se estableció en Colombia en el siglo XVI. venían misioneros de
varias órdenes religiosas (especialmente dominicos, agustinos, franciscanos y jesuitas) que se encargaron de evangelizar a los pobladores indígenas, al tiempo que servían a los grupos españoles y criollos establecidos. Dichas órdenes fundaron conventos en distintos puntos del país, especialmente en la región Andina y en la Costa Caribe A finales del siglo xvi
surgen los primeros seminarios para el clero secular, el cual, por lo
demás, siempre adoleció de baja formación en comparación con las órdenes religiosas. Por ello la mayor parte de los obispos durante los siglos XVI y XVII fueron religiosos. El clero secular se encargó de las parroquias de "españoles" y mestizos, y de las doctrinas que iban secularizándose debido a la reducción de la población indígena . A finales del siglo xviii
las reformas borbónicas comienza a resquebrajarse este esquema,
en especial en el aspecto educativo. Se cuestionó por primera vez la utilidad del sistema escolástico se procura una implantación de programas educativos de tinte ilustrada.
relación iglesia y estado
En el siglo XIX caracterizado por las controversias, el cambio político
de la Nueva Granada hace que se reduzca la invasión de la iglesia logra el régimen del patronato. El Estado patrocinaba a la iglesia, era el encargado de pagarle a los párrocos, obispos, etc., el Estado le cobraba a la iglesia una comisión donde el 80% era para el estado. a la iglesia le correspondía el 20%. Antes de nombrar a los obispos tocaba mandar al Rey y que este escogiera. El patronato era también administrado por la iglesia.. Conflicto Estado-Iglesia (1920-1940) Después de que los liberales lograron llegar al poder, de todos los enfrentamientos sucedidos y de la iniciación de la independencia, en la cual estos grupos llevaran a cabo la perdida del territorio nacional frente a los Estados Unidos, creían que la creación y empleo de métodos para el crecimiento económico y la estabilidad política México estaría en peligro. la crisis en esta época, propusieron reemplazar y cambiar el orden actual, con lo cual se llevaba a cabo el despojo del poder de los pilares de dicho orden colonial, la iglesia, el ejército, los caciques regionales, los pueblos comunales, por una estructura que para ellos era moderna y más eficaz.
se le ha denominado como “Reforma Liberal" que pasó por varias
etapas que se determinaron por la resistencia de dicha reforma. PRIMEROS ENFRENTAMIENTOS La iglesia católica ha tenido un papel sumamente importante en la guerra revolucionaria, tuvo muchos medios a su alcance para actuar en los principales sucesos de la guerra civil, no solamente por su gran ejército de obispos, sacerdotes, frailes, arzobispos y monjes que rebasaba los doce mil en toda la República y por el poder de convencimiento que tenía ante el pueblo sino la existencia de un ejército propagandista de la fe católica distribuido por toda la República en puntos estratégicos, ejemplo de estos se encuentra el periódico El Correo de Chihuahua dirigido por el militante católico Silvestre Terrazas. En agosto de 1911 se constituyó el Partido Católico Nacional patrocinado por la iglesia, pero existieron problemas internos al tener diferentes intereses apoyando algunos a Francisco I Sin duda la iglesia estaba dentro de la batalla política solamente por la búsqueda de su fuero, sus intereses políticos, poder en exceso y un respeto de todo gobernante hacia los derechos de Dios, dejando todos sus intereses en manos del Partido Católico nacional. CAUSAS DE LA GUERRA CRISTERA Las primeras crisis resultarían del proceso por el que pasa la separación de poderes y los bienes que pasaron de religiosos al civil, el Estado choca con la iglesia, en una pelea que será por la independencia de cada una de estas. Existió una oposición de los obispos al trato que les ofrecía Obregón, ellos decían que querían traicionar al estado con el nuevo modelo que proponían, en el cual, el modelo social cristiano pasaría al Estado. Las actividades religiosas ocupaban un lugar importante en la época de la revolución, todo esto con el fin de reclamar la reforma cuatro años antes a la nueva reforma y las disposiciones favorables para los obreros de la constitución de 1917. NOMBRE DE CARDENALES El papa Pío XII lo elevó a Cardenal en 1953 y, así, participó en el cónclave que eligió al papa Juan XXIII. Se opuso a los mandatos del general Gustavo Rojas Pinilla y de la junta militar de Gobierno que lo sucedió… El segundo cardenal Luis Concha Córdoba, a quien se le rendía tributo, respeto y veneración como si fuera un papa. En la catedral de Bogotá utilizaba ornamentos con hilos de oro, que identificaban su poder. (Además: Los sermones del nuevo cardenal de casi 100 años)… El tercer cardenal Aníbal Muñoz Duque, objeto de numerosas caricaturas en las que se destacaba su defecto en un ojo. No se salvó de la pluma de Héctor Osuna, quien ha disfrutado dibujando, entre otros personajes, a los cardenales. El cuarto cardenal Mario Rebollo Bravo, nacido en Génova (Italia). Famoso por su terquedad sobre todo con la adicción al cigarrillo, causante del cáncer pulmonar que lo llevó a la tumba …
El quinto purpurado criollo es monseñor Pedro Rubiano
Sáenz, a quien le tocó enfrentar dos grandes ‘chicharrones’. El primero, la quiebra de la Caja Vocacional, que llevó a la Iglesia a vender propiedades para devolverles dinero a los miles de ahorradores.
El sexto Darío Castrillón Hoyos, controvertido por sus
posiciones sobre los pobres, sus críticas a los gobiernos y a los poderosos y la defensa de la utilización de los dineros de la mafia para repartir entre los más necesitados. Bernardo Herrera Restrepo fue un eclesiástico colombiano de la Iglesia católica, fue obispo de la diócesis de Medellín y posteriormente arzobispo de la arquidiócesis de Bogotá. Fundador del Instituto San Bernardo De La Salle ubicado en la ciudad de Bogotá, gestor de las obras educativas de la congregación de los Hermanos de las Escuelas Cristianas del distrito Lasallista de Bogotá y Medellín.. Nació el 11 de septiembre de 1844 en Bogotá, como tercer hijo de los ocho que hubo en el hogar conformado por el prestigioso abogado Bernardo Herrera Buendía y por su esposa María de Jesús Restrepo Montoya, quien era hija de José Manuel Restrepo Vélez, historiador, político y vicepresidente de Colombia. A los doce años entró al Liceo de la Infancia de Ricardo Carrasquilla. Desde 1858 hasta mediados de 1861 estudió en el Colegio de San Bartolomé con los Jesuitas, siendo condiscípulos suyos Miguel Antonio Caro y José Domingo Ospina. Asistió con su padre en 1863 a la Convención de Rio negro. El 11 de marzo de 1864 partió para Europa donde en el Seminario de Isasi estudió filosofía, pasando luego en 1865 al Seminario de San Sulpicio para cursar los estudios teológicos. El 12 de diciembre de 1871, fue nombrado por el arzobispo Arbeláez, rector del seminario Conciliar , recientemente restaurado. En Medellín, organizó el Capítulo y tuvo muy buenas relaciones con los canónicos. Transformó completamente el seminario Mayor imponiendo la disciplina sulpiciana que con ligeros cambios rigió hasta 1960, cuando se publicó un nuevo reglamento con una orientación distinta.