La ciencia que no tenía nombre…

En la antigüedad la ciencia avanzada de antiguas civilizaciones: Grecia, Arabia y China lograron

sus primeros acercamientos a la creación de autómatas, en ellas se inventaron complejas
máquinas mecánicas que funcionaban como un complicado reloj, estas maquinas por más
complejas no lograban acercarse siquiera a la funcionalidad de una calculadora y eran hechas
para un fin especifico, como tocar un órgano de viento. Un poco más cerca llego Leonardo Da
Vinci con su famoso Caballero mecánico, una aproximación al movimiento humano utilizando
la mecánica.

Es difícil creer que los primeros acercamientos reales a la ciencia de la robótica, incluso el uso
del termino”robótica” hayan sido alcanzados por grandes escritores de ciencia ficción aun
antes que científicos e ingenieros, y es que una de las características de la ciencia ficción como
género es la posibilidad de anticiparse a los cambios de la sociedad. El escritor imagina el
futuro y a veces acierta , no siempre por un conocimiento científico superior sino gracias al uso
de la imaginación. Einstein por ejemplo creía que el gran secreto de su inteligencia era su fértil
imaginación.

Karel Capek, 1920 , en la famosa novela R.U.R. (Rossum's Universal Robots) popularizó el
termino “robot “ , que nace de la palabra checa robota que significa trabajos forzados, y que
consecuentemente fue traducida al ingles como robot .

En 1940 En el cuento “¡Mentiroso!”, Isaac Asimov un gran escritor escribió sobre la Robótica
añadiéndole el sufijo –ica tan natural para designar a las disciplinas de la física (hidráulica,
dinámica etc.), al termino Robot dando por fin un nombre a la ciencia que se ocupa del diseño,
manufactura y aplicaciones de los robots. Doce años más tarde, el escritor descubrió que la
palabra "robótica" no figuraba en ningún diccionario, y se adjudicó la invención.

Isaac Asimov fue un pionero de la ciencia de la robótica proponiendo incluso las tres leyes
fundamentales de la Robotica aparecidas por primera vez en el relato Runaround en 1940:

1. Un robot no puede hacer daño a un ser humano o, por inacción, permitir que un ser
humano sufra daño.
2. Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto si estas
órdenes entrasen en conflicto con la Primera Ley.
3. Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que esta protección no
entre en conflicto con la Primera o la Segunda Ley.

Las tres leyes aparecen en un gran número de historias de Asimov, la más famosa, siendo base
incluso para la película con el mismo nombre fue Yo Robot, y es una obligación decir que el
libro es mucho mejor que la película.

Aproximadamente 1950, Joseph Engelberger fascinado leía Yo Robot , e inspirado decidió

estudiar cuan factible era la fabricación de un Robot, para tal fin decidió asociarse con el
Inventor George Devol para fundar la compañía Unimation. La compañía que en veinte años ,
con la aparición de los microchips, lograría constituirse en la compañía número uno del mundo
para la fabricación de Robots industriales.
Isaac Asimov el escritor de ciencia ficción pasó a convertirse en el padre de la Robótica
moderna y la inspiración de muchos estudiantes y expertos en el tema. Demostrando que la
imaginación es la herramienta fundamental de toda ciencia incluso antes del conocimiento.

Pablo Iván Zamora Mercado

IEEE Rama Estudiantil
Universidad Mayor de San Andrés