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La oración es nuestra fortaleza y da poder. A través de la oración, los jóvenes pueden hallar gozo, ser refrescados y lograr excelencia moral. La comunión con Dios estimula buenos pensamientos y aspiraciones nobles. Además, la oración prepara para los deberes diarios y provee la fuerza necesaria para resistir tentaciones y vencer al enemigo. Finalmente, la oración secreta como la de Moisés en el monte, habilita para construir el carácter de acuerdo al ideal divino y asegura
La oración es nuestra fortaleza y da poder. A través de la oración, los jóvenes pueden hallar gozo, ser refrescados y lograr excelencia moral. La comunión con Dios estimula buenos pensamientos y aspiraciones nobles. Además, la oración prepara para los deberes diarios y provee la fuerza necesaria para resistir tentaciones y vencer al enemigo. Finalmente, la oración secreta como la de Moisés en el monte, habilita para construir el carácter de acuerdo al ideal divino y asegura
La oración es nuestra fortaleza y da poder. A través de la oración, los jóvenes pueden hallar gozo, ser refrescados y lograr excelencia moral. La comunión con Dios estimula buenos pensamientos y aspiraciones nobles. Además, la oración prepara para los deberes diarios y provee la fuerza necesaria para resistir tentaciones y vencer al enemigo. Finalmente, la oración secreta como la de Moisés en el monte, habilita para construir el carácter de acuerdo al ideal divino y asegura
EN MEDIO de los peligros de estos ltimos das, la nica seguridad
para la juventud est en la vigilancia y la oracin siempre crecientes. El joven que halla su gozo en leer la Palabra de Dios y en la hora de la oracin, ser constantemente refrescado por los sorbos de la fuente de la vida. Lograr una altura de excelencia moral y una amplitud de pensamiento que otros no pueden concebir. La comunin con Dios estimula los buenos pensamientos, las aspiraciones nobles, la percepcin clara de la verdad y los elevados propsitos de accin. Los que as se ponen en comunin con Dios, son reconocidos por l como sus hijos e hijas. Se elevan constantemente obteniendo ms claros conceptos de Dios y de la eternidad, hasta que el Seor hace de ellos conductos de luz y de sabidura para el mundo.(MJ.PAG.144) LA ORACIN DA PODER La fuerza adquirida por la oracin a Dios nos preparar para nuestros deberes cotidianos. Las tentaciones a que estamos diariamente expuestos hacen de la oracin una necesidad. A fin de ser mantenidos por el poder de Dios mediante la fe, los deseos de la mente debieran ascender continuamente en oracin silenciosa. Cuando estamos rodeados por influencias destinadas a apartarnos de Dios, nuestras peticiones de ayuda y fuerza deben ser incansables. A menos que as sea, nunca tendremos xito en quebrantar el orgullo y en vencer el poder que nos tienta a cometer excesos pecaminosos que nos apartan del Salvador. La luz de la verdad que santifica la vida, descubrir al que la recibe las pasiones pecaminosas de su corazn que se esfuerzan por tener el seoro y que hacen necesario tener todo nervio en tensin y ejercitar todas las facultades para resistir a Satans y vencer por los mritos de Cristo (Youth's Instructor, agosto 18, 1898) EL PODER DE LA ORACIN Fue en el monte con Dios donde Moiss contempl el modelo de aquel edificio maravilloso que haba de ser morada de la gloria divina. Es en el monte con Dios -el lugar secreto de comunin-, donde hemos de contemplar su glorioso ideal para la humanidad. As seremos habilitados para dirigir de tal manera la edificacin de nuestro carcter que se realice para nosotros la promesa: "Habitar y andar entre ellos, y ser su Dios, y ellos sern mi pueblo".* Mientras atendemos a nuestros quehaceres diarios, deberamos elevar el alma al cielo en oracin. Estas peticiones silenciosas suben como incienso ante el trono de gracia y los esfuerzos del enemigo quedan frustrados. El cristiano cuyo corazn se apoya as en Dios, no puede ser vencido. No hay malas artes que puedan destruir su paz. Todas las promesas de la Palabra de Dios, todo el poder de la gracia divina, todos los recursos de Jehov estn puestos a contribucin para asegurar su libramiento. As fue como anduvo Enoc con Dios. Y Dios estaba con l, sirvindole de fuerte auxilio en todo momento de necesidad. . .