4/430 26 cops LOS TRES PERONISMOS Estado y poder econémico 1946-1955 /1973-1976 / 1989-1999 por Ricardo Sidicaro801 sor 01 6 88 ¥L 19 89 96 $s we 6L aL ¥L 1 pereisa & jepos uopenns vy ap & (eeso0) (@é-9961) Ousnorod jap sorqutE> so] 9161-8161 msquored onso1q08 Jp X opersa Pp SIE eT “E sejstuosad soonsod soy 4 sopeztu’ souesaidusa so[? seonupuong jeiat99 WoPEIapasuOD eT ‘insnpar ey 2p soureiardoud so] ap sasazait soy sayems souresazdura sapues8 so] ap s9sa191U so] sopresardura sazome sayediouud so & uous, ap ousaiqo8 [a ourstuosod jop uopemsiyaid yy A gp-¢p6T TEN OUIDIGOS [q S961-9F61 Soopw9Uod20p0s sox0}2" sapedioud so] 2p soqupuopasd sof 9p omtoqmeuonsono (2 4 wisquosad Opes IZ oe & satopea taste soanyfog SF6L-0¢61 SovmEUHOpard soomttpuessopos saso}9e { sauopeasastiog soapiiod sntojouaKson opeisy [2p UoPON-ASIOD wy “| Da copes oonyod odurey sajteuropaid soaqm9 102901908 $9019" SO" saruaBiuup & sopnueg ‘woponponay soyuogmpapessy aorpuy 9-4-10,96-286 NEST syrg wunuadiry Sx01PS INK OBIS ZOOS O sonewyiry Sxoqqanysey prmeg epexod 9p OPENNTAL ‘danqqaptseu (ated PPE ‘ueuoragsomnsog sopesta T-OPMLT 99 10188236 NSE sun poeta 402 Teen Daa SOMONONETT “9 ep "2's “SesoH|pa OUNNUIEA O16! cca a rinse Varn aN nea TEAO +e -s eunuabsy S2/0)!pa OU!4 RICARDO SIDIcAKO 1a combinacién entre el fraude y las obras piiblicas de alcan- ce municipal o provincial conformaban la légica que se encontra, baen Ia base de la acci6n politica del conservadurismo, Guards sus dirigentes principales alcanzaban el control de los puestos nis importantes del Estado, el aprendizaje realizado en st curses ho. norumno podia, natur fur en que algunos altos dirigentes del conservadurismo percibian I situacién nacional, pero, de todas maneras, no se cortaba su sela cin con el sistema que los habia Hevado ala altura del podasig Esmis la autonomfa propia de los aparatos estates con reapen Ia independencia de los politicos con representaciones organizadas de! gran naturalmente, que existiesen nu. merosos casos de corrupcién y de claro favoritismo a determine dos intereses econdmicos, Después del derrocamiento de Castillo, Jorge Santamarina, e primer ministro de Hacienda del gobierno militar presdidlo por fl general Ramirez, hizo un llamado a las corporaciones para gue colaboraran en la discusién de los futuros proyectos del fves cea, nomica, Muchos debieron creer que el ciclo de desencentioey de conflicts entre el Estado ylosatoressocioeconémicos pred tminantes se habfa cerrado con el golpe del 4 de junio, Sin clus 0, los acontecimientos tomaron tn curso muy distintoy el Eo do intervencionista se conviri en el centro dela nueva elapa que s¢ abri6 con los militares y siguis con el peronismo” idores vis d vis de las * La Nacién, edivovial, 8 de junio de 1948, junio de 1948, p. 4, reproducide en Anales 4 SBA. ao LXXVI, vol, LXXVI, N¥6, junio 1843, pp. 473-474, a 2, El Estado peronista y el cuestionamiento de los predominios de los principales actores socioeconémicos 1946-1955 EI Estado intervencionista cuyas actividades se desenvolvian con gran autonomfa respecto a los intereses de los actores socioe- condmicos predominantes fue el focus institucional que facilité ta ‘ercacién del peronismo, Esos aparatos estatales, con su capacidad de accién sobre la sociedad, y mas especificamente sobre la eco- nomia, considerablemente ampliada en los tiltimos afios del régi- men conservador se convirtieron en una condicién estructural y objetiva que facilité la creaci6n de la nueva fuerza politica. Seria implificacién atribuir al cardcter del Estado intervencionis- ial papel de causa exclusiva en la explicacion de los cambios po- iticos que se iniciaban. Como lo sefalamos en la introduccién, en nuestro recorte analitico, sin ignorar la existencia de otros fac- tores, privilegiamos la dimensién estatal en el estudio de las trans- formaciones de las politicas de los gobiernos peronistas. Desde sa 6ptica, en el presente capitulo nos ocuparemos de las relacio- nes que se establecieron entre 1943 y 1955 entre el Estado y los actores socioeconmicos predominantes. En tanto el anlisis se centrara en las formas més tipicas que adquirieron esas relacio- nes, el lector no encontrar aqui los detalles minuciosos de los acontecimientos 0 giros puntuales ocurridos, sino una exposicion empiricamente fundada de Ia logica de los procesos sabre los que hemos indagado. En la reconstruccién sociol6gica de cada uno de los subperiodos que estudiaremos no faltarén, por cierto, las referencias a algunos hechos o personas muy individualizadas que no son meros ejemplos para sostener argumentaciones globales, sino que cumplen con la funcién de revelar, mas alla de su care- ter singular y datado, las orientaciones de los actores en su senti- do mas general