Procuraduría General de la República, demuestra torpeza.

Creer que por la vía de la

fuerza bruta va a sostener un gobierno como el suyo, cuestionado y endeble; que de
esta manera podrá someter al pueblo en lucha por sus derechos, no revela capacidad
ni inteligencia.

Calderón con su represión también se equivoca El apoyo a la APPO hará caer a

Los primeros actos de Calderón, con respecto de Oaxaca, han sido de represión.
Pero se equivoca si cree que encarcelando a quienes cree que dirigen la lucha va a as-
fixiarla. Por varias, razones: una es que se trata de un movimiento con una muy amplia
Ulises Ruiz y también a Calderón
dirección, que no radica en unos pocos individuos; otra, porque se trata de un pueblo
aguerrido, fogueado en mil batallas de orden social, al que la represión, lejos de inti-
midarlo, lo enardece, según lo ha demostrado ya. Y otra más radica en la profundidad
de los problemas, en la triple crisis, económica, social y ya también política por la que
atraviesa el país.

A la APPO no la vence ni la represión ni la prisión

Frente a la insensibilidad y la torpeza de Calderón, la Perspectiva de la Asamblea
Popular de los Pueblos de Oaxaca, APPO, es la de su fortalecimiento y ulterior desa-
rrollo. Ya ha dado pruebas de capacidad de convocatoria, de prudencia frente a la pro-
vocación y a la represión, y de decisión y firmeza en la lucha. También ha demostrado
un eficaz nivel de articulación entre las numerosas organizaciones que la integran.

La caída de Ulises y Calderón sentarán las bases para la revolución

Si el gobierno federal no reacciona de manera positiva frente a las justas demandas
del pueblo de Oaxaca, si persiste en su tendencia represiva, pronto se unirá la deman-
da de la salida de Calderón a la de Ulises, por las mismas razones. Y en el proceso de
lucha, se irá construyendo un programa colectivo de reivindicaciones, que no quede en
la caída de uno y otro, sino que ataque las cuestiones de fondo, que tienda a acabar con
las políticas neoliberales; que se encamine a consolidar una organización amplia y plu-
ral orientada a la conquista de la Segunda y Definitiva Independencia de México, esta
vez frente al imperialismo estadounidense, y a sentar las bases para la edificación de
una sociedad superior, sin explotadores ni explotados, una sociedad socialista. Hacia
allá empujan sus mejores fuerzas.

¡Viva México!

Gobiernos neoliberales insensibles y torpes
L os gobiernos neoliberales se han caracterizado por su torpeza e insensibilidad frente a
la rebelión del pueblo oaxaqueño. Todos, sin importar quien los encabeza o de cuál par-
tido político surgieron, han tenido esas mismas características. Igual ha sido por lo que hace
a la autoridad local que a la federal; igual con Fox que con Calderón. Así lo demuestra el
repaso de los acontecimientos.
Ulises Ruiz gobernador déspota
Ulises Ruiz, el déspota de Oaxaca, demostró torpeza e insensibilidad cuando creyó que
podía aplacar al movimiento sindical magisterial ejerciendo una brutal represión, y lo que
consiguió fue desatar una protesta mayor que involucró a la gran mayoría del pueblo de la
entidad, en solidaridad con los maestros de sus hijos. Ése fue el chispazo que dio inicio a la
gran movilización popular, aunque sus causas profundas, ya lo hemos dicho, están en la tre-
menda injusticia que se da, más que en otras épocas, en ésta, luego de cinco lustros de neo-
liberalismo que ha ahondado el abismo que separa a los que muy poco o nada tienen de los
que se apoderan de todo, sin ningún derecho.
El pueblo oaxaqueño lo único que exigía era que Ulises dejara el cargo
El movimiento popular levantó entonces una demanda unánime: castigo a Ulises, el re-
presor, en la forma de su cese del cargo de gobernador. El procedimiento era lo de menos;
los oaxaqueños aceptaban la figura constitucional de la desaparición de poderes; también la
petición de licencia por parte del propio Ulises, incluso el que la autoridad federal lo llama-
ra al ejercicio de otro puesto cualquiera, en la capital del país o en una embajada en el exte-
rior. Que se fuera, simplemente. Esto no sólo entrañaría un castigo, sino que sería una forma
de protección social y popular porque conocen la conducta revanchista y violenta de Ulises,
si se quedaba, habría represalias en forma de persecuciones, encarcelamientos injustos, ase-
sinatos y torturas a granel.
La ineptitud de Vicente Fox
Una vez convertido el caso en un problema de dimensión nacional, Fox y su “gabineta-
zo” lo único que exhibieron fue, otra vez, torpeza e insensibilidad. Fue un gobierno de inep-
tos y reaccionarios en un grado difícil de superar. Impreparado y tonto, como no ha habido
otro en la historia, e impreparados sus colaboradores, hicieron gala de su tontería en todos
los asuntos, en todos los lugares y en todo momento: el conflicto de Oaxaca no podía ser la
excepción. En su concepción política de derecha no tiene
cabida ningún concepto de justicia social. Para la derecha
en general y la panista en particular, el que unos pocos se
apoderen de los frutos del trabajo de toda la sociedad, tie-
ne plena legitimidad; que los muchos sean explotados de
manera inicua y despojados no sólo del fruto de su traba-
jo, sino de todos sus derechos, es lo normal y lo correcto.
Así está hecha su mentalidad.
Calderón y Fox herederos del fascismo
Por eso Calderón y Fox comparten la misma ideología.
También su gabinete, integrado por panistas casi de ma-
nera exclusiva; fue el partido creado en la etapa en la que
el fascismo intentaba apoderarse del mundo y, con ese fin,
implantaba su semilla en todas partes. Nunca debemos
olvidar que a México vinieron agentes enviados ex profe-
so por el Partido Nacional Socialista Alemán, de Adolfo
Hitler, y de la Falange Española; unos y otros intervinie-
ron de manera decisiva para que surgiera el PAN en la dé-
cada de los treintas del siglo XX. Precisamente para com-
batir al gobierno del general Lázaro Cárdenas. Por eso
el PAN siempre ha sido un partido enemigo de la cla-
se trabajadora y el pueblo; también enemigo de la
democracia. Por esto sería ingenuo esperar que
Calderón y colaboradores tuvieran un mínimo
de sensibilidad social.
Calderón tramposo, alevoso y marrullero
Calderón tiene mayor preparación formal que Fox.
Sin embargo, hasta ahora no ha dado muestras de ningu-
na habilidad y sólo ha mostrado su faceta tramposa, ale-
vosa y marrullera. La integración de su gabinete tampoco
lo revela como un individuo con capacidad suficiente para
enfrentar y resolver de manera adecuada los problemas
tan agudos que enfrenta un país en crisis, como el nuestro.
Designar como secretario de Gobernación a un individuo
que cobró fama de represor feroz durante su gestión como
gobernador de Jalisco, como Francisco Ramírez Acuña, y
a otro represor, Eduardo Medina Mora como titular de la