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c) Nova species o specificatio. Se da cuando una persona, con una materia prima
ajena, produce una nueva forma (nova species), haciéndose así imposible la
acción reivindicatoria y, por tanto, plateándose el problema de la propiedad de la
nueva forma, mientras las escuela Sabiniana atribuye la propiedad al propietario
de la materia prima (conforme al pensamiento estoico que da preferencia a la
materia), la escuela Proculeyana6 atribuye la propiedad al especificador (conforme
el pensamiento peripatético que da preferencia a la forma). La última
jurisprudencia clásica –a partir de Salvio Juliano– acoge la solución Proculeyana
siempre y cuando la nova species sea irreversible.
E incluso ahora, considerar entre estos casos al territorio y/o posesión del
enemigo como res nullius sigue siendo claramente visto como una especie de
repulsión, contemplándolo como una simple ficción y negando rotundamente su
existencia. Considerándose además, como un ataque en contra de los derechos
que tanto énfasis pone la sociedad actualmente, aunque sean olvidados
fácilmente por algunas clases de gobiernos, que a veces no entienden, o quizá no
quieran hacerlo, que es necesario situarse en el tiempo, espacio y el pensamiento
de aquella arcaica sociedad romana. Es entonces cuando se le imputa al Derecho
Romano de menoscabar al Derecho Internacional moderno, atribuyéndole
perjuicios a este con algunos puntos que se exponen en sus puntos; sin embargo,
debería decirse que este fue el que salió peor en esta contienda, ya que se nota
cómo la acusación por parte de algunos entendidos de la materia afecta
directamente al Derecho Romano, siendo este el más dañado de los dos.
Es probable que el ser humano ya hubiera practicado la ocupación del res nullius
antes que se establezca la estructura de las sociedades civiles. Se mantuvo así,
que la ocupación era el desarrollo en el cual se transformaban las “cosas que no
han tenido o no tienen dueño” en la propiedad privada que es tan preciada en
estos tiempos. Sin embargo, cuando el autor se refiere a esta posible hipótesis
acerca del origen de la propiedad privada, no podemos olvidar tampoco que está
era la acumulación del sobrante o exceso de la producción, y esta era en todo
caso la res nullius de la que tanto se nos trata de explicar mediante sus
características y su definición en el texto.
Aunque tan solo con el concepto de ocupación, este causa una cierta problemática
que no puede ser respondida por falta de datos y base. Por ejemplo, cómo es que
se respetaba la ocupación del individuo o la posesión de este respecto a otros
miembros de la comunidad, o preguntarse si es que era respetado en todo caso
esta facultad del ser humano, ya que el proteger el lugar que alguien puede
ocupar no es útil cuando en cierto momento alguien se considera con la fuerza
necesaria para ahuyentar al “propietario de ese momento”, siendo estas preguntas
difíciles de responder por la misma cantidad de información que hace falta para
ahondar más en estos asuntos. No obstante, no hay ninguna sorpresa que el
primer propietario fuese el hombre fuertemente armado que protegió, o en
posibles circunstancias quitó la ocupación al individuo debilitado y frágil, mediante
la fuerza o intimidación. El ocupante se vuelve también en propietario, porque no
se puede concebir la idea de propiedad sin que exista alguien que ejerza un poder
a partir de esta, quien vendría a ser el propietario.
En la India por ejemplo, había ideas sobre la propiedad que discrepaban sobre
estas mismas nociones en la sociedad romana. La comunidad hindú era
netamente patriarcal y una organización de copropietarios, usualmente
entrelazados por nexos de parentesco, como en el caso de que al nacer un hijo,
este obtiene un interés en los bienes del padre, y tiene la posibilidad de pedir
herencia o parte de estas posesiones. Al menos eso se estipulaba, pero era muy
poco utilizado en las verdaderas relaciones entre familias, aunque además se
debe especificar que en algunas partes de La India, no solo había lazos
sanguíneos de por medio entre estas disposiciones porque con el respectivo
permiso y condiciones, podía incluirse a hombres que se integraban a la
comunidad; se encontraban mayormente de esta manera, había una familia
preponderante en las provincias hindúes o quizá algunas pocas más, esto debido
a la concepción de la copropiedad y lo mencionado anteriormente.
Esta podría ser una de las tantas razones por que se sospecha que la etapa
incipiente del Derecho se distinguía por el hecho de la copropiedad, por la
combinación de de derechos individuales y propietarios, confundiéndolos también
a su paso.
En Rusia, podía encontrarse con una similitud enorme con la sociedad hindú, al
menos en el ámbito que se refiere a la relación entre los aldeanos y en la
multiplicidad de medidas que conciernen a la administración interna. Sin embargo,
hay una diferencia que sobresale interesantemente entre estas dos, los
copropietarios hindúes tienen intereses diferentes a pesar de que sus vienen estén
mezclados, siendo la separación de derechos completa e indefinida. En cambio la
división de derechos es solo temporal para los aldeanos rusos, dado que la
propiedad individual se extingue y estos bienes son después de acopiados,
redistribuidos a la sociedad, estos periodos de división suceden en intervalos de
tiempo inexactos que no suceden con la misma duración y puede causar conflictos
con los intereses privados.
El Cessio in Jure era otro término del que vale explicar un poco, esta era una
recuperación en un tribunal de propiedad que trata de traspasarse. El demandante
era quien establecía el asunto del proceso, mientras el acusado se rebelaba, no
presentándose, y el objeto naturalmente era entregado al demandante.
Betancourt, Fernando (2007) Derecho Romano Clásico. 3ª Ed. Sevilla, Grafitrés, S. L. Op. Cit, pág. 322
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Betancourt, Fernando (2007) Derecho Romano Clásico. 3ª Ed. Sevilla, Grafitrés, S. L. Op. Cit, pág. 323
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Son los fundos o fincas rústicos objeto de una parcelación oficial mediante la ceremonia de la limitatio (limes).
Estos fundos se separaban por una franja de terreno inapropiable de 1.5 metros que permitía acceder a la
parcela y ararla sin pisar la parcela vecina. Betancourt, Fernando (2007) Derecho Romano Clásico. 3ª Ed.
Sevilla, Grafitrés, S. L. Op. Cit, pág. 293
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Son los fundos itálicos, o situados en Italia, con sus antiguas servidumbres rústicas, los esclavos, los animales
de tiro o de carga. Mancipi derivaría de Mancipium, que era la potestad que en el antiguo derecho tenía el
paterfamilias sobre personas o cosas. Mientras que para la transmisión de las cosas mancipables se requerían
las formas solemnes de la mancipatio (Modo de adquirir la propiedad del ius civile arcaico) y de la in iure cessio
(Acto formal y abstracto que servía para transmitir la propiedad), para las no mancipables bastante con la
simple entrega o traditio (tradición).La distinción de cosas mancipables y la mancipatio se mantiene durante
toda la época clásica, incluso cuando los cambios en las relaciones comerciales dan una mayor importancia a
los fundos provinciales. Sin embargo, pierde valor e importancia cuando el pretor concede la actio Publiciana
(es una reinvindicatio en cuya fórmula se finge que ha transcurrido el tiempo necesario para la usucapión),
análoga a la reinvindicatio (Protege la propiedad en su contenido fundamental. Se puede planear cuando un
tercero posee la cosa), al que hubiese adquirido estas cosas sin las formalidades del acto mancipatorio.
Justiniano elimina de la compilación toda referencia a la res mancipi y sustituye en los textos mancipatio por
traditio, declarando abolida la clasificación por considerarla fuera de la realidad. García, Manuel J. (2000)
Diccionario de Jurisprudencia Romana. 2ª Ed. Madrid, Publicaciones Digitales, S. A. Op. Cit. pág. 305
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Escuela que era, en la opinión común, oficial, conservadora y procuraba salvaguardar en lo posible la
tradición, siendo el completo contraste con la Escuela Proculeyana. Parra, María Dolores (2005) La
argumentación retórica en Juvencio Celsio. Madrid, Dykinson, S. L. Op. Cit. pág. 72
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Escuela romana que se distinguió, tanto por su consecuencia frente a la ciencia, embebida por la filosofía
griega, en particular de los estoicos, como por su independencia política y su no sometimiento a las
autoridades. Carello, Armando (2000) Derecho Constitucional y Administrativo. Buenos Aires, Juris. Op. Cit.
pág. 91
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Cosas que no admiten mancipación. Cosas que no entran en la categoría de res mancipi, y que en el ámbito
de la economía originaria romana estaban representados por los objeto de escaso valor para la economía
agrícola. García, Manuel J. (2000) Diccionario de Jurisprudencia Romana. 2ª Ed. Madrid, Publicaciones
Digitales, S. A. Op. Cit. pág. 305