Prof: Karina Hendrie - Año 2015- Modelo paternalista (paternal o sacerdotal):
• El paciente recibe las intervenciones necesarias y que
mejor garantizan su salud y bienestar.
• Los médicos utilizan sus conocimientos para determinar
la situación clínica del paciente y su pronóstico; así como también eligen las pruebas diagnósticas y los tratamientos.
• En casos extremos: el médico informa de modo
autoritario al paciente en el momento de la intervención. • Presupone criterios «objetivos», que determinan qué es lo mejor: decisión tomada por el médico sin participar a paciente (quien debe estar agradecido por la decisión tomada por el médico, aunque no estuviera de acuerdo).
• El médico privilegia el bienestar y la salud del paciente
antes que su capacidad de elección y autonomía.
• Médico: rol de tutor del paciente.
Modelo informativo (científico, técnico o modelo del consumidor): • Objetivo de la RMP: proporcionar al paciente toda la información relevante para que pueda elegir la intervención que desee, tras lo cual el médico la llevará a cabo.
• El médico: debe informar al paciente sobre el estado de
su enfermedad, la naturaleza de los posibles diagnósticos y las intervenciones terapéuticas, así como sus posibles beneficios y riesgos (incluso la incertidumbre del conocimiento médico). • En caso extremo: el paciente puede llegar a manejar toda la información médica pertinente a su enfermedad y por lo tanto, seleccionar las intervenciones que mejor se ajusten a sus valores. Autonomía.
• Clara distinción entre los hechos y valores: el médico es
un técnico que le facilitará al paciente los datos, experiencia, información necesarios para que este pueda ejercer el control de la situación. Modelo interpretativo:
• Objetivo de la RMP: determinar los valores del paciente, qué
es lo que realmente desea en ese momento, y ayudarle así a elegir de entre todas las intervenciones médicas disponibles aquellas que satisfagan su valores.
• El médico informa al paciente sobre la naturaleza de su
afección, los riesgos y beneficios de cada intervención posible (como en el modelo informativo); pero además, le ayuda a aclarar y articular sus valores, y a determinar qué intervención médica los desarrolla mejor. • Según este modelo, los valores del paciente no son necesariamente fijos ni conocidos por él. A menudo están poco definidos y él los comprende sólo parcialmente.
• Es tarea del médico con el paciente aclarar y hacer
coherentes esos valores. El médico trabaja con el paciente intentando reconstruir sus objetivos, sus aspiraciones, sus responsabilidades y su carácter. Modelo interpretativo… • En caso extremo: el médico debe concebir la vida del paciente como un todo discursivo desde donde se determinan sus valores y sus prioridades. De esta manera el médico determina qué pruebas y tratamientos desarrollan mejor estos valores.
• El médico no impone sus órdenes al paciente, sino que
éste es quien decide qué valores y formas de actuar se ajustan mejor a lo que él es. El médico no juzga los valores del paciente; le ayuda a comprenderlos y a valerse de ellos en el contexto médico. • Rol del médico: consejero, desarrolla un papel consultivo, facilitando al paciente la información relevante, ayudándole a aclarar valores y sugiriéndole las intervenciones médicas que mejor los lleven a cabo.
• Obligaciones del médico: además de las referidas a lo
informativo, requieren incorporar al paciente en un proceso global de análisis. Por lo tanto la autonomía del paciente se concibe como una autocomprensión. Modelo deliberativo:
• Objetivo de la RMP: ayudar al paciente a determinar y
elegir de entre todos los valores relacionados con su salud y que pueden desarrollarse en el acto clínico, aquellos que son los mejores.
• El médico debe esbozar la información sobe la situación
clínica del paciente y ayudarle posteriormente a dilucidar los tipos de valores incluidos en las posibles opciones. • En caso extremo: médico y paciente deben comprometerse en una deliberación conjunta sobre qué tipo de valores relacionados con la salud puede y debe buscar el paciente.
• Pueden presentarse elementos morales que no tienen
relación con la enfermedad; el médico deberá evitar la coacción, siendo el paciente quien debe definir sobre su vida y seleccionar los valores que va a asumir. Modelo deliberativo…
• Médico: actúa como un maestro o un amigo,
comprometiendo al paciente en un diálogo sobre qué tipo de actuación sería la mejor. No sólo le indica qué podría hacer sino también (conociendo al paciente y deseándole lo mejor) qué debería hacer, qué decisión respecto al tratamiento médico sería la más adecuada.
• Autonomía del paciente: autodesarrollo moral. El paciente
está capacitado no sólo para seguir sus preferencias irreflexivas, sino también para analizar a través del diálogo, los distintos valores relacionados con la salud, su importancia, y sus implicaciones en el tratamiento.