Mecanismos encefalicos
de la conducta y la motivacién.
El sistema limbico y el hipotdlamo
APITULO OS
El control de la conducta depende de la totalidad
del sistema nervioso. Incluso el ciclo de la vigilia y
del suefio que se expondré en el Capitulo 59 es
ciertamente uno de los patrones conductuales mas
importantes.
En este capitulo trataremos primero los meca-
nismos que controlan los grados de actividad de las,
diferentes partes del encéfalo. Después estudiare-
mos las bases de los impulsos motivacionales, en
particular el control motivacional del proceso de
aprendizaje y los sentimientos de placer y castigo.
Estas funciones del sistema nervioso son ejecuta-
das por las regiones basales del encéfalo, que en
conjunto se denominan laxamente sistema limbi-
co, que quiere decir sistema «del borde>.
SISTEMAS ACTIVADORES-IMPULSORES
DEL ENCEFALO
Si se detiene la transmisi6n continua de sefiales
nerviosas desde la parte baja del encéfalo al cere-
bro, el cerebro se vuelve inutil. De hecho, una com-
presién fuerte del tronco encefilico en la unién en-
tre el mesencéfalo y el cerebro, a menudo como
consecuencia de un tumor pineal, suele inducir un
estado ininterrumpido y perpetuo de coma.
Las sefiales nerviosas del tronco enceféllico acti-
van la parte cerebral del encéfalo de dos formas: 1)
estimulan directamente la actividad de fondo de
amplias zonas del cerebro, y 2) activan sistemas
neurohormonales que liberan sustancias neuro-
transmisoras concretas andlogas a las hormonas,
con accién facilitadora o inhibidora, en ciertas zo-
nas del encéfalo. Estos sistemas activadores siem-
pre funcionan juntos y no se pueden separar; sin
embargo, se describira cada uno de ellos como si
fuera una entidad independiente.
Control de la actividad cerebral
Por las sefiales excitadoras
continuas del tronco encefalico
Area reticular excitadora del tronco
encefalico
La Figura 58-1 muestra un sistema general de
control del grado de actividad del encéfalo. El im-
pulso central de este sistema reside en un area ex-
citadora situada en la sustancia reticular de la
protuberancia y el mesencéfalo. Esta zona se cono-
ce como drea facilitadora bulborreticular. Tam-
bién se hablo de ella en el Capitulo 55, porque es la
misma zona de sustancia reticular del tronco ence-
félico que transmite seftales facilitadoras descen-
dentes por la médula espinal para mantener el
tono de los mtisculos antigravitatorios y controlar
la actividad de los reflejos de la médula espinal.
Ademés de estas sefiales descendentes, esta area
manda sefales ascendentes profusas, La mayoria
de ellas se dirigen primero al télamo para excitar
un nuevo conjunto de neuronas que emite sefales
nerviosas a todas las regiones de la corteza cere-
bral y a varias regiones subcorticales.
817818 Tratado de fisiologia médica
alamo
FIGURA 68-1. Sistema excitador-activador del encéfalo.
‘Asmismo, se muestfa un dea inhibicora bulbar que puedie
Inhibir o deprimir el sistema nervioso.
Las sefiales que atraviesan el talamo son de dos
tipos. El primero son los potenciales de accién de
transmisién répida que excitan el cerebro durante
unos milisegundos. Estos potenciales se originan
en grandes cuerpos neuronales repartidos por toda
la zona reticular del tronco enceféilico. Sus termi-
naciones nerviosas liberan la sustancia neuro-
transmisora acetilcolina, que acttia como agente
excitador durante unos milisegundos antes de des-
truirse.
El segundo tipo de seftal excitadora proviene
de un gran ntimero de pequefias neuronas dise-
minadas por la zona excitadora de la sustancia
reticular del tronco encefillico. De nuevo, la ma-
yoria de ellas se dirige al télamo, pero esta vez a
través de pequefias fibras de conduccién lenta
que establecen sinapsis principalmente en los
niicleos intralaminares del télamo y en los ni-
cleos reticulares de la superficie del télamo. A
partir de abi, otras fibras pequefias se di
buyen por todas las partes de la corteza cerebral.
El efecto excitador causado por este sistema de
fibras aumenta progresivamente durante muchos
segundos, hasta un minuto o més, es decir, estas
sefiales revisten especial importancia para con-
trolar el nivel basal de excitabilidad del cerebro a
mas largo plazo.
EXCITACION DEL AREA EXCITADORA DEL TRON-
CO ENCEFALICO POR SENALES SENSITIVAS PERIFE-
RICAS. El grado de actividad del area excitado-
ra del tronco encefilico y, por tanto, de todo el
encéfalo esté determinado en gran medida por el
tipo de sefales sensitivas que entran en el cerebro
desde la periferia, En particular, las senales dolo-
rosas aumentan la actividad de esta area excitado-
ra y llaman poderosamente la atencién del ce-
rebro.
La importancia de las sefiales sensitivas para la
activacion del 4rea excitadora se demuestra por el
efecto de la seccidn del tronco encefalico por enci-
ma del punto donde penetran los dos nervios trigé-
minos en la protuberancia. Son los nervios con una
entrada més alta en el encéfalo que transmiten
cantidades significativas de senales somatosensi-
tivas al cerebro. Cuando cesan todas estas sefales
aferentes, el grado de actividad del area excitadora
del cerebro disminuye bruscamente y éste pasa al
instante a una actividad muy reducida, que se
aproxima a un estado de coma permanente. Cuan-
do el tronco encefélico se secciona por debajo de los,
nervios trigéminos, con lo que quedan indemnes
‘muchas sefales sensitivas aferentes de las regio-
nes facial y oral, se evita el coma.
‘AUMENTO DE LA ACTIVIDAD DEL AREA EXCITA-
DORA DEL TRONCO ENCEFALICO POR LAS SENALES
DE RETROALIMENTACION DEL CEREBRO. No s6lo
llegan sefiales excitadoras al cerebro desde el area
excitadora bulborreticular del tronco encefélico,
sino que también retornan por retroalimentacién
desde el cerebro a las regiones bulbares. Por tanto,
cada vez que la corteza cerebral se activa por pro-
‘cosos de pensamiento 0 motores del cerebro, regre-
san sefiales a las dreas excitadoras del tronco ence-
falico, que a su vez envian de nuevo més sefiales a
la corteza cerebral. De esta manera se mantiene el
grado de excitacién de la corteza cerebral o incluso
se aumenta. Es un mecanismo general de retroali-
‘mentacién positiva por el que cualquier actividad
iniciada en el cerebro promueve todavia més acti-
vidad, conservando la mente despierta.
EL TALAMO ES UN CENTRO DE DISTRIBUCION
QUE TAMBIEN CONTROLA LA ACTIVIDAD DE REGIO-
NES ESPECIFICAS DE LACORTEZA._ Como se sefialé
enel Capitulo 57 y se ilustra en la Figura 57-2, casi
cualquier drea de la corteza cerebral conecta con
su érea propia y sumamente especifica del télamo.
Por tanto, la estimulacién eléctrica de un punto
concreto del télamo activa una regién especifica
pequeia de la corteza. Ademés, las sefiales habi-
tualmente reverberan entre el télamo y la corteza,
de forma que el talamo excita la corteza y la corte-
za reexcita el télamo por las vias de retorno. Se ha
sugerido que el proceso de pensamiento facilita los
recuerdos a largo plazo, precisamente como conse-
cuencia de esta reverberacién de las sefales.
{Puede el talamo recabar recuerdos concretos de
la corteza o activar procesos de pensamiento espe-Mecanismos encefalicos de la conducta y la motivacién. I sistema limbico y el hipotéiamo 819
cfficos? Ciertamente, el talamo posee los circuitos
neuronales adecuados para hacerlo,
Un Grea reticular inhibidora localizada
en Ia parte inferior del tronco encefalico
La Figura 58-1 ilustra otra drea de interés para
el control de la actividad cerebral. Se trata del drea
inhibidora reticular, localizada medial y ventral-
mente en el bulbo. En el Capitulo 55 se indies que
esta drea inhibe el érea reticular facilitadora de la
parte superior del tronco encefillico y, en conse-
cuencia, también reduce la actividad de las porcio-
nes superiores del encéfalo. Uno de los mecanismos
consiste en excitar las neuronas serotoninérgicas;
éstas a su vez segregan la nourohormona inhibido-
ra serotonina en lugares clave del encéfalo; trata-
remos de esto con mayor detalle posteriormente,
Control neurohormonal de
la actividad encefdlica
Aparte del control directo de la actividad encefé-
lica por la transmisién concreta de sefales nervio-
sas desde la parte inferior del encéfalo a las regio-
nes corticales del cerebro, se utiliza otro mecanismo
fisiol6gico de control de la actividad cerebral. Este
consiste en la liberacién de hormonas neurotrans-
‘misoras excitadoras 0 inhibidoras a la sustancia
encefélica. Estas neurohormonas con frecuencia
persisten durante minutos 0 incluso horas, y por
tanto ejercen un control prolongado, mas que una
activacién o inhibicién instanténeas.
La Figura 58-2 presenta tres sistemas neurohor-
monales cartografiados con detalle en el encéfalo
de rata: 1) un sistema de la noradrenalina; 2) un
sistema de la dopamina, y 3) un sistema de la sero-
tonina. La noradrenalina funciona normalmente
como hormona excitadora, mientras que la seroto-
nina habitualmente es inhibidora y la dopamina,
excitadora en algunas areas e inhibidora en otras.
Por eso y como cabia esperar, los tres sistemas
ejercen efectos diferentes sobre la excitabilidad de
las diferentes partes del encéfalo. El sistema de la
noradrenalina se extiende pricticamente a todas
las areas del encéfalo, mientras que los de la sero-
tonina y de la dopamina se dirigen a regiones mu-
cho més especificas del encéfalo; el sistema dopa-
minérgico hacia las regiones ‘de los ganglios
basales y el sistema serotoninérgico hacia estruc-
turas de la linea media.
SISTEMAS NEUROHORMONALES DEL ENCEFALO
HUMANO. La Figura 58-3 muestra las dreas del
tronco enceféilico que activan cuatro sistemas neu-
rohormonales, los tres que hemos tratado en la
rata y otro més, el sistema de la acetilcolina. Algu-
nas de sus funciones coneretas son:
Carebelo
‘reas basales del encetalo
NORADRENALINA
cote
SEROTONINA
FIGURA 58-2. Tres sistornas neurohormonales del cerebro
e la rata cuya topogratia se conoce: un sistema noradte-
néigico, un sistema dopaminérgico y un sistema serotoninér-
gico. (Adaptado de Kelly, sagun Cooper, Bloom y Roth en
Kandiel ER y Schwartz JH Principles of Neural Sciencle, 2.°ed.,
New York, Elsevier, 1985)
1. El locus ceruleus y el sistema de la noradre-
nalina. El locus ceruleus es una pequeia area loca-
lizada a ambos lados en la parte posterior, en la
unién entre la protuberancia y el mesencéfalo. Las
fibras nerviosas de esta drea se extienden por todo
el cerebro, de la misma manera que ilustra la parte
superior de la Figura 58-2 para la rata, y segregan
noradrenalina. La noradrenalina generalmente
excita el cerebro y aumenta su actividad. Sin em-
bargo, ejerce efectos inhibidores en algunas zonas
del cerebro, cuyas sinapsis neuronales cuentan
con receptores inhibidores. En el Capitulo 59 vere-
mos c6mo este sistema probablemente desempefia
un papel importante en la génesis de los suetios,
causando un tipo de suefio denominado de movi-
mientos oculares répidos (sueio REM 0 MOR).