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Práctica 1: Medida de la salinidad de un suelo

Fundamento

En el suelo existen diferentes componentes salinos como resultado de los procesos que tienen lugar en él.
Pueden provenir de la roca madre como los cloruros, carbonatos, sulfatos, etc. Pueden ser de origen artificial,
como los generados por restos de fertilizantes, o bien ser de origen natural, como los producidos por las
plantas adaptadas a vivir en condiciones de alta concentración en sales, por las aguas freáticas marinas o el
agua del mar.

Las sales predominantes en los suelos son Calcio (Ca) y Sodio (Na), elementos que le aportan diferentes
características al suelo según la proporción en la que se den. En general, un suelo que contiene compuestos de
calcio (junto con otras sales) suele ser bastante estable; este elemento hace el pH del suelo sea menor de 8,5,
que tenga una conductividad eléctrica mayor de 4 deciSiemens/m y que sea de tipo Solonchak, con perfiles
A−C, A−B−C con z y/o y en cualquier horizonte, que se presentan en zonas áridas y zonas de depresión. En
este tipo de suelo el drenaje de sales está impedido por las propias características del suelo.

Por otro lado, un suelo que contiene compuestos de sodio en exceso, es dispersante, de estructura laminar, con
pH bastante alto (se forma por procesos de alcalinización principalmente) y se da en climas áridos y
semiáridos. Es de tipo Solonetz, con un horizonte nátrico (árgico con arcillas saturadas en sodio), con un perfil
A−E−Btn−C.

Se debe tener en cuenta la salinidad de un suelo, ya que las plantas que crezcan en suelos de estas
características sufrirán estrés hídrico por pérdida de agua hacia el suelo, a no ser que se trate de plantas
halófitas. También porque la fertilidad del medio es baja, son suelos pobres, debido a que los nutrientes no se
encuentran disponibles a pH alto.

Medida de la salinidad

A través de la conductividad eléctrica se determina la concentración de sales solubles en disolución en el


suelo. Se basa en la velocidad con la que la corriente eléctrica atraviesa una solución salina, la cual es
proporcional a la concentración de sales en disolución. Hasta hace unos años se expresaba en mmhos/cm, pero
hoy día se expresa en deciSiemens/metro (dS/m), siendo ambas medidas equivalentes.

Para considerar si un suelo es salino o no, existen límites arbitrarios; así la Soil Taxonomy adopta el valor 2
dS/m para considerar un suelo salino, ya que las propiedades quedan fuertemente influenciadas por el factor
salinidad. Por otro lado, el United States Salinity Laboratory de Riverside establece los siguientes criterios de
salinidad:

Salinidad (Conductividad,
Suelo Elementos afectados
(dS/m)
0−2 Normal
2−4 Ligeramente salino. Rendimiento de cultivos sensibles
4−8 Salino Rendimientos de la mayoría de los cultivos
8−16 Fuertemente salinos Sólo no se ven afectados los cultivos tolerantes
>16 Extremadamente salinos Muy pocos cultivos dan rendimiento aceptable

En general, se considera que un suelo es salino si presenta una conductividad mayor de 16 dS/m, siempre que
el pH sea mayor de 8,5. Con una conductividad de 8 dS/m ya se considera un suelo con propiedades salinas.

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Cálculos

La concentración de sodio se puede medir, bien en la solución del suelo, bien en el complejo de cambio.

• Contenido en Sodio: Se calcula el PSI o porcentaje de sodio intercambiable (se mide en el complejo
de cambio). Es el porcentaje de sodio con respecto a los demás cationes absorbidos, con ello sabemos
qué cationes predominan en el complejo adsorbente. Si resulta mayor del 15 %, se considera que el
suelo puede empezar a sufrir problemas de solidificación y dispersión de arcilla.

[Na+]

PSI = x 100

[intercambio catiónico]

• Contenido de sodio en la solución del suelo: Se denomina razón de adsorción de sodio (RAS):

[Na+]

RAS =

[Ca++] + [Mg++]

Metodología (Se describe el procedimiento a seguir en la fotocopia adjunta).

Las muestras de suelos provienen de las Lagunas de Villafáfila (Zamora).

Para nuestras muestras tomamos 100 gr de suelo y lo mezclamos con 60 o 70 ml de agua. El proceso de
saturación se realiza al contrario que de forma natural, es decir se satura en tierra y no en agua. En esta
medida, contamos con la ventaja de que no se tiene en cuenta la cantidad de agua que utilicemos, ya que la
conductividad será la misma.

Una vez saturada la muestra de suelo, se deja reposar. Al día siguiente se filtra la muestra con ayuda de la
bomba de vacío para obtener la porción de agua en la que medimos la conductividad a 25 ºC.

Material

Recipiente de plástico con tapa

Probeta de 100ml

Varilla de vidrio

Espátula

Agua destilada

Quitasato

Bomba de vacío

Embudo Buchner

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Conductímetro Conductímetro

Papel de filtro (Fuente: www.net−interlab.com)

Muestras de suelos

Resultados

Muestra Conductividad (dS/m) Clasificación


Laguna grande (fondo) 1 48,6 Suelo salino
Laguna grande (fondo) 2 16,6 Suelo salino
Laguna Barrillos (fondo)1 31,5 Suelo salino
Suelo de propiedades
Laguna Barrillos (observatorio) 2 8,9
salinas

Conclusiones

Todas las muestras de suelo pueden considerarse salinas bajo cualquier sistema de clasificación. Destacar la
muestra Laguna Barrillos (observatorio) 2, para la que habría que analizar el pH si se requiere una
clasificación más exacta en cuanto a la salinidad de dicha muestra.

Lagunas de Villafáfila (Zamora)

(Fuente: www.adripalomares.com)

Práctica 2: Determinación de carbonatos/bicarbonatos en agua. Resultados.

(Fundamento, metodología, material utilizado y cálculos se describen en las fotocopias anteriores).

Preparación

Preparar una solución de ácido clorhídrico 0,02N a partir del producto comercial, sabiendo que en la etiqueta
del mismo se lee: Pureza: 37% en peso, densidad: 1,19 gr/cm3 (o gr/ml) y pm: 36,46.

Equivalentes de soluto

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Normalidad =

1000 ml de disolución

masa HCl (puro)

Equivalentes HCl =

Peso molecular HCl

Masa HCl (puro) 1

Normalidad = = Densidad HCl (puro) ·

1000 ml · pm HCl pm HCl

Como el producto no es puro, se corrige la fórmula con el porcentaje en peso:

Normalidad = 1,19 · 37/100 · 1/36,36 = 0,012, para 1000 ml. Para 1 litro = 12 N.

Sabiendo la normalidad de la solución comercial, se averigua el volumen que se ha de tomar para elaborar un
litro de una solución 0,02 N de HCl.

V·N =V' · N' 1 L · 0,02 = V' · 12 N V' = 0,00166 L 1,66 ml.

Resultados

Muestra Color (fenolftaleína) Valoración ppm CO3 2−


Agua artificial Violeta 10,5 ml 252
Topas (SA) Incoloro 0 ml 0
Charca Violeta 2,5 ml 60

Valoración ml utilizados (sin


Muestra Color (verde de bromocresol) (incluida la valoración ppm HCO−3
primera) anterior)
Agua artificial Azul 17,5 ml (−10,5 ml) = 7 170,8
Topas (SA) Azul 7 ml (−0 ml)= 7 170,8
Charca Azul 22 ml (−2,5 ml) = 19,5 475,8

Observaciones y conclusiones

En la muestra de agua de Topas (SA), no aparece un color rosado o violeta cuando se añade fenolftaleína, por
lo que no hay presencia de carbonatos. No se ha dado ningún caso en este análisis, pero si hubiera existido
alguna muestra sin bicarbonatos, una vez valorada la muestra para carbonatos, habría virado su color a
amarillo.

No se ha encontrado ninguna clasificación de agua en la que se valore esta por su contenido en carbonatos
aisladamente, siempre va acompañado este análisis de otros parámetros para caracterizar el agua, como el pH,
concentración de Na, etc.

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Lo único que se puede deducir en base al análisis de la cantidad de bicarbonatos es que son muestras de agua
dulce, cuya concentración de dichos iones varía entre 50 y 350 ppm, por regla general (Custodio, 1976).
Incluso la muestra charca, presenta una concentración más elevada. Se debe tener en cuenta que los valores de
HCO−3 medidos en el laboratorio suelen ser algo menores que los reales.

Si las muestras que contienen bicarbonatos además presentaran sodio, serían de mala calidad para el riego.

Teniendo en cuenta la legislación nacional actual (R.D. 1138/1990 de 14 de Septiembre) sobre la calidad de
las aguas potables, se considera, para las aguas potables de consumo humano sometidas a un tratamiento de
ablandamiento, una concentración mínima de HCO−3 de 30 ppm. Por lo que todas las muestras se consideran
aguas potables para este parámetro.

Para determinar la potabilidad haría falta analizar muchos más parámetros.

Porción de suelo con carbonatos secundarios

(Fuente: www.edafología.net)

Práctica 3: Medida de la Demanda Química de Oxígeno en agua.

Introducción

La D. Q. O. Es la demanda química de oxígeno. Es el parámetro utilizado para caracterizar la contaminación


orgánica del agua que se mide a partir de la cantidad de oxígeno disuelto necesario para la degradación
química de los contaminantes orgánicos que contiene. Se entiende como degradación química la reacción de
un oxidante químico, bien dicromato potásico, bien permanganato potásico, que consume materia orgánica.

No debe confundirse con la D. B. O., que es el parámetro utilizado para caracterizar la calidad de un agua, que
mide la cantidad de oxígeno necesaria para la degradación biológica de las materias orgánicas que contiene.
Es un indicador del grado de contaminación orgánica del agua. La diferencia principal entre los dos
parámetros es que la medida de la D. B. O. da como resultado la cantidad de materia orgánica biodegradable
que contiene el agua a estudio (oxidación orgánica); y la medida de la D. Q. O. muestra la cantidad de materia
orgánica no biodegradable que presenta el agua a estudio (oxidación química).

Las unidades en las que se miden son gramos de oxígeno / metros cúbicos de agua o en el equivalente
miligramos de oxígeno / litros de agua. Por lo que sus dimensiones físicas son MASA/VOLUMEN = M/V.

g O2 mg O2

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−−−−−−−−−−− = −−−−−−−−−−

m3 H2O l H2O

Son parámetos complementarios para medir el índice de biodegradabilidad del

D. B. O.5

agua = , que toma los valores que se muestran en la tabla:

D. Q. O.

Valor Tipo de agua


Menor que 0, 2 No biodegradable
Entre 0, 2 y 0, 4 Biodegradable
Mayor que 0, 4 Muy biodegradable

(Nota: El parámetro que se incluye en el cálculo del índice de Biodegradabilidad es D. B. O.5, cuya medida se
toma siguiendo unos estándares: Se deja reposar el agua 5 días, la temperatura debe ser 20 ºC, en un recipiente
cerrado, fuera del contacto del aire y en oscuridad).

(Principio, reactivos, procedimiento y cálculos se muestran en las fotocopias anteriores).

Resultados

Muestras Volumen gastado de Sal de Mohr D.Q.O. (mg/L = ppm)


Blanco 9,90 ml 0
Agua residual (Salamanca) 8,20 ml 17,17
Topas (Salamanca) 8,00 ml 19,19
Negrilla de Palencia (Sa) 9,05 ml 8,58

Conclusiones

La muestra más contaminada por materia orgánica es el agua de Topas (Sa), ya que presenta la demanda
química de oxígeno más alta, es decir, se necesitan 19,19 miligramos de oxígeno por cada litro de agua para
degradar la materia orgánica que contiene la muestra.

Según Custodio (1976), se pueden considerar aguas no contaminadas, las que presenten un valor para la D. Q.
O. Menor de 15 ppm, por lo que la única que no estaría contaminada por materia orgánica, sería el agua de
Negrilla de Palencia (Salamanca).

Práctica 4: Determinación de metales pesados en suelo

Introducción

Los metales pesados una vez depositados en el suelo, tienden a mantenerse, al menos inicialmente, en los
horizontes superficiales siendo subsiguientemente sometidos a una serie de procesos de retención semejantes
a los que aparecen en suelos naturales, con la salvedad de que suelen ser incorporados en mayores
concentraciones y bajo formas complejas muy variables dependiendo de la fuente contaminante. Entre tales
procesos cabe citarse, los relativos a precipitación como fase sólida del suelo, adsorción por coloides

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inorgánicos−arcillas, óxidos y oxihidróxidos de hierro y manganeso y sobre materia orgánica, y reacciones de
complejación con la materia orgánica del suelo.

La persistencia de estos metales pesados en los suelos es mucho mayor que en cualquier otro medio de la
biosfera y la contaminación que producen resulta virtualmente permanente. Por otra parte su carácter tóxico y
acumulativo ocasiona graves daños en plantas, animales y el hombre. La alta y sostenida carga de
contaminantes aplicados a los suelos puede superar su capacidad de retención, fijación y adsorción
contribuyendo a la disponibilidad de los contaminares y su translocación a las plantas o aguas subterráneas.

(Objetivo, fundamento, método y cálculos se explican en la fotocopia anterior)

Medida de la concentración de metales pesados en suelos mediante espectrofotómetro de absorción atómica.


Fundamento.

• Bases: El color de la muestra (absorbancia a cierta longitud de onda) es proporcional a la concentración del
analito (metal pesado) de la muestra.
• Parámetros: Transmitancia: T = P / Po

Absorbancia: A = Log (Po / P)

Absortividad molar (ðð: A = ð·b·C

Ley de Lambert − Beer: Log (Po / P) = ð·b·C

Siendo P la radiación emitida, Po la radiación incidente, C la concentración y b la ordenada en el origen de la


recta obtenida al representar la absorbancia frente a la cantidad de metal pesado.

El aparato con el que realizamos la medida de la absorbancia es un espectrofotómetro de absorción atómica,


que puede ser de doble haz de luz o de un solo haz. Consta de las siguientes partes:

• Fuente de luz: Lámparas de Wolframio, nitrógeno, Deuterio...


• Monocromador: prisma o redes de difracción.
• Muestra: en cubeta de vidrio transparente para determinaciones en el espectro visible.
• Detectores: fotomultiplicador.
• Representación gráfica del espectro: clásico o de diodos en fila.

Esquema de un Espectrofotómetro de un solo haz

Obturador Fotodetector Medidor

Fuente

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Espectrofotómetro de absorción atómica

(Fuente: hercules.cedes.es)

Resultados

Para cada elemento a analizar, se utiliza una lámpara específica y se elabora una recta de calibrado,
determinada por los siguientes puntos:

Longitud de
Elemento Rango Punto 1 Punto 2 Punto 3
onda (nm)
Cadmio 228,8 3 0,9 1,8 2,7
Zinc 213,9 2 0,4 0,8 1,6
Cobre 325,6 10 2 4 8
Plomo 217 30 5 10 20

Primera extracción, medidas de absorbancia obtenidas

Muestra Elemento Dilución Absorbancia Muestra Elemento Dilución Absorbancia


1 Cd 50 1,5 2 Cd 200 1,0
1 Zn 50 0,9 2 Zn 200 0,5
1 Cu 10 4,4 2 Cu 50 2,9
1 Pb 0 17,0 2 Pb 50 7,0
Muestra Elemento Dilución Absorbancia Muestra Elemento Dilución Absorbancia
3 Cd 100 1,7 4 Cd 100 1,7
3 Zn 100 1,1 4 Zn 100 1,1
3 Cu 20 5,6 4 Cu 50 2,5
3 Pb 20 10,0 4 Pb 50 5,0

Segunda extracción, medidas de absorbancia obtenidas

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Muestra Elemento Dilución Absorbancia Muestra Elemento Dilución Absorbancia
1 Cd 100 1,2 2 Cd 0 1,5
1 Zn 50 1,5 2 Zn 0 1,1
1 Cu 50 2,2 2 Cu 0 6,1
1 Pb 50 7,0 2 Pb 10 6,0
Muestra Elemento Dilución Absorbancia Muestra Elemento Dilución Absorbancia
3 Cd 10 1,1 4 Cd 5 1,6
3 Zn 10 0,5 4 Zn 5 1,0
3 Cu 10 4,2 4 Cu 5 5,0
3 Pb 20 12,0 4 Pb 10 16,0

Cálculos de la primera extracción

Cobre Concentración (ppm) Cadmio Concentración (ppm)


Muestra 1 274 Muestra 1 487
Muestra 2 173 Muestra 2 362
Muestra 3 206 Muestra 3 392
Muestra 4 193 Muestra 4 392
Zinc Concentración (ppm) Plomo Concentración (ppm)
Muestra 1 282 Muestra 1 1036
Muestra 2 227 Muestra 2 686
Muestra 3 217 Muestra 3 836
Muestra 4 217 Muestra 4 786

Cálculos de la segunda extracción

Cobre Concentración (ppm) Cadmio Concentración (ppm)


Muestra 1 110 Muestra 1 120
Muestra 2 0 Muestra 2 0
Muestra 3 42 Muestra 3 11
Muestra 4 25 Muestra 4 8
Zinc Concentración (ppm) Plomo Concentración (ppm)
Muestra 1 75 Muestra 1 350
Muestra 2 0 Muestra 2 60
Muestra 3 5 Muestra 3 240
Muestra 4 8 Muestra 4 160

Cálculo del porcentaje de extracción

Cobre % Cadmio % Zinc % Plomo %


Muestra 1 40,14 Muestra 1 24,64 Muestra 1 26,59 Muestra 1 33,78
Muestra 2 0 Muestra 2 0 Muestra 2 0 Muestra 2 8,74
Muestra 3 20,38 Muestra 3 2,80 Muestra 3 2,30 Muestra 3 28,70
Muestra 4 12,95 Muestra 4 2,04 Muestra 4 3,68 Muestra 4 20,35

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Conclusiones

Se observa que la muestra que más elementos adsorbe (que presenta el mayor porcentaje de extracción para
todos los elementos), es la muestra nº 1. Era lo que cabía esperar, puesto que corresponde a un horizonte Bt
de suelo, caracterizado por un enriquecimiento de arcilla iluvial (31,1% de arcilla). Se comprueba entonces,
que los suelos arcillosos son capaces de adsorber más iones de carga positiva (como los elementos que nos
ocupan). Esto es debido a que las partículas de arcilla y del complejo arcilloso−húmico se encuentran
cargadas negativamente. Por ello el complejo arcilloso−húmico se llama también complejo adsorbente.

Por el contrario, la muestra nº 2 presenta el menor porcentaje de extracción, debido a la poca capacidad de
adsorción que presentan los perfiles del tipo C3, caracterizados por ser suelos blandos, sueltos y no
edafizados, más parecido a un horizonte C, pero en transición a un horizonte R, por eso tiene un alto
contenido en arena gruesa (92,6%).

De las muestras pertenecientes a un horizonte At (caracterizado por tener una acumulación de materia
orgánica sin perturbar), se puede deducir que la que más elementos pesados retiene es la nº 3, debido al
complejo arcillo−húmico que presenta, aunque en poco porcentaje.

Es necesario tener en cuenta estos hechos en proyectos de edificación, porque según el tipo de instalación que
vaya a recibir el suelo, deberá de ser unas características u otras. Por ejemplo, en el caso que nos ocupa de los
metales pesados, no se debe asentar un vertedero sobre un suelo que retenga estos elementos, pues se verán
afectadas las plantas, los organismos del suelo y el agua que drene ese suelo por los metales pesados que
desprenderán los residuos almacenados.

Aunque no podamos realizar una comparación con las muestras analizadas, cabe destacar que, en la
legislación nacional actual, según el Real Decreto 1310/1990 de 29 de Octubre, se establecen como valores
límites de contenido en metales pesados en el suelo (en mg/kg de materia seca de una muestra representativa):

Parámetros

Valores límite:

Suelos con pH menor de 7

Valores límite:

Suelos con pH mayor de 7

Cadmio

3,0

Cobre

50

210,0

Niquel

10
30

112,0

Plomo

50

300,0

Zinc

150

450,0

Mercurio

1,5

Cromo

100

150,0

BIBLIOGRAFÍA

• Custodio, E.y Llamas, M. R. Hidrología subterránea. Barcelona. Omega. 1976.

• García Díaz, J. C. Y Méndez−Romero, F. Aplicación del análisis [...] regados con aguas residuales
urbanas no depuradas. Universidad Politécnica de Valencia. Lleida. 2003.

• Lara Hernández, J. M. (editor). Biosfera, ecología y evolución. (CD−ROM). Ed. Planeta. 1997.

• Metcalf&Eddy. Tratamiento y depuración de las aguas residuales. Ed. McGraw−Hill. 1996.

• AA.VV. Diccionario de la Naturaleza. Hombre, ecología y paisaje .Madrid. Ed. Espasa Calpe. 1993.

• hercules.cedex.es/equipos_ceh/ftir.htm

• www.adripalomares.com/AreaActua/pueblos/Villafafila.htm

• www.boe.es

• www.edafología.net

• www.lenntech.com

• www.net−interlab.com/archivo_crison/conductimetros.html

11
PRÁCTICAS DE CONSERVACIÓN DE SUELOS Y AGUAS

ÍNDICE

CONTENIDO Pág.

Práctica 1: Medida de la salinidad del suelo


3

Práctica 2: Determinación de carbonatos/bicarbonatos en agua


7

Práctica 2: Resultados
10

Práctica 3: Medida de la demanda química de oxígeno en agua


12

Práctica 4: Determinación de metales pesados en suelo


16

Práctica 4: Conclusiones
20

Bibliografía
22

Circuitoo

Referenciaa

Selector de longitud de onda

Muestra

12

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