE LA ADORACIÓN DEL ÍDOLO POR
LA ADORACIÓN DEL DIOS VERDADERO

TEMER A DIOS CONFIAR EN DIOS


ARREPENTIRSE AMAR A DIOS
DELEITARSE EN DIOS

Como indican estos pasajes, Dios he diseñado un hermoso ciclo


para quienes quieren adorarlo por sobre todas las cosas. Al amar,
alabar, dar gracias y deleitarse en Dios, Él cumplirá sus deseos con
el mejor regalo: Él mismo. Y al aprender a deleitarse más y más en
Él, sentirá una menor necesidad de encontrar felicidad, realización
y seguridad en las cosas de este mundo.
Preguntas de Rayos X que nos permiten
discernir cuando un deseo se está convirtiendo
en una exigencia pecaminosa.

- ¿Qué me preocupa?
- ¿Cuál es la primera cosa en mi mente por la
mañana y la última por la noche?
- ¿Cómo completaría el espacio en blanco: “Si tan
solo _________ entonces me sentiría feliz,
realizado y seguro”?
- ¿Qué deseo preservar o evitar a toda costa?
- ¿Dónde pongo mi confianza?
- ¿Qué temo?
Cuando cierto deseo no es satisfecho:
¿Siento frustración, ansiedad,
resentimiento, amargura, ira, o depresión?
¿Hay algo que deseo tanto que estoy
dispuesto a desilusionar o lastiman a otros
para tenerlos?
¿Cómo puedo mostrar la obra de Jesús en mí
asumiendo la responsabilidad por mi
contribución al conflicto?

Mat 7:5 ¡Hipócrita! Echa primero la viga de


tu ojo, y entonces mirarás en echar la mota
del ojo de tu hermano.
1. Te enojas

2. Te rehúsas a perdonar

3. Te exaltas a ti mismo

4. Señalas a los demás como


causantes de tus errores
 Se facilitan las discusiones
personales.

 Se reconoce la contribución en el
problema.

 Se es impulsado por el Espíritu a


encontrar paz a través de la confesión.

 Hay libertad, la amargura


desaparece.
Marcos 12:31

“Y el segundo es semejante a él:


Amarás a tu prójimo como a ti
mismo”

 NO hagas lo que no te gusta que


te hagan

“Cuando reconocemos que nuestros


propios pecados son tan serios que Jesús
tuvo que morir por nosotros, y recordamos
que Él nos ha perdonado todas nuestras
faltas, podemos renunciar a nuestra
ilusión de autojustificación y reconocer
libremente nuestras fallas”
LA CONFESIÓN TRAE LIBERTAD

Quien encubre su pecado jamás


prospera; quien lo confiesa y lo deja,
halla perdón.

Proverbios 28:13
Los Siete Elementos de la Confesión
Mateo 7:3-5; 1 Juan 1:8-9; Proverbios
28:13
• Dirigirse a Cada uno de los involucrados. (Todos a
quienes has afectado.)
• Evita el “si”, el “pero” y el “quizás”.
• Admite asuntos específicos. (Tantos actitudes como
acciones).
• Pide disculpas. (Expresa arrepentimiento por la
manera en que has herido a alguien).
• Acepta las consecuencias. (Tales como la restitución).
• Cambia tu conducta. (Cambia tus actitudes y
acciones).
• Pide perdón a la otra persona.
¿A quienes tengo que pedir perdón? ¿Y que
aspecto de mi carácter tengo que cambiar?
¿Cómo puedo demostrar el perdón de Dios, y
promover una solución razonable?

“De modo que se toleren unos a otros y se


perdonen si alguno tiene quejas contra otro. Así
como el señor los perdonó, perdonen también
ustedes”.
Colosenses 3:13

Potrebbero piacerti anche