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588 .- PROCLO.: In Alc., ed. Westerink, 1954, p.8; Citado por FRIEDLÄNDER.: Plato I,
p.366, y GUTHRIE, W.K.C.: A History of Greek Philosophy. vol. IV, p.14, de la edición
española.
589 .- GUTHRIE, W.K.C.: A History of Greek Philosophy. Cambridge University Press,
1962. Traducción española de Álvaro Vallejo Campos y Alberto Medina González: Historia
de la Filosofía griega. vol. IV, p.14. Asímismo para la historia de esta recuperación cf.:
GUNDER, H.: Der platonische Dialog. Heidelberg, 1968.
590 .- Citado por: GUTHRIE, W.K.C.: A History of Greek Philosophy. Cambridge
University Press, 1962. Traducción española de Álvaro Vallejo Campos y Alberto Medina
González: Historia de la Filosofía griega. vol. IV, p.14.
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platónicos, a saber, la perspectiva ontológica y la dramática (591 ). A
nuestro entender, si los diálogos están escritos con una intención
formal o de método no queda recogida en la perspectiva dramática,
pues ésta es entendida en un sentido literario y no como lo que aquí
llamaremos estructuras operatorias. Ambas perspectivas, la literaria y
la estructural coinciden en la imagen producida, pero una
interpretación operatoria supone que los diálogos tendrían una
intencionalidad metodológica, en este caso, referida a la creación
funcional de imágenes y no simplemente a su utilización. Desde la
perspectiva literaria el "Símil de la línea" o el "mito de la caverna"
son dos metáforas, pero desde la perspectiva operatoria se trata de
dos " modelos" o "estructuras" para crear imágenes.
“Sócrates.- Pero creo que me concederás que todo discurso debe estar
compuesto como un organismo vivo, de forma que no sea acéfalo, ni
le falten los pies, sino que tenga medio y extremos, y que al escribirlo,
se combinen las partes entre sí y con el todo” (593 ).
591 .- ROSEN, S.: Plato’s Sophist. The Drama of original and image. London, Yale
University Press (1929) 1983.
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Sócrates, a excepción de las Leyes, donde no aparece, y en el
Parménides, el Sofista y el Político donde no tiene el papel central.
594 .- PLATÓN.: República, 328 e 3-7. Esta es la respuesta de Sócrates a Céfalo sobre la
conversación y la necesidad de aprender de los mayores.
po…a t…j ™stin, trace‹a kaˆ calep»,
À ·vd…a kaˆ eÜporoj. kaˆ d¾ kaˆ soà ¹dšwj ¨n puqo…mhn
Óti soi fa…netai toàto, ™peid¾ ™ntaàqa ½dh e• tÁj ¹lik…aj
Ö d¾ "<™pˆ g»raoj oÙdù>" fasin e•nai oƒ poihta…, pÒteron
calepÕn toà b…ou, À pîj sÝ aÙtÕ ™xaggšlleij.
595 .- Platón se refiere a las conexiones entre los conceptos en el Fedón, 100 e 8 y ss.,
sostiene en el Fedón que la idea no sólo es idéntica a sí misma, sino que está
indisolublemente asociada a otras ideas determinadas. En este punto seguimos claramente la
tesis, que Platón pretende establecer un método para evaluar las consecuencias de las
proposiciones, mantenida por Gadamer sobre Platón: GADAMER, H-G.: L’Inizio della
filosofia occidentale. Instituto Italiano per gli Studi Filosofici y Edizioni, 1993. Traducción
española de Ramón Alfonso Díez y Mª del Carmen Blanco: El inicio de la filosofía
occidental. Barcelona, Paidós, 1995, p.62.
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La utilización de diálogos por parte de Platón sobrepasa la mera
cuestión formal sin perder el carácter evocación y recuerdo (596 ). El arte
de Homero y de Hesíodo: el e5poj era considerado como una
inspiración de las musas, en Homero hablan por su boca, por tanto la
verdad era intrínseca al método pues estaba asegurada por los dioses
(597 ). El lógoj en general y el de Platón en particular, se enfrenta con el
problema de la verdad o quizá más correctamente con el problema del
discurso convincente, problema central de toda retórica. Cuando la
retórica estudia el discurso mediante logoj, el problema de la verdad
se convierte en el de los efectos del discurso. Por ello nos dice
Aristóteles al inicio de la Poética (598 ) que “Hablaremos de la poética
en sí y de sus diferentes tipos, del efecto que cada uno tiene...”.
Platón, al igual que la retórica se preocupa por los efectos del discurso,
su crítica a la poesía se basa en ello. Critica los efectos inconscientes
de la poesía. Pero estilísticamente tiene en mente la tragedia y más
concretamente, creemos, la comedia como modelo discursivo general y
tomará del e5poj la descripción por imágenes típica de los rapsodas.
596 .- Havelock considera que el principal elemento de la poesía épica era su carácter de
evocación y recuerdo: HAVELOCK, E.A.: Preface to Plato. Harvard University Press, 1963.
Traducción española de Ramón Buenaventura: Prefacio a Platón. Madrid, Visor, 1994, p.
96. "Desde el punto de vista de nuestro actual análisis, la épica ha de considerarse, antes que
ninguna otra cosa, un acto de evocación y de recuerdo".
597 .- En gran medida esta concepción casi divina se sigue manteniendo en algunas artes
como la pintura, en la que no cabe la pregunta por el significado al autor, sino que se produce
una participación con la divinidad, tanto del autor, que expresa algo que no puede verbalizar,
como del espectador que capta ese mensaje y que tampoco puede explicarlo.
598 .- ARISTOTELES.: Poética, 1447 a 8-9. Para esta obra de Aristóteles utilizamos la
traducción de Anibal González Pérez en la edición de las poéticas de Aristóteles, Horacio y
Boileau, de Editora Nacional (Madrid, Editora Nacional, 1982). Perˆ poihtikÁj aÙtÁj te
kaˆ tîn e„dîn aÙtÁj, ¼n tina
dÚnamin ›kaston œcei, ...
599 .- .-" Es, pues, la tragedia imitación de una acción esforzada y completa, de cierta
amplitud, en lenguaje sazonado, separada cada una de las especies (de aderezos) en las
distintas partes, actuando los personajes y no mediante relato, y que mediante compasión y
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función, al convertirlo en texto para su lectura, impone una estructura
que lleva a eliminar al propio lector, pasando a ser éste un personaje
más de la obra (600 ). Es decir, la opinión que se forma el lector cuando
se lo permite el diálogo en el proceso de lectura, es una más de los
contertulios que aparecen y definitivamente queda eliminado si ésta la
reexpone uno de los personajes en un momento dado. Platón juega a
que el lector recorra cada uno de los personajes. En una estructura de
libro argumentativa, como p.e. las obras aristotélicas, el lector se sitúa
ante la obra. Cuando un sujeto está leyendo un determinado libro, las
opiniones que allí aparecen son las del autor, y si este cita a otros será
para refrendar o cuestionar una determinada tesis, por tanto el lector
tendrá siempre como referencia al sujeto que escribe el libro. El lector
cuestionará o aprobará lo que está leyendo. Le parecerán
convincentes o no las tesis, pues estará situado frente a la obra. De
esta forma el texto es la opinión del autor que contrasta con la del
lector.
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saben “nada preciso” (602 ) del tema del alma?. Esta recreación del
panorama cultural griego es otra de las estrategias dramáticas de
Platón. Un sujeto del siglo –IV se siente retratado por que la escena,
las costumbres, las formas, son las de Atenas misma.
602 .- PLATÓN.: Fedón, 61 d. En este pasaje resulta sorprendente que dos discípulos de
Filolao no estén al corriente de las teorías pitagóricas sobre la inmortalidad del alma, a no ser
que Platón quiera establecer que sobre estos temas no existe ninguna certeza, como se podría
desprender de los párrafos siguientes.
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reconocerse”, como señala Gadamer (603 ). Mas que de “un modelo
vacio” como dice Gadamer, se trataría de un personaje universal.
603 .- GADAMER, H-G.: L’Inizio della filosofia occidentale. Instituto Italiano per gli
Studi Filosofici y Edizioni, 1993. Traducción española de Ramón Alfonso Díez y Mª del
Carmen Blanco: El inicio de la filosofía occidental. Barcelona, Paidós, 1995, p. 55.
604 .- La dialéctica para Aristóteles es idéntica a la retórica, mientras que para Platón la
dialéctica encuentra lo verosímil (la vivacidad). Para el tema de la dialéctica puede cf. el
estudio que realiza Quintín Racionero en: ARISTÓTELES.: Retórica. Madrid, Gredos,
1994.
605 .- El concepto de recta razón (ÑrqÕn lógon) en la Estoa es de capital importancia y
representa el criterio de verdad, pues es ella la que posee el peso decisivo en el conocimiento.
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misma dicen que es o una representación comprensiva que es segura o
una disposición en la recepción de las representaciones que no muda
por efecto del razonamiento. Y sin la especulación dialéctica el sabio
no sería infalible en su razonamiento; pues gracias a ella se distinguen
la verdad y la mentira y se discriminan claramente lo que es plausible
y lo que se expresa con ambigüedad; y sin ella no es posible proceder
metódicamente mediante preguntas y respuestas.” (606 )
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pero son condiciones materiales; las posibilidades que un anuncio
ofrece están determinadas en unas direcciones concretas y no en
otras.
certeza de un tipo al que vamos a llamar certeza no sensible.” HABERMAS, J.: Vorstudien
und Ergänzungen zur Theorie des kommunikativen. Frankfurt y Main, Suhrkamp, 1984.
Traducción española: Teoría de la acción comunicativa. Madrid, Cátedra, 1989, p.125.
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4.2. CARACTERÍSTICAS DEL DIÁLOGO PLATÓNICO.
608 .- SZLEZÁK, Th. A.: Como leggere Platone. Milano, Rusconi, 1991. Traducción
española de José Luis García Rúa: Leer a Platón. Madrid, Alianza, 1997, pp.36 y ss.
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Y puede replicar a varios interlocutores, pero él nunca es
replicado.
609 .- En este sentido cf. la introducción de Gustavo Bueno al Protágoras (Oviedo, Pentalfa,
1980, pp. 15-84), donde el diálogo es interpretado con el símil de un combate de boxeo.
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3.- Considerar a los personajes, como individuos o en su
defecto como corrientes culturales, no deja de suponer el
haber sido atrapado por la imagen platónica de tal forma
que trasladamos determinados conceptos de la actualidad
al mundo griego sin una justificación adecuada. Un
personaje es una creación literaria aunque ésta coincida
con la imagen que nosotros poseemos de ese nombre,
pero no representa fidedignamente las opiniones y
actitudes vitales de un sujeto. Por otra parte, considerar a
un personaje como la síntesis de un representante de una
corriente cultural de la época, supone que estamos
trasladando un concepto actual propio de la sociedad de
comunicación, que es ella misma un producto, entre otros
factores, del platonismo.
610 .- En este sentido podemos ver las relaciones entre las leyes, el carácter normativo de los
directores de banquetes y su relación con la educación de los ciudadanos en: RELANCIO
MENENDEZ, José Luis.: El problema de la ‘participación’ de todos los ciudadanos en
Platón (Las Leyes I-II). Tesis Doctoral, Oviedo, 1996.
611 .- FRIEDLÄNDER, Paul.: (1989). Seinswahrheit und Lebenswirklichkeit. 1928.
Traducción española de Santiago GONZÁLEZ ESCUDERO de la alemana de 1964 3ed.;
Platón. Verdad del ser y realidad de vida. Madrid, Tecnos, 1989, p.138.
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7.- La utilización y refutación de los interlocutores supone
un salto o una aporía que conduce a un diálogo posterior,
a una nueva ordenación.
612 .- Algunos de los estudios sobre los mítos platónicos: COUTURAT, L.: De Platonicis
mythis. Paris, Alcan, 1896.; BRISSON, L.: Platon les mots et les mythes. Paris, Maspero,
1982, 238pp. 1982; DROZ. G.: Los mitos platónicos. Barcelona, Labor, 1993, 164pp.;
FRUTIGER, Perceval.: Les mythes de Platon. Etude philosophique et littéraire. Paris,
1930, 4ed. 295pp. 1930; HIRSCH, W.: Platons weg zum Mythos. Berlin-New York, SSch.
Köln De Gruyter, 1971, 399pp.; KOSTER, W.J.W.: Le Mythe de Platon de Zarathoustra
et des Chaldéens. Étude critique sur les relations intelectuelles entre Platon et l’orient.
Leiden, Brill, 1951, 87pp.; KRÜGER, G.: Eros und Mythos bei Plato. Frankfurt/Main,
Klostemann, 1978, 99pp.; LLEDÓ, Emilio.: El surco del tiempo. Meditaciones sobre el
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quedan numerosas sombras por aclarar. La crítica, loa la utilización de
mitos por parte de Platón planteándose el problema del sentido de
estos tanto en la obra como en la doctrina, así como su carácter de
verdad (613 ). Como ya hemos dicho anteriormente, el mito se encuentra
en otro plano para los griegos (614 ). Aristóteles consideraba que el
amante del mito es en cierto sentido un amante del saber, porque el
mito se compone de maravillas (615 ). Debemos tener en consideración
que el mito (mu<q < oj) es para los griegos un “relato”, cualquier tipo de
relato, historia o ficción.
mito platónico de la escritura y la memoria. Barcelona, Editorial Crítica, 1992, 231 pp.;
MATTÉI, Jean-François.: Platon et le miroir du mythe. De l'âge d'or à l'Atlantide,
Thémis/Philosophie Paris (PUF) 1996, VI+330 pp. Bibliographie, Index nominum, Index
rerum.; PIEPER, Josef.: über die Platonichen Mythen. München, Kösel, 1965, 96pp.
Trad., esp., Sobre los mitos platónicos. Barcelona, Herder, 1984. 88pp.; RUIZ YAMUZA,
Emilia.: El mito como estructura formal en Platón. Salamanca, Universidad de Sevilla,
1986, 182pp.; SCHEFFER, Christina.: Platon und Apollon. Vom Logos zurück zum
Mythos, International Plato Studies 7, Sankt Augustin (Academia Verlag) 1996,
Bibliographie.; STEWART, J.A.: The Myths of Plato. G. R. Levy, 1960 (1905).;
VALLEJO CAMPOS, Álvaro.: Mito y persuasión en Platón, Sevilla, Er, Revista de
Filosofía. Suplementos 2, 1993, 349 pp.
613 .- Señalamos algúnos artículos y tratados a modo de ejmplo: BUISMAN,J.R.: Mythen
en Allegorieën in Plato's Kennis en Zijnsleer. Paris-Amsterdam, 1932, 125pp.; ADORNO,
Francesco.: "Due tipi di discorsi in Platone: mito e logos", Mélanges Riondato (E.), 1991,
43-56.; McCABE, Mary Margaret.: “Myth, allegory and argument in Plato", Apeiron, Publ.
by the Dept. of Classical Studies of Monash University, 25 (Clayton, [Australia], 1992) 47-
67.; FREYDBERG, Bernard D.: “Mythos and logos in platonic politeiai", History of
European Ideas, 16 (Oxford, 1993) 607-612.; LENS, Jesús.: “Sobre un mito platónico y su
pervivencia”, Florentia Iliberritana. Revista de Estudios de Antigüedad Clásica, 2 (Granada
1991) 259-267.; LLOYD, Geoffrey E. R.: “Plato and the mathematics and nature, myth and
science [1968, 1983]", Methods and problems in Greek science (recueil), 1991, 333-
351.;ROSSETTI, Livio.: "La dimensión retórica de los mitos platónicos" [trad. de José
Checa Beltrán], Revista de Occidente, 1994, 72-91.; SMITH, Danny L.: “Erotic modes of
discourse. The union of mythos and dialectic in Plato's Phaedrus", Analecta Husserliana 33,
1991, 233-241.;
614 .- Cf. la obra clásica de DETIENNE, M.: Maestros de verdad en la Grecia arcaica.
Madrid, Taurus, 1981.
615 .- ARISTÓTELES.: Metafísica, A, 2, 982 b 18.
616 .- El Diccionario de la Real Academia de la Lengua define “mito” como algo
engañoso: “Del gr. mu<qoj.
1. m. Fábula, ficción alegórica, especialmente en materia religiosa.
2. Relato o noticia que desfigura lo que realmente es una cosa, y le da apariencia de
ser más valiosa o más atractiva.
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historia increíble, deformada. Mientras que para los griegos el mito es
lo aceptado socialmente. Así, como ejemplo, Hecateo de Mileto (617 ),
antecesor de Herodoto, quien comenzaba sus Genealogías
comparando las versiones que se proponía contar (muqe‹tai) con las
explicaciones (lógoi) dadas por otros griegos, señalando que no se
trata de que unas sean más o menos racionales, sino que como dice
explícitamente su versión es lo que él cree que es verdad. Droz señala
que el mito no es un método para buscar la verdad (618 ), sino un medio
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para exponer lo verosímil. Esta interpretación del mito como relato
verosímil, es utilizada por el propio Platón en el Timeo (619 ).
4.3.1.- El mito.
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sólo el conocimiento directo de las sociedades primitivas y una amplia
recopilación de mitos de diversas culturas, sino también una
metodología rigurosa y operativa que nos permite enfrentarnos con el
mito desde nuevas perspectivas, dotando al mito de contenido nuevo,
fundamentado en estructuras operativas dentro de las sociedades (624 )
624 .- Los mitos han sido interpretados de distinta manera. Para Aristóteles, tienen un cierto
valor al considerarlos, como la filosofía, fruto de la admiración ante lo desconocido, pero los
contrapone al verdadero logos:
“Que [la filosofía] no se trata de una ciencia productiva, es evidente ya
por los primeros que filosofaron. Pues los hombres comienzan y comenzaron
siempre a filosofar movidos por la admiración; al principio admirados ante los
fenómenos sorprendentes más comunes; luego avanzando poco a poco y
planteándose problemas mayores, como los cambios de la luna y los relativos a
sol y a las estrellas, y la generación del universo. Pero el que se plantea un
problema o se admira, reconoce su ignorancia. (Por eso también el que ama los
mitos es en cierto modo filósofo; pues el mito se compone de elementos
maravillosos). De suerte que, si filosofaron para huir de la ignorancia, es claro
que buscaban el saber en vista del conocimiento, y no por alguna utilidad. Y así
lo atestigua lo ocurrido. Pues esta disciplina comenzó a buscarse cuando ya
existían casi todas las cosas necesarias y las relativas al descanso y al ornato de
la vida. Es, pues, evidente que no la buscamos por ninguna otra utilidad, sino
que, así como llamamos hombre libre al que es para sí mismo y no para otro,
así consideramos a ésta como la única ciencia libre, pues ésta sola es para sí
misma. [...] Metafísica, 982b 11-28.”
“Oti d' oÙ poihtik», dÁlon kaˆ ™k tîn prètwn filosofh-
s£ntwn: di¦ g¦r tÕ qaum£zein oƒ ¥nqrwpoi kaˆ nàn kaˆ
tÕ prîton ½rxanto filosofe‹n, ™x ¢rcÁj m•n t¦ prÒceira
tîn ¢tÒpwn qaum£santej, e•ta kat¦ mikrÕn oÛtw pro?Òntej
kaˆ perˆ tîn meizÒnwn diapor»santej, oŒon per… te tîn tÁj
sel»nhj paqhm£twn kaˆ tîn perˆ tÕn ¼lion kaˆ ¥stra
kaˆ perˆ tÁj toà pantÕj genšsewj. Ð d' ¢porîn kaˆ qaum£-
zwn o‡etai ¢gnoe‹n (diÕ kaˆ Ð filÒmuqoj filÒsofÒj pèj
™stin: Ð g¦r màqoj sÚgkeitai ™k qaumas…wn): ést' e‡per di¦
tÕ feÚgein t¾n ¥gnoian ™filosÒfhsan, fanerÕn Óti di¦ tÕ
e„dšnai tÕ ™p…stasqai ™d…wkon kaˆ oÙ cr»seèj tinoj ›neken.
marture‹ d• aÙtÕ tÕ sumbebhkÒj: scedÕn g¦r p£ntwn
ØparcÒntwn tîn ¢nagka…wn kaˆ prÕj ·vstènhn kaˆ diagw-
g¾n ¹ toiaÚth frÒnhsij ½rxato zhte‹sqai. dÁlon oân æj di'
oÙdem…an aÙt¾n zhtoàmen cre…an ˜tšran, ¢ll' ésper ¥nqrw-
poj, famšn, ™leÚqeroj Ð aØtoà ›neka kaˆ m¾ ¥llou ên, oÛtw
kaˆ aÙt¾n æj mÒnhn oâsan ™leuqšran tîn ™pisthmîn: mÒnh
g¦r aÛth aØtÁj ›nekšn ™stin. (id)
A veces, usa también el término mythos para referirse a la trama de una comedia. Epicuro
señala, de manera contundente, el abandono del mito para dar lugar a la explicación racional:
«basta con que se excluyan los mitos; cosa que es posible, si en perfecto acuerdo con las
apariencias o fenómenos, los consideramos como signos de lo que no aparece», Carta a
Pitocles, 71). Evhemero, en el siglo III d.C., afirmaba que los dioses y héroes del panteón
homérico eran antiguos reyes divinizados y mitificados. Con ello intentó dar una primera
interpretación racional al origen de los mitos, de manera que al ser racionalizados como fruto
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a las que pertenece. Pero también, para evitar el prejuicio de consolidar
los mitos como propios de las sociedades primitivas (625 ), deben
tenerse en cuenta las investigaciones más recientes que se vienen
realizando sobre los mitos en nuestra sociedad por un amplio grupo de
investigadores como Roland Barthes o Román Gubern, por citar dos
ejemplos (626 ).
278
Marx W.: Introducción a la filosofía de la ciencia. 2 vols., Alianza, Madrid 1973, vol. 1,
p. 70-71.). Pero no existe una única interpretación teórica de los mitos sino que, lejos de
ello, se han propuesto numerosas teorías. Entre los antropólogos, los que más destacaron en
el estudio de los mitos fueron Frazer, Boas (que los relacionó con los cuentos populares),
Radcliffe-Brown, que destacó el aspecto funcional de los mitos en la estructura social, Ruth
Benedict, que los relacionó con los ritos y las religiones, B. Malinowski, que propuso una
definición clásica de mito:
“Enfocado en lo que tiene de vivo, el mito no es una explicación
destinada a satisfacer una curiosidad científica, sino un relato que hace revivir una
realidad original y que responde a una profunda necesidad religiosa, a
aspiraciones morales, a coacciones e imperativos de orden social, e incluso a
exigencias prácticas. En las civilizaciones primitivas el mito desempeña una
función indispensable: expresa, realza y codifica las creencias; salvaguarda los
principios morales y los impone; garantiza la eficacia de las ceremonias rituales y
ofrece reglas prácticas para el uso del hombre. El mito es, pues, un elemento
esencial de la civilización humana; lejos de ser una vana fábula, es, por el
contrario, una realidad viviente a la que no se deja de recurrir; no es en modo
alguno una teoría abstracta o un desfile de imágenes, sino una verdadera
codificación de la religión primitiva y de la sabiduría práctica [...]. Todos estos
relatos son para los indígenas la expresión de una realidad original, mayor y más
llena de sentido que la actual, y que determina la vida inmediata, las actividades
y los destinos de la humanidad. El conocimiento que el hombre tiene de esta
realidad le revela el sentido de los ritos y de los preceptos de orden moral, al
mismo tiempo que el modo de cumplirlos.” MALINOWSKI, B.: Magia,
ciencia y religión, citado por Mircea Eliade en Mito y realidad, Guadarrama,
Madrid 1978, p.26-27.
La corriente funcionalista los ha considerado básicamente como elementos que forman
parte de un sistema social dentro del cual ejerce su propia función, y pasan a ser
comprendidos en el marco más amplio de una sociedad. Para Malinowski, los mitos
manifiestan el carácter estatutario de las instituciones y conductas sociales, y actúan como una
justificación de las costumbres y creencias sociales.
G. Dumézil, Lévi-Strauss y la corriente estructuralista destacan en el mito una doble
referencia: a la sociedad y al lenguaje. El conjunto de mitos de una sociedad es, en este
sentido, una conducta verbal institucionalizada: nos llevan a acontecimientos pasados («antes
de la creación del mundo», o «hace mucho tiempo»), pero «forman parte de una estructura
permanente, que se refiere simultáneamente al pasado, al presente y al futuro». Los mitos se
transmiten básicamente por tradición oral y sin espíritu crítico. En cuanto recuerdan y hacen
presente un hecho acaecido en tiempos inmemoriales, sobre todo en aquellos que narran
relatos sagrados, recurren al culto donde, a través del rito, el recuerdo se vuelve eficaz y activo
y el acaecimiento pasado se renueva y repite. Para Lévi-Strauss las sociedades arcaicas, lejos
de carecer de una estructura lógica, tienen sistemas de enorme complejidad, de entre los que
destacan los mitos. Éstos siempre están relacionados con determinados problemas y crean
situaciones artificiales elaboradas inconscientemente (fruto de la misma estructura del espíritu
humano, semejante en toda época y sociedad), para mediar ante los problemas. Los mitos
tienen, pues, un origen psicológico y son engendrados para solucionar problemas. Son fruto
de la tendencia de la mente a polarizar la experiencia describiéndola en series de opuestos, en
una especie de clasificación binaria, y aparecen como intentos de conciliación de los opuestos.
En su evolución los mitos cambian aspectos superficiales, pero su estructura permanece. Una
de las polaridades más características descritas por Lévi-Strauss es la que enfrenta a la
naturaleza con la cultura, que se manifiesta a través de los mitos relativos a lo crudo y lo
279
Como decíamos, mito (mûqoj) significa para los griegos “relato”,
cualquier tipo de relato, historia o ficción; se aplica tanto a los símiles
de Platón como a las fábulas de Esopo (627 ). Se trata de un término no
marcado frente al epos (narración heroica) y ambos frente a ergon
(hecho) (628 ) tal y como recoge Homero en la Iliada (629 ). Si bien su
etimología es dudosa, el término abarca todos los aspectos generales
del relato y se opone a istoríe (630 ), palabra también de amplios
sentidos, desde “investigación” (631 ) hasta el más difundido de
“escrito narrativo a partir de informaciones” (632 ).
cocido. Por otra parte, la corriente llamada simbolismo ha visto en los mitos una expresión
peculiar humana distinta del pensamiento conceptual. En esta perspectiva destacan los
estudios que les dedicó Ernst Cassirer, quien consideraba los mitos como una forma
simbólica esencial, junto con el lenguaje y la ciencia. Para Cassirer, los mitos, que están en
la base de la religión y del arte, permiten al hombre conducirse mediante representaciones
simbólicas que no están dadas, sino constituidas por la conciencia, y son las primeras formas
de ordenación del mundo. «Expresan la totalidad del ser natural en el lenguaje del ser
humano y social, y la totalidad del ser humano y social en el lenguaje del ser natural». A
partir del mito surge la religión que distingue entre el yo y el no-yo, y entre lo sensible y lo
espiritual. En un sentido parecido surgieron también teorías psicológicas que consideraban los
mitos como producto de la psique humana. Freud, por ejemplo, los relacionaba con los
símbolos y con el sueño. De entre las teorías psicológicas de los mitos destaca también la
elaborada por Jung, que los relacionaba con su teoría de los arquetipos.
627 .- GARCÍA MORENO, J.: “Introducción”, en: APOLODORO.: Biblioteca mitológica.
Madrid, Alianza, 1993, p.8.
628 .- GONZÁLEZ ESCUDERO, Santiago.: “Los mitos de la cosmogonía órfica como
introducción al pitagorísmo”, El Basilisco, 9 (Oviedo, 1980) 11.
629 .- HOMERO.: Iliada, 9, 443
630 .- Para la utilización del termino “istoria” y su uso por Herodoto, cf.: CHATELET.: El
nacimiento de la Historia.Tomo I. Siglo XXI, 1978.
631 .- HERODOTO.: Historias, 2, 29; PLATÓN.: Fedón, 96a; ARISTÓTELES.: De la
respiración de los animales, 447a 7.
632 .- HERODOTO.: Historias, 7, 96.
633 .- Maurice Godelier ha insistido en las interacciones entre cultura y naturaleza en el
pensamiento mítico, exigida por la propia lógica del razonamiento analógico propio del mito.
El esquema anteriormente expuesto que puede estar a la base de la estructura mítica y de
diversos desarrollos “científicos” y “tecnológicos” puede verse en este proceso de mitificación
con respecto a números y estructuras en: DANIEL, G.: "Stonehenge: Monumentos
280
influencia de la naturaleza como “mito” para marcar lo socialmente
fidedigno. En los mitos se recrean, a través de distintas claves y
códigos, los hechos primordiales que, supuestamente, dan explicación
y fundamento tanto a las normas sociales como a las creencias,
costumbres, etc. mediante la exposición de la genealogía o narración
de dichas normas y funciones, o del origen o génesis del mundo y del
hombre. El mito establece dos espacios separados: uno es el mundo de
lo sobrenatural en el que se dan las relaciones y acontecimientos
verdaderos; el otro, el mundo natural, que es una imagen o reflejo del
anterior que es el verdadero (634 ). Entre estos dos espacios se
establecen otros intermedios (bosques, jardines, …), lugares de
interacción entre los mortales y los dioses. Así mismo, se utilizan una
serie de códigos simbólicos de animales, minerales, metales, colores
281
etc., estudiados, entre otros, por Marcel Detienne (635 ). Estos códigos
van generalmente asociados a la actividad de seres sobrenaturales o
de poderes excepcionales, y todo ello permite la justificación de
valores, instituciones y creencias, que las sociedades construyen
mediante representaciones simbólicas que generalmente expresan las
características propias de la sociedad que los engendra.
635 .- Detienne estudia la utilización de los aromas en la mitología griega: DETIENNE, M.:
Les jardins d'Adonais. París, Gallimard. Traducción española de José Carlos Bermejo
Barrera: Los jardines de Adonis. Madrid, Akal, 1983. 241pp.
636 .- NESTLE, W.: Von Mythos zum Logos. 1940.
637 .- HABERMAS.: Mito y Razón. Barcelona, Paidos, 1997, p.11.
282
fórmulas de cohesión social, son lo que permite construir el e5qoj.
Platón señala el poder educativo de los mismos. El mito señala las
conexiones entre las cosas pero no su explicación. Pero el mito no se
limita a señalar unas costumbres, un e5qoj como señalábamos, sino
también y sobre todo marca una trayectoria, un páqoj, definido por el
movimiento de los personajes y situaciones que se desarrollan. Los
personajes de los mitos pueden pertenecer al mundo cotidiano o no,
pero tienen rasgos o características que los hacen peculiares o
extraordinarios. Incluso debemos señalar que el mito tiene su origen en
las sociedades arcaicas, pero llega a nosotros, conviviendo como
recreación e incluso, en algunos casos, se inventan nuevos mitos en
nuestra sociedad. Un ejemplo puede ser el mito de Juicio de Paris,
donde se definen las funciones de las tres diosas, pero también la
forma de comportarse y la función de la mujer en el mundo clásico, así
como la time del guerrero. Por todo ello el mito reproduce el e5qoj
familiar, establece un pa’qoj mediante el desarrollo de la narración y
pretende imprimir (túpoi) en el que lo recibe un h3qoj, para formar el
carákthr.
283
Afrodita (641 ) que representan las tres funciones. Zeus encargó a
Hermes que llevase a las diosas al monte Ida, para que París, un mortal,
fallase el pleito.
640 .- Algunas de las referencias clásicas a Atenea que pueden dibujar su personalidad y
funciones en la mitología son: HESIODO.: Teogonía, 886 y ss.; PÍNDARO.: Olimpicas,
VII, 65 y ss.; EURÍPIDES.: Ion, 454 y ss.; APOLODORO.: Biblioteca., 1, 3, 6, y ss.; 6, 1
y ss.; II, 4, 3; 4, 11; III., 14, 1; 6; 12, 3; VIRGILIO.: Eneida, III, 578 y ss.: HERODOTO.:
VIII, 55; OVIDIO.: Met., VI, 70 y ss.; Hig.: Fábulas, 164, 166; SERVIO.: Comentario a
Virgilio, Geórg., I, 12; III, 113; PAUSANIAS.: I, 18, 2; OVIDIO.: Met., II, 552 y ss.
641 .- Algunas de las referencias clásicas a Afrodita que pueden dibujar su personalidad y
funciones en la mitología son: HOMERO.: Odisea, VIII, 266 y ss.; Iliada, II, 819 a 821;
III, 15 y ss.; IV, 10-12; V, 1 y ss.; V, 311-317; 330 y ss.; HESIODO.: Teogonía, 190 y ss.;
ANTONINO LIBERAL.: Transformaciones, 34; APOLODORO.: Biblioteca, I, 9, 17; 4,
4; III, 2, 2; 12, 2; 14, 4; Epítome, IV, 1; LUCIANO.: Tragoedon, 87 y ss.
642 .- Hija de Cronos y Rea. Las estaciones fueron sus niñeras. Podía otorgar el don de la
profecía al hombre o bestia que ella quisiera. En tanto que esposa legítima de Zeus es la
protectora de las mujeres casadas. Se la representa como una mujer celosa, violenta y
vengativa, cuando se pone en peligro el hogar familiar. Las infidelidades de Zeus son tomadas
como insultos y no sólo persigue a las amantes de Zeus sino también a sus hijos. El atributo
ordinario de Hera es el pavo real. Sus plantas eran el helicriso, la granada y el lirio. Como
características de Hera podemos señalar: Esposa; Madre; Organizadora de la casa; Dócil
aunque agresiva y vengativa cuando se ataca o entra en su territorio; Postergada y referida al
hombre. No tiene importancia la sexualidad. Refinamiento y porte debido a su status. Cf.:
GRIMAL, P.: Dictionnaire de la mythologie grecque et romaine. Paris, PUF, 1951.
Traducción española de Fancisco Payarols. Diccionario de mitología griega y romana.
Barcelona, Paidós, 1986.
643 .- Es la diosa de la Guerra. Es una diosa, por tanto, de la segunda función. Para la
mentalidad patrilineal indoeuropea es difícil entender a una mujer como guerrera en igualdad
284
Cada una de ellas intenta sobornarlo con uno de estos presentes que
corresponde al estatus o función que desempeña, como veremos más
adelante.
con los demás dioses varones de la segunda función. Es por ello que le van a atribuir un
nacimiento peculiar. Para ser una diosa de la segunda función debe de ser hija de Zeus. Atenea
es procreada por Zeus y por Metis de una forma irregular: Zeus ha mantenido relaciones con
Metis; Urano y Gea advierten a Zeus que el segundo hijo de Metis, si nace, le derrocará, por
lo que Zeus se come a Metis. Un tiempo después siente terribles dolores de cabeza, por lo
que Hefaistos le tiene que abrir la cabeza, saliendo de ella una joven totalmente armada.
Atenea es Diosa de la guerra; armada con lanza y égida, pero también diosa de la Razón.
Preside las artes y la literatura, en la que compite con las musas, aunque tiene una relación
más estrecha con la Filosofía que con la Poesía y la música. Estas características intelectuales
son atribuidas a los dioses griegos de origen mediterráneo. Su animal es la lechuza o el búho
y es la introductora del olivo y su aceite, en Ática. Como características podemos señalar:
Agresiva; Inteligente; Astuta; No resalta especialmente su belleza. Renuncia a su parte
femenina; Virgen, aunque también puede tener el papel de compañera y entonces jugar algún
papel secundario en el sexo. Cf.: GRIMAL, P.: Dictionnaire de la mythologie grecque et
romaine. Paris, PUF, 1951. Traducción española de Fancisco Payarols. Diccionario de
mitología griega y romana. Barcelona, Paidós, 1986.
644 .- Diosa del amor. El nacimiento de Afrodita se hace surgir de las partes de Urano que
son arrojadas al mar. Después de su nacimiento es acogida por la Horas (las Estaciones).
Afrodita es una diosa de la tercera función, que se casa con un dios de la tercera función:
Hefaistos, el dios cojo. Se la hace amante de Ares, dios de la segunda función. Homero cuenta
como de madrugada fueron sorprendidos por el Sol, quien los denunció a Hefaistos, el cual
preparó secretamente una trampa, cayendo los dos en una red. A ruegos de Poseidón, los
suelta, huyendo ambos. De Ares y Afrodita nacieron Eros y Anteros, Deimo y Fobo (el terror
y el Temor) y Harmonía, a los que se añade Príapo, dios de los jardines. Se le atribuyen
distintos romances con varios dioses (con Ares y Adonis) y con algunos mortales. El
animal que está asociado a ella es la paloma y las plantas la rosa y el mirto. Como
características tendría: el amor, la pasión, la promiscuidad, ser amante, esclava, mujer objeto
o descanso del guerrero. Cf.: GRIMAL, P.: Dictionnaire de la mythologie grecque et
romaine. Paris, PUF, 1951. Traducción española de Fancisco Payarols. Diccionario de
mitología griega y romana. Barcelona, Paidós, 1986.
285
en Creta (645 ), por lo que encarga a Helena que les dispense todo tipo
de atenciones y les deje permanecer en Esparta todo el tiempo que
deseen. No tardó Paris en enamorar a Helena, con la ayuda de
Afrodita. Helena reúne todos los tesoros que posee y huye con su
amante durante la noche hacia Troya, abandonando a su hija
Hermíone, de nueve años.
645 .- Catreo fue rey de Creta, era hijo de Minos y padre de Clímene, Altémenes y Aérope,
como nos describe: APOLODORO.: Biblioteca Mitológica, II 1, 5; III 1, 2; y en las
Epítomes, 2, 10; 3, 3; 6, 8.
646 .- En la sociedad griega arcaica se dan tres funciones desde un punto de vista ideológico:
La primera función corresponde al padre y es la organizadora, la del jefe, que administra el
derecho, el poder tanto de lo sagrado como de lo terreno; la segunda función corresponde a los
hijos y es la guerrera, que posee dos caras. Una la intelectual, cuyo ideal es Apolo y otra la de
la fuerza, cuyo ideal es Ares, en el cine moderno estos dos papeles corresponderían a
Schwardzenager y Silverter Stalone; la tercera función corresponde a la productora,
286
desempeña en la publicidad actual. La aplicación del esquema
estructuralista de Dumezil a la publicidad permite analizar
detenidamente el papel que juega la mujer en la misma y lo que a
nuestro entender es más importante, discernir como determinados
elementos quedan obscurecidos en aras de marcar un papel. Para
ejemplificarlas comentaremos tres tipos de anuncios:
reproductora. Las mujeres, por si mismas no tienen una función específica, adoptan las del
hombre-marido. Cf.: DUMÉZIL, G.: Heur et malheur du guerrier. Paris, PUF, 1969.
Traducción española de Juan Almela.: La función del guerrero. México, Siglo XXI, 1971,
cf. expecialmente pp.3-6.
287
1. - La mujer en la publicidad desempeñando la primera
función: Es muy común su utilización en lo relativo a
productos destinados al hogar. Representa a la mujer
como esposa legítima, madre; es la organizadora de la casa
y señora indiscutible de la misma, dócil y obediente
aunque enérgica en su territorio, agresiva y vengativa
cuando se ataca o entra en su espacio; postergada y
referida al hombre pero por encima de éste en sus
dominios donde es la experta, la conocedora de….
Algunos análisis "feministas" (647 ) señalan que cuando la
mujer aparece como "experta, las “voces en of” son
masculinas, sin embargo, esto no deja de ser un contraste
y cuando el hombre aparece como "experto" representa
otra de las funciones del hombre (el mundo de la empresa,
el vendedor, …), pero fundamentalmente su función
exterior al hogar o domino de la "reina de la casa". En
este tipo de mujer no juega un papel importante la
sexualidad, si no es como madre o a veces como forma de
recuperar al marido frente a elementos externos. Cuando
aparece al lado del marido en acontecimientos sociales es
refinada y lleva el porte debido a su estatus. La mujer
como primera función está utilizada reiteradamente en los
anuncios de detergentes y solamente una marca, Luzil,
intentó un esquema de la segunda función, presentando a
una mujer trabajadora (648 ). A continuación reproducimos
un anuncio en el que se presenta a la mujer en la primera
función como defensora de la familia.
288
289
2.- La mujer en la publicidad como segunda función: Es la mujer
guerrera, agresiva e inteligente, dueña de sí misma. Se caracteriza
por presentar a la mujer de forma activa en la sociedad. Su
referente son los trabajos reconocidos socialmente y que la
muestran como independiente, sin hombres o despreciándolos.
Este papel cada vez va tomando un mayor protagonismo en la
medida que se produce la incorporación de la mujer al mundo
laboral y va abandonando paulatinamente su función
reproductora (649 ). Es agresiva, inteligente, astuta, no resalta
especialmente su belleza frente a las otras características, por lo
que renuncia a su parte femenina, que de aceptarla le llevaría a
adoptar una de las otras dos funciones. A modo de ejemplo
presentamos un anuncio, que desde una visión sexista podría
ser considerado de la 3ª función (650 ). Se trata de un anuncio de
lencería y presenta a una mujer luciendo ropa interior. Desde el
principio la utilización de mujeres en ropa interior para realizar
este tipo de publicidad no se ha entendido como sexista, quizá
en algunos casos se tildó de inmoral o escandalosa, aunque se
era mucho más permisivo con ella que con otro tipo de anuncios.
La modelo se encuentra en una pose que denota desafío,
seguridad y aplomo, y donde el aspecto sexual es mitigado
cubriéndole el hombro más cercano a nosotros con la chaqueta.
649 .- Ésta es la tesis fundamental de Marvin Harris sobre la liberación de la mujer, que es
producida por estas dos causas. Cf.: HARRIS, M.: "Por qué han abandonado el hogar las
mujeres", en America New: The Anthropology of a Changing Culture. New York, Simon
& Schuster, 1981, Traducción española de Juan Oliver Sánchez-Fernández: La cultura
norteamericana contemporánea. Una visión antropológica. Madrid, Alianza Editorial,
1984, pp.85-108.
650 .- La razón fundamental para rechazar la interpretación sexista de este anuncio, sin entrar
en tecnicismos o estructuras profundas de análisis es que va dirigido a mujeres, por tanto no
puede tener un componente sexual, sino de imagen deseable para una (imitativo).
290
291
3. .- La mujer en la publicidad como tercera función: Ella está
caracterizada por la belleza, el amor; la pasión; la
promiscuidad; ser amante; esclava; mujer objeto o
descanso del guerrero, es la concepción de la mujer como
servicio, bien sea sexual, social o como trabajadora en el
sentido más bajo del término (simple esclava). Muchas
veces soltera y cuando está casada, su marido posee una
carencia (a Hefaistos es cojo) o es presentado como un
pelele, un pobre hombre incapaz de luchar contra las
infidelidades de su mujer. El ejemplo más claro de mujer de
la tercera función en nuestro siglo es Marilyn Monroe,
quien es presentada en la mayoría de sus películas como
una modelo de extraordinaria belleza, sensual y erótica,
pero carente de inteligencia.
651 .- En la Ley General de la Publicidad, se dedica el artículo tercero del Título segundo
sobre publicidad ilícita a prohibir los anuncios que atenten contra la dignidad de la mujer:
"TITULO II. DE LA PUBLICIDAD ILICITA
Artículo 3.
Es ilícita:
a) La publicidad que atente contra la dignidad de la persona o vulnere los valores
y derechos reconocidos en la Constitución, especialmente en lo que se refiere a la
infancia, la juventud y la mujer.
b) La publicidad engañosa
c) La publicidad desleal
d) La publicidad subliminal
e) La que infrinja lo dispuesto en la normativa que regule la publicidad de determinados
productos, bienes, actividades o servicios". Ley General De Publicidad. Título II, artículo
3º (B.O.E. 15 de Noviembre de 1988, pp.32464 y ss.)
292
293
Históricamente ha cambiado bastante la apreciación sobre los
mitos. Durante el s. XIX, se estudió extensamente el origen y
evolución de los mismos aunque, en general, a excepción de Schelling
-que los consideraba auténticas manifestaciones culturales de los
pueblos-, se concebían como meras fábulas, invenciones o ficciones, y
su estudio se centraba especialmente en la perspectiva meramente
filológica (Fr. M. Müller). En general, se pensaba que la aparición del
pensamiento racional era el paso del mito al logos, fruto de la
superación del mero pensamiento mítico y, aún cuando esto puede
seguir sosteniéndose como un hecho histórico, no aclara la verdadera
naturaleza del pensamiento mítico. De hecho, ya desde la antigua
Grecia, se tendió a minusvalorar los mitos. El primero en atacarlos por
su antropomorfismo fue Jenófanes.
294
como decíamos anteriormente, significa distintas cosas. Por una parte
“mito” es simplemente un «hablar o contar historias» (655 ), por otra,
carácter de conocimiento, moviéndose en una ambivalencia propia de la tesis o conclusión
que se mantiene, es decir, la de entender el mito como persuasión y ésta como una
“ mediación entre lo racional y lo irracional”, pero cargado de un cierto elemento negativo
cf. o.c. p.323. Platón utiliza “mito” en este sentido de fábula, en Fedón, 60 c 2 como en 61
b 4, pero en 60 d, Cebes utiliza el de logos al hablar de “toùs toû Aisôpou lógous”.
655 .- PLATÓN.: Fedón, 61 e 2, lo utiliza como narrar, en el sentido de relato tradicional,
es el sentido más general y aparece varias veces en la República: 378 c 4; estableciendo una
clasificación de tipos de narración en 394 b 8-c 5:
"Claro que yo hablo también de oídas sobre esas cosas. Pero lo que he oído no tengo
ningún reparo en decirlo. Además, tal vez es lo más conveniente para quien va a emigrar hacia
allí ponerse a examinar y a relatar mitos acerca del viaje hacia ese lugar, de qué clase
suponemos que es. ¿Pues qué otra cosa podía hacer uno en el tiempo que queda hasta la
puesta del sol?. (PLATÓN.: Fedón, 61d 9-e 4).
'All¦ m¾n kaˆ ™gë ™x ¢koÁj perˆ aÙtîn lšgw: § m•n
oân tugc£nw ¢khkoëj fqÒnoj oÙdeˆj lšgein. kaˆ g¦r ‡swj
kaˆ m£lista pršpei mšllonta ™ke‹se ¢podhme‹n diaskope‹n
te kaˆ muqologe‹n perˆ tÁj ¢podhm…aj tÁj ™ke‹, po…an tin¦
aÙt¾n o„Òmeqa e•nai: t… g¦r ¥n tij kaˆ poio‹ ¥llo ™n tù
mšcri ¹l…ou dusmîn crÒnJ;
"Ni admitamos en absoluto que los dioses hagan la guerra a dioses, se confabulen o
combatan unos contra otros; pues nada de eso es cierto: al menos si exigimos que los que van
a guardar el Estado consideren como lo más vergonzoso el disputar entre sí. Y con menor
razón aún han de narrarse -o representarse en bordados- gigantomaquias y muchos otros
enfrentamientos de toda clase de dioses y héroes con sus parientes y prójimos. Antes bien, si
queremos persuadirlos de que ningún ciudadano ha disputado jamás con otro y de que eso
habría sido un sacrilegio, tales cosas son las que, tanto los ancianos como las ancianas, deben
contar a los niños desde la infancia; y aun llegados a adultos, hay que forzar a los poetas a
componer, para éstos, mitos de índole afín a aquélla. Narrar en cambio. Los encadenamientos
de Hera por su hijo o que Hefesto fue arrojado fuera del Olimpo por su padre cuando intentó
impedir que éste golpeara a su madre, así como cuantas batallas entre dioses ha compuesto
Homero, no lo permitiremos en nuestro Estado, hayan sido compuestos con el sentido
alegórico o sin él. El niño, en efecto, no es capaz de discernir lo que es alegórico de lo que no
lo es, y las impresiones que a esa edad reciben suelen ser las más difíciles de borrar y las que
menos pueden ser cambiadas. Por ese motivo, tal vez, debe ponerse el máximo cuidado en
los primeros relatos que los niños oyen, de modo que escuchen los mitos más bellos que se
hayan compuesto en vista a la excelencia." (PLATÓN.: República: 378 b 8-e 3).
OÙdš ge, Ãn d' ™gè, tÕ par£pan æj qeoˆ qeo‹j polemoàs…
te kaˆ ™pibouleÚousi kaˆ m£contai-oÙd• g¦r ¢lhqÁ-e‡
ge de‹ ¹m‹n toÝj mšllontaj t¾n pÒlin ful£xein a‡sciston
nom…zein tÕ ·vd…wj ¢ll»loij ¢pecq£nesqai-polloà de‹
gigantomac…aj te muqologhtšon aÙto‹j kaˆ poikiltšon, kaˆ
¥llaj œcqraj poll¦j kaˆ pantodap¦j qeîn te kaˆ ¹rèwn
prÕj suggene‹j te kaˆ o„ke…ouj aÙtîn-¢ll' e‡ pwj mšl-
lomen pe…sein æj oÙdeˆj pèpote pol…thj ›teroj ˜tšrJ
¢p»cqeto oÙd' œstin toàto Ósion, toiaàta lektša m©llon prÕj
t¦ paid…a eÙqÝj kaˆ gšrousi kaˆ graus…, kaˆ presbutšroij
gignomšnoij kaˆ toÝj poiht¦j ™ggÝj toÚtwn ¢nagkastšon
logopoie‹n. “Hraj d• desmoÝj ØpÕ Øšoj kaˆ @Hfa…stou
·…yeij ØpÕ patrÒj, mšllontoj tÍ mhtrˆ tuptomšnV ¢mune‹n,
295
es algo más que una opinión probable, el mito debe ser un relato
verosímil. En Platón la palabra mito también significa: fabulación
próxima a la mentira aunque con algo de verdad (656 ), mentira (657 ), un
296
juego para niños (658 ) o un cuento para viejas (659 ), un recurso
pedagógico (660 ), palabra sagrada (661 ), creencia moralmente eficaz (662 )
Y nada más que acabó de componer la llamada "palinodia" recubrió la vista. Yo no voy a
intentar ser más sabio que ellos, al menos, en esto. Por tanto, antes de que me sobrevenga
alguna desgracia por haber maldicho del Amor, le voy a ofrecer una palinodia, a cara
descubierta, y no tapado, como antes, por vergüenza." (PLATÓN.: Fedro, 242 d 11-243 b 7)
SW. OÜ ti ØpÒ ge Lus…ou, oÙd• ØpÕ toà soà lÒgou, Öj
di¦ toà ™moà stÒmatoj katafarmakeuqšntoj ØpÕ soà ™lšcqh.
e„ d' œstin, ésper oân œsti, qeÕj ½ ti qe‹on Ð ”Erwj, oÙd•n
¨n kakÕn e‡h, të d• lÒgw të nund¾ perˆ aÙtoà e„pšthn æj
toioÚtou Ôntoj: taÚtV te oân ¹martanšthn perˆ tÕn ”Erwta,
œti te ¹ eÙ»qeia aÙto‹n p£nu ¢ste…a, tÕ mhd•n Øgi•j lšgonte
mhd• ¢lhq•j semnÚnesqai æj tˆ Ônte, e„ ¥ra ¢nqrwp…skouj
tin¦j ™xapat»sante eÙdokim»seton ™n aÙto‹j. ™moˆ m•n oân,
ð f…le, kaq»rasqai ¢n£gkh: œstin d• to‹j ¡mart£nousi perˆ
muqolog…an kaqarmÕj ¢rca‹oj, Ön “Omhroj m•n oÙk Ésqeto,
Sths…coroj dš. tîn g¦r Ñmm£twn sterhqeˆj di¦ t¾n @Elšnhj
kakhgor…an oÙk ºgnÒhsen ésper “Omhroj, ¢ll' ¤te mousikÕj
ín œgnw t¾n a„t…an, kaˆ poie‹ eÙqÝj-
OÙk œst' œtumoj lÒgoj oátoj,
oÙd' œbaj ™n nhusˆn eÙsšlmoij,
oÙd' †keo Pšrgama Tro…aj:
kaˆ poi»saj d¾ p©san t¾n kaloumšnhn PalinJd…an para-
crÁma ¢nšbleyen. ™gë oân sofèteroj ™ke…nwn gen»somai
kat' aÙtÒ ge toàto: prˆn g£r ti paqe‹n di¦ t¾n toà ”Erwtoj
kakhgor…an peir£somai aÙtù ¢podoànai t¾n palinJd…an,
gumnÍ tÍ kefalÍ kaˆ oÙc ésper tÒte Øp' a„scÚnhj
™gkekalummšnoj.
658 .- PLATÓN.: Sofista, 242 c 8.; PLATÓN.: Político, 268 d. En el Sofista este pasaje
constituye, sin lugar a dudas, la más antigua “historia de la filosofía”. En algunos casos no es
fácil adivinar a qué autores alude Platón; en las notas siguientes sólo ofrecemos hipótesis
probables. Sobre la posibilidad de que Platón utilice para este panorama doxografías
corrientes en su época, cf. J. MANSFELD, “Aristotle, Plato, and the Preplatonic doxography
and chronography”, en Storiografia e Dossografia nella filosofia antica, ed. G.
CASERTANO, Turín, 1986, páginas 1-59.
"EXTR.-- Me da la impresión de que cada uno de ellos nos narra una especie
de mito, como si fuésemos niños. Uno dice que los entes son tres, que a veces pelean
entre sí, y que otras veces, convertidos en amigos, llevan a cabo casamientos y
nacimientos, y alimentan a sus descendientes." (PLATÓN.: Sofista, 242 c 8-d 2) .
XE. MàqÒn tina ›kastoj fa…neta… moi dihge‹sqai paisˆn
æj oâsin ¹m‹n, Ð m•n æj tr…a t¦ Ônta, poleme‹ d• ¢ll»loij
™n…ote aÙtîn ¥tta pV, tot• d• kaˆ f…la gignÒmena g£mouj
te kaˆ tÒkouj kaˆ trof¦j tîn ™kgÒnwn paršcetai:
"EXT.- Incorporemos en nuestra conversación algo que es casi un juego. En
efecto, tendremos que servirnos de una buena parte de un extenso mito y, para lo que
reste -como hicimos antes-, seguiremos aislando una parte de otra parte, hasta llegar
por fin al fondo de la cuestión que estamos examinando. ¿No es eso lo que debemos
hacer?
J.SÓC.- Sin duda alguna.
297
como una hipótesis (663 ), … Y en definitiva una imagen 664
( ). Paul
Veyne señala el mito como una realidad compleja constitutiva del
EXT.- Presta, entonces, toda tu atención a mi mito, como los niños. A fin de
cuentas, dada tu edad, tan lejos no estás de los juegos infantiles." (PLATÓN.:
Político, 268 d 8-e 6).
XE. ScedÕn paidi¦n ™gkerasamšnouj: sucnù g¦r mšrei
de‹ meg£lou mÚqou proscr»sasqai, kaˆ tÕ loipÕn d», kaq£per
™n to‹j prÒsqen, mšroj ¢eˆ mšrouj ¢fairoumšnouj ™p' ¥kron
¢fikne‹sqai tÕ zhtoÚmenon. oÙkoàn cr»;
NE. SW. P£nu m•n oân.
XE. 'All¦ d¾ tù mÚqJ mou p£nu prÒsece tÕn noàn,
kaq£per oƒ pa‹dej: p£ntwj oÙ poll¦ ™kfeÚgeij paidi¦j
œth.
659 .- PLATÓN.: Gorgias, 527a 5; PLATÓN.: República, 350 e 2-4.
"…Quizá esto te parece un mito, a modo de cuento de vieja, y lo desprecias;
por cierto, no sería nada extraño que lo despreciáramos, si investigando pudiéramos
hallar algo mejor y más verdadero…" (PLATÓN.: Gorgias, 527ª
T£ca d' oân taàta màqÒj soi doke‹ lšgesqai ésper graÕj
kaˆ katafrone‹j aÙtîn, kaˆ oÙdšn g' ¨n Ãn qaumastÕn kata-
frone‹n toÚtwn, e‡ pV zhtoàntej e‡comen aÙtîn belt…w kaˆ
¢lhqšstera ...
"Yo responderé: "¡Sí", como a las viejas que cuentan cuentos (, y aprobaré o
desaprobaré con la cabeza". PLATÓN.: República, 350 e 2-4. Traducción de Jose
Manuel Pabón y Manuel Fernández Galiano. Madrid, Centro de Estudios
Constitucionales, 1981.
...rèta: ™gë dš soi, ésper ta‹j grausˆn
ta‹j toÝj mÚqouj legoÚsaij, "e•en" ™rî kaˆ kataneÚsomai
kaˆ ¢naneÚsomai.
660 .- PLATÓN.: República, VII, 514 c; También como una forma de exposición lúdica:
PLATÓN.: Protágoras, 320 c. Como un recurso didáctico que es esencialmente falso aunque
posee algo de verdad: PLATÓN.: República, 377 a 4-7, vease nota 69.
661 .- PLATÓN.: Fedro, 274 d. Aunque podría interpretarse también en el sentido de
engaño.
662 .- PLATÓN.: Menón, 86 b-c.
663 .- "¡Ea, pues! Vamos a suponer que educamos a esos hombres como si tuviéramos
tiempo disponible para contar cuentos." PLATÓN.: República, 376 d 9-10. Traducción de
Jose Manuel Pabón y Manuel Fernández Galiano. Madrid, Centro de Estudios
Constitucionales, 1981.
”Iqi oân, ésper ™n mÚqJ muqologoàntšj te kaˆ scol¾n
¥gontej lÒgJ paideÚwmen toÝj ¥ndraj.
664 .- "- Modelando con el discurso una imagen del alma para que nuestro interlocutor vea lo
que digo.
- ¿Qué clase de imagen?
- La de aquellos caracteres que nos narran los mitos desde antiguo, como Quimera, Escila,
Cerbero y numerosas otras criaturas que se cuenta que reunían muchas figuras en una sola."
PLATÓN.: República, 588 b 10-c 5:
E„kÒna pl£santej tÁj yucÁj lÒgJ, †na e„dÍ Ð ™ke‹na
lšgwn oŒa œlegen.
Po…an tin£; Ã d' Ój.
298
pensamiento griego y con un estatuto propio que no era incompatible
con otro tipo de conocimientos. En este sentido nos transmite un
relato sobre las creencias de los Dorzé, un pueblo de Etiopía, que
mantienen sobre los leopardos escrito por Dan Sperber: “el leopardo
es un animal cristiano que respeta los ayunos de la iglesia copta,
obsevancia que en Etiopía es el test pricipal de la religión; un Dorzé,
sin embargo, no deja de estar menos preocupado por proteger su
ganado el miércole y el viernes, días de ayuno, que los otros días de
la semana; ya que consideran verdad que los leopardos ayunan y
que comen todos los días; los leopardos son peligrosos todos lo días:
lo saben por experiencia; los leopardos son cristianos: la tradición
te lo garantiza”. (665 ). Veyne rompe así con la tradición positivista
encarnada fundamentalmente por la obra de Wilhelm Nestle Von
Mythos zum Logos, donde se habla de una evolución del mito al logos
(666 ).
299
La constitución de una narración desde la tradición oral ha sido
estudiada y se tiende a considerar que depende de un hecho o
acontecimiento que va siendo alterado progresivamente al ser
reproducido y transmitido. Vansina (667 ), establece que la relación entre
el hecho observado o acontecimiento y el último testimonio o
anotación de la tradición oral se produce de la siguiente manera: el
hecho observado es comunicado por el observador del mismo
mediante un testimonio inicial o prototestimonio. Este testimonio es
entendido por una persona, quien a su vez lo divulga contándolo a
una tercera y así sucesivamente. De esta forma se constituye una
cadena de tradición en la que cada persona constituye un eslabón.
Tras un largo proceso en la cadena uno de los eslabones transmite el
testimonio a un escribano que lo transcribe fijándolo como texto.
Vansina representa el esquema de la siguiente manera:
Hecho o acontecimiento
?
?
Observador ? ? ? ? ? ? ? ? ? prototestimonio o testimonio
inicial.
?
?
Cadena de tradición ? ? ? ? ? ? testimonio eslabón o
auricular.
?
?
Ultimo testigo ? ? ? ? ? ? ? ? último testimonio o
testimonio final
?
?
Marcador ? ? ? ? ? ? ? ? ? ? anotación más antigua.
300
que tener en cuenta la Teoría de la Información en lo relativo a los
elementos que conforman el sistema de la comunicación (668 ):
feed-back o retroalimentación
Canal
transmisor o medio
Decodificación Destinatario
Fuente de Codificación Emisi Recepción o
o descifrado Interpretación
Información cifrado ón
Ruidos
o
interferencias
301
El mito se diferencia de cualquier otro caso de tradición oral
como pueden ser una descripción de las hazañas de un héroe, un
lugar, etc., porque el mito son formulas ancladas en un œqoj o reales
transmitidas porque han funcionado y siguen funcionando en el
desarrollo social. A nuestro entender todavía no quedan recogidos
otros factores importantes que existen o funcionan en la transmisión
del mito, como son los elementos culturales y los acontecimientos que
inciden en el surgimiento y transmisión del mito, pero que también son
fundamentales en la recepción por parte del destinatario. Es decir, los
hechos que pueden dar lugar a que un observador establezca un
prototestimonio no se dan de una forma aislada, sino que se relacionan
con otros e inciden en la formulación de ese testimonio inicial. Por otra
parte, la cadena de tradición dará importancia a un testimonio en la
medida que coincide con otros hechos y patrones culturales que
modifican este testimonio moldeándolo. Por último, el destinatario final
o lector está influido por los otros patrones culturales de su medio,
que le dan las claves mismas para entender el mito de acuerdo a su
tiempo y cultura.
302
Hecho o acontecimiento ? ? ? Fuente de
Información.
Patrones
culturales Destinatario interpretación
303
1. - El mito en sentido estricto. Es un relato en el que los
personajes son divinos, en el sentido de que son
trayectorias no sujetas a la muerte. Los temas se refieren
a los orígenes cosmogónicos de los dioses y el mundo.
De ahí que este tipo de mitos se relacione en muchos
casos con la religión.
304
No es aquí el momento de realizar un examen detallado sobre la
racionalidad del mito, pero es necesario establecer algunos supuestos
que se encuentran en las posiciones de los críticos.
671 .- Esta interpretación es sostenida, entre otros, por: SNELL, B.: Entdeckung des
Geistes. Studien zur Entstehung des europäischen Denkens bei des Griechen. Hamburg,
1955.
672 .- Cf.: HIDALGO TUÑON, Alberto /IGLESIAS FUEYO, Carlos /SÁNCHEZ ORTIZ
DE URBINA, Ricardo.: Historia de la Filosofía. Madrid, Anaya, 1978, pp.10-12.
673 .- Cf.- VERNANT, J-P.: Mythe et pensée chez les grecs. París, Librairie François
Maspero, 1965. Traducción española de Juan Diego López Bonillo: Mito y pensamiento en
la Grecia antigua. Barcelona Ariel, 1983, p.334. Donde dice: “El pensamiento racional
tiene una ficha civil; se conoce su fecha y su lugar de nacimiento. Es en el siglo VI antes de
nuestra era, en las ciudades griegas de Asia Menor, donde surge una nueva forma de reflexión,
totalmente positiva, sobre la naturaleza”: El texto que reproducimos proviene de un artículo
publicado en 1957.
305
entre otros Hyland (674 ) donde se da ya una proporción y unas
operaciones. Cuando estas proporciones se apliquen de forma
conceptualizada y se añadan nuevas operaciones, en las que van a
jugar un papel importante las matemáticas, se producirá la Filosofía. La
frontera entre el mito y la Filosofía no es de partida, como señala Kirk
(675 ), sino de llegada. No existe una tradición que parte de Tales, por
ejemplo, hasta Hegel, sino que podemos hablar de una tradición en el
momento que existe Hegel, es decir en la medida que se parte de Hegel
y se llega a Tales (676 ).
1. Ejemplificación.
2. Unión.
3. Separación o división.
4.3.4.1.- La ejemplificación.
674 .- HYLAND, D.A..: The Origins of Philosophy, Its Tise in Myth and the Pre-
Socratics. New York, Putnam’ Sons, 1973. Traducción española de Jorge L. García
Venturini: Los orígenes de la filosofía en el mito y los presocráticos. Buenos Aires, El
Ateneo, 1975.
675 .- KIRK, G.S. La naturaleza de los mitos griegos. Barcelona, 1984.
676 .- Esta tesis se encuentra desarrollada en: BUENO, Gustavo.: La metafísica
presocrática. Oviedo, Pentalfa, 1974, p.7 y ss.
677 .- KIRK, G.S. La naturaleza de los mitos griegos. Barcelona, 1984. pp. 233-235.
306
Este papel ejemplificador del mito es, como señala
oportunamente Adela Ania, recogido por la tragedia griega del siglo -
V, pero introduciendo modificaciones. La principal consiste en variar
las situaciones, pero conservando los personajes. A veces también se
introducen personajes nuevos, aprovechando las plantillas míticas
existentes y respetando las operaciones míticas. Esta operación, como
señala Adela Ania, recuerda a la de los aedos, que variaban la forma de
realización concreta del poema pero mantenían los esquemas que
garantizaban el éxito de su labor (678 ).
4.3.4.2.- Unión
307
más grande, el que gobierna, el dios de la luz, el rey, aquel que ostenta
el mando y establece la justicia. Es por tanto normal que de la unión
carnal de estas características el producto sea la mezcla de las
características de la madre y del padre, así de la Ley y el Gobierno
surge la Paz; el Buen Gobierno y la Justicia.
680 .- Sobre el tema del espacio como khôra cf.: CENTENO, Salvador.: La idea de espacio
en Demócrito. Mecanografiado. Oviedo, Universidad de Oviedo, 1985, 195pp.
681 .- HESIODO.: Teogonía, 117-123.
308
Inmortales que habitan la nevada cumbre del Olimpo (682 ). Hasta los
Dioses necesitan un espacio para existir, sin él no lo podrían hacer. Por
ello Gea tiene que ser el primer dios que aparece después de establecer
la línea. Una vez establecido o delimitado el espacio, nos sigue
quedando una indeterminación: Tártaro. Pero, además es necesario
introducir una operación: la unión o Eros, que será utilizada dentro del
esquema indoeuropeo de la familia mediante matrimonios, infidelidades
o incestos.
Figura 1.
682 .- HESIODO.: Teogonía, 117-118. Cf., la nota anterior para el texto completo.
309
Figura 2.
Figura 3.
310
Sin embargo en el mundo griego esta división espacial no es de
carácter geométrico o matemático (683 )
Caos
Érebo Noche
Éter Día
311
Habíamos establecido anteriormente una clasificación entre: el
mito en sentido estricto que utiliza personajes de carácter divino y sus
temas se refieren a los orígenes cosmogónicos de los dioses y el
mundo;. la saga o leyenda heroica, en la que los protagonistas son
héroes o semidioses; y el cuento popular o Märchen. Kirk establece
una clasificación más completa aplicándola al mito griego (684 ):
684 .- KIRK, G.S. La naturaleza de los mitos griegos. Barcelona, 1984. p.94 y ss
685 .- PLATÓN.: Protágoras, 320 c 4-5.
.., màqon lšgwn ™pide…xw À lÒgJ
diexelqèn;
312
de la obra, si se trata de una novela, un diálogo, una obra de teatro, un
ensayo, un artículo,..., (686 ), aquí se plantea, sin lugar a dudas, si cada
elemento interno, cada recurso utilizado por Platón tiene un sentido.
686 .- Lo cual se ha señalado como algo central en la teoría platónica; el método "mayéutico"
no sólo se postula, sino que se ejercita.
687 .- WILAMOWITZ.: “Über das Symposion des Platon”, en Actas de la Academia
prusiana de las Ciencias, 21 (1912) 333.
688 .- Dentro de esta interpretación se encontraría HEGEL.: Obras Completas. Stuttgart,
Glockner, 1927-1940, vol.18, p.179, quien habla de una obra supuestamente escrita por
Platón y al parecer perdida, que estaría redactada de forma doctrinal y no como diálogo,
lamentándose de que "sólo conservemos sus diálogos".
689 .- Y por supuesto superfluos; no es necesario insistir en que existe una amplia tradición
en la Filosofía Moderna racionalista, que podemos remontar hasta Descartes, la cual reconoce
un rango epistemológico importante a la poesía.
690 .- PLATÓN.: Timeo, 40d-41a.
313
La pregunta se refiere a qué significa este texto. En la literatura
platónica se dan entre otras las siguientes respuestas (691 ):
691 .- PIEPER, J.: Über die platonischen Mythen. Munich, Kösel, 1965. Trad., esp.,
Sobre los mitos platónicos. Barcelona, Herder, 1984, p.57.
692 .- WILLMANN, O.: Geschichte des Idealismus. Brunswick, 1907, 2ed, t.I, p.416 y
ss.
693 .- WILLMANN, O.: Geschichte des Idealismus. Brunswick, 1907, 2ed, t.I, p.419,
atribuye esta opinión a Constantin RITTER y a Leopold SCMIDT, aunque PIEPER, J.:
Über die platonischen Mythen. Munich, Kösel, 1965. Trad., esp., Sobre los mitos
platónicos. Barcelona, Herder, 1984, p.83, nota 10, considera que WILLMANN, no está
completamente en lo cierto al hacer esta atribución.
694 .- SAUSSAYE, Chantepie de la.: Lehrbuch der Religionsgeschichte. Friburg, 1897,
2ed., t.II, p.349.
695 .- ZELLER, Eduar.: Die Philosophie der Griechen, II, 1, p.932. Citado por: PIEPER,
J.: Über die platonischen Mythen. Munich, Kösel, 1965. Trad., esp., Sobre los mitos
platónicos. Barcelona, Herder, 1984, p.83, nota 12, quien hace constar que se trata de un
discípulo de Hegel.
696 .- PIEPER, J.: Über die platonischen Mythen. Munich, Kösel, 1965. Trad., esp.,
Sobre los mitos platónicos. Barcelona, Herder, 1984, p.58.
314
existentes a lo largo de los Diálogos que "ni Platón ni Sócrates
aceptaron los mitos como verdad" (697 ). Creemos que nuevamente se
imponen los prejuicios que históricamente tenemos sobre los mitos.
697 .- PIEPER, J.: Über die platonischen Mythen. Munich, Kösel, 1965. Trad., esp.,
Sobre los mitos platónicos. Barcelona, Herder, 1984, p.58.
698 .- BRISSON, L.: Les mots et les mythes. Paris, François Maspero, 1982, pp.42-43.
315
Esta forma es alterada por la escritura, que fija el mito. Platón
realiza una crítica importante contra este tipo de alteración del mito en
un pasaje del Fedro, precisamente con otro mito, el de Thamus y
Theuth. Thamus presenta a Theuth las ventajas del invento de la
escritura (699 ):
316
crítica que sigue realizando en el Fedón contra la mera erudición frente
a la sabiduría, en clara referencia a su doctrina pedagógica.
317
Clasificación Tema Diálogo
Mitos escatológicos Origen del alma. Timeo, 69 c-72 a.
Sobre la caída y el
infierno:
Los caballos alados. Fedro, 246 a-249 c.
El infierno. Gorgias, 523 a-527 a.
El mito de Er. República, 617 d-621 b.
La metempsicosis. Fedón, 107 c-115 a.
La Reminiscencia. Menón, 81 a-e.
La naturaleza República, 415 e.
humana
Mitos antropológicos. El mito del Andrógino. Banquete , 189 d-193 a.
1. Mitos cosmológicos.
2. Mitos etiológicos A.
3. Mitos etiológicos B.
4. Mitos espaciales.
318
Poniendo en correspondencia la clasificación de Santiago
González Escudero con la de Paul Friedländer, se establecería una
correspondencia con una casilla vacía:
707 .- La diferencia esencial entre los mitos cosmológicos y los etiológicos A sería temporal,
es decir los etiológicos A son mas recientes.
708 .- PLATÓN.: Protágoras, 320d y ss.
709 .- PLATÓN.: El Banquete, 178a y ss.
319
Estos mitos no existían en la tradición sino que se
construyen utilizando los personajes y situaciones de la
cosmología tradicional. Su construcción viene determinada para
explicar un fenómeno determinado. Hesíodo ya construye este
tipo de mitos, por eso se trata de mitos clásicos, aunque más
recientes que los tradicionales. Se realizan utilizando personajes
y situaciones de la cosmología tradicional. Claro ejemplo de ellos
son el Mito de las Edades en Hesíodo (710 ), o el discurso de
Pausanías en El Banquete de Platón (711 ).
320
4.5.2.4.- Mitos espaciales.
321
4.5.4. Mito y publicidad.
322