En cuanto a la posibilidad de realizar la prescripción por parte de los demandantes,
concluimos que no es posible porque uno de los demandantes Rafael Lluncor había celebrado un contrato de arrendamiento mediante el cual poseía el bien inmueble, que dicho sea de paso en el articulo 897 señala que “no es poseedor quien se encuentra en relación de dependencia respecto a otro”, y que sería mas bien un servidor de la posesión; por lo que el demandante no tendría el “animus domini” o sea la voluntad que tiene una persona de dirigirse o comportarse como propietario de una cosa, que es un requisito para poder usucapir. Por lo que en esta parte estamos de acuerdo con lo resuelto por el Pleno.