Ven oh Jesús a nuestro hogar.

Te invitamos en el a morar.
Se con papa y con mama.
Tu bendición ven hoy a dar.

Reine afecto y perfecto amor.

Lejos del mal de cualquier temor.
Nuestro vivir en en todo aquí.
Honre tan solo al Salvador.

En el gran día de gloria sin par.

Cuando tu reino triunfante ha de estar
Oh buen Señor acuerdate.
Salva también a nuestro hogar
 La Entrega de los padres a sus hijos es
demostrada por su prontitud y
disposición a ejecutar sus
responsabilidades de padres

• Anhelan estar con sus hijos

• Disfrutan ser aquellos de quienes
los niños dependen.
• No les intimidan las
responsabilidades.
• No tienen temores de sus deberes
de padres.
• No dejan para mañana las
responsabilidades de cada día.
• Tienen orgullo de proclamar a sus
hijos como propios.
 Para conocer a sus hijos los padres
necesitan tener conciencia de su desarrollo,
estudian a ellos y a su mundo como el
jardinero estudia un jardín tapado de hojas

 Saben de que son capaces los niños a

una edad determinada.
 Saben qué necesitan para el crecimiento
sano, la estabilidad emocional y el
desarrollo intelectual y saben
específicamente como ayudarles en ese
crecimiento.
 Conocen los gustos, las metas y las
habilidades individuales de cada niño,
apoyándoles en sus características
únicas.
 Tienen una buena idea de las
preocupaciones problemas y preguntas
que tendrá el niño al ir creciendo en
esta época y edad.
Padres estables son consecuentes en sus
pautas de conducta, mantienen un
temperamento bastante uniforme y sus
emociones no varían mucho. Son padres
predecibles.

 No hacen promesas que no pueden

cumplir y cumplen las que hacen.
 No infunden ningún temor.
 Practican lo que predican.
 Son constantes en el horario y
hábitos diarios..
 Son un punto de referencia a su
familia.
 Los padres son llamados a proteger y
proveer para quienes ellos aman. Los niños
necesitan apoyo y guía de los padres.
La mejor manera de proteger es:

 Satisfaciendo las necesidades

materiales de la familia. (Alimento,
ropa, calzado, educación).
 Teniendo un ingreso confiable y
estable.
 Educando sobre ciertas medidas de
precaución y emergencia para prevenir
ciertas crisis.
 Proveyendo vivienda que garantice
seguridad.
 Cuidando la buena reputación de la
familia.
La mejor manera de enseñar amor es siendo un
modelo de amor.

 Si el padre y la madre son felices, uno

con el otro, ese contentamiento se
transmitirá al niño. Esto resulta no solo
en buena conducta y afecto, sino
también en un sentido de valor personal.
 Nada es mas básico para la felicidad y el
sentido de valor del niño que el amor
mutuo entre el padre y la madre.
 Los padres deben mostrar su afecto y
amor mutuo delante de los niños.
 El saber que los padres se aman provee
al niño de seguridad de estabilidad, y de
un sentido sagrado de la vida.
 Su matrimonio es un modelo para el
matrimonio de sus hijos.
 Escuchar activamente es una disciplina
fundamental para las actividades
paternales.

 Escuchar es una disciplina que

podemos aprender.
 Cuando los padres escuchan a sus
hijos están diciendo, !te amo!.
 Escuchar es entender lo que están
pensando y sintiendo sus hijos.
 Escuchar es dedicar tiempo
comunicando así amor y respeto
 Los padres tienen la función de
proveedores espirituales. Tienen el
privilegio de enseñar los valores
cristianos a sus hijos:

 Leyendo la Biblia
 Teniendo un momento de
adoración en el hogar.
 Siendo modelos de santa
conducta en e l diario vivir, en la
iglesia y en el hogar.
 Orando con ellos.
Cada etapa de la vida del niño florece con
nuevas actividades, ideas y posibilidades. Los
aspectos emocionales, físicos, mentales, y
espirituales de sus vidas constituyen un jardín
de potenciales.

El trabajo de los padres es desmalezar el

jardín y preparar la correcta cantidad de suelo
y de agua para que estas flores tengan toda la
oportunidad de crecer.

Los padres eficaces conocen los puntos

fuertes y las flaquezas de sus hijos, sus
esperanzas y aspiraciones, sus gozos y
penas, y son capaces de atender sus
necesidades..
Ven oh Jesús a nuestro hogar.
Te invitamos en el a morar.
Sé con papá y con mamá.
Tu bendición ven hoy a dar.

Reine afecto y perfecto amor.

Lejos del mal de cualquier temor.
Nuestro vivir en todo aquí.
Honre tan solo al Salvador.

En el gran día de gloria sin par.

Cuando tu reino triunfante ha de estar
Oh buen Señor acuérdate.
Salva también a nuestro hogar