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• Informe de lectura de la 2da parte del documento de los trastornos

del lenguaje

El texto comienza hablando de la primacía de la letra, y dice principalmente que


en la psicosis una de las características fundamentales es que aparece un
particular investimento más de la palabra que de la cosa, esto se equipara a lo
que ocurre en el sueño y trae como consecuencia las construcciones
abstractas de las palabras destinadas a significar por ellas mismas, es como si
los significantes estuvieran separados, desconectados entres sí y de la cadena
significante. Dichos significantes funcionan como letras aisladas, de modo tal
que un significante no remite a otro (que es lo que se espera), por esto el
psicótico toma la literalidad de la palabra letra por letra.

La relación entre significantes lleva implícita el goce, y la letra se pone como


litoral, límite entre los significantes y el goce, este litoral da cuenta de algo más
allá, da cuenta del goce, pero como el psicótico no tiene este límite, se da una
deslocalización del goce, deslocalización a la cual se le trata de dar un sentido
por medio de la construcción de un delirio (alucinaciones), ya que las
construcciones delirantes parten de la misma letra, es ésta su soporte material,
la letra que no remite a nada es el germen para la alucinación y el delirio y esto
es un intento de encadenamiento.

Luego el texto, comienza a hablar sobre la significación fálica, la cual hace que
un significante remita a otro significante, esto en un proceso de desplazamiento
en la cadena significante, pero hay que ponerle un límite para que el sujeto
tome posición frente a la escogencia de la significación, y lo anterior sólo es
alcanzado por la operación del Significante del Nombre del Padre.

La significación fálica es la que da orden al sujeto, es la que le proporciona el


sentimiento de vida, por lo cual su falta que es propia del sujeto psicótico le
hace sentir una incapacidad de vivir como a los demás.

Por la falta de la significación fálica para el sujeto psicótico no es posible hacer


el cierre que le permite el alcance de la significación, por esto en el discurso
psicótico se ve un regular salto de un tema a otro al igual que una gran
ensalada de letras y la aparición de ciertas palabras ininterrumpidas o frases
inconclusas, lo cual puede llevar al sujeto a sentirse invadido hasta el punto de
aislarse, sumergiéndose en el mutismo, lo que muestra que en la psicosis el
significante tiene efectos sobre el cuerpo, efectos que pueden llegar a tener la
capacidad para destruirle.
En el neurótico, a diferencia del psicótico, hay una regulación del aparato del
goce, debido a que éste posee un límite establecido por el Nombre del Padre,
lo cual permite que el sujeto recorte en su propio cuerpo el goce y fije su goce
pulsional en relación con los objetos parciales. Objetos que dibujan el vacío, y
por medio de los mismos trata de ser taponado, esto tiene que ver con el
lenguaje, la letra y la significación fálica.

El sujeto neurótico somete al goce a la ley significante, lo encierra, hay un


límite al goce fálico (goces del cuerpo), al goce del otro (que es imposible). En
la psicosis el sujeto se convierte en un sujeto invadido por el goce, éste es el
fenómeno de hipercatexis de la libido puesta sobre sí mismo. El psicótico se
identifica con el objeto, con el vacío mismo y aquí se puede llegar al paso al
acto y para que esto no se dé aparecen las alucinaciones y los delirios, lo que
es un intento de poner este goce invasor a raya.

El psicótico está en el lenguaje pero fuera del discurso, ya que debido a la


carencia de la significación fálica no existe una posibilidad de dialectizar porque
la palabra es eso y nada más. Entonces, como es por medio del discurso que
se establece el lazo social con el otro, por ende el psicótico al ser carente éste
no tiene lazo social, y como en el discurso todo lo que uno habla se devuelve
desde el otro no se puede establecer esta devolución por lo dicho
anteriormente, por esto el otro del psicótico está del lado de la influenciación.

Otra de las características de la psicosis es la aparición del holofraseo, es


decir, que no hay separación de un significante y otro, no hay valor diferencial
de los significantes, no hay ambigüedad, sólo certezas inamovibles, por lo cual
aparece un sujeto que es una petrificación en una significación, siendo esto la
base para la construcción de los delirios.

Para concluir, cabe resaltar, que tanto Lacan como Freud reducen los
elementos de la psicosis a lo simbólico produciendo esto una “categorización”:

• Primacía de la letra: alucinaciones, delirios, trabajo por la letra.

• Carencia de significación fálica: alucinaciones, empuje a la mujer,


delirios.

• Desregularización del aparato del goce: trastornos del lenguaje

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