SEMINARIO: ENCUENTROS Y DESENCUENTROS EN LA RELACION DE

PAREJA.

CONGREGACION MARIANA
Centro de Familia Santa Maria
Medellín
Julio 31 de 2010

CAMINO PARA RECONSTRUIR LA CONFIANZA

DESPUES DE UNA INFIDELIDAD
CRISTINA MARIA GIRALDO HURTADO
Trabajadora Social, UPB
Esp. en Trabajo social de Familia, UPB
Esp. en Terapia Familiar Sistémica, UPB

Las relaciones que requieren la vivencia de un compromiso genuino, son como

un molino de piedra: o te muelen o te pulen; que ocurra algunas de estas dos
cosas, depende en último término de uno mismo. Ninguna relación adulta está
expuesta a tantas fricciones y situaciones difíciles como la relación de pareja,
pues en esta, hay un enfrentamiento permanente con las necesidades, deseos
y expectativas de la otra persona, lo que en la mayoría de las veces es el caldo
de cultivo para variadas y necesarias crisis, siendo quizás una de las más
devastadoras la infidelidad.

Esta conferencia esta interesada en abordar el aspecto reparador de la

infidelidad, las formas de reconstruir vínculos y resignificar la intimidad, a partir
de acciones negociadas y concretas que favorezcan el restablecimiento de la
confianza y la materialización del perdón al interior de la pareja.

La infidelidad después de la violencia domestica, es el problema más frecuente

y difícil en las relaciones de pareja, es síntoma de alguna anomalía previa,
consciente o inconsciente, por ello, un verdadero detector de problemas
amorosos ocultos y una oportunidad de visibilizarlos y resolverlos, es decir, un
punto de partida para mejorar la relación. De ahí que las infidelidades sólo
destruyen las malas relaciones, demasiado débiles, desgastadas o neuróticas y
refuerzan las que están enraizadas en lazos de amor, madurez psicológica,
responsabilidad y compromisos. La infidelidad como la ruptura de un contrato,
acuerdo o pacto implícito o explícito, en el cual uno de los dos miembros en
una pareja, tiene algún tipo de relación con una tercera persona (J. Camacho).
Si bien esto puede sonar muy claro, a veces los límites de lo que se considera
una infidelidad varía de persona a persona. El tema fundamental para hablar
de infidelidad es la ruptura del contrato que se había establecido, al romperse o
incumplirse ese contrato entre los miembros de la pareja, se pone en cuestión
la confianza y la palabra empeñada, dañando la relación. La confianza es la
gran perjudicada con el descubrimiento de la infidelidad, la persona engañada
tendrá dificultades en volver a creer en ella y en el otro, se rompe la promesa
de amor, respeto y responsabilidad donde la exclusividad es el prerrequisito
supremo para construir un proyecto de pareja.
Así pues, la exclusividad se refiere a que la pareja tendrá un espacio relacional
privado, donde no puede ingresar nadie más. Este pacto dota a la pareja de un
ambiente de seguridad, que poco a poco se convierte en intimidad, ambos
elementos, seguridad e intimidad, son necesarios para la evolución y
supervivencia de la pareja; la intimidad es la posibilidad de desnudarse
emocionalmente, libre de juicios o rechazo, se construye a medida que crece la
confianza y donde a pesar de ser personas diferentes, sigue habiendo aprecio,
respeto y afecto por aquello que es del otro. La intimidad le permite a la pareja
conocer del otro no solo lo evidente, sino también lo privado.

Sin compromiso ni fidelidad, la intimidad y la cercanía son muy endebles e

inseguras como para aventurarse en una relación de pareja duradera y a pesar
de que la pareja necesita una vida extraconyugal donde nutrir su individualidad,
ese espacio privado de intimidad debe permanecer vedado a factores externos
que pongan en peligro la estabilidad del compromiso y las premisas básicas de
la relación.

Cuando la infidelidad tiene lugar en una pareja, la reconstrucción de este

vinculo es un proceso complejo y largo, donde se evidencian tres opciones,
uno, conformarse con la situación; dos, separase o tres, seguir juntos, reparar
el daño y aprender a relacionarse de una mejor manera; sin embargo, en
cualquiera de estos casos, la pareja debe ser conciente de que la delación
nunca volverá a ser como antes, es probable que sea mejor o peor, pero no
igual. Si la pareja permanece junta y desea reparar la crisis, debe iniciar con
un compromiso genuino de mutua transformación, aceptación y perdón; es
responsabilidad de ambos reconstruir el vinculo; no solo es el infiel el
responsable de la reparación, debe haber en el engañado (a) una actitud de
flexibilidad para aceptar y recibir las acciones reparatorias y coconstruir
nuevas opciones que permitan sanar las heridas, recuperarse a sí mismo y a
la relación.

Restablecer la confianza, requiere de voluntad, creatividad y constancia, hay

que mirar con sinceridad la relación, los sentimientos y verdades de cada uno,
entender el sentir y las confusiones que particularmente los afectan, evitar la
victimización y enfrentarse progresivamente a la cicatrización de estas heridas
mediante la vivencia del siguiente proceso:

1. Expresar, desfogar las emociones ocasionadas (dolor, despecho, rabia)

no sólo ante la propia pareja, sino también con otros familiares, amigos,
etc., que acompañarán y compartirán el dolor de la persona y le darán
ánimo y consejo.

2. La persona engañada y su pareja infiel deberán afrontar con coraje el

suceso e investigarán conjuntamente cuál fue el significado de la
infidelidad: ¿una huida? ¿una sustitución? ¿un narcótico? ¿un castigo o
venganza? ¿una muestra de soledad o desamor? ¿un síntoma de
aburrimiento? Etc. Es indispensable responder a estas preguntas no
sólo como parte del proceso curativo del engañado (a), sino también
 para prevenir futuras repeticiones de la infidelidad u otros síntomas
indeseables.

3. Resolver a fondo, si se quiere y se puede, todos los problemas

descubiertos (comunicación, aburrimiento, desconfianza, rencores
ocultos, problemas sexuales, problemas con los hijos, problemas
emocionales en alguno o ambos miembros de la pareja u otros).

Si ambos miembros de la pareja se aman y son lo suficientemente lúcidos y

valientes para recorrer juntos, todas estas etapas, las heridas del engañado y
el sentimiento de culpa del infiel empezara a desaparecer gradualmente, la
confianza del primero regresará espontáneamente, y la calidad de la relación
tenderá a ser incluso mejor que antes de la infidelidad. Si, por el contrario,
estos procesos no se dan u ocurren muy defectuosamente, entonces el
conflicto mutuo seguirá abierto durante mucho tiempo y podrá llevar incluso a la
ruptura definitiva.

Para poder establecer agendas de reparación, es necesario que los miembros

de la pareja entiendan que desde el rol de engañado (a) o infiel, los retos y
necesidades son variables, aunque el compromiso y la intención reparatoria
deben se equitativos; de un lado el engañado sufre inmediatamente tres
heridas: dolor por el abandono (celos); humillación (narcisismo y autoestima
heridos) y rabia (odio, rencor, deseos de venganza), necesita entonces
recuperar su autoestima, aprender a poner limites, desarrollar flexibilidad,
recuperar la alegría y validar su sentido de vida para autodignificarse; de otro,
el infiel requiere conocerse, entender la naturaleza de su actos, trabajar en su
tendencia a romper pactos y reglas, hacer concientes sus debilidades y
necesidades, ejecutar acciones encaminadas a retribuir el daño causado para
facilitar la construcción de una nueva confianza y recuperar la capacidad de
merecimiento.

Acciones reparadoras del infiel:

1. Reconocer la ofensa y pedir perdón

2. Romper inmediatamente la relación con el o la amante
3. Informar a la pareja de cualquier encuentro casual con la tercera
persona
4. Escuchar humildemente los reclamos y contener la rabia
5. Responsabilizarse de la multa por los daños causados (perdidas
temporales o definitivas)
6. Dar cuenta de su rutina diaria:
a. Informar en que lugar y con quien esta
b. Informar cuando llegara a la casa
c. Asegurar verbalmente y de manera constante que no tendrá otra
aventura amorosa
d. Insistir en que no abandonara la relación
e. Expresar constantemente la importancia de la pareja.
7. Cubrir de miel las conversaciones:
a. Me encanta estar contigo
b. Tu eres lo que necesito en mi vida
 c. Le das tantas cosas a mi vida
d. Tu haces que mi vida sea mas interesante
e. Tu has construido una vida hermosa para nosotros
f. Tu haces que mi vida se llene de risas
g. Mi vida es mucho mas rica gracias a ti
h. Me encanta abrasarte
i. Te deseo
j. Eres muy guapo (a)
k. Tu me haces sentir mas seguro (a)
l. Me gusta la manera en que tratas a la gente
m. Me encanta que podamos confiar uno en el otro
n. Me encanta como te ves, como hueles y la forma en que caminas
o. Me encanta conversar contigo
p. Aunque este de mal humor todavía te amo
q. Puedo contar con tigo
r. Tu haces de nuestra casa un hogar
s. No podría soportar perderte
t. Quiero que siempre estemos juntos
u. Me encanta el hecho de haber podido enfrentar juntos los
momentos difíciles
v. Se que me amas
w. Me encanta la persona que soy en tu presencia
x. Me enorgullezco de ti
y. Te extraño
z. Gracias

Acciones reparadoras de quien es engañado:

1. Humildad para reconocer el dolor

2. Autoevaluación
3. Reconocer las ganancias secundarias que mantienen el caos
4. Disposición honesta de reconstrucción de la relación
5. Reconocer la necesidad de humanizar a su pareja (no existen parejas
perfectas)
6. Callar su mente y desconectarse del evento
7. Detener los reclamos
8. Aceptar las acciones reparatorias
9. Esforzarse por mantener buenos momentos
10. Hacer preguntas pertinentes cuyas respuestas sea capaz de escuchar:
a. Que te dijiste a ti mismo (a) que te dio permiso a relacionarte con
esta persona?
b. Después de haber tenido sexo por primera vez con esta persona,
te sentiste culpable?
c. Si sabias que estaba mal ¿Cómo pudo progresar esa relación?
d. Pensaste en mi en algún momento?
e. Que compartiste sobre nosotros?
f. Hablaron de amor?
g. Hablaron de un futuro juntos?
h. Que viste en él o ella?
i. Que te gusto de ti mismo en esa relación?
 j. Hubo infidelidades previas u otras oportunidades?
k. Tuviste sexo sin protección?
l. Que te enseño esta experiencia?
m. Crees que te equivocaste?
n. Estas arrepentido?

Es compromiso de ambos descubrir lo que abrió la grieta y permitió la entrada

de un tercero, descubrir lo que falto y sobro en la relación, sin señalar
culpables, moverse rápidamente hacia el rescate de la relación, teniendo en
cuenta que habrá altibajos y obstáculos que son necesarios y sanos porque
permiten expresar las diferencias sin miedo al rechazo o al abandono
emocional. La disposición a permitir la expresión del temor del otro y su
verdad, es la paz que ofrece el perdón.

Si la infidelidad supone la ruptura de un contrato, la reparación y el perdón

exigen la construcción de uno nuevo, que recoja el aprendizaje logrado, nuevas
expectativas y amor maduro, este nuevo contrato de pareja debe ser objetivo,
evaluable, negociado y supervisado, con unas variables claras que permitan la
socialización de las responsabilidades, las necesidades y las metas; estas
podrían ser algunas de las categorías que facilitaría la formalización de un
nuevo pacto en la relación:

• Que significa para la pareja convivencia

• Que compromisos necesita la relación
• Redistribución de los roles
• Que significa en la relación la sexualidad y el sexo, como se vivirá
• Como se desarrollará la negociación de los conflictos
• Que acciones crearan y protegerán la intimidad de la pareja
• Cuales será los espacios de privacidad individual
• Con que miedos se queda la relación
• Que acciones neutralizaran esos miedos
• Cuales será los hábitos y estrategias de comunicación
• Cuáles serán las áreas de interés en la pareja.
• Cuáles serán los estilos de vida
• Definición de límites con la familia de origen y amigos
• Definición de límites con hijos
• Manejo del dinero
• Cuáles son los valores que caracterizaran esta relación

La realización de este nuevo contrato requiere de una atmosfera solemne, que

promueva nuevas emociones y motivaciones encaminadas a una aceptación
libre y abierta para prosperidad de la relación, además, cada miembro de la
pareja ha de tener el deseo de construir un perdón mutuamente solidario, en su
expresión más plena de generosidad en el afecto, en la escucha y en todo lo
que se tiene y se es. Cuando se trabaja sinceramente en el perdón, crece el
vínculo de la lealtad como máxima expresión del compromiso y se convierte en
el cimiento más seguro de la relación.

El objetivo del perdón, no debe ser únicamente impedir el rompimiento del

vinculo, mas allá de esto, es la oportunidad para vivir una vida responsable y
plena, sin ataduras ni temores, donde la persona se involucra de manera
intencional con la claridad, de que la decisión de perdonar no excluye la
opción de reclamar justicia y dignidad, convirtiéndose en la más genuina
oportunidad de libertad emocional. Cuando la pareja ha perdonado será capaz
de recuperar el sentido del humor, de sostener buenos momentos sin
recuerdos dolorosos, de dar y recibir, sabrán como demostrase el afecto y el
aprecio mutuamente, y es ese momento donde pueden considerar que lo han
logrado!

Los más valientes preferirán un amor reconstruido, antes que un amor

perfecto.

BIBLIOGRAFIA

CONTRATO MATRIMONIAL Y TERAPIA DE PAREJA. Clifford J. Saguer.

Amorrortu editores. Buenos Aires. 1997

DESPUES DE LA INFIDELIDAD: COMO RECONSTRUIR LA CONFIANZA Y

RECUPERAR LA CORDURA. Alejandro Navarrete

“ENTENDIENDO A LA PAREJA”. Compiladora Luz de Lourdes Eguiluz. Ed.

PAX Mejico. 2007

PRIVATE LIES: INFIDELITY AND THE BETRAYAL OF INTIMACY. Frank

Pittman.