Julio 2009 Oración de los Padres 1 Padre Celestial
Me abruma la enormidad de las exigencias de la paternidad. Si no te
tuviera en forma constante a mi lado, mis esfuerzos serían en vano.
Te alabo por ser fuente de todo gozo, victoria, dignidad personal y
gratitud en mi vida. Ayudadme, Padre, a inculcar en mis hijos sentimientos saludables, de valor personal, aunque los míos a veces se encuentran muy bajos.
Ayudadme a no humillar a mis hijos con palabras duras. Concededme
la habilidad de estimular sus buenas cualidades con palabras de ánimo
Sujeta mi lengua cuando tenga que escuchar y no hablar. No
permitas que los reprenda injustamente ni que emplee un tono de voz áspero cuando los disciplino. Dadme paciencia para ayudarles a formar un carácter fuerte y una actitud responsable. Concededme sabiduría para acceder a sus deseos razonables y valor para negar los pedidos de cosas que podrían perjudicarlos
Que una sonrisa ilumine mi rostro cada día
Concededme la habilidad para reconocer cuando debo dejar de lado el trabajo para disfrutar de experiencias que se presentan en forma inesperada. Ayudadme a manifestar amor por mis hijos desde sus tiernos años y durante toda la vida. Mis hijos son también tus hijos, Padre.
Los encomiendo a tus manos poderosas. Que el ejemplo
que doy a tu servicio inspire amor a ellos y el deseo de servirte para siempre. Autor desconocido Oración de los padres 2 Señor, hazme mejor padre, Enseñadme a entender a mis hijos, a escucharlos en forma paciente lo que tengan que decirme y a contestar amablemente sus preguntas.
Ayudadme a no interrumpirlos sin causa o
contradecirles. Señor, hazme tan cortés y educado con ellos, como deseo que lo sean conmigo. Dadme valor confesar mis faltas y pedirles perdón, cuando haya procedido en forma equívoca con ellos.
No hiera yo en forma innecesaria los sentidos de mis
hijos No permitas que me ría de sus errores, ni que los abochorne ni los ridiculice para castigarlos. Impide que tiente a mis hijos a mentir o robar. Guiadme hora tras hora, para que pueda demostrarles mediante todo lo que haga o diga puesto que la honradez produce felicidad. Te ruego que reduzcas mi mezquindad, que me ayudes a dejar de regañar y a frenar la lengua cuando se me esté agotando la paciencia. Señor, ayudadme a corregir los errores de mis hijos sin herir sus sentimientos, haciéndoles comprender su error, rectificándolo.
Abridme los ojos ante todo lo bueno que hagan.
Dadme las palabras oportunas para la alabanza sincera. Guardadme de medirlos y valorarlos por las normas y costumbres de los adultos.
Gracias Padre por disimular mis errores y los
errores de mis hijos, dadnos tu bendición y te pido que protejas a mis hijos de todo mal. Autor desconocido Cómo ser infeliz Este artículo inicia así: “Piensa en ti mismo. Habla de ti. Usa el pronombre “yo” tanto como sea posible. Preocúpate constantemente por las opiniones que los demás tengan de ti.
Escucha ávidamente lo que la gente dice de ti.
Espera ser apreciado. Sé sospechoso. Sé celoso y envidioso. Sé sensible a los actos de descortesía. Nunca perdones una crítica. No confíes más que en ti. Insiste en obtener la consideración y el respeto de los demás.
Exige que los demás estén de acuerdo con tus
puntos de vista en todo. Ponte de mal humor cuando la gente no te agradezca los favores que les has hecho. Nunca olvides los servicios prestados. Si puedes, elude tus responsabilidades. Haz lo menos posible por los demás.”
Vernos a nosotros mismos como el centro del
universo conduce a la infelicidad. No fuimos hechos para ser el centro de nuestra atención. Según las Sagradas Escrituras, fuimos hechos para dar nuestros corazones al “Altísimo y Sublime”, que habita con los quebrantados y humildes de espíritu. Isaías 57:15.
Él da consuelo y paz a aquellos que sienten
necesidad de Él. v v,18,19 No hay paz para los impíos, dijo Dios. Isaías 57:21. Señor ayudadnos alejar nuestros pensamientos de nosotros mismos y a centrar nuestra atención en Ti, la única fuente de verdad y paz duradera
Una persona nunca está tan vacía como cuando
está llena de sí misma
Fuente obtenida de un panfleto.
LOS DIEZ MANDAMIENTOS DE LAS RELACIONES HUMANAS Jesús dijo: “Un nuevo mandamiento os doy, que os améis los unos a los otros”
1- Háblele a la personas amablemente; no hay nada
tan agradable como una frase alegre al saludar. 2- Sonría a la gente, se necesita la acción de 25 músculos para fruncir el ceño y únicamente 15 para sonreír.
3- Llame a las personas por su
nombre, la música más agradable para el oído de cualquiera, es el sonido de su propio nombre. 4- Sea amigable y cortés si desea tener amigos sea agradable
5- Sea cordial, hable y actúe como si todo
lo que hiciere fuese un placer. 6- Interésese verdaderamente en las personas, puede simpatizar con ellas si se lo propone.
7- Sea generoso en hacer resaltar las
buenas cualidades y no las negativas. 8- Tenga sentimientos de consideración hacia los sentimientos de los demás, se lo agradecerán.
9- Tome en consideración a los demás, en toda
contraversia hay tres opiniones o puntos de vista: el del otro, el suyo y el correcto 10- Esté dispuesto a prestar servicio, lo que más cuenta en la vida, es lo que hacemos por los demás. El libro de la vida. Cada día la vida te ofrece una página en blanco del libro de tu existencia. Tu pasado ya está escrito y no puedes corregirlo; en sus páginas amarillas puedes encontrar tu historia, algunas con suaves colores, otras con oscuros matices… Recuerdos bellos de tiempos gratos o páginas que quisieras arrancar para siempre… Este día tienes la oportunidad de escribir una página más. Está únicamente en tus manos escoger los colores que tendrá, pues aún en la adversidad puedes colocar matices de serenidad para convertirla en una bella experiencia. ¿Cómo escribirá el día de hoy? Sólo depende de tu voluntad y optimismo hacer que la página del día de hoy en el libro de tu vida, sea una página que en el futuro puedas atesorar como un bello recuerdo. Si supieras que sólo vas a vivir un día más, ¿qué harías? Sin duda, te pondrías en paz con Dios y con los que te rodean; disfrutarías de los rayos del sol, de la suave brisa, de la alegría de los tuyos e hijos, del amor de tu pareja, de tantas bendiciones que la vida nos coloca al alcance de la mano y que muchas veces no sabemos valorar. Disfruta este nuevo día, haz un inventario mental de todas las cosas buenas que existen en tu vida y vive cada hora con buen ánimo, dando lo mejor de ti, no dañes a nadie y siéntete feliz de estar vivo, de poder regalar una sonrisa, de ofrecer tu mano y tu ayuda generosa. Nunca es tarde para cambiar el rumbo y empezar a escribir páginas de dicha y paz en el libro de la vida. Agradece a Dios el regalo que te da hoy y la oportunidad de convertir este día en una página bella del libro de tu existencia. Recuerda que a pesar de todas las situaciones adversas, está únicamente en tus manos vivir el día de hoy…como si fuera el primero, como si fuera el último, como si fuera el único en el libre de tu vida.