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Diagnóstico de daños producidos por componentes no estructurales de

viviendas en zonas sísmicas.


• ¿Qué son zonas sísmicas?
El Ecuador se divide en seis zonas sísmicas. Todo el territorio ecuatoriano está
catalogado como de amenaza sísmica alta, con excepción del nororiente que
presenta una amenaza sísmica intermedia y del litoral ecuatoriano que presenta
una amenaza sísmica muy alta.

• ¿Qué son elementos estructurales?


Conjunto de elementos estructurales ensamblados para resistir cargas verticales,
sísmicas y de cualquier otro tipo. Las estructuras pueden clasificarse en estructuras de
edificación y otras estructuras distintas a las de edificación (puentes, tanques, etc.).

• ¿Cuáles son los componentes no estructurales?

• Las investigaciones básicas no suelen tener mucha difusión, aunque nuestras vidas fueran bastante complicadas, si no se investigara sobre temas fundamentales que por lo general la sociedad los
da normalmente por hechos.
COMPONENTES NO ESTRUCTURALES
Según la Norma Ecuatoriana de la Construcción NEC 2015
Sistemas del edificio: Todos los sistemas físicos que comprenden un edificio y sus servicios. Esto incluye
sistemas arquitectónicos, estructurales, mecánicos, plomería, electricidad, protección contra incendios,
transportación vertical (ascensores) y sistemas de seguridad.
Más específicamente los sistemas arquitectónicos incluyen fachadas no estructurales, techos, paredes
divisorias no estructurales, particiones, etc.; sistemas estructurales incluyendo sistemas y fundaciones para
resistencia de fuerzas gravitatorias y sísmicas; sistemas mecánicos de calefacción, ventilación y equipos de
aire acondicionado, ductos, sistemas de control, etc.; sistemas de plomería incluyendo calentadores de agua
domésticos, tuberías, controles, accesorios de plomería, sistemas de aguas residuales, gas natural y gas
propano, aguas lluvias y bombas, etc.; sistemas eléctricos incluyendo interruptores, transformadores,
breakers, cableado, accesorios para iluminación, sistemas emergentes de energía, etc.; y sistemas contra
incendios incluyendo rociadores, sistemas de monitoreo y alarma, etc. Lo que no se incluye como sistemas
del edificio es considerado como contenido del edificio.
Componentes no estructurales: Componentes del edificio que no forman parte del sistema estructural que
resiste cargas verticales y laterales y que tampoco se definen como contenido del edificio.
Contenido del edificio: Instalaciones contenidas en el edificio que no han sido definidas como sistemas
estructurales del edificio. Los ejemplos incluyen equipos instalados por los ocupantes, sistemas de manejo
de materiales, estanterías, muebles, accesorios, máquinas de oficina, equipos de computación, equipos y
maquinarias y bienes personales.
El Ecuador se encuentra ubicado sobre la zona de interacción de las placas tectónicas Nazca (submarina) y Sudamericana
(continental). Este fenómeno debido a un efecto denominado subducción y sumado a la existencia de varias fallas
tectónicamente activas al interior del territorio, es responsable de una permanente actividad sísmica, lo que explica que
entre 1949 y 2016, se hayan producido alrededor de seis eventos destructivos.

Las placas se empujan una con otra y si ese movimiento se


mantuviera constante, para los humanos resultaría
imperceptible, pero en ocasiones suelen quedarse “trabadas”
entre sí, lo que genera tensiones, por lo que al romperse libera
la energía acumulada, produciéndose lo que conocemos como
terremotos.
energía acústica liberada que se propaga a través de un medio (aire), y mediante ondas sonoras llega al oído y se percibe
Cuando se produce la rotura
de placas, las ondas sísmicas
viajan a través de la superficie
y transmiten su energía a los
elementos estructurales, que
en función de su diseño,
disipará dicha energía,
deformándola y por inercia en
sus niveles superiores
generará desplazamientos, en
cambio en los elementos no
estructurales, dependiendo de
su masa y puntos de anclaje
con la estructura, los acelerará
o deformará.
Investigaciones como esta se vienen desarrollando principalmente en los
últimos 40 años, en los Estados Unidos, primero para realizar
recomendaciones para los equipos de las plantas de energía nuclear, pues
el costo, principalmente de los equipos, de estas estructuras es altísimo y
se debe asegurar su operación e imposibilidad de fallas debido a los
riesgos que éstas representaran.
Posterior a eso se fueron aplicando para edificaciones de vivienda, pero
con métodos alternativos más simples, algunos de ellos con una base
fuertemente empírica y otros basados en la aplicación rigurosa de los
principios de la dinámica estructural, para comprender la respuesta
sísmica de los elementos no estructurales, teniendo en cuenta criterios en
función de su forma, del uso que cumplen en la estructura, del tipo de
conexión con la estructura que los soporta y de los estados de daños y sus
repercusiones.
“ZONA CERO”
Manuela Cañizares y Eloy Alfaro

Antes del sismo de Ab. 16/2016 Imagen posterior-sismo


Manuela Cañizares entre Eloy Alfaro y 6 de Diciembre

Antes del sismo de Ab. 16/2016 Imagen posterior-sismo


Manuela Cañizares y Eloy Alfaro

Antes del sismo de Ab. 16/2016 Imagen posterior-sismo


Piedrahita y 6 de Diciembre

Antes del sismo de Ab. 16/2016 Imagen posterior-sismo


Piedrahita y Eloy Alfaro

Antes del sismo de Ab. 16/2016 Imagen posterior-sismo


Los resultados indicaron que:
El 85 % de las viviendas son de uno o dos pisos
El 85 % de ellas son de hormigón armado
Todas sufrieron daños en sus elementos no estructurales por aceleración
(luminarias, electrodomésticos, vajillas, vitrinas, cielos rasos, cuadros y
espejos) y, un 80 % sufrieron afectaciones por deformación (grietas en
paredes).
Ninguno de los encuestados ni sus familiares, resultaron heridos por el
impacto de estos elementos, pero sí tuvieron pérdidas económicas sea
por la reposición de los objetos rotos o por la paralización temporal de sus
negocios ante el daño producido.
Los resultados indicaron que:
El 85 % de las viviendas son de uno o dos pisos
El 85 % de ellas son de hormigón armado
Todas sufrieron daños en sus elementos no estructurales por aceleración
(luminarias, electrodomésticos, vajillas, vitrinas, cielos rasos, cuadros y
espejos) y, un 80 % sufrieron afectaciones por deformación (grietas en
paredes).
Ninguno de los encuestados ni sus familiares, resultaron heridos por el
impacto de estos elementos, pero sí tuvieron pérdidas económicas sea
por la reposición de los objetos rotos o por la paralización temporal de sus
negocios ante el daño producido.
La vulnerabilidad sísmica a la que estamos sometidos, tanto por la interacción de las placas submarina y continental,
así como fallas tectónicas en el interior de nuestro territorio, debería inducirnos a iniciar líneas de investigación en el
comportamiento de los elementos no estructurales, a través del diseño, modelamiento y simulación en mesas
vibratorias, las que nos permitiría reproducir cargas dinámicas de tipo sísmico y con ello calcular sistemas de anclaje
o fijación de componentes no estructurales que son sometidos a las aceleraciones producto de los terremotos.

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