La ciática es una Inflamación dolorosa del

nervio ciático el cual se inicia en la porción

terminal de la médula espinal y se dirige hacia
los músculos de las nalgas, muslos, piernas y
pies.

La ciática, o neuritis ciática, es más frecuente

en los hombres que en las mujeres. Suele
afectar a personas de edad comprendida
entre los 30 y los 50 años que efectúan
esfuerzos físicos importantes.
Es frecuente que la ciática derive de un
traumatismo en la columna vertebral o de un
movimiento muy violento, susceptibles ambos
de producir una hernia discal, es decir, el
desplazamiento de cualquiera de los discos
cartilaginosos que hay entre las vértebras.

Cuando esto sucede, tiene lugar una

compresión del nervio que sale de la médula
en la zona correspondiente al disco
desplazado; el tramo de la columna vertebral
más afectado por la hernia discal es el lumbar
y, a menudo, el nervio atacado es el ciático.
La ciática también puede ser debida a
enfermedades inflamatorias y tumorales de la
columna vertebral, o a cualquier otra
circunstancia que irrite el nervio ciático en su
recorrido.
Los síntomas más comunes son el dolor en
la zona inervada por el ciático. Es unilateral
y suele comenzar en la nalga, descendiendo
por la cara posterior del muslo, cara externa
de la pierna y pie, hasta el dedo gordo. La
intensidad del dolor varía según las
características de la afección, pero se
incrementa con la tos, los esfuerzos
excesivos para defecar y el movimiento del
tronco y las extremidades.
La mostaza ha sido empleada desde hace
mucho tiempo como un alimento curativo en
el caso de la ciática.

Su aplicación es externa mediante la

colocación de una cataplasma caliente de las
hojas, pero también se puede usar su jugo
para el consumo interno con el fin de reforzar
este remedio.
El ajo es otro alimento curativo utilizado para
aliviar no sólo la ciática sino también los
dolores de oídos, estómago, dientes,
articulaciones, y los asociados con la artritis,
el reumatismo y la bursitis.
 Preparación

Ingredientes #1 Ponga la manzana, el apio, el pepino,

el pimiento morrón y el ajo uno a la
1 manzana partida en vez en el exprimidor y procéselos.
octavos Sirva en un vaso y agite bien. Tomar
2 tallos de apio partidos en este jugo a diario y dos veces al día
trozos de 5 a 7 cm
cuando se sufre de dolor de ciática.
1/2 pepino picado o en
rebanadas largas
1/4 pimiento morrón
partido a la mitad
1 diente de ajo
 Preparación

Ingredientes #2 Ponga la mitad de las

zanahorias, del apio, del
2 zanahorias partidas en camote, del perejil y del
trozos de 5 a 7 cm
ajo en el exprimidor;
1 tallo de apio partido en
trozos de 5 a 7 cm
después el pepino y los
1/2 camote pequeño, picado tomates y enseguida la
8 ramitas de perejil, otra mitad de los
1 chile rojo, ingredientes. Procéselos.
1 diente de ajo Sirva en un vaso. Tomar
1/2 pepino en rebanadas o a diario
picado,
2 tomates
 Preparación.

Licuar todos los ingredientes. Es

importante observar que se
Ingredientes #3 agrega el melocotón, el kiwi y
unas cuantas manzanas dulces
2 manzanas para suavizar el gusto picante e
1 kiwi pelado incorporar una dosis de vitaminas
2 tazas de hojas de y antioxidantes. Tomar a diario.
mostaza parda cortadas Si se está sufriendo el dolor de
2 ramas de apio ciática, beber 2 veces al ´día
1 melocotón
deshuesado
Ejercicio para aliviar la ciática
#1:

Echado de espaldas, con las

rodillas dobladas y los pies
apoyados en el suelo, sujetar
con ambas manos una rodilla y
elevarla hasta el pecho. Repetir
el ejercicio con la otra pierna y
luego con ambas piernas a la
vez.
Ejercicio para aliviar la ciática
#2:

Echado de espaldas, con las

rodillas dobladas y los pies
apoyados en el suelo, apretar
la espalda contra éste,
contrayendo el abdomen y las
nalgas. En la misma posición,
contraer y levantar las nalgas
del suelo.
Ejercicio para aliviar la
ciática #3:

Echado de espaldas, con las

rodillas dobladas y los pies
apoyados en el suelo,
levantar la cabeza y los
hombros, flexionando el
tronco hacia delante.
Ejercicio para aliviar la ciática #4:

De pie, flexionar las rodillas e inclinar el

tronco hacia delante hasta tocar el suelo
con las manos.

Estos ejercicios deben realizarse sobre una

superficie plana y dura, sin brusquedad ni
forzando ningún movimiento si se nota alguna
molestia. La gimnasia ha de practicarse
diariamente, de manera prolongada y regular,
sin llegar nunca al cansancio exagerado.
Dormir en cama dura

No agacharse doblando la cintura, sino las rodillas.

No acarrear objetos pesados; en caso de tener que

hacerlo, sostener objetos próximos al cuerpo.

Evitar movimientos exagerados de la región

lumbar,

Evitar cualquier gesto brusco, incluso al

incorporarse o al acostarse
Elaborar un colchón interno. Comprar en la
farmacia o en una tienda de artículos ortopédicos
un soporte elástico para la espalda que se ciña a su
cintura. Éste empuja su abdomen hacia adentro, lo
que produce un cojín interno de aire que calma y
protege los nervios alrededor de su columna
vertebral.

Estirarse cada 30 minutos. El movimiento aumenta

la circulación y reduce la inflamación ligada a
algunas zonas dañadas, por ejemplo los discos. No
se quede sentada ratos largos si tiene ciática. Será
suficiente con que se ponga de pie un rato.
Dar un paseo cada hora. Dar un paseo breve
cada hora también acelerará la curación.
Hasta hace unos años, los médicos solían
recomendar reposo absoluto durante unas
dos semanas para la ciática, pero un estudio
realizado en Maastricht dirigido por el Dr.
PC. Bromen, descubrió que "en los
pacientes con síntomas y signos de
síndrome radicular lumbosacro, el reposo
en cama no es más efectivo que el reposo
relativo. En la investigación participaron
183 pacientes.
Acudir al doctor, si el dolor de ciática dura más
de cuatro semanas. Es raro, pero si el problema
fuera por un disco herniado, la especialista le
recomendará una inyección de cortisona o la
cirugía para aliviar la presión sobre el nervio.
Cabe señalar que un quiropráctico y otro tipo de
especialista jamás deben manipular la espina
dorsal cuando se tiene dolor de ciática. Esto
empeorará el problema. También tenga mucho
cuidado con los masajes, pues contribuirán a la
inflamación acentuarán los síntomas en lugar de
aminorarlos,