AIRE ACONDICIONADO

• Los egipcios, como en tantos ámbitos, también fueron

pioneros en el acondicionamiento del clima. Durante las
noches los esclavos retiraban los muros falsos de piedra del
palacio del faraón y los llevaban al desierto del Sahara,
donde las temperaturas descienden de modo extremo en la
madrugada. Los dejaban horas allí, hasta que se enfriaran, y
antes del amanecer volvían a ponerlos en su sitio. Se supone
que los recintos faraónicos se mantenían a 26°C mientras en
el exterior la temperatura ambiente era casi el doble. El
acondicionamiento moderno del aire apareció en el siglo
XIX, cuando Lord Kelvin creó un circuito frigorífico hermético
basado en la absorción del calor a través de un gas
refrigerante. En 1902 el estadounidense Willis Carrier diseñó
un aparato que controlaba la temperatura y la humedad
ambiental mediante un sistema de tubos enfriados. Había
surgido el primer aparato de aire acondicionado en la
historia, y Carrier recibió el patente correspondiente en
1906. Este invento básico, al que se le hicieron cambios y
transformaciones a lo largo de un siglo, hizo posible el
desarrollo de muchas regiones tropicales y desérticas del
mundo.
 VELA
• Aunque sus usos son ahora reducidos, en una época las velas fueron la principal fuente
de iluminación artificial disponible en el mundo. Sus primeros antecedentes
aparecieron en distintas culturas. Los egipcios desarrollaron las suyas sumergiendo
juncos secos en grasa animal para realizar después el proceso de combustión. Los
romanos las preparaban sumergiendo papiro enrollado en sebo animal o cera de abeja
derretidos. Se sabe también que los chinos las elaboraban con papel de arroz y
obtenían la cera de un insecto local combinado con algunas semillas. Ya en tiempos
bíblicos las velas tenían un importante uso ceremonial, como podemos constatarlo en
diversos pasajes del Antiguo Testamento. Durante siglos las velas fueron elaboradas con
sebo, hasta que en la Edad Media aparecieron en Europa las primeras hechas con cera
de abeja, que se quemaban de manera más uniforme, producían una flama más limpia
y despedían un olor agradable, así superaban todos los inconvenientes del sebo. Fue el
material principal hasta el sigo XIX, cuando las desplazó un derivado del esperma de
ballena que producía una luz más brillante y una cera más resistente a las condiciones
ambientales. En el siglo XIX también hubo los recursos industriales para fabricar velas
en grandes cantidades y se introdujo un nuevo material, la parafina, derivado del
petróleo, de la que están hechas la mayoría actuales. Sin embargo, en las últimas
décadas de ese siglo, cuando la elaboración se había perfeccionado, apareció la
ampolleta eléctrica, que las desplazó de modo significativo.
LUZ ELÉCTRICA
• Por varios siglos, para iluminar los hogares se utilizaron lámparas cargadas con diversos
combustibles: sebo, cera de abeja o aceite de pescado, de oliva y de otras plantas como
sésamo y nuez. En el siglo XIX se uso carbón y derivados del petróleo entre ellos el
kerosén y el gas, este ultimo fue empleado para el alumbrado publico hasta entrado el
siglo XX. En 1809 el inventor inglés Humphry Davy diseño el modelo primitivo de una
lámpara eléctrica con filamentos de carbono, sin embargo, su modelo y otros que le
sucedieron solo eran funcionales bajo condiciones de laboratorio. Transcurrió casi un
siglo antes de que, en 1879, el célebre Thomas Alva Edison patentara la primera lampata
incandescente comercialmente viable, cuyo modelo predominó en las casas hasta la
aparición de los focos ahorradores. Aunque los inventores Henry Woodward y Matthew
Evans, de Toronto, habían conseguido una tecnología semejante, el proyecto de Edison
contó con el respaldo de inversionistas industriales que aportaron un capital de 50.000
dólares. En los años que surgieron, hizo mejoras a su diseño original, como la
introducción de filamentos derivados del bambú que prolongaban la vida útil de su
lámpara hasta 1.200 horas. A comienzos del siglo XX otros investigadores desarrollaron
los filamentos de tungstonm que resultaron ser los mejores para producir luz. William
David Coolidge perfeccionó la tecnología, logró reducir los elevados costos iniciales e hizo
que este material dominara el mercado.
 ASPIRADORA

• En el curso de varios siglos las casas se han limpiado con escobas, un implemento
doméstico aún vigente cuyos antecedentes más remotos se ubican en el siglo V a.c., y
que en los mitos ha sido relacionado con el transporte de las brujas. En realidad su
utilidad para las tareas de aseo es ilimitada; en buena medida solo traslada el polvo de
una zona de la pieza a otra. La idea de literalmente extraer la suciedad y retirarla
supondría después un cambio de paradigma: la primera aspiradora fue patentada por
Daniel Hess el 10 de junio de 1860. Habitante de West Union, lowa, llamó a su invento
“una barredora de alfombras”; consistía en un cepillo rotatorio, lo cual no era novedoso,
pero contaba con un mecanismo en la parte superior para succionar el polvo y basura. Lo
más sorprendente de su diseño es que tenía dos cámaras de agua para capturar las
partículas más finas. Al parecer el modelo no llegó a producirse de manera comercial,
como ocurrió con otros prototipos más o menos contemporáneos que eran pesados,
voluminosos y difíciles de manejar. En 1899 John S. Thurman dio a conocer el primer
modelo con motor, que funcionaba mediante combustión de gasolina. No logró venderlo,
pero él ofrecía servicios de aseo de puerta en puerta. En 1901 apareció la primera
aspiradora de motor eléctrico, y en 1908 el primer modelo portátil, patentado por James
Murray Spangler. A partir de esos avances se desarrollaron las aspiradoras que hoy
conocemos.
PLANCHA
PASTO
• Una casa rodeada de pasto verde y bien recortado es, para muchos, el símbolo de
bienestar al estilo estadounidense. La imagen se complementa con la presencia
de un hombre de edad madura, generalmente jubilado, que lo corta con cuidado
y aprovecha para hacer algunos otros trabajos de jardinería. Estos espacios
verdes surgieron en la Edad Media, como zonas separadas de pastura para el
ganado; en la etapa posterior fueron el elemento distintivo de las grandes
casonas señoriales, y en el siglo XVIII adquirieron carácter como espacios de
interacción social para familias y amistades. La jardinería evolucionó como arte
decorativa y encontramos ejemplos en los castillo de Gran Bretaña y Francia. El
1830 Edward Berad Budding inventó la pandora inspirada en los avances de la
Revolución Industrial, y con ella el pasto o césped recibió un nuevo manejo, más
uniforme y regular. Con los desarrollos inmobiliarios edificados después de la
Segunda Guerra Mundial, adquirió gran importancia en miles de hogares de los
suburbios estadounidenses y en áreas habitacionales de otros países, como los
fraccionamientos residenciales en diferentes ciudades de Chile.
IMPERMEABILIZACIÓN
• Los techos de las antiguas construcciones eran impermeabilizados con un
complejo sistema que involucraba distintos materiales y era cubierto con
una solución alumbre, compuesto mineral que se disolvía con calor y
distribuía por la techumbre para evitar el paso del agua. Con la revolución
Industrial y la extracción del petróleo comenzaron a inventarse nuevos
materiales que revolucionaron el mercado. Uno pionero fue el alquitrán,
mezcla de petróleo crudo y amoniaco que comenzó a emplearse como
capa protectora de los techos de hormigón, ya en el siglo XX. A partir de el
se crearon las primeras membranas protectoras combinadas con cartón
asfáltico, y en las décadas de 1970 y 1980, a partir de las investigaciones de
la NASA en el marco de la carrera espacial, empezó a usarse la membrana
de fibra de vidrio como asiento para otras combinaciones a base de
petróleo. La industria petroquímica continúa en el desarrollo de materiales
cada vez más durables y resistentes a los cambios de temperatura y
factores como la lluvia ácida.
CAFETERA
• La primera cafetera de la historia fue elaborada en 1818 por un parisino
identificado como Monsiur Laurens. En la capital francesa la bebida se
había puesto de moda. Era una cafetera con filtro, con sistema para
calentar el agua, hacerla subir a un compartimiento e irrigar el café
previamente tostado y molido que se depositaba en él. Los modelos
basados en este principio se mantuvieron vigentes a lo largo del siglo XIX e
inicios del XX. En 1908 un ama de casa común llamada Melia Bentz,
cansada de lavar las bolsitas de tela, inventó su propio sistema para
prepara café mediante un filtro de papel. Cuando tuvo el papel perfecto,
comercializó su invención y en ese mismo año ella y su marido Hugo Bentz
fundaron la compañía Melitta Bentz que, para comenzar, vendió 1.200
equipos. Por su parte, la cafetera para preparar espresso siguió un
desarrollo independiente; fue inventada en 1822, también por un francés
llamado Louis Bernard Rabaut. Aquel equipo inicial, como todos los que
surgieron, usaba vapor de agua para extraer el sabor del café molido.
CUCHILLO
• Ya desde el Neolítico nuestros antepasados advirtieron la necesidad de
cortar sus alimentos en porciones mas pequeñas. Para ello afilaban piedras
y palillos o se valían de cuernos de animales y conchas de moluscos. El
cuchillo empezó a cobrar forma como implemento primario para comer, y
al inicio se elaboró de piedra, luego de bronce y, hacia el año 1000 a.c., de
hierro, con lo que inició un proceso evolutivo hasta ser parte fundamental
en los hogares. En la Europa medieval los cuchillos eran signos de lujo y
poder para reyes y señores feudales, que mandaban a hacer piezas de
metal muy elaboradas. Cuando recibían la visita de otro señor importantes,
se esperaba que llevaran su propio juego de cuchillos. Los primeros
cuchillos de mesa terminaban en punta, para que la gente ensartara la
comida. Así, era común que sus usuarios se lastimaran el paladar. En 1637
el cardenal Richelieu ordenó que fabricaran un modelo romo y desde
entonces los cuchillos de mesa son así.
CUCHARA
• Nadie sabe con exactitud cuándo se usó la primera cuchara. Sin embargo,
se han hallado implementos de este tipo con fines religiosos u
ornamentales en Egipto, mil años antes de Cristo. Hechas de diversos
materiales estaban en posesión de los faraones y sacerdotes egipcios, y sus
diseños podían ser muy ricos. Por otro lado, la gente común acostumbraba
usar como cucharas conchas marinas de molusco o cuernos ahuecados de
algún animal. En la Edad Media el uso de la cuchara comenzó a
generalizarse. En el siglo XV las cucharas elaboradas de madera fueron
reemplazadas por versiones metálicas, especialmente en los círculos de
personas acaudaladas. La mención más temprana de ese implemento en
Inglaterra es de 1259, como parte del inventario de las posesiones del rey
Eduardo I. El diseño la cuchara presentó numerosos cambios hasta adquirir
su aspecto actual a finales del siglo XVIII.
TENEDOR
• Los tenedores existen desde la antigua Grecia, quizá adoptados de Oriente
Medio. Sin embargo, tardaron bastante en integrarse a las mesas europeas.
Se supone que la princesa bizantina Anna Doukaina, quien se casó con el
dogo de Venecia en 1075, introdujo su empleo en Italia. Procedente de una
corte esplendida, se disgustó al ver la decadencia de la corte de Venecia, en
la que la gente comía con pésimos modales y sin normas de cortesía o
higiene. Al parecer fue ella quien hizo adoptar el uso de la servilleta y de un
pequeño recipiente con agua para enjuagarse las manos. En 1533, cuando
Catalina de Médici contrajo matrimonio con Enrique II, trajo consigo un
juego de tenedores desde Florencia. Reacios a aceptar lo que consideraban
una mera afectación italiana, los cortesanos franceses siguieron con sus
hábitos de comer con la manos y el cuchillo. El tenedor se hizo respetar
solo hasta el siglo XVII, cuando el rey Carlos I de Inglaterra declaró que: “Es
decente usar tenedor”. A partir de entonces el empleo de esa herramienta
se hizo cada vez mas común.
TOSTADORA
• Hasta inicios del siglo XX era común que se quemara el pan tostado a la
plancha. Durante la Primera Guerra Mundial Charles P. Strite, mecánico de
una planta de Stillwater, Minnesota, pensó en un recurso para evitar el
molesto requisito de la atención humana constante: diseñó una tostadora
con temporizador integrado (para calcular el tiempo que el pan debía
permanecer en ella) y un sistema de resortes que expulsaba la rebanada
una vez que estaba lista. El 29 de mayo de 1919 entregó los documentos
necesarios para solicitar la patente, pensando el gran potencial que su
invento podría tener en los restaurantes. Menos de una década después, el
y sus competidores ya estaban patentando sus modelos ideados para el
hogar. En 1926 el Toastmaster, basado en el diseño de Strite, fue el pionero
de una nueva generación de aparatos eléctricos de cocina. En la década de
1930, cuando comenzó a venderse el llamado “Pan de molde”, el tamaño
estándar de las rebanadas facilitó la tarea e hizo de la maquina tostadora
un recurso imprescindible dentro de la cocina.
PROCESADORA DE ALIMENTOS
• La idea de crear un aparato multifuncional que apoyara a las personas
que cocinan en tareas básicas como cortar, picar y rallar surgió en la
segunda mitad del siglo XX, cuando se pensaba que los robots
disminuirían la carga de trabajo. En la década de 1950 Pierre Verdun,
empleado de una empresa dedicada a la preparación de banquetes y
servicios de alimentación, concibió el modelo inicial: un cuenco con
una cuchilla giratoria en el fondo. En 1960 la idea evolucionó en el
modelo Robot Coupé, el primer robot comercial para la industria de
los alimentos. Fue a partir de los años 70 cuando se integró a las
cocinas de Estados Unidos.
ABRELATAS
• En 1810 el comerciante británico Peter Durand presentó, por primera vez,
la comida enlatada, hecho que marcó un hito en la historia de la industria
de los alimentos. Desde entonces, a lo largo del siglo XIX esta forma de
envasarlos se hizo cada vez más común y el procedimiento se perfeccionó
en plena época dela Revolución Industrial gracias al progreso obtenido. En
la Guerra de Secesión de Estados Unidos(1861-1865) los soldados ya
llevaban parte de sus provisiones en latas. Abrirlas no resultaba una tarea
sencilla y era común recurrir al cuchillo. En 1866 J. Osterhoudt patentó las
ingeniosas latas de sardinas que traen su propia llave y están listas para
abrirse. Hacía falta, sin embargo, un abrelatas universal. En 1870 William
Lyman patentó el modelo básico, que corta alrededor de la orilla de lata. Su
versión se ajustó y perfeccionó en las décadas siguientes(incluso se sigue
haciendo hasta la fecha) y halló un hito con el lanzamiento al mercado del
abrelatas eléctrico, en 1931.
SERVILLETAS
• Los antiguos romanos ya las usaban y las llamaban sudaria, en latín; sin
embargo, su plena difusión en Europa tomó varios siglos. La gente seguía la
costumbre de los griegos, que se limpiaban la boca con costras de pan duro
o con migas de pan, tal y como lo siguen haciendo muchos comensales
que, según las normas comunes de etiqueta, no tienen tan buenos
modales. Otros recursos para limpiarse la boca eran las mangas de la
propia ropa o la mano. Cuando el uso de las servilletas se adoptó de forma
general, estas eran de tela y aparecieron en distintos tamaños: uno
especial para limpiar la boca y otros para evitar que la ropa se manchara o
suplicara durante los banquetes. En cuanto a las versiones de papel, se
sabe que surgieron en China, donde ese material se inventó alrededor del
siglo II a.c. Las servilletas de papel se conocían como chih pha, se doblaban
en forma cuadrada y se empleaban para servir el té.
PLATO
• Pocos implementos pueden disputar al plato preponderante que tiene en
el manejo de los alimentos. Los primeros que se conocen datan de la
cerámica prehistórica en Europa, y están hechos de un barro
característico(gris, negruzco o rojo ennegrecido). Mientras algunos son
lisos, otros llevan dibujos geométricos, unos son planos y otros tienen la
forma de cuencos. A veces están pintados con alguna sustancia vegetal, en
otras tallados: En el Neolítico, el proceso de decorativo fue cada vez más
elaborado: se han hallado platos con dibujos lineales o geométricos hechos
con incisiones que a veces se rellenaban con pastas de otro color. Algunos
investigadores han puesto en duda la inclusión de platos en la vajilla
domestica hasta antes de la Edad Media, y se presume que la familia comía
de un recipiente común. A partir del Renacimiento el uso de platos se
extendió en la mesas de Europa y se crearon elaboradas vajillas que
llegaron a tener cientos de piezas.
COCINA
• Su importancia sobrepasa la de cualquier otro mueble o instrumento. La
cocina es el centro mismo de la casa y el elemento que hace posible la
preparación de los alimentos. Su historia avanza por siglos. En el XVII se
crearon los primeros modelos de ladrillo para los hogares. En el XVIII ya
había cocinas de hierro que usaban leña y servían también como
calefactores. En el XIX ya se empleaban para cocinar y eran complejos
equipos provistos de tubos de escape. Fue en ese entonces cuando James
Sharp produjo la primera cocina que utilizaba gas propano, invento que no
prosperó por la toxicidad del combustible. A finales de ese siglo los
inventores británicos R.E. Crompton y J.H. Dowsing dieron a conocer la
primera cocina eléctrica para uso domestico, pero en el xx, gracias al mejor
conocimiento y el manejo mas eficiente de los derivados del petróleo, la
cocina a gas cobró la importancia que en la actualidad tiene.
LICUADORA
• Las dueñas de casa consideran que la licuadora es uno de los recursos mas
útiles disponibles en la cocina. No solo aligera el trabajo a la hora de
preparar los alimentos, también permite que estos se digieran mejor. Hasta
inicios del siglo XX quienes cocinaban, usaban para moler su propia fuerza,
recurriendo a diversos dispositivos según el contexto cultural, como el
mortero. Stephen J. Poplawski, un ciudadano estadounidense de origen
polaco, concibió la idea de triturar los alimentos con la ayuda de un motor
eléctrico y, en 1922, tras casi una década de realizar experimentos, patentó
lo que llamó “batidora de vaso”. Su idea, al parecer, no era tanto moler
alimentos, sino combinarlos a partir de un elemento agitador montado en
el fondo del recipiente. Al principio lo promovió para la preparación de
batidos, pero en las décadas que surgieron otros inventores colocaron
aspas en el fondo, en vez del agitador, un recurso que sentó las bases para
todos los desarrollos posteriores de este tipo.
HORNO DE MICROONDAS
• Muchas personas aún se resisten a usarlo por sus presuntos riesgos a la
salud, pero el horno microondas ha transformado el trabajo en las cocinas
comerciales y domesticas, sobre todo en las tareas de recalentado. Su
origen es producto de un hallazgo casual. En 1945 Percy Spencer, un
ingeniero de Howland, Maine, colaboraba en la compañía Raytheon
investigando la tecnología para transmisores de radar basados en
microondas. Durante una sesión de trabajo descubrió que una barra de
chocolate Mr. Goodbar que llevaba en el bolsillo comenzaba a derretirse
por efectos de las microondas. En ensayos posteriores verificó los efectos
de estas sobre un huevo y el maíz. En octubre de ese mismo año su
compañía patentó el procedimiento y en enero de 1947 ya se había
instalado un modelo para la venta de hot-dogs en la estación Grand Central
de Nueva York. Poco después salió al mercado Radarange, el primer
modelo comercial de microondas que pesaba casi 340 kilogramos.
ETIQUETA
• Aunque no se limita a la mesa y a la hora de comer, en ese espacio y en ese
momento cuando la etiqueta o buenos modales se pone más a prueba, con
algunas normas elementales(no masticar con la boca abierta) y otras de
una enorme complejidad que ahora han caído en desuso. Algunas de las
mas simples surgieron durante el Neolítico, con el único propósito de
facilitar y hacer más elaboradas, mismas que pueden llenar grandes
manuales, se diseñaron en las cortes francesas entre los siglos XVII y VVIII,
al parecer porque los nobles se aburrían y buscaban medios cotidianos
para entretenerse. Tales códigos de conducta(muchos de ellos sin mayor
sentido que el mero capricho) se difundieron en otras naciones europeas y,
en general, en el mundo occidental, donde se consideraba a Francia es
estándar de la moda.
FÓSFOROS
• Hoy basta con frotar un fósforo contra una superficie que permita la
fricción para tener en las manos el fuego mismo. Se tiene noticia de que los
chinos ya los conocían-considerados uno de los grandes avances de la
humanidad-alrededor del año 950 pero, como ocurre con muchos otros
hallazgos, el proceso de descubrimiento en el mundo occidental siguió un
paso diferente. El alquimista alemán Hennig Brandt los inventó por
accidente en el siglo XVII y el químico Robert Boyle elaboró los primeros
creados a propósito con fósforo, papel, madera y sulfuro. Fue en el siglo
XIX cuando John Walker, un farmacéutico de Stockon-on-Tees, Gran
Bretaña, dio a los fósforos una forma semejante a la que conocemos hoy. El
principal problema de esos fósforos y los que les sucedieron era la
combustión accidental. En 1844 el sueco Gustaf Erick Pasch elaboro los
primeros fósforos de seguridad, separando los ingredientes reactivos para
evitar quemaduras