Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
En algunas ocasiones estas deformaciones son elásticas, es decir, una vez que
dejan de actuar las fuerzas sobre el cuerpo, éste, recupera su forma y dimensiones
iniciales. En otras ocasiones las deformaciones son permanentes y los cuerpos
no vuelven a su estado inicial.
Se dice que un cuerpo puede resistir unas determinadas cargas cuando dicho cuerpo no
se rompe por la acción de éstas. Sin embargo estas cargas pueden producir
deformaciones en el cuerpo que hacen que su trabajo dentro de una estructura no sea el
adecuado. Es aquí donde entra el concepto de rigidez. Un cuerpo será más rígido
frente a determinadas fuerzas cuanto menos se deforma. Para que un cuerpo se
considere rígido este no debe deformarse ante las fuerzas que actúan sobre él o que su
deformación sea tan pequeña que no impida que el cuerpo realice el trabajo para el que
está construido.
Por ejemplo una viga de un puente se puede deformar, pero su máxima deformación no
debe impedir que la gente pase por el puente. Si es así la viga es rígida.
Además, una estructura debe ser resistente, es decir que cada elemento de la
estructura sea capaz de soportar el esfuerzo al que se va a ver sometido. El tamaño y
la forma de cada elemento es lo que hará que soporten los esfuerzos. Esto está muy
relacionado con los perfiles con los que se construyen las vigas y los pilares.
Momento repartido:
En cuanto a su geometría, podemos clasificar las formas estructurales de acuerdo con el
siguiente esquema:
Con una dimensión mucho mayor que las otras dos:
Barras rectas :Vigas, Pilares, Ejes, y Barras de Armaduras
Vigas curvas, Vigas de sección variable
Arcos
Cables
Con una dimensión mucho menor que las otras dos:
Membranas, Placas, y Láminas
Forma general
Frecuente en nudos y uniones entre los elementos anteriores, y en muchos elementos de
máquinas (bielas, cigüeñales...)
La forma de barra recta es la más ampliamente utilizada en las estructuras de todo tipo, y
será a la que prestemos especial atención en este curso. Su geometría es la engendrada
por una superficie plana que llamaremos “sección” o “perfil” de la barra, al desplazarse
a lo largo de un segmento de recta perpendicular a ella, que llamamos “directriz” de la
barra. Entendemos por viga (fig 1.1a) aquella barra que está sujeta en algunos (pocos)
puntos, y que soporta cargas transversales a ella, situadas en otros puntos. Por pilar (fig
1.1b) entendemos aquella barra que soporta cargas fundamentalmente longitudinales
con su eje. Frecuentemente se reserva el calificativo de pilar para las barras verticales
de las construcciones de edificación, que suelen trabajar de la manera indicada, en
concreto a compresión (no a tracción). Las “armaduras” (fig 1.1e) son estructuras
metálicas de barras muy ligeras y esbeltas, como las que suelen formar el cuerpo de las
grandes grúas (para obra civil o urbana, portuarias, etc), y los esqueletos resistentes de
las cubiertas de muchas naves industriales, polideportivos, etc. Las barras de las
armaduras, por cómo están diseñadas y montadas, en general sólo admiten cargas
longitudinales con la propia barra, siendo en ese sentido parecidas a los pilares. Pero
por una parte, estas barras para armaduras suelen ser mucho más esbeltas, y por otra
parte pueden trabajar a tracción o a compresión. Su gran esbeltez las hace
especialmente propensas a sufrir fenómenos de inestabilidad, y su montaje y puesta en
servicio difiere mucho del de los pilares, por lo que se estudian por separado.
Las vigas curvas se utilizan generalmente debido a exigencias de la funcionalidad
que debe prestar el elemento resistente, aunque en ocasiones obedecen a criterios
estéticos. Algunos semáforos de tráfico, cuyo soporte tiene directriz curva,
constituyen un ejemplo sencillo de viga curva. La exigencia de funcionalidad es, en
este caso que las luces del semáforo cuelguen del centro de la carretera sin que el
soporte obstaculice el tráfico.
Una viga de sección variable se proyecta generalmente con la intención de
aprovechar mejor el material. La idea básica es poner sección más gruesa donde la
solicitación va a ser mayor. La ejecución de una viga de sección variable es más
complicada -y por lo tanto cara-, que una de sección constante. Este es un factor que
puede contrarrestar fácilmente el ahorro de material, y que debe ser sopesado al
considerar elementos de este tipo.
Una viga de sección variable se proyecta generalmente con la intención de
aprovechar mejor el material. La idea básica es poner sección más gruesa donde la
solicitación va a ser mayor. La ejecución de una viga de sección variable es más
complicada -y por lo tanto cara-, que una de sección constante. Este es un factor que
puede contrarrestar fácilmente el ahorro de material, y que debe ser sopesado al
considerar elementos de este tipo.
Un arco tiene una geometría similar a la de una viga curva, por lo que conviene
enfatizar la diferencia entre ambos: el arco tiene su curvatura y sus apoyos
diseñados de modo que, para el estado de carga previsto, trabaje a compresión en
todos sus puntos. Esto permite realizar arcos en materiales que no resisten tracción,
como pueden ser la piedra o el hormigón, e incluso formar el arco con piezas que
no presenten cohesión entre sí (sillería). Por el contrario, en una viga curva se
cuenta con que habrá tracción en muchos de sus puntos. Es evidente que el diseño
de un arco debe ser especialmente cuidadoso, ya que la aparición indeseada de
tracciones puede arruinar fácilmente el arco. Muchas catedrales góticas y románicas
tienen magní- ficos ejemplos de arcos realizados en piedra
Los cables (fig 1.1d), al contrario que los arcos, no pueden soportar otra cosa que no
sea tracción. Su geometría se adapta de forma natural a las cargas para que ello
resulte así. En estructuras convencionales, el cable suele usarse en forma de tirante,
es decir para intentar mantener la distancia entre dos puntos de la estructura que de
otro modo tenderían a separarse entre sí. En esos casos el cable recibe las acciones
por sus extremos, y adopta una geometría recta.
Una membrana puede entenderse como “un cable con una dimensión más”: no
presenta resistencia a ser doblada y no puede soportar compresiones (al igual que
el cable). Un ejemplo familiar de membrana es la tela que forma un globo
aerostático. En estructuras habituales, las membranas son escasamente usadas como
elemento resistente
Una placa (fig 1.1c) puede entenderse “como una viga recta con una dimensión
más”. Al igual que las vigas, presenta resistencia a ser curvada, y típicamente está
sustentada en algunos puntos mientras soporta acciones transversales a la placa en
otros puntos. Un ejemplo familiar de placa es el tablero de una mesa, o también la
plancha de acero que se suele poner en las calles sobre una zanja (realizada
normalmente para operaciones de mantenimiento), para que puedan continuar
pasando vehículos por encima. El suelo (“forjado”) entre plantas de un edificio no
es un buen ejemplo de placa, debido a su construcción con vigas y direcciones
preferentes (“forjado unidireccional”). Un suelo construido a base de un
emparrillado de vigas (“forjado bidireccional”) podría asimilarse más a una placa.
Una lámina puede entenderse “como una viga curva con una dimensión más”. Tiene
en común con las placas todas sus características, salvo que su geometría no es
plana sino alabeada. El típico ejemplo de lámina lo constituye la chapa de la
carrocería de un automóvil bajo la carga aerodinámica, o bajo la acción accidental
de un peso (una persona apoyada o sentada sobre la chapa, etc).
Isostáticas:
Son aquéllas en las que pueden obtenerse sus reacciones y las leyes de esfuerzos
únicamente utilizando las ecuaciones de equilibrio.
Hiperestáticas:
Para obtener las reacciones y las leyes de esfuerzos son precisas, además de las
condiciones de equilibrio, tantas condiciones de compatibilidad de movimientos
como grados de hiperestatismo existan.
Si GH = 0, la estructura es isostática.
Mecanismos:
Se producen cuando la estructura colapsa (GH < 0).
En ESTÁTICA los cuerpos son RÍGIDOS