Sei sulla pagina 1di 5

La Materia: Estados de la Materia

por Anthony Carpi, Ph.D.

De joven, recuerdo haber visto asombrado como hervía el agua


en una cacerola. Al buscar la explicación de por qué se formaban
las burbujas, creí por un tiempo que el movimiento del agua
calentada llevaba aire hacia el fondo de la cacerola que después
se elevaba en forma de burbujas a la superficie. No sabía que lo
que estaba pasando era aún más mágico de lo que imaginaba: las
burbujas no eran de aire, en realidad eran agua en forma de gas.

Los diferentes estados de la materia han confundido a la gente


durante mucho tiempo. Los antiguos griegos fueron los primeros en identificar tres
clases (lo que hoy llamamos estados) de materia, basados en sus observaciones del
agua. Pero estos mismos griegos, en particular el filósofo Thales (624 - 545 BC),
sugirió, incorrectametne, que puesto que el agua podía existir como un elemento
sólido, líquido, o hasta gaseoso bajo condiciones naturales, debía ser el único y
principal elemento en el universo de donde surgía el resto de sustancias. Hoy
sabemos que el agua no es la sustancia fundamental del universo, en realidad, no es
ni siquiera un elemento.

Para entender los diferentes estados en los que la materia existe, es necesario
entender algo llamado Teoría Molecular Kinética de la Materia. La Teoría Molecular
Kinética tiene muchas partes, pero aquí introduciremos sólo algunas. Uno de los
conceptos básicos de la teoría argumenta que los átomos y moléculas poseen una
energía de movimiento, que percibimos como temperatura. En otras palabras, los
átomos y moléculas están en movimiento constante y medimos la energía de estos
movimientos como la temperatura de una sustancia. Mientras más energía hay en
una sustancia, mayor movimiento molecular y mayor la temperatrua percibida.
Consecuentemente, un punto importante es que la cantidad de energía que tienen los
átomos y las moléculas (y por consiguiente la cantidad de movimiento) influye en su
interacción. Al contrario que simples bolas de billar, muchos átomos y moléculas se
atraen entre sí como resultado de varias fuerzas intermoleculares, como lazos de
hidrógenos, fuerzas van der Waals y otras. Los átomos y moléculas que tienen
relativamente pequeñas cantidades de energía (y movimiento) interactuarán
fuertemente entre sí, mientras que aquellos con relativamente altas cantidades de
energía interactuarán poco, si acaso.

¿Cómo se producen estos diferentes estados de la materia? Los átomos que tienen
poca energía interactúan mucho y tienden a “encerrarse” y no interactuar con otros
átomos. Por consiguiente, colectivamente, estos átomos forman una sustancia dura,
lo que llamamos un sólido. Los átomos que poseen mucha energía se mueven
libremente, volando en un espacio y forman lo que llamamos gas. Resulta que hay
varias formas conocidas de materia, algunas de ellas están detalladas a continuación.

Los sólidos se forman cuando las fuerzas de atracción entre moléculas individuales
son mayores que la energía que causa que se separen.
Las moléculas individuales se encierran en su posición y
se quedan en su lugar sin poder moverse. Aunque los
átomos y moléculas de los sólidos se mantienen en
movimiento, el movimiento se limita a una energía
vibracional y las moléculas individuales se matienen fijas
en su lugar y vibran unas al lado de otras. A medida que ©Corel Corporation

la temperatura de un sólido aumenta, la cantidad de


vibración aumenta, pero el sólido mantiene su forma y volumen ya que las moléculas
están encerradas en su lugar y no interactúan entre sí. Para ver un ejemplo de esto,
pulsar en la siguiente animación que muestra la estructura molecular de los cristales
de hielo.

Materia sólida - hielo


Una simulación del movimiento molecular dentro de un cristal de hielo.

(Flash required)

Los líquidos se forman cuando la energía (usualmente en forma de calor) de un


sistema aumenta y la estructura rígida del estado sólido se rompe. Aunque en los
líquidos las moléculas pueden moverse y chocar entre sí,
se mantienen relativamente cerca, como los sólidos.
Usualmente, en los líquidos las fuerzas intermoleculares
(tales como los lazos de hidrógeno que se muestran en la
siguiente animación) unen las moléculas que
seguidamente se rompen. A medida que la temperatura
de un líquido aumenta, la cantidad de movimiento de las ©Corel Corporation
moléculas individuales también aumenta. Como resultado,
los líquidos pueden “circular” para tomar la forma de su
contenedor pero no pueden ser fácilmente comprimidas porque las moléculas ya
están muy unidas. Por consiguiente, los líquidos tienen una forma indefinida, pero un
volumen definido. En el ejemplo de animación siguiente, vemos que el agua líquida
está formada de moléculas que pueden circular libremente, pero que sin embargo, se
mantienen cerca una de otra.

Materia líquida - agua


Una simulación del movimiento molecular dentro del agua líquida.
(Flash required)

Los gases se forman cuando la energía de un sistema


excede todas las fuerzas de atracción entre moléculas.
Así, las moléculas de gas interactúan poco,
ocasionalmente chocándose. En el estado gaseoso, las
moléculas se mueven rápidamente y son libres de circular
en cualquier dirección, extendiéndose en largas
distancias. A medida que la temperatura aumenta, la ©Corel Corporation
cantidad de movimiento de las moléculas individuales
aumenta. Los gases se expanden para llenar sus
contenedores y tienen una densidad baja. Debido a que las moléculas individuales
están ampliamente separadas y pueden circular libremente en el estado gaseoso, los
gases pueden ser fácilmente comprimidos y pueden tener una forma indefinida.

Materia gaseosa - vapor


Una simulación del comportamiento de las moléculas de agua, convirtiéndose en estado gaseoso.

(Flash required)

Los sólidos, líquidos y gases son los estados más comunes de la materia que existen
en nuestro planeta. Si quiere comparar los tres estados, pulse en la siguiente
comparación animada . Note las diferencias del movimiento molecular de las
moléculas de agua en estos tres estados.

Sólido-Líquido- Comparación de Gas

Los plasmas son gases calientes e ionizados. Los plasmas se


forman bajo condiciones de extremadamente alta energía,
tan alta, en realidad, que las moléculas se separan
violentamente y sólo existen átomos sueltos. Más
sorprendente aún, los plasmas tienen tanta energía que los
electrones exteriores son violentamente separados de los
átomos individuales, formando así un gas de iones altamente
cargados y energéticos. Debido a que los átomos en los
©NASA/JPL/Caltech
plasma existen como iones cargados, los plasmas se
comportan de manera diferente que los gases y forman el
cuarto estado de la materia. Los plasmas pueden ser percibidos simplemente al mirar
para arriba; las condiciones de alta energía que existen en las estrellas, tales como el
sol, empujan a los átomos individuales al estado de plasma.

Como hemos visto, el aumento de energía lleva a mayor movimiento molecular. A la


inversa, la energía que disminuye lleva a menor movimiento molecular. Como
resultado, una predicción de la Teoría Kinética Molecular es que si se disminuye la
energía (medida como temperatura) de una sustancia, llegaremos a un punto en que
todo el movimiento molecular se detiene. La temperatura en la cual el movimiento
molecular se detiene se llama cero absoluto y se calcula que es de -273.15 grados
Celsius. Aunque los científicos han enfríado sustancias hasta llegar cerca del cero
absoluto, nunca han podido llegar a esta temperatura. La dificultad en observar una
sustancia a una temperatura de cero absoluto es que para poder “ver” la sustancia se
necesita luz y la luz transfiere energía a la sustancia, lo cual eleva la temperatura. A
pesar de estos desafíos, los científicos han observado, recientemente, un quinto
estado de la materia que sólo existe a temperaturas muy cercanas al cero absoluto.

Los Condensados Bose-Einstein representan un quinto estado de la materia visto


por primera vez en 1955. El estado lleva el nombre de Satyendra Nath Bose y Albert
Einstein, quien predijo su existencia hacia 1920. Los condensados B-E son
superfluídos gaseosos enfríados a temperaturas muy cercanas al cero absoluto. En
este extraño estado, todos los átomos de los condensados alcanzan el mismo estado
mecánico-quantum y pueden fluir sin tener ninguna fricción entre sí. Aún más
extraño es que los condensados B-E pueden “atrapar” luz, para después soltarla
cuando el estado se rompe.

También han sido descritos o vistos varios otros estados de la materia menos
comunes. Algunos de estos estados incluyen cristales líquidos, condensados
fermiónicos, superfluídos, supersólidos y el correctamente denominado "extraña
materia". Para leer más sobre estas fases, visite la página Phase (Fase) de la
Wikipedia, cuyo enlace se encuentra en la sección Para Seguir Explorando.

Transiciones de Fase

La transformación de un estado de la materia a otro se denomina transición de fase.


Las transiciones de fase más comunes tienen hasta nombre. Por ejemplo, los
términos derretir y congelar describen transiciones de fase entre un estado sólido y
líquido y los términos evaporación y condensación describen transiciones entre el
estado líquido y gaseoso. Las transiciones de fase ocurren en momentos muy
precisos, cuando la energía (medida en temperatura) de una sustancia de un estado,
excede la energía permitida en ese estado. Por ejemplo, el agua líquida puede existir
a diferentes niveles de temperatura. El agua fría para beber puede estar alrededor de
4ºC. El agua caliente para la ducha tiene más energía y, por lo tanto, puede estar
alrededor de 40ºC. Sin embargo, a 100ºC en condiciones normales, el agua
empezará una transición de fase y pasará a un estado gaseoso. Por consiguiente, no
importa cuán alta es la llama de la cocina, el agua hirviendo en una cacerola se
mantendrá a 100ºC hasta que toda el agua haya experimentado la transición al
estado gaseoso. El exceso de energía introducido por la alta llama acelerará la
transición de líquido al gas; pero no cambiará la temperatura. La curva de calor
siguiente ilustra los cambios correspondientes en energía (mostrada en calorías) y la
temperatura del agua, a medida que experimenta la transición de fase del estado
líquido al estado gaseoso.

Como puede verse en el gráfico superior, el movimiento de izquierda a derecha


muestra que la temperatura del agua líquida aumenta a medida que se introduce la
energía (calor). A 100ºC el agua empieza a experimentar una transición de fase y la
temperatura se mantiene constante, aún cuando se añade energía (la parte plana del
gráfico). La energía que se introduce durante este periodo es la responsable de la
separación de la fuerzas intermoleculares para que las moléculas de agua
individuales puedan “escapar” hacia el estado gaseoso. Finalmente, una vez que la
transición ha terminado, si se añade más energía al sistema, aumentará el calor del
agua gaseosa o vapor.

Este mismo proceso puede ser visto inversamente, si simplemente miramos al gráfico
superior yendo de la derecha hacia la izquierda. A medida que el vapor se enfría, el
movimiento de las moléculas del agua gaseosa y, por consiguiente, de la
temperatura, disminuirá. Cuando el gas alcanza 100ºC se perderá más energía del
sistema a medida que las fuerzas de atracción entre las moléculas se reformen. Sin
embargo, la temperatura se mantiene constante durante la transición (la parte plana
del gráfico). Finalmente, cuando la condensación se acaba, la temperatura del líquido
empezará a disminuir a medida que la energía se retira.

Las transiciones de fase son una parte importante del mundo que nos rodea. Por
ejemplo, la energía que se pierde cuando la perspiración se evapora de la superficie
de nuestra piel, le permite a nuestro cuerpo regular correctamente su temperatura
durante los día cálidos. Las transiciones de fase tienen un importante rol en la
geología, influenciando la formación mineral y, posiblemente, hasta los terremotos. Y
quién puede ignorar la transición de fase que ocurre a aproximadamente -3ºC,
cuando la crema, tal vez con algunas fresas o pedazos de chocolate, empieza a
formar un sólido helado.

Ahora entendemos lo que ocurre en una cacerola con agua hirviendo. La energía
(calor) introducida en el fondo de la cacerola causa una transición de fase localizada
del estado de agua líquida al estado gaseoso. Ya que los gases son menos densos
que los líquidos, esta transición de fase localizada forma bolsas (o burbujas) de gas
que se elevan a la superficie de la cacerola y que se revientan. Pero la naturaleza es
generalmente más mágica que nuestra imaginación. A pesar de todo lo que sabemos
sobre los estados de la materia y sobre las transiciones de fase, todavía no podemos

Potrebbero piacerti anche