El Loris arcoíris es uno de los más habituales entre los aficionados.

Los loris y
loriquitos son unas aves de gran colorido y de una belleza excepcional pertenecientes al
orden de las Psitaciformes, familia de las Psitácidas. Están englobados en once géneros.
Los loris que podemos encontrar más comúnmente en avicultura están incluidos en los
géneros Eos spp., Pseudoeus spp., Lorius spp. y Trichoglossus spp. Su distribución
geográfica comprende Polinesia, Micronesia y Oceanía. La diferencia existente entre
loris y loriquitos no está sujeta a criterios de tipo taxonómico sino a criterios
comerciales; los loris tienen la cola corta y los loriquitos la cola larga. La peculiaridad
que presentan estos pájaros con respecto a otros loros y papagayos radica en la
alimentación; a diferencia de otras especies de psitácidas que se alimentan
principalmente de semillas, los loris ingieren comida líquida y de carácter pastoso, y
necesitan una dieta rica en vitaminas, agua, azúcares y proteínas. Se han adaptado a la
ingestión de polen y néctar, así como frutas maduras e insectos.
Esta adaptación a los alimentos blandos ha provocado que la molleja de loris y
loriquitos sea menos musculosa que la de otras psitácidas, lo que les impide la correcta
digestión de semillas.
A continuación indicamos una serie de mezclas dulces con la que podemos mantener
correctamente a los loris.
Para la preparación del néctar utilizaremos dos cucharadas soperas de azúcar moreno de
caña o jarabe de caña, de miel y de papilla infantil multifruta, disuelto todo ello en un
litro de agua tibia. También podemos utilizar como disolvente zumo de fruta dulce. Otra
mixtura más pastosa la obtendremos de mezclar pulpa de manzana, pera, piña dulce,
zanahoria y pepino. Al resultante le añadimos una parte de harina de arroz, pasta al
huevo, comida universal y cereales infantiles. Mezclamos bien los componentes y
finalizamos con la adición de una cucharada de glucosa, diez cuharaditas de miel y una
de un producto polivitamínico. La mezcla tiene que tener la consistencia del yogur.
También podemos utilizar leche, leche en polvo o condensada para disolver los
componentes del néctar. Componentes como cereales para alimentación infantil,
papillas de copos de avena, extracto de carne de buey (en tiendas de alimentación y de
animales), miel, glucosa en polvo, azúcar, melaza, pan integral, bizcochos, galletas...
Debido a su composición, estas mezclas permiten una rápida proliferación de bacterias
que estropean el alimento y pueden provocar trastornos digestivos al animal
(especialmente si las mezclas llevan leche). Por esta razón, la distribución del alimento
debe de seguir unas pautas rigurosas. Se marcará un horario fijo para la servir el
alimento, aprovechando las horas de mayor actividad de los animales ( primeras horas
del día y al caer la tarde) para que los pájaros se acostumbren a comer a una hora
determinada. La naturaleza perecedera del néctar obliga a reponerlo dos veces al día.
Este dato es indicativo; lo cambiaremos tantas veces como observemos que haya
fermentado. El recipiente dónde se sirva la mezcla tiene que ser fácilmente lavable y
desinfectable, duradero y atóxico. Cada vez que se cambie el néctar hay que lavar el
comedero. Podemos hacer la mezcla más o menos diluida, según la necesidad de nuestra
mascota, aunque hay que señalar que es preferible suministrar mezclas diluidas a
concentradas (el animal regula mejor la cantidad de energía que ingiere).
La otra parte integrante de la dieta de los loris la constituyen las mezclas de frutas
maduras, como el plátano, la manzana, las uvas, la papaya, el melón, las fresas, el
tomate, etc, que pueden ser dadas al animal haciendo un revuelto junto con maíz dulce y
zanahoria rallada (muy importante para los loris, muy sensibles a la deficiencia en
vitamina A). No incluiremos en la dieta frutas no maduras o agrias. Siempre que
podamos suministraremos la fruta pelada, si no lo hacemos de esta manera, la lavaremos
abundantemente para evitar el riesgo de intoxicación por pesticidas. Ocasionalmente
podemos dar a nuestras aves semillas previamente puestas a remojo en agua tibia
durante veinticuatro horas. Las semillas germinadas son un buen complemento.
No olvidemos que existen preparados comerciales de néctar de gran calidad para la
alimentación de estos pájaros. El desconocimiento de estos espléndidos animales ha
provocado que los cuidados a los que se sometía a loris fueran idénticos a los de
cualquier otro loro, reduciendo así su supervivencia en cautividad y haciendo de estos
pájaros unas aves "difíciles" de mantener con vida o en buenas condiciones. Espero que
esta pequeña reseña sobre alimentación nos anime a conocer a estos sorprendentes y
coloridos pájaros