0 a 3 años Ideas que orientan el trabajo educativo con los niños y niñas de 0 a 3 años Un tema que concita siempre gran interés y discusión entre las docentes, y en general, entre todos aquellos que brindan atención educativa a los niños y niñas es la planificación, aspecto multidimensional que nos reta de manera permanente a mantener la coherencia entre las grandes intenciones educativas y la práctica misma. En tanto los paradigmas educativos evolucionan, lo hacen también las metodologías de planificación. En ese sentido, la Ley General de Educación y el Proyecto Educativo Nacional vigentes señalan, la necesidad de formar personas capaces …..promoviendo … “una educación para la realización personal de todos los peruanos y para la edificación colectiva de la democracia y del desarrollo del país” Una planificación que concibe al niño como ejecutor permanente de acciones pensadas y dirigidas por otros, no es una forma de planificación que contribuya al proceso de individuación y de construcción del sentido de sí mismo, característica fundamental de desarrollo que sienta sus bases en los primeros años de vida. Menos aún, promueve la autonomía ni la creatividad, condiciones fundamentales para aprender a aprender por propia iniciativa, con eficacia y de manera permanente.. La planificación, para la atención educativa de los niños y niñas, en este paradigma ( está enfocada a promover, su protagonismo, para pensar y realizar sus propios proyectos de acción, como también para tener una participación activa en los momentos en que son atendidos. * Lo expuesto, demandará que el rol educativo del adulto debe ser de mediador y facilitador en el proceso de desarrollo y aprendizaje de los niños y niñas, descartando interacciones invasivas que limiten sus posibilidades. * La planificación, no estará centrada en definir acciones que el niño deba ejecutar, sino más bien en crear situaciones retadoras que les posibiliten desplegar todas sus potencialidades llevando a cabo sus propios proyectos de acción. La manera cómo vemos a los niños y las creencias que tenemos sobre cómo aprenden y las condiciones que requieren para crecer y desarrollarse son sin duda, aspectos que determinarán en gran parte, el tipo de persona que formaremos. De allí la importancia de reflexionar sobre el tipo de niño que queremos ayudar a crecer y desarrollar. *IDEAS QUE ORIENTAN LA ACCIÓN EDUCATIVA EN EL PRIMER CICLO DE LA EDUCACIÓN BÁSICA REGULAR Mirada de la niñez Reconocer al niño como: Sujeto de derechos: persona en evolución permanente, que requiere de condiciones básicas para crecer y desarrollarse, y cuya singularidad y particularidad deben ser reconocidas en todos los campos de su desarrollo. Sujetos de acción: más que de reacción. Los bebés llegan al mundo dotados de capacidades para percibir, moverse, relacionarse con el entorno y aprender.. A partir de esta acción e interacción los niños también se transforman. La acción del niño es la que le permite explorar, conocer y formar su pensamiento. Ser social se desarrollan como sujetos, a partir de otros, con otros y en oposición a otros; Entender al niño como un sujeto social significa reconocer que cada niño nace dentro de una comunidad, marcada por un origen, una lengua, una región geográfica, valores, cierta manera de mirar, sentir, pensar y actuar en el mundo, compartidos por su grupo de pertenencia. Si bien esta pertenencia establece ciertas condiciones, es necesario considerar que el niño es un ser único. Los niños, además son seres que se desarrollan de manera integral, es decir, desde el movimiento, la emoción, la comunicación no verbal y verbal, y el pensamiento. Todos estos procesos se realizan en forma simultánea, por lo que no podemos promover su desarrollo a partir de acciones aisladas que fragmenten su percepción del mundo o que los limiten en la vivencia de esta integralidad. Principios que orientan la atención educativa de los niños y niñas PRINCIPIO DE RESPETO: Considera la importancia de crear condiciones que respeten los procesos y necesidades vitales que nuestros niños y niñas requieren para desarrollarse plenamente. Respetar al niño como sujeto implica reconocer sus derechos, valorar su forma de ser y hacer en el mundo, lo que supone considerar su ritmo, nivel madurativo, características particulares y culturales, que hacen de él un ser único y especial. PRINCIPIO DE SEGURIDAD: constituye la base para el desarrollo de una personalidad estable y armoniosa en el niño, la cual se construye a través del vínculo afectivo, la calidad de los cuidados que recibe, y la posibilidad de actuar e interactuar con libertad en espacios seguros que permitan el desarrollo de su potencial natural. A partir del placer de sentirse seguro, es que los niños y las niñas podrán separarse y diferenciarse para construir su propia identidad, desarrollar progresivamente su autonomía y atreverse a salir al mundo para explorarlo. PRINCIPIO DE UN BUEN ESTADO DE SALUD: No implica únicamente la atención física del niño y niña; se trata de un cuidado integral. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud es entendida como “…un estado de completo bienestar físico, psicológico y social, y no meramente la ausencia de enfermedad”. Por lo tanto, la salud involucra un estado de bienestar en el aspecto físico, mental y social; está relacionada a conductas, estilos de vida, entornos físicos y sociales saludables; y pone énfasis en acciones educativas que faciliten la participación social y el fortalecimiento de las capacidades de las familias en el mantenimiento, mejoramiento y recuperación de la salud de los niños y las niñas. PRINCIPIO DE AUTONOMÍA Tiene como base la convicción de que los niños y las niñas son capaces de desarrollarse, aprender y construirse a sí mismos, siempre y cuando se garantice las condiciones físicas y afectivas que requieren para ello. De este modo, serán capaces de realizar acciones a partir de su propia iniciativa. PRINCIPIO DE MOVIMIENTO El movimiento libre constituye un factor esencial en el desarrollo integral del niño, pues le permite expresarse, comunicarse, adquirir posturas, desplazamientos y desarrollar su pensamiento. Es importante que los niños y las niñas desplieguen al máximo sus iniciativas de movimiento y acción para conocerse y conocer el mundo que los rodea. Además, el movimiento libre es un elemento fundamental en la construcción de la personalidad. PRINCIPIO DE COMUNICACIÓN La comunicación es una necesidad esencial y absoluta, que se origina desde el inicio de la vida con las interacciones y en el placer de las transformaciones recíprocas. Por tanto, en los primeros años de vida, es importante considerar al bebé o al niño como un interlocutor válido, con capacidades comunicativas y expresivas PRINCIPIO DE JUEGO LIBRE. Jugar es una actividad libre y esencialmente placentera, no impuesta o dirigida desde afuera. Le permite al niño, de manera natural, tomar decisiones, asumir roles, establecer reglas y negociar según las diferentes situaciones. A través del juego, los niños y las niñas movilizan distintas habilidades cognitivas, motoras, sociales y comunicativas. ELEMENTOS FAVORECEDORES DEL DESARROLLO Y APRENDIZAJE DE LOS NIÑOS Y NIÑAS DE 0 A 3 AÑOS Para orientar la atención educativa de los niños menores de 3 años es necesario que los adultos tengan en cuenta lo siguiente: *Crear las condiciones para un buen estado de salud integral Velar por la salud física y emocional de los niños: su alimentación, atención médica, actividad motora, relación con los demás y todos aquellos aspectos que contribuyen a su bienestar. *Valorar y promover la identidad cultural Implica tener en cuenta la realidad familiar, histórico- social, económica y cultural de cada niño, reconociendo la realidad intercultural de nuestro país y favoreciendo la integración y la convivencia armónica *Consolidar una relación afectiva privilegiada Se trata de desarrollar una relación, cálida, respetuosa con los niños; siendo capaz de darse cuenta de sus intereses y comprender sus necesidades. Consolidar una relación afectiva privilegiada *Favorecer en el niño la toma de conciencia de sí mismo y de su entorno Los adultos debemos ayudar a los niños a comprenderse a sí mismos, saber quiénes son, qué les sucede, qué se les hace y lo que hacen ellos, quiénes se ocupan de ellos, cuál es su entorno y lo que les va a ocurrir. *Valorar la actividad autónoma El niño es capaz de decidir qué quiere hacer, nuestra tarea es brindarle un espacio seguro y objetos interesantes que le permitan descubrir sus propias capacidades. GRACIAS POR SU ATENCIÓN