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La Vida

Desde el amor y al servicio del Amor,

¡Refleja!
La Vida no puede ser definida,
pero Ella nos rodea y nos penetra;
está en nosotros y
está fuera de nosotros.
La Vida se encuentra manifestada
en el ser humano y en la Naturaleza
y más allá de nuestro mundo,
en los astros y en todo el Universo.
Podríamos suponer que la piedra, por ejemplo, carece de Vida,
porque nuestros ojos no pueden ver en ella movimiento alguno;
pero la Ciencia ha demostrado el movimiento constante y la
enorme energía que existe en los átomos
de los elementos que la constituyen.
Así pues, no solamente el ser humano es Vida manifestada,
sino también son Vida manifestada los animales,
los vegetales y los minerales.
Todo es Vida y, por ello, todo está íntimamente unido entre sí.
La Vida es indestructible; puede cambiar de “forma”,
puede cambiar de “lugar”, pero jamás deja de Ser.
Cuando se produce lo que llamamos “muerte”, es decir la desencarnación,
la Vida – en ese Espíritu – deja la “forma” física y cambia de “lugar”,
pues al dejar el mundo físico entra nuevamente en el Espacio, así como antes,
para encarnar o nacer, debió dejar el Espacio y venir a la Tierra.

Y siempre continuó siendo el mismo “Espíritu” porque, como dijimos,


la Vida es indestructible y jamás deja de Ser.
Ignorando la Verdad,
los humanos limitamos la vida a lo físico,
y en consecuencia, sólo nos esforzamos
por obtener progreso material
y disfrutar de placeres materiales.
Ello nos hizo ambiciosos y egoístas y, además,
nos creamos necesidades artificiales,
necesidades provenientes de vicios
o de costumbres que en nada nos benefician,
sino que, por el contrario, hemos llegado a
esclavizarnos en forma tal que,
por satisfacerlos, no titubeamos en luchar,
engañar y hasta delinquir.
Los humanos nos hemos alejado del Camino de la Verdad
y a veces no podemos disfrutar de nuestra Verdadera Vida porque,
desestimando el amor – que es Ley De Vida –
impregnamos nuestra alma de egoísmo, ambición y odio
que, envenenando nuestra alma,
nos impide sentirnos totalmente felices.
El Conocimiento de la Vida es imprescindible,
porque demuestra claramente el error en que
vivimos y hemos vivido.

A la vez, ese Conocimiento


nos enseña que debemos dar, al aspecto
humano y al aspecto Espiritual
de nuestra Vida, el valor exacto que cada
uno tiene, viviendo menos para la “forma”
humana, que en algún momento
abandonaremos, y más para
la Vida Verdadera – la Vida del Espíritu –
en la que siempre Viviremos, porque Ella
jamás dejará de Ser.
Vivir para la Vida del Espíritu no significa
olvidar los deberes y los afectos humanos
ni significa retirarse del mundo,
sino encauzar nuestra vida humana, en todos sus aspectos
– familiar, social y demás –
en el Camino Verdadero del Amor
que nos señala la Ley de la Vida.
Mediante el Conocimiento de la Vida
resulta sumamente fácil comprender lo que la vida
- a través de sus Leyes – reclama de nosotros;
pero, sin duda, al carecer de ese Conocimiento,
hemos vivido sin preocuparnos por saber cuál es,
realmente, la finalidad de la vida humana
ni en qué forma debemos vivirla para poder obtener
de ella el máximo beneficio, no el beneficio material,
que pronto desaparece, sino el beneficio Espiritual,
que perdurará por siempre.
Así como la vida humana tiene sus leyes
y reconocemos que debemos vivir de acuerdo con ellas,
la Vida Espiritual tiene también sus Leyes
y debemos reconocer que necesitamos, inevitablemente,
vivir de acuerdo con Ellas para
poder lograr armonía, paz y felicidad
y, por sobre todo, para poder obtener
nuestro propio Progreso Espiritual,
causa y finalidad de la vida humana.
Siempre recibirás Ayuda
desde lo Superior
si eliges retomar el
Camino del Amor
del cual alguna vez
te has desviado y,
por ello, sufres.

Es tu elección y Responsabilidad
vivir una vida feliz.

¡Acciona! ¡Éste es el momento


de reencontrarte con tu Esencia!
Desde el amor y al servicio del Amor,

¡Refleja!
por Marcela Parolin
Buenos Aires, Argentina

Vamos siendo un movimiento cuyo objetivo es irradiar Amor al mundo,


facilitando herramientas para la transformación personal,
que ayuden a discernir cuál es el camino, a fin de ya no desviarse
y no atraer para nuestras vidas el dolor.
El único protagonista es el mensaje.

No perseguimos fines económicos porque es una tarea de servicio.


Nos mantenemos con aportes que Uds. eligen hacer,
cada uno desde su vocación y servicio,
para que siga girando la rueda de la prosperidad, nos beneficiemos todos,
y el mensaje de Amor llegue a mayor cantidad de personas cada día.

¡Muchas gracias por tu colaboración!

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Música de la presentación: “Fluid Motions”, by Christopher Franke


Imágenes de la Web. Texto: Universalismo.

Solicitamos NO modificar la presentación

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