Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Incomunicación
La infidelidad es un síntoma de la serie de crisis por las que atraviesa la pareja. Si buscamos en
el fondo, descubriremos que somos infieles cuando no encontramos en nuestra pareja lo que
buscamos y nuestra relación no satisface completamente nuestras necesidades o en algunos
casos simplemente por placer como ya mencionamos anteriormente. Sin embargo, superar la
crisis dependerá de la forma en que podamos comunicarnos como pareja.
Psicoterapia infantil.
“Dentro de cada niño existe una historia que necesita contarse, una
historia que nadie más ha tenido tiempo de escuchar.”
Pero a veces los cambios no son fáciles de asimilar. El niño puede entonces
desarrollar conductas inapropiadas, sentimientos que lo incomodan y le
lastiman, sensaciones con las que se siente incapaz de lidiar.
En Psicoterapia, el niño aprende a conocer sus emociones, cómo se llaman,
de dónde provienen y qué puede hacer con ellas.
Podemos ayudarte.
-Por lo que se tiene: en muchas ocasiones, también se llega a ser infiel, cuando uno de
la pareja por haber obtenido poder, dinero y una posición social, siente que se ha ganado
el derecho a tener un mayor potencial sexual con el sexo opuesto.
-Cuando la pareja lo permite porque sabe que la relación esta mal: se da sobre todo
cuando ambos se dan cuenta de las deficiencias de su relación, y por lo tanto estan de
acuerdo en que los dos o a veces uno tenga relaciones extramaritales con otra persona,
de tal forma que con ella pueda satisfacer lo que le hace falta en su relación con su
pareja estable.
Introducción
La infidelidad en las relaciones de pareja tiene consecuencias devastadoras. Es la
primera causa de divorcio (Hall y Fincham, 2006) no solamente en occidente sino en
otras muchas culturas estudiadas (Betzig, 1989) y está asociada al maltrato de la esposa
o a su asesinato (Daly y Wilson 1988). Puede causar al traicionado angustia y le puede
desencadenar ataques de furia y sentimientos de humillación (Buunk y van Driel, 1989;
Daly y Wilson, 1988; Lawson y Samson, 1988) también está asociada a la depresión
mayor y a la ansiedad (Cano y Leary, 2000).
Dupree y otros (2007) han realizado una revisión de los métodos ahora existentes para
proponer un tratamiento basado en el consenso entre los expertos. En todos los que
consideran encuentran como elemento fundamental la propuesta de que se dé un
proceso de perdón que lleve a la reconciliación. El perdón es un proceso que tiene
efectos saludables en la persona que perdona promoviendo su salud mental; pero ha sido
incorporado al quehacer terapéutico en fechas muy recientes y no hay un consenso muy
elaborado sobre cuales son los procesos que se han de seguir para llevarlo a cabo
(Wade, Johnson, y Meyer, 2008). Se puede afirmar que la reconciliación que se busca
en la pareja después de la infidelidad tiene que pasar por un proceso de pedir perdón y
perdonar. El propósito de este artículo es profundizar en como se puede llevar a cabo el
proceso de reconstrucción de la pareja en el contexto de la infidelidad.
Qué es la infidelidad
La fidelidad es una de las bases sobre las que se construyen la inmensa mayoría de los
matrimonios y de las parejas que mantienen una relación estable. Ahora bien, raramente
se establece de forma explícita y clara en qué consiste ser fiel. Muchas veces no se
hacen explícitos los comportamientos que son admisibles para cada uno en la relación
de pareja. Se dan por supuestos, es decir, se establecen de forma implícita de acuerdo
con elementos como los usos sociales, o las costumbres y suposiciones de las familias
de origen o del contexto social de cada cual. Por ello, puede que lo que es infidelidad
para el traicionado no lo sea para el que ha sido infiel. Por ejemplo, el uso de
pornografía puede ser considerado normal por el marido, mientras que la mujer lo
considera una traición porque él está pensando en otras mujeres en lugar de en ella; o el
contacto amistoso con anteriores parejas puede ser considerado infidelidad por una
parte, mientras que la otra lo considera normal. En consecuencia, en la consulta es
importante evaluar en cada caso lo que significa infidelidad para cada miembro de la
pareja, porque lo que puede parecer un intento de quitar importancia al hecho por parte
del que ha sido infiel puede que sea realmente una diferencia de estándares a la hora de
considerar lo que es infidelidad.
Efectos de la infidelidad
Cuando alguien te hace daño es como si te mordiera una serpiente. Las hay que tienen la
boca grande y hacen heridas inmensas. Curar una mordedura así puede ser largo y
difícil; pero cualquier herida se cierra finalmente. Pero el problema es mucho peor si la
serpiente es venenosa y te deja un veneno dentro que impide que la herida se cierre. Los
venenos más comunes son el de la venganza, el del ojo por ojo, el de buscar justicia y
reparación a ultranza. El veneno puede estar actuando durante muchos años y la herida
no se cierra, el dolor no cesa durante todo ese tiempo y tu vida pierde alegría, fuerza y
energía. Cada vez que piensas en la venganza, o la injusticia que te han hecho, la herida
se abre y duele, porque recuerdas el daño que te han hecho y el recuerdo del sufrimiento
te lleva a sentirlo de nuevo. Sacar el veneno de tu cuerpo implica dejar de querer
vengarse, en resumen dejar de hacer conductas destructivas hacia quien te mordió.
Como te decía solamente pensando en la venganza el veneno se pone en marcha. Por
eso, si quieres que la herida se cure, has de dejar los pensamientos voluntarios de
venganza hacia quien te hizo daño. Indudablemente tendrás que procurar que la
serpiente no te vuelva a morder; pero para eso no tendrás que matarla, basta con evitarla
o aprender a defenderte de ella o asegurarte de que lo que ha ocurrido ha sido una
acción excepcional que no se volverá a repetir. En la búsqueda de la justicia tienes que
tener en cuenta que no se trata de dejar de defender tus derechos, se trata de no buscar
en ella un desahogo emocional.
Los factores psicológicos o emocionales influyen y modulan todos los procesos vitales, tanto en
estados de salud como de enfermedad. Esto es aún más relevante cuando las personas están
siendo afectadas por enfermedades crónicas o potencialmente graves como son las
enfermedades inflamatorias intestinales.
No hay evidencias categóricas para para afirmar esto. Sin embargo, estos factores pueden
influir en como son vividas estas enfermedades por quien las padece. Estos son aspectos
vitales que siempre deben ser considerados y abordados en cada individuo.
Los aspectos emocionales o de personalidad de cada persona son inseparables del cuerpo.
Los síntomas de muchas enfermedades incluidas las digestivas pueden empeorar frente a
situaciones de tensión. Stress emocional o exceso de trabajo físico pueden gatillar síntomas
digestivos como dolor abdominal o diarrea. Esto se debe probablemente a un cambio en el
funcionamiento intestinal más que a un aumento de la inflamación intestinal, aunque no es
descartable que en procesos crónicos de stress pueda desarrollarse o incrementarse una
inflamación intestinal.
Estos síntomas emocionales si interfieren con la vida diaria deben ser enfrentados con el fin de
superarlos o mejorarlos. Es importante reforzar la autoestima y establecer que esta enfermedad
no es causada por problemas psicológicos o mentales con el fin de evitar sentimientos de
culpa, ya que esta condición no se debe a que el paciente no pueda controlar sus emociones.
Esto debe ser abordado junto con la familia del paciente, amigos, medico tratante, psicólogo y/o
psiquiatras.
El seguir las indicaciones médicas es vital en una adecuada recuperación y en mantener una
vida normal.