Sei sulla pagina 1di 20

 Composición de las aguas residuales urbanas.

Clasificaremos los componentes según el aspecto químico o bajo el aspecto biológico.

 Composición química.

 Sólidos.

Generalmente, las aguas residuales contienen sólidos disueltos, sólidos en suspensión y


sólidos en flotación, que normalmente no pasan de 1.000 ppm del total, aunque su tratamiento
en estaciones depuradoras necesita de instalaciones especiales.

 Clasificación según su composición.

Según su composición los dividiremos en:

- Sólidos orgánicos

- Sólidos inorgánicos

 Sólidos orgánicos

Ya se ha indicado el origen vegetal o animal de los sólidos orgánicos presentes en las aguas
residuales. A veces contienen, además, compuestos orgánicos sintéticos. Los glúcidos, lípidos,
proteínas y sus derivados son los grandes grupos de esta clase: son biodegradables y su
eliminación por combustión es relativamente sencilla.

 Sólidos inorgánicos.

Se incluyen en este grupo todos los sólidos de origen generalmente mineral, como son sales
minerales, arcillas, lodos, arenas y gravas no biodegradables, y ciertos compuestos corno
sulfatos, carbonatos, etc., que pueden sufrir algunas transformaciones (fenómenos de óxido-
reducción y otros).

 Clasificación según su presentación.

Los clasificaremos en cuatro grupos:

- Sólidos sedimentables.

- Sólidos en suspensión.

- Disoluciones coloidales.

- Sólidos disueltos.

 Sólidos sedimentables

Son aquellas panículas más gruesas que se depositarán, por gravedad, en los fondos de los
receptores; su análisis se realiza por volumetría y gravimetría, previa decantación y tamizado.

Se componen de un 70 por 100 de sólidos orgánicos y de un 30 por 100 de sólidos inorgánicos.

 Sólidos en suspensión.
Son las partículas flotantes, como trozos de vegetales, animales, basuras, etc., y aquellas otras
que también son perceptibles a simple vista y tienen posibilidades de ser separadas del líquido
por medios físicos, como arcillas, arenas, etc.

Generalmente se componen de un 68 por 100 de sólidos orgánicos y de un 32 por 100 de


sólidos inorgánicos.

 Disoluciones coloidales.

Están formadas por partículas de tamaño intermedio entre el de las disoluciones verdaderas y
el de las partículas de las suspensiones groseras:

1 mµ< < 0,2 µ. aunque estos límites son arbitrarios y se fijan por conveniencia.

La fase dispersa puede comprender hasta el 40 por 100 de los sólidos totales y suele estar
formada por coloides liófilos, es decir, por soles bastante estables.

Una pequeña parte la constituyen elementos casi sedimentables, pero la mayoría sólo puede
ser detenidos por crisol de Gooch.

Se calcula que están constituidos por un 75 por 100 de componentes orgánicos y un 25 por 100
de componentes inorgánicos.

Son fácilmente degradables y tienen gran capacidad de absorción, circunstancia a tener en


cuenta en las estaciones de tratamiento de aguas residuales.

 Sólidos disueltos

Se incluyen en este grupo todos aquellos sólidos que pasan por el crisol de Gooch, aunque una
pequeña parte está constituida por coloides (un 10 por ciento).

Su proporción es de un 40 por ciento de productos orgánicos y un 60 por 100 de sólidos


inorgánicos.

 Gases.

Las aguas residuales urbanas contienen diversos gases con diferente concentración.

 Oxígeno disuelto

Es el más importante, y es un gas que va siendo consumido por la actividad química y


biológica.

Características Concentración (en mg/l)


Conductividad 1792
Sólidos totales 1590
MES 1150
Coliformes 63 x l07
DBO 220
DQO 500
NH3 0,2
P04 23
Cl 182
S04 147
Dureza total 483
Alcalinidad (total) 433
pH 7,7
Hg 0,0015
Cd 0,027
Zn 0,54
Cu 0,09
Ni 0,1
Fe 2,4
Mn 0,17
Na 308
K 50
Pb 0,09

NUTRIENTES. OLIGOELEMENTOS Y AGENTES CONTAMINANTES DE LAS

AGUAS RESIDUALES DE MEXICO D.F.

Características Concentración (en mg/l)


pH 7,9
Ca 128
Mg 33
Na 237
K 52
Fe trazas
Cl 263
S04 229
P04 3,7
NH4 36
Nitritos 3,3
Nitratos 1,6
DQO 325
DBO 141
MED 1138
MES 180
N(total) 62

CONTENIDO EN NUTRIENTES Y AGENTES CONTAMINANTES DE LAS AGUAS

RESIDUALES DE DEBRECEN (HUNGRíA)

Características Concentración (en mg/l)


P (total) 7
N amoniacal 9,3
N de nitritos 0,005
N de nitratos 0,54
COT 183
B Q33
Ca 108
Na 103
Me 25
Mn 0,16

CONTENIDO MEDIO DE NUTRIENTES Y AGENTES CONTAMINANTES EN LAS

AG~S RESIDUALES DE EAST LANSING (MICH., USA).

El oxígeno disuelto depende de muchos factores, como temperatura, altitud, movimientos del
curso receptor, actividad biológica, actividad química, etc.

Su análisis se puede realizar por varios métodos, pero los más característicos son el de
Winkler, el de Winkler-Alsterbergo la polarografía.

El control del oxígeno disuelto a lo irgo del tiempo, nos suministra una serie de datos
fundamentales para el conocimiento del estado de un agua residual.

 Ácido sulfhídrico

Es un gas que se forma al descomponerse en medio aerobio ciertas sustancias orgánicas e


inorgánicas que contienen azufre.

Su presencia, que se manifiesta fundamentalmente por los olores que produce, es un indicativo
de la evolución estado de un agua residual, es poco estable al calor, descomponiéndose en
azufre e hidrógeno.

 Anhídrido carbónico

El gas que Helmot llamó en 1630 "gas silvestre", se produce en las fermentaciones de los
compuestos orgánicos de las aguas residuales negras. Su presencia en el agua puede
estudiarse por infinidad de métodos (van Slyke, volumetría, analizador especifico IR, etc.).

El CO2 del agua se presenta libre o como componente de bicarbonatos; la parte libre puede
tener una fracción activa que puede destruir carbonatos y ejercer diversas acciones químico-
biológicas en el seno del agua residual.

 Metano

Se forma en la descomposición anaerobia de la materia orgánica al reducir ciertas bacterias el


CO2, utilizando hidrógeno de fermentaciones butíricas y apareciendo sobre todo en cierto tipo
de estaciones depuradoras, dando algunas posibilidades de aprovechamiento como
combustible.

 Otros gases

Se producen además gases malolientes, como ácidos grasos volátiles, indol, escatol y otros
derivados del nitrógeno.
 Líquidos.

A veces, las aguas residuales urbanas próximas a una industria pueden contener líquidos
específicos.

Por lo general, las aguas residuales urbanas llevan algunos líquidos volátiles como gasolinas,
alcoholes, etc.

 Composición biológica.

Las aguas residuales urbanas contienen gran número de organismos vivos que son los que
mantienen la actividad biológica, produciendo fermentaciones y descomposición y degradación
de la materia orgánica e inorgánica.

Estos organismos pueden ser vegetales o animales, situándose así entre los seres vivos:

Vegetales (Strasburger, 1971)

- Espermatofitos

- Micofitos

- Eumicofitos

- Mixomicofitos

- Euglenofitos

- Ficofitos

- Bacteriofitos

- Virus

Animales (Grassé, 1965.1970)

- Cordados

- Metazoarios triblásticos

• Artrópodos

• Anélidos

• Rotíferos

- Protozoarios

- Rizópodos

- Flagelados

• Ciliados

 Mohos.
Son hongos que se implantan en la materia orgánica en descomposición. Atacan a los hidratos
de carbono y a los productos nitrogenados (en la leche oxidan la caseína, produciendo urea,
leucina, etc.).

Los más importantes son: Mucor, Oidium, Aspergilus, Penicillium, etc.

 Bacterias.

Son organismos unicelulares móviles o inmóviles de formas diversas (cocos, bacilos, espirilos,
filamentosas) y de tamaño y modo de vida diferentes según la especie y el medio.

Se multiplican por división celular y su velocidad de reproducción puede ser frenada por varias
causas, como por ejemplo:

• Naturaleza de la bacteria.

• Temperatura (OºC <T < 45ºC).

• Medio.

• Disminución de alimentos y del oxígeno disuelto.

• Acumulación de productos metabólicos tóxicos.

• Variaciones del pH al aparecer ácidos, productos amoniacales. etc.

• Competencia vital.

En ciertos casos, aunque se cumplan estas condiciones limitantes, las bacterias viven y se
multiplican, como ocurre con las bacterias termófilas (viven bien a 50 0C), o con las anaerobias
estrictas.

Podemos clasificar las bacterias de las aguas residuales urbanas según su nutrición, en dos
grandes grupos:

 Bacterias parásitas

Son las que han tenido como huésped al hombre o a los animales; suelen ser patógenas y
producir graves enfermedades (tifus, cólera, disentería, etc.), y en el tratamiento de las aguas
residuales son uno de los factores más importantes a tener en cuenta.

 Bacterias saprofitas

Son las que se nutren de los sólidos orgánicos residuales y provocan descomposiciones
fundamentales en los procesos cíe depuración.

Según el medio, las bacterias de las aguas residuales urbanas se pueden clasificar en:
Aerobias, anaerobias, facultativas y autótrofas.

 Bacterias aerobias

Son aquellas que necesitan oxígeno procedente del agua para su alimento y respiración.
El oxígeno disuelto que les sirve de sustento es el oxígeno libre (molecular) del agua, y las
descomposiciones y degradaciones que provocan sobre la materia orgánica serán procesos
aerobios, estos procesos se caracterizan por falta de malos olores.

 Bacterias anaerobias

Son las que consumen oxigeno procedente de los sólidos orgánicos e inorgánicos y la
presencia de oxígeno disuelto no les permite subsistir. Los procesos que provocan son
anaerobios y se caracterizan por la presencia de malos olores.

 Bacterias facultativas

Algunas bacterias aerobias y anaerobias pueden llegar a adaptarse al medio opuesto, es decir,
las aerobias a medio sin oxígeno disuelto y las anaerobias a aguas con oxígeno disuelto.

 Bacterias autótrofas

Son aquellas que pueden sustentar su protoplasma a partir de sustancias minerales como
anhídrido carbónico, sulfatos, fosfatos, carbonatos, etc. tomando la energía necesaria para sus
biosíntesis a partir de la luz (bacterias fotosintéticas) o a partir de ciertas reacciones químicas
(bacterias quimiosintéticas).

Citaremos aquí las más importantes dentro de las aguas residuales urbanas según los
procesos que en ellas se efectúan:

Bacterias nitrificantes.

Son las Nitrobacter y Nitrosomonas, que necesitan como fuente de energía reacciones
químicas determinadas. Son aerobias. Las primeras oxidan el ácido nitroso y las segundas el
amoniaco.

Bacterias ferruginosas y manganosas.

Son las que extraen su energía de procesos de oxidación de sales ferrosas o manganosas, y
pertenecen a ella los géneros Clonothrix, Leptothrix, etc.

Tiobacterias.

Las Thiotrix, Beggiatoas y otras oxidan el SH2, y al agotar el gas oxidan el azufre producido a
ácido sulfúrico.

Bacterias oxidantes del hidrógeno.

Las Hydrogenomonas oxidan el hidrógeno producido por las bacterias heterótrofas en las
fermentaciones de los glúcidos, produciendo agua.

 Otros vegetales.

Se presentan algas tipo Euglena, Volvocales, etc.

 Virus.

El interés que tiene el conocer la gran variedad de virus que pueden aparecer en las aguas
residuales, es por su acción nociva como agentes productores de enfermedades-cosa a tener
en cuenta en los tratamientos en estaciones depuradoras- pues pueden infectar el tracto
intestinal y pasar a las heces. En un gramo de heces podemos encontrar hasta 109 panículas
de virus infecciosos.

Los virus más comunes en las aguas residuales urbanas son:

- Adenovirus.

• Enterovirus.

Poliovirus.

Echovirus.

Coxsackievirus.

- Hepatitis A.

- Reovirus.

- Rotavirus.

 Animales.

 Protozoarios.

Aparecen rizópodos (amibas) flagelados y ciliados (Paramecium, Colpidium, Vorticela), etc.

 Metazoarios.

Rotíferos, anélidos (Tubifex), larvas, etc.

 Propiedades de las aguas residuales urbanas.

 Propiedades físicas.

Estas propiedades son adquiridas en su mayor parte, según sea el contenido total de sólidos
en sus diferentes variantes de materiales flotantes, sustancias coloidales y productos disueltos.

Los sólidos pueden plantear problemas cuando las aguas residuales son tratadas mediante
sistemas agrarios, debido a su capacidad de ocluir los poros del suelo y de poder llegar a
establecer costras impermeables sobre la superficie de los terrenos.

El color de los efluentes urbanos produce ciertos efectos sobre las aguas de aplicación cuando
se siguen sistemas agrarios de tratamiento de las aguas residuales. Generalmente, la
coloración es indicadora de la concentración y composición de las aguas contaminadas, y
puede variar del gris al negro. En la medida que éste es más intenso, la capacidad de
absorción de energía solar es mayor, y ello redunda en una ligera elevación de la temperatura
del suelo.

La temperatura de los efluentes urbanos no plantea graves problemas, ya que oscila entre 10 y
20º C; facilita así el desarrollo de una fauna bacteriana y una flora autóctona, ejerciendo una
acción amortiguadora frente a la temperatura ambiente, tanto en verano corno en invierno, y en
cualquier tipo de tratamiento biológico.

El olor causado por la descomposición anaerobia de la materia orgánica es debido, sobre todo,
a la presencia de ácido sulfhídrico, indol, escatoles, mercaptanos y otras sustancias volátiles, y
es eliminado por aireación o por aspersión del agua en los diferentes sistemas biológicos que
se están tratando.

 Propiedades químicas.

Las propiedades químicas del agua tienen gran importancia debido a que interaccionan con las
del suelo, variando el valor de cada parámetro. Esto nos obliga a considerar que las
modificaciones a provocar en el agua residual tienen que poseer un sentido de equilibrio que
evite, en cualquier forma, que un componente se convierta en factor limitante del crecimiento
del sistema natural que queremos aplicar.

Las propiedades químicas de las aguas residuales son proporcionadas por componentes que
podemos agrupar en tres categorías, según su naturaleza: Materia orgánica, compuestos
inorgánicos y componentes gaseosos, conjunto que podemos reunir, a su vez, en dos grandes
grupos:

- Sólidos en suspensión

- Compuestos en disolución

Ya hemos tratado ampliamente de los problemas que causa la materia orgánica. Esta, tanto en
disolución como en suspensión, presenta una composición más o menos homogénea, en la
que se encuentran, en forma predominante, las proteínas, los hidratos de carbono y algunos
aceites y grasas. En esta distribución no podemos olvidar los compuestos citados como
fenoles, plaguicidas, etc.

Si la distribución de esta materia orgánica es importante respecto a las características


organolépticas del agua y algunas propiedades físicas, como la densidad y turbidez, o químicas
corno el pH, generalmente no hay correlación entre la concentración y el efecto.

De este modo, podemos comprender que a bajas concentraciones de un determinado


compuesto orgánico, pueden manifestarse toxicidades en un suelo si se aplican sistemas de
vertidos agrarios.

Existen elementos, como el nitrógeno, que se encuentran bajo diferentes formas:

El nitrógeno orgánico puede aparecer como amonio, en los nitratos orgánicos y en los nitritos,
siendo las dos primeras formas mayoritarias. La presencia de nitratos es muy importante
cuando se aplican sistemas de vertidos a suelos. y. además, por la capacidad de eutrofización
que desarrollan estos compuestos cuando aparecen en concentraciones elevadas en la parte
superficial de los suelos.

Un elemento integrado en los compuestos orgánicos de los efluentes, y de gran importancia, es


el fósforo, que pasa rápidamente a fosfato.

Los elementos pesados y los elementos traza son, en algunos casos, esenciales para el
desarrollo y el crecimiento de las plantas y microorganismos de los sistemas biológicos de
tratamiento de aguas. Sin embargo, a determinados niveles estos elementos esenciales se
pueden convertir en tóxicos.

El zinc, el cobre y el níquel son los metales que más contribuyen a acrecentar las cifras de
elementos pesados, siendo el zinc el metal usado como referencia de toxicidad.
El boro es otro elemento que puede afectar mucho a los sistemas biológicos de tratamiento de
aguas. Es esencial en la micronutrición vegetal, pero puede ser tóxico para muchos sistemas
de fauna y flora que están presentes en los procesos de tratamiento de las aguas residuales.

 Características biológicas.

El componente biológico es básico en las aguas residuales, habida cuenta de su capacidad


metabólica y, en consecuencia, de su potencialidad de trasformación de los restos químicos,
orgánicos y físicos.

Ya hemos indicado reiteradamente la presencia de fauna y flora en las aguas residuales,


hemos hablado de bacterias, actinomicetos, hongos y algas, y hemos hablado de la fauna que
compone las pirámides de detritívoros que sirven para conseguir reciclar determinados
elementos que son fundamentales para los sistemas biológicos de tratamiento de las aguas
residuales.

Es claro que el componente orgánico de las aguas residuales es un medio de cultivo que
permite el desarrollo de los microorganismos que cierran los ciclos biogeoquimicos de
elementos como el azufre, el carbono, el nitrógeno o el fósforo, entrando frecuentemente en
competencia y eliminando los elementos microbianos patógenos que se pueden encontrar en el
medio.

Este componente biológico se manifiesta fundamentalmente en 5 áreas diferentes:

 Descomposición de los compuestos orgánicos contenidos en las aguas residuales.

 Eliminación de determinados compuestos orgánicos que sean tóxicos para los vegetales y
microorganismos del suelo.

 Desaparición de microorganismos patógenos.

 Participación en los ciclos biogeoquimicos del N, del P, y del S, elementos fundamentales


cuando se presentan como nitratos, fosfatos o sulfatos en el movimiento y asimilación por el
suelo y los vegetales.

 Reacciones de la materia orgánica transformada y del componente microorgánico frente a


los constituyentes minerales del suelo, participando en la promoción de microagregados
organominerales, variando la solubilidad de determinados iones y la solubilidad a lo largo de los
diferentes horizontes del perfil, etc.

Un último aspecto del componente biológico de las aguas residuales, es la presencia de


determinados virus ya citados, quienes, aún en muy baja proporción respecto a bacterias y
microorganismos en general, manifiestan enorme peligrosidad desde el punto de vista sanitario.

Los virus presentes en estas aguas residuales provienen de las excretas intestinales del
hombre y los animales domésticos. Se han detectado unos 100 serotipos diferentes en las
excretas humanas y su actuación depende del tipo de virus. Muchos son resistentes a casi
cualquier tipo de tratamiento. El mayor problema lo plantean por su capacidad de detección con
pequeñísima presencia de inoculo.

A pesar de todo, si no se ingieren aguas residuales urbanas, si se tratan y si su uso se


restringe a aplicaciones adecuadas, el peligro desde el punto de vista sanitario se reduce al
mínimo. A ello ayuda, además, la acción del medio, pues hay que tener en cuenta que los virus
siempre necesitan un elemento vivo para poder desarrollar su ciclo vital y si el líquido se aplica
de forma apropiada, esa fase queda muy marginada y así se minimiza el riesgo.
Plantas de tratamiento de aguas residuales

las Plantas de Tratamiento son instalaciónes donde a las Aguas Residuales se les retiran los
contaminantes, para hacer de ella un agua sin riesgos a la salud y al medio ambiente al
disponerla en un cuerpo receptor natural (mar, ríos o lagos) o por su reuso en otras actividades
de nuestra vida cotidiana con excepción del consumo humano (no para ingerir o aseo
personal).

Los objetivos de las plantas de tratamiento biológico son tres:

(1º) reducir el contenido en materia orgánica de las aguas.


(2º) reducir su contenido en nutrientes.
(3º) eliminar los patógenos y parásitos.
Estos objetivos se logran por medio de procesos aeróbicos y anaeróbicos, en los cuales la
materia orgánica es metabolizada por diferentes cepas bacterianas.

Las aguas residuales son creadas por las residencias, las instituciones, y los establecimientos
comerciales e industriales. Pueden ser tratadas cerca de donde se crean (en tanques o plantas
sépticas y otros sistemas de tratamiento aerobios), o ser recogidas y transportadas vía una red
de tuberías y las estaciones de bomba a una planta de tratamiento municipal. La colección y el
tratamiento de las aguas residuales está típicamente conforme a ser local, estatal y a
regulaciones federales y a estándares (regulación y controles). Las fuentes industriales de las
aguas residuales requieren a menudo procesos especializados de tratamiento.
Normalmente el tratamiento de las aguas residuales implica tres etapas: Tratamiento primario,
secundario y terciario.
Primero, los sólidos se separan de la corriente de las aguas residuales. La materia biológica
entonces disuelta es convertida progresivamente en una masa sólida usando bacterias
indígenas, flotantes. Finalmente, los sólidos biológicos entonces se neutralizan o reutilizan, y el
agua tratada se puede desinfectar químicamente o físicamente (por ejemplo por la
microfiltración). El efluente final se puede descargar en una corriente, un río, una bahía, una
laguna o una tierra húmeda, o puede ser utilizado para la irrigación.

 Pretratamiento:

Esta etapa no afecta a La materia orgánica contenida en el agua residual. Se pretende con el
pretratamiento La eliminación de materias gruesas, cuerpos gruesos y arenosos cuya
presencia en el efluente perturbaría el tratamiento total y el funcionamiento eficiente de las
maquinas, equipos e instalaciones de La estación depuradora.

En el pretratamiento se efectúa un desbaste para La eliminación de las sustancias de tamaño


excesivo y un tamizado para eliminar las partículas en suspensión. Un desarenado, para
eliminar las arenas y sustancias sólidas densas en suspensión y un desengrasado para
eliminar los aceites presentes en el agua residual así como elementos flotantes.

Depuración de aguas residuales

Los procesos empleados en las plantas depuradoras municipales suelen clasificarse como
parte del tratamiento primario, secundario o terciario.

Tratamiento primario

Las aguas residuales que entran en una depuradora contienen materiales que podrían atascar
o dañar las bombas y la maquinaria. Estos materiales se eliminan por medio de enrejados o
barras verticales, y se queman o se entierran tras ser recogidos manual o mecánicamente. El
agua residual pasa a continuación a través de una trituradora, donde las hojas y otros
materiales orgánicos son triturados para facilitar su posterior procesamiento y eliminación.

Cámara de arena
En el pasado, se usaban tanques de deposición, largos y estrechos, en forma de canales, para
eliminar materia inorgánica o mineral como arena, sedimentos y grava. Estas cámaras estaban
diseñadas de modo que permitieran que las partículas inorgánicas de 0,2 mm o más se
depositaran en el fondo, mientras que las partículas más pequeñas y la mayoría de los sólidos
orgánicos que permanecen en suspensión continuaban su recorrido. Hoy en día las más
usadas son las cámaras aireadas de flujo en espiral con fondo en tolva, o clarificadores,
provistos de brazos mecánicos encargados de raspar. Se elimina el residuo mineral y se vierte
en vertederos sanitarios. La acumulación de estos residuos puede ir de los 0,08 a los 0,23 m3
por cada 3,8 millones de litros de aguas residuales.

Sedimentación

Una vez eliminada la fracción mineral sólida, el agua pasa a un depósito de sedimentación
donde se depositan los materiales orgánicos, que son retirados para su eliminación. El proceso
de sedimentación puede reducir de un 20 a un 40% la DBO5 y de un 40 a un 60% los sólidos
en suspensión.

La tasa de sedimentación se incrementa en algunas plantas de tratamiento industrial


incorporando procesos llamados coagulación y floculación químicas al tanque de
sedimentación. La coagulación es un proceso que consiste en añadir productos químicos como
el sulfato de aluminio, el cloruro férrico o polielectrolitos a las aguas residuales; esto altera las
características superficiales de los sólidos en suspensión de modo que se adhieren los unos a
los otros y precipitan. La floculación provoca la aglutinación de los sólidos en suspensión.
Ambos procesos eliminan más del 80% de los sólidos en suspensión.

Flotación

Una alternativa a la sedimentación, utilizada en el tratamiento de algunas aguas residuales, es


la flotación, en la que se fuerza la entrada de aire en las mismas, a presiones de entre 1,75 y
3,5 kg por cm2. El agua residual, supersaturada de aire, se descarga a continuación en un
depósito abierto. En él, la ascensión de las burbujas de aire hace que los sólidos en suspensión
suban a la superficie, de donde son retirados. La flotación puede eliminar más de un 75% de
los sólidos en suspensión.

Digestión

La digestión es un proceso microbiológico que convierte el cieno, orgánicamente complejo, en


metano, dióxido de carbono y un material inofensivo similar al humus. Las reacciones se
producen en un tanque cerrado o digestor, y son anaerobias, esto es, se producen en ausencia
de oxígeno. La conversión se produce mediante una serie de reacciones. En primer lugar, la
materia sólida se hace soluble por la acción de enzimas. La sustancia resultante fermenta por
la acción de un grupo de bacterias productoras de ácidos, que la reducen a ácidos orgánicos
sencillos, como el ácido acético. Entonces los ácidos orgánicos son convertidos en metano y
dióxido de carbono por bacterias. Se añade cieno espesado y calentado al digestor tan
frecuentemente como sea posible, donde permanece entre 10 y 30 días hasta que se
descompone. La digestión reduce el contenido en materia orgánica entre un 45 y un 60 por
ciento.

Desecación

El cieno digerido se extiende sobre lechos de arena para que se seque al aire. La absorción por
la arena y la evaporación son los principales procesos responsables de la desecación. El
secado al aire requiere un clima seco y relativamente cálido para que su eficacia sea óptima, y
algunas depuradoras tienen una estructura tipo invernadero para proteger los lechos de arena.
El cieno desecado se usa sobre todo como acondicionador del suelo; en ocasiones se usa
como fertilizante, debido a que contiene un 2% de nitrógeno y un 1% de fósforo.

Tratamiento secundario
Una vez eliminados de un 40 a un 60% de los sólidos en suspensión y reducida de un 20 a un
40% la DBO5 por medios físicos en el tratamiento primario, el tratamiento secundario reduce la
cantidad de materia orgánica en el agua. Por lo general, los procesos microbianos empleados
son aeróbicos, es decir, los microorganismos actúan en presencia de oxígeno disuelto. El
tratamiento secundario supone, de hecho, emplear y acelerar los procesos naturales de
eliminación de los residuos. En presencia de oxígeno, las bacterias aeróbicas convierten la
materia orgánica en formas estables, como dióxido de carbono, agua, nitratos y fosfatos, así
como otros materiales orgánicos. La producción de materia orgánica nueva es un resultado
indirecto de los procesos de tratamiento biológico, y debe eliminarse antes de descargar el
agua en el cauce receptor.

Hay diversos procesos alternativos para el tratamiento secundario, incluyendo el filtro de goteo,
el cieno activado y las lagunas.

Filtro de goteo

En este proceso, una corriente de aguas residuales se distribuye intermitentemente sobre un


lecho o columna de algún medio poroso revestido con una película gelatinosa de
microorganismos que actúan como agentes destructores. La materia orgánica de la corriente
de agua residual es absorbida por la película microbiana y transformada en dióxido de carbono
y agua. El proceso de goteo, cuando va precedido de sedimentación, puede reducir alrededor
de un 85% la DBO5.

Fango activado

Se trata de un proceso aeróbico en el que partículas gelatinosas de cieno quedan suspendidas


en un tanque de aireación y reciben oxígeno. Las partículas de cieno activado, llamadas floc,
están compuestas por millones de bacterias en crecimiento activo aglutinadas por una
sustancia gelatinosa. El floc absorbe la materia orgánica y la convierte en productos aeróbicos.
La reducción de la DBO5 fluctúa entre el 60 y el 85 por ciento.

Un importante acompañante en toda planta que use cieno activado o un filtro de goteo es el
clarificador secundario, que elimina las bacterias del agua antes de su descarga.

Estanque de estabilización o laguna

Otra forma de tratamiento biológico es el estanque de estabilización o laguna, que requiere una
extensión de terreno considerable y, por tanto, suelen construirse en zonas rurales. Las
lagunas opcionales, que funcionan en condiciones mixtas, son las más comunes, con una
profundidad de 0,6 a 1,5 m y una extensión superior a una hectárea. En la zona del fondo,
donde se descomponen los sólidos, las condiciones son anaerobias; la zona próxima a la
superficie es aeróbica, permitiendo la oxidación de la materia orgánica disuelta y coloidal.
Puede lograrse una reducción de la DBO5 de un 75 a un 85 por ciento.

TRATAMIENTOS TERCIARIOS

La reutilización de agua residual mediante tratamientos terciarios es una buena alternativa para
el ahorro de agua y reducir considerablemente el consumo. Para ello es fundamental adecuar
el agua de salida de la depuradora a unos parámetros adecuados para su uso con otros fines
como el riego del jardín debido a que, fundamentalmente, el agua depurada presentará cierto
contenido bacteriológico y por tanto necesita ser desinfectada. Hidritec dispone
fundamentalmente de tres métodos de desinfección de agua que pueden ser complementados
con una filtración apropiada estudiando cada caso concreto por separado en función del tipo de
agua residual y las necesidades concretas.

TRATAMIENTO TERCIARIO MEDIANTE SISTEMA DE CLORACIÓN


Se trata de mantener el agua depurada en un depósito final de distribución con un contenido
adecuado de cloro libre para evitar la proliferación de microorganismos con el objetivo de
hacerla apta para su reutilización. Existen varias formas de cloración del depósito que pueden
pasar por un sistema automático de medición y control de la dosificación de cloro libre en el
depósito mediante sonda de cloro libre o de redox o dosificación de cloro proporcional al caudal
de agua depurada mediante la instalación de un contador-emisor de impulsos. La cloración del
agua residual es el sistema más sencillo y económico para un tratamiento terciario de
reutilización de agua para riego de jardines y plantas. Como desventaja cabe destacar el hecho
de que requiere el empleo y manipulación de un producto químico como el hipoclorito de sodio.
Además, ciertas plantas ornamentales, hortalizas o cultivos frutícolas pueden ser susceptibles a
ser dañadas a partir de ciertos niveles de cloro libre. También cabe destacar que este sistema
supone siempre el empleo de un depósito exclusivo para realizar la cloración ya que siempre
es necesario un tiempo de contacto adecuado del agua clorara para asegurar la desinfección.

Algunas de las reacciones químicas que ocurren entre compuestos de cloro y el agua se
representan en las ecuaciones químicas siguientes:

Hidrólisis del cloro: Cl2 + 2 H2O -----> HCl + H3O1+ + Cl1-

Disociación del ácido hipocloroso: HClO + H2O ----> H3O1+ + ClO1-

Acidificación del hipoclorito de sodio: NaClO + H1+ ----> Na1+ + HClO

El cloro puede formar con el amoníaco las cloraminas que también tienen acción
desinfectante. El peróxido de cloro también es capaz de oxidar a los fenoles.
El cloro tiene una acción tóxica sobre los microorganismos y actúa como oxidante sobre la
materia orgánica no degradada y sobre algunos minerales. El cloro no esteriliza porque aunque
destruye microorganismos patógenos no lo hace con los saprofitos.
El tratamiento biológico puede resumirse en el siguiente diagrama:

TRATAMIENTO TERCIARIO MEDIANTE RADIACIÓN ULTRAVIOLETA

En este caso la desinfección se realiza mediante un equipo UV que proporciona una


desinfección inmediata y más efectiva que la cloración. Otra ventaja añadida es que no
requiere de depósitos de contacto ya que la desinfección se realiza de forma instantánea
mediante el paso de agua por el equipo de tratamiento ultravioleta lo que favorece este tipo de
tratamiento terciario cuando no se disponga de espacio suficiente para un tratamiento con cloro
o con ozono. Para asegurar el buen funcionamiento del equipo ultravioleta es necesario un
correcto sistema de filtración para eliminar turbidez y asegurar una transmitancia adecuada de
la radiación ultravioleta en el flujo de agua a tratar.

TRATAMIENTO TERCIARIO MEDIANTE OZONIZACIÒN

El ozono es un poderoso oxidante y desinfectante con una velocidad de esterilización superior


a la de un tratamiento convencional de cloro aumentando su eficacia. Esto permite tratamientos
con ozono con tanques de contacto muy reducidos ya que únicamente son necesarios unos
tres minutos de tiempo de contacto para asegurar la desinfección. Además , para el tratamiento
de agua residual para su reutilización en riego y agricultura, el ozono aporta una mayor
oxigenación a la raíz de la planta a la vez que le transmite su carácter desinfectante. Los
resultados son cultivos con un crecimiento más rápido con mayor productividad y evitando
plagas y enfermedades.

El proceso de ósmosis inversa

En el proceso de ósmosis inversa se requiere de una membrana semipermeable (cuando


están en contacto con la solución, permite el paso de pequeñas moléculas de disolvente y
bloquea el paso de moléculas o iones de mayor tamaño como el soluto) que solamente permita
el paso del agua. Cuando una solución acuosa (por ejemplo, agua con iones minerales) se
separa del agua mediante una membrana semipermeable, el agua fluye hacia la solución y
debido a esto la concentración de iones en solución disminuye. Este es el fenómeno de la
ósmosis y a la presión necesaria para evitar que se presente el fenómeno de la ósmosis se le
llama presión osmótica de la solución. Sin embargo, este proceso puede invertirse mediante la
aplicación de una presión sobre la solución con lo cual el agua es forzada a fluir de la solución
hacia la otra parte del sistema (el agua dulce) provocando así la concentración de los iones. A
este fenómeno se le conoce con el nombre de ósmosis inversa.
El fenómeno de la ósmosis inversa es útil para la desmineralización del agua y para la
eliminación de materia orgánica y nutrientes disueltos en el agua. La ósmosis inversa puede
llegar a lograr una desmineralización del 90 % con una pérdida de aproximadamente el 25 %
del agua de alimentación en forma de sal muera. Se le considera como uno de los métodos de
tratamiento terciario más prometedor para el tratamiento del agua contaminada.
La isla de Malta que se localiza en el mar Mediterráneo, está formada principalmente por
piedra caliza y por eso existe poca agua dulce subterránea. Parte del agua para consumo en la
isla se obtiene por el método de desalinización por ósmosis inversa reduciendo la salinidad del
agua de 36000 ppm a menos de 500 ppm (límite aceptable para el agua potable). La planta
desalinizadora está en Ghar Lapsi y produce 5.3 millones de galones de agua desalinizada por
día.

¿Qué es la electrolisis del agua?

El tratamiento del agua por electrólisis es mucho más común de lo que nosotros suponemos;
decimos que es un tipo de desinfección ecológica y segura y supone, al mismo tiempo, un
nuevo concepto en el tratamiento de las piscinas. La electrólisis del agua tiene como objetivo
mejorar su calidad y simplificar en gran medida los trabajos de mantenimiento; éste es un
sistema que básicamente genera cloro a partir de sal común. Esta sal se añade directamente
sobre la piscina en una concentración que no supera los 6 gramos litros, es decir 6 veces
menos a la concentración del agua de mar; esta adición de sal se efectuará una única vez, al
llenar la pileta lo que implica que no será necesario agregar una nueva concentración durante
la vida útil del agua. El tratamiento del agua por electrólisis es un sistema capaz de eliminar
cualquier tipo de impureza microscópica; si se lo une a un eficiente sistema de depuración,
conseguimos resultados óptimos. Debemos aclarar que los bañistas no notarán la sal en el
agua, sino que todo lo contrario, tendrán la sensación de nadar en un líquido similar al del mar
pero mucho más suave debido a que la concentración salina es mucho menor pero suficiente
como para permitir la electrólisis.

La segunda ventaja radica en el mantenimiento del sistema, éste es más que sencillo, lo único
que debemos rellenar los depósitos especiales de sal, y esto de forma esporádica; además con
la electrólisis no es necesario manipular, almacenar ni dosificar ningún elemento químico.
Obtenemos un considerable ahorro de agua, llegando incluso hasta el 5% del volumen total de
los estanques.

Intercambio iónico

Para eliminar el exceso de iones inorgánicos positivos y negativos se utiliza el método de


intercambio iónico, el cual se basa en el mismo principio que el método del intercambio por
tratamiento con permanganato de potasio. Cuando el sabor es debido al clorofenol se elimina al
filtrar el agua a través de carbón activado. El cloro detiene el crecimiento de las algas, también
lo hacen el permanganato de potasio y el sulfato de cobre. Si los conductos se ensucian deben
limpiarse y los lechos filtrantes se deben volver a lavar para eliminar las acumulaciones de
mucílagos y mejorar la velocidad de caudal.

FILTRACION DE AGUA CON CARBON ACTIVO (Adsorción)

EN QUE CONSISTE LA FILTRACION

La filtración por arena, carbón activado o antracita consiste en la purificación del agua al
atravesar un lecho compuesto por alguno de los materiales citados. La filtración es
utilizada en los tratamientos de afino de las Estaciones de Tratamiento de Agua Potable
(E.T.A.P.).

Los filtros de alto rendimiento URSO están especialmente concebidos para cubrir todas las
necesidades en el campo del tratamiento del agua. Están sometidos a un riguroso control de
calidad y probados uno a uno a 1,5 veces la presión de trabajo seleccionada.
FILTRO
URSO -
CA

1-Lecho de
Carbón
Activo

2-Batería
de válvulas

3-Toberas
de drenaje

4-
Distribuidor

CARBON ACTIVO

El carbón es una sustancia que se viene utilizando desde finales de la edad media con fines
medicinales, pero no ha sido hasta el siglo XVIII cuando se han empezado a desarrollar
aplicaciones industriales con carbón activo.

En la actualidad esta ampliamente implantado el empleo de carbón activo en diversos campos


de la industria tales como la industria de los azucares, la industria química, la industria
farmacéutica etc. y, además, se está incrementando su uso cada vez más en el tratamiento de
aguas residuales, potables y de proceso industrial, ya que, el carbón activo, es la sustancia
adsorbente por excelencia. Esta elevada capacidad de adsorción de diversas sustancias, junto
con la gran facilidad y rapidez de eliminación del medio tratado y la posibilidad de, una vez
agotado, ser regenerado para su reutilización, permite un tratamiento eficaz y barato en
múltiples aplicaciones, en muchas de las cuales es un producto insustituible.
En el presente documento se presentan de forma resumida las características físico - químicas
del carbón activo, sus diferentes tipos, los métodos de fabricación y regeneración y sus
posibles aplicaciones.

El carbón activo en grano en el tratamiento de aguas:

El carbón activo en grano puede usarse en el tratamiento de aguas potables sustituyendo a los
filtros de arena o como complemento de estos en una segunda etapa de filtración. En el
primer caso el carbón activo en grano actuaría como filtro mecánico y adsorbente, mientras que
en el segundo caso solo funcionaría como adsorbente con una mayor eficiencia en la retención
de micro contaminantes.

Una de las funciones del carbón activo en el tratamiento de aguas es la eliminación de


concentraciones residuales de agentes oxidantes como cloro y ozono, y de los derivados
cancerígenos, trihalometanos, originados en estos tratamientos. El carbón activo actúa
adsorbiendo estos productos o catalizando su paso a formas reducidas inofensivas.

Estos agentes oxidantes pueden dañar el carbón activo que, para esta aplicación, debe de
presentar una gran dureza, siendo los carbones de hueso de aceituna y cáscara de coco los
más recomendables.

La capacidad de un carbón activo para eliminar concentraciones residuales de cloro viene dada
por la altura de la columna de carbón activo necesaria para reducir la concentración de cloro de
una solución a la mitad.

El carbón activo retiene materia orgánica, algas, detergentes, pesticidas, y en general todos los
compuestos que causan problemas de olores y sabores en las aguas destinadas al
abastecimiento de poblaciones.

La capacidad de un carbón activo para adsorber materia orgánica viene dada por el índice de
adsorción de fenol.

Sobre el carbón activo granular puede además favorecerse el desarrollo de colonias


bacterianas que contribuyan a la eliminación de materia orgánica.

Cuando las aguas presentan problemas por la presencia de iones hierro y manganeso, el
tratamiento consiste en la oxidación bien con oxigeno atmosférico bien con agentes oxidantes y
una posterior filtración en carbón activo o antracita.

Para la selección del mejor tipo de carbón activo para la adsorción de un determinado
contaminante, así como de los mejores parámetros de operación de un filtro (tiempo de
contacto, granulometría del carbón activo, altura del lecho, etc.), es posible llevar a cabo un
"Test en Columna" consistente en filtrar una muestra del agua a tratar a través de columnas de
carbón activo en grano.

Estas columnas deben de tener unas dimensiones mínimas de 60 cm de altura de carbón


activo y 4 cm de diámetro interno y pueden estar fabricadas en cristal, plástico, fibra de vidrio o
metal.

El diseño de los filtros de carbón activo granular depende de la calidad del agua y de la
disponibilidad de espacio, así como de las etapas de tratamiento necesarias.

Básicamente se pueden usar filtros abiertos o filtros cerrados a presión. La velocidad de


filtración en estos filtros ronda los 5-20 m/h y la altura de lecho como mínimo de 75 cm. Los
filtros se deben contra lavar con agua, ya que el contra lavado con aire puede producir abrasión
y formación de finos. La velocidad de contra lavado recomendable es de 10 - 15 m/h, lo que
provocar una expansión del lecho de carbón de aproximadamente un 20%.

El carbón activo usado en tratamiento de aguas potables puede regenerarse una vez agotada
su vida útil.

Potrebbero piacerti anche