El proyecto de construir un basurero nuclear en el estado de Texas cerca de la frontera con
México no es nueva [1]. Una primera propuesta se presento cinco años atrás, para ser desarrollada en la Comunidad de Sierra Blanca, lo que originó una fuerte oposicion por parte de senadores mexicanos y los miembros del Cabildo de El Paso, en Texas. La propuesta finalmente fue archivada. Ahora se encuentra a consideración del senado estatal una nueva iniciativa de ley, que autorizaría al Departamento de Salud de Texas a otorgar licencia a una compañía privada, para administrar un sitio que contendría desperdicios radiactivos de bajo nivel. La Cámara de Representantes de Texas aprobó la iniciativa el pasado mes de abril. La propuesta es construir el depósito nuclear en un área del condado de Andrews, al noroeste de la ciudad de Midland, Texas. En el lugar existe un basurero de desperdicios radiactivos administrado por la compañía Waste Control Specialists, la misma interesada en construir y administrar el depósito nuclear. Los desechos radiactivos serían los considerados de bajo nivel, pero su radiactividad permanecería en niveles peligrosos por cientos de años. Los desechos son producidos por hospitales, laboratorios de investigación y plantas eléctricas. La iniciativa plantea construir un depósito que será “una instalación aislada y asegurada”, capaz de aislar los desperdicios radiactivos del ambiente por cientos de años. Erin Rogers, coordinadora en Texas del grupo ecologista nacional Sierra Club, advirtió que el proyecto en el condado de Andrews podría llegar a contaminar mantos acuíferos y abriría la posibilidad de que esta entidad se convirtiera en el basurero nuclear de todo el país.
INVESTIGACION CIENTIFICA EN MEXICO
Enviado por faith el 16 septiembre 2007 - 2:13am. Hola, yo soy mexicano y hago mi doctorado en España. La investigación en México está centralizada. Casi la mitad de la producción científica depende de la UNAM y del Instituto Politécnico Nacional. Si tu campo son las humanidades, arqueología, biología tienes diversidad de alternativas pero no muy bien remuneradas. Si tu campo es más de biología molecular entonces debes estar cerca de hospitales o grandes ciudades (México, Guadalajara, Monterrey, Puebla). No esperes encontrar a un gobierno mexicano comprometido con la ciencia pero como español, lo que podrías aprovechar es financiamiento de la Agencia Española de Cooperación Internacional, universidades españolas y las múltiples opciones para europeos que existen. El próximo año la ciudad de México iniciará la construcción de un gran complejo científico
EL RESURGIMIENTO DE LA LABOR CIENTIFICA
No cabe duda que incatalizador primordial fue la llegad de una brillante pleyade de pensadores m y científicos españoles aislados como producto de la guerra civil de su país. A partir de entonces la actividad de hacer ciencia comenzó a tener un proceso de crecimiento sostenido lográndose su institucionalización. El proceso de masificación de las universidades en la décadas de los 60 s y 70s y el crecimiento sostenido de la economía nacional, permitió a un mayor numero de estudiantes dedicarse ala ciencia: a principios de los 70s ya existían diversos núcleos de investigación preocupados pro reproducirse .De hecho este es el momento de la profesionalización de la ciencia en México a decir del doctor José Yacaman (1994)lo cual propicio que en 1971 el gobierno fundara el consejo nacional de ciencia y tecnología (CONACYT). TIEMPOS RECIENTES Las continúas crisis sexenales y el deseo de crecer por parte de la comunidad científica a los planes de desarrollo que exigen respuestas inmediatas, tuvo graves consecuencias en la caída de los salarios de los investigadores y en la falta de recursos para financiar investigaciones. Produciéndose el fenómeno conocido hoy como fuga de cerebros sobre todo a universidades y empresas norte americanas Finalmente el CONACYT y SNI han propiciado la desintegración de l proceso tutorial en la información de nuevos científicos, donde el tiempo de maduración de un discípulo ala sombra de su maestro es ingrediente importante en su futura solides académica. Lo grave de este asunto es que mientras que los salarios de los científicos están entre los 10 y 13 mil dólares al año aquí en México en otros países se multiplica demasiado esto .Asociado a esto, mientras que en México el congreso de la unión destina el .04% del Pib ala ciencia y la tecnología, la UNESCO recomienda por lo menos el 1%. En México no es posible realizar investigación de primer mundo por falta de infraestructura y apoyos millonarios, cuando hay grandes problemas de pobreza, salud alimentación, educación y carencia de tecnología apropiada por resolver a través de nuestro trabajo. El Gobierno mexicano ha decidido aceptar el basurero radiactivo que Estados Unidos pretende construir en la frontera entre ambos países.Después de cinco días de declaraciones contradictorias, un escueto comunicado oficial emitido por los secretarios (ministros) de Relaciones Exteriores, Medio Ambiente y Energía de México asegura que el confinamiento de residuos tóxicos de Sierra Blanca (Tejas) "no representará riesgo alguno" para la población y el entorno ecológico de ese país, puesto que "sí cumple con la normatividad mexicana y con los requisitos internacionales de seguridad". La noticia en otros webs webs en español en otros idiomas Este comunicado oficial zanja la polémica y difumina el disgusto mostrado por la responsable de Medio Ambiente, Julia Carabias, y la canciller, Rosario Green, después de que una resolución del Senado norteamericano diera vía libre, el pasado miércoles, a la construcción del confinamiento. De hecho, la Cancillería hizo llegar a EE UU 14 notas diplomáticas (la última el viernes pasado) en las que solicitaba la reubicación del basurero, que distará apenas 30 kilómetros de Ciudad Juárez, la localidad más populosa del Estado mexicano de Chihuahua. El proyecto estadounidense ha levantado las protestas de todos los partidos y de los grupos ecologistas de México, temeroros de que, a pesar de los acuerdos firmados por ambos países, la frontera común se acabe convirtiendo en un basurero nuclear. Un convenio suscrito por México y Estados Unidos en los años ochenta recomendaba a ambos países no usar la zona fronteriza para el emplazamiento de cementerios nucleares.