ROMANOS Universidad Nacional de San Martín Grupo N° 3 • Facultad de Ingeniería INTEGRANTES: Civil y Arquitectura . • Escuela Académica • Sofía L. Fernández Marina Profesional de • Paula P. del Castillo Sánchez Arquitectura y Urbanismo • Jewell J. Cárdens Chavez • Cristian C.J. Romero Velásquez. • Michael Reyes Rituay • Roger Abad Ramón Los Números Arábigos. • ORIGEN : Los números arábigos se originaron en la India al menos hace 1.700 años. Fueron inventados por los matemáticos hindúes, después de haber evolucionado a partir de los números de Brahmi. • HISTORIA : Los números indios pasaron a Persia y, finalmente, a Arabia, donde hicieron su camino hacia Europa a través de las rutas comerciales. Al llegar a Europa, pasando por la zona árabe de África del Norte comenzaron a ser conocidos como los números arábigos. • GEOGRAFÍA: El sistema numérico que usamos hoy fue influenciado por todos los países por los que pasó en su camino desde la India hasta Europa. Persia, Oriente Medio y África del Norte, contribuyeron a su formación, así como las influencias budistas y brahmanes producto de su paso por la India. • ¿CÓMO FUERON INVENTADOS LOS NÚMEROS ARÁBIGOS? Los números que se usan en Estados Unidos y Europa en la actualidad se inventaron en la India. Siguieron las rutas comerciales del oeste a través de Persia hasta el norte de África, donde los árabes se referían a ellos como los números hindúes. Después de haber llegado a Europa en la Edad Media, se los empezó a conocer como números arábigos. Ortografía de los números arábigos: Las cifras enteras. • Las cifras que componen un número se escriben seguidas: 3479. Aquellas que representan números elevados pueden dividirse en grupos de tres dígitos, de derecha a izquierda: 28 450 857. Esta separación no se aplica en los números de cuatro cifras. • No debe utilizarse ni el punto ni la coma para separar los grupos de tres dígitos en la parte entera de un número. Para ello se admite el uso de un pequeño espacio en blanco. • Los bloques de cifras no deben aparecer en líneas diferentes, ya que eso dificultaría la identificación del conjunto como un único número: *27 315 / 857. Ortografía de los números arábigos: las cifras decimales • En las lenguas que utilizan el alfabeto latino, el signo utilizado como separados decimal es el punto o la coma, con distinga distribución geográfica. • Los organismos internacionales de normalización se inclinan por dar preferencia a la coma en toros los documentos de difusión internacional. No obstante, la Conferencia General de Pesos y Medidas decidió reconocer ambos signos como igualmente válidos en 2003. • Con el fin de promover un proceso de unificación en español, se recomienda el uso del punto como separador decimal, pero ambos se consideran válidos; así pues, según las zonas, podrá escribirse π = 3.1416 o π = 3,1416. • Es incorrecto el uso del apóstrofo en lugar de la coma para separar la parte entera del decimal en la escritura de números: *28’57. Ortografía de los Números Cardinales • Los cardinales de cero a quince, todas las decenas (veinte, treinta, cuarenta...), cien(to), quinientos y mil son palabras simples. El resto de los números cardinales son complejos y se forman por fusión, yuxtaposición o coordinación de cardinales simples. • De los cardinales complejos, se escriben en una sola palabra los correspondientes a los números 16 a 19 y 21 a 29, así como todas las centenas: dieciséis, dieciocho, veintiuno, veintidós, doscientos, cuatrocientos, etc. • Cuando un numeral tiene su origen en una expresión coordinada, la y copulativa etimológica se convierte en i en la grafía unitaria: dieciséis (de diez y seis). • A partir de treinta, los cardinales complejos se escriben en varias palabras. Los correspondientes a las series de las decenas se forman por coordinación mediante la conjunción y: treinta y uno, cuarenta y cinco, noventa y nueve; el resto se forma por mera yuxtaposición: ciento dos, mil cuatrocientos treinta, trescientos mil veintiuno, etc. • Mitos
• Sorprendentemente, los números del uno al
nueve tienen la misma cantidad de ángulos en la estructura que el número que representan, un ángulo para el uno, dos ángulos para el dos, y así sucesivamente. Muchos creen que fue de esa manera en que lo que los árabes crearon que el sistema, cuando en realidad fue evolucionando a partir de los números hindúes durante muchos siglos.
• Nota de color
• Los antiguos egipcios pintaron una línea recta
vertical para simbolizar el número "uno" y dos líneas para el "dos" hace más de 5.000 años. LOS NÚMEROS ROMANOS • El sistema de numeración romana es un sistema de numeración no posicional que se desarrolló en la Antigua Roma y se utilizó en todo el Imperio romano. • Este sistema emplea algunas letras mayúsculas como símbolos para representar ciertos números, la mayor parte de números se escriben como combinaciones de letras. Por ejemplo, el año 2014 se escribe como MMXIV, donde cada M representa 1000, la X representa 10 más y IV representa cuatro unidades más (al ser V, que representa el 5, precedido por I, que representa el 1). Romano Decimal Nota I 1 Unus Quinque. V es la mitad superior de X; V 5 en etrusco Λ. X 10 Decem L 50 Quinquaginta C 100 Letra inicial de Centum. D 500 Quingenti. D, es la mitad de la Phi Φ. M 1000 Mille. Originalmente era la letra Phi. USO ACTUAL DE LOS NÚMEROS ROMANOS • En monumentos o placas conmemorativas, para indicar los años: MCMXCIX [= 1999]. • En las publicaciones periódicas, para señalar el año al que corresponde cada ejemplar desde que comenzó su edición: El País, Año XXXV. • Para indicar los siglos, siempre pospuestos al sustantivo: siglo XXI. No deben emplearse con este fin los números arábigos, como en alemán: *siglo 21. • Para indicar las dinastías en ciertas culturas, normalmente antepuestos al sustantivo: los faraones de la XVIII dinastía. • En las series de papas y reyes de igual nombre, siempre pospuestos: Juan XXIII, Felipe IV. • En la denominación de congresos, campeonatos, certámenes, festivales, etc., siempre antepuestos al nombre correspondiente: IV Congreso de Biogenética. Si el número resulta excesivamente complejo, se prefiere el uso de las abreviaturas de los numerales ordinarios: 78.0 Campeonato Mundial de Ajedrez. • En la numeración de volúmenes, tomos, libros, capítulos de una obra: tomo III, capítulo IX, escena VII. Se escriben siempre pospuestos al sustantivo. • Los números romanos usados con valor ordinal no deben escribirse nunca acompañados de letras voladas: *IV.0 Congreso de Bioética. • Para enumerar las páginas de las secciones preliminares de una obra, con el fin de distinguirlas de las del cuerpo central: Las advertencias de uso comienzan en la página XIII. • Para indicar el mes en la expresión abreviada de las fechas: 13-XII-1999. Hoy es habitual el uso de números arábigos. LECTURA DE LOS NÚMEROS ROMANOS • Los números romanos se leen reproduciendo el numeral ordinal correspondiente: IV Jornadas de Sociología (cuartas jornadas...). • Si el número es muy complejo, puede también leerse como cardinal: LXXVIII Congreso Nacional de Mutualistas (septuagésimo octavo congreso... o setenta y ocho congreso...). • Cuando se usan como identificadores, para referirse a algo que forma parte de una serie, los números romanos se leen únicamente en como cardinales: la N-II(la ene dos o la nacional dos). • En otros contextos de uso, su lectura es la siguiente: • Cuando indican año, se leen como cardinales. No obstante, hasta el diez pueden leerse también como ordinales: MDCCXXI (mil setecientos veintiuno); año II (año dos o año segundo). • Cuando indican siglo, del I al X se leen como cardinales o como ordinales, con preferencia por estos últimos: siglo II (siglo dos o siglo segundo); pero del siglo XI en adelante solo es normal su lectura como cardinales: siglo XI (siglo once). • En las series de papas y reyes del mismo nombre, se leen como ordinales hasta el diez (aunque también se admite el cardinal): Enrique VIII (Enrique octavo), Alfonso X (Alfonso décimo o Alfonso diez); y como cardinales a partir de diez: Luis XV (Luis quince). GRACIAS