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FUEGO

1.1. ACERCA DEL FUEGO


Fuego, luz y calor resultantes de la rápida combinación del oxígeno, o en algunos casos
de cloro gaseoso, con otros materiales. La luz se presenta en forma de llama, y se
compone de partículas resplandecientes del material en combustión y ciertos
productos gaseosos que se iluminan con el calor producido. La condición imprescindible
para que se dé el fuego es la presencia de una sustancia combustible, a una
temperatura suficientemente alta para provocar la combustión (llamada temperatura
de ignición), y la presencia de oxígeno (generalmente procedente del aire) o cloro
suficientes para mantener la combustión. El fuego se obtenía por dos métodos
elementales: rozamiento y percusión. El rozamiento eleva la temperatura de un
material combustible (leña) hasta la temperatura de ignición. El método de percusión
genera chispas que encienden la leña. En algunas culturas se utilizaba, y se sigue
utilizando, el método de fricción. Para llevarlo a cabo se frotan dos pedazos de
madera rodeados de material combustible hasta alcanzar la temperatura de ignición.
En el método del palo y la ranura, se frota un palo en la ranura de un trozo de madera.
Con el método del taladro, se hace girar a gran velocidad un palo en un pedazo de
madera fijo. El movimiento del palo se efectúa frotándolo entre las palmas de las
manos o moviendo adelante y atrás un arco de madera en cuya cuerda se enrolla el
palo.

La modalidad más básica del método de percusión consiste en golpear dos trozos de
pedernal, o también pedernal contra un pedazo de pirita. Con el tiempo la pirita
sustituyó al pedernal. El método de pedernal y acero fue predominante en el mundo
civilizado hasta cerca del año 1827, cuando se empezaron a usar las cerillas o
fósforos. Con éstas, se utiliza la fricción para alcanzar la temperatura a la que se
encienden los productos químicos existentes en la cabeza del fósforo. También puede
hacerse fuego usando una lente o un reflector curvo para concentrar los rayos del sol
sobre el material combustible. Se podría decir que el uso del fuego se desarrolló en
cuatro etapas. Primero fue la observación de las fuentes naturales del fuego, como los
volcanes o los árboles ardiendo por la acción de los rayos. En una segunda etapa el
hombre conseguía el fuego de sus fuentes naturales y lo empleaba para calentarse,
como iluminación y como protección frente a los depredadores. Más tarde aprendió a
hacer fuego cada vez que lo necesitaba y finalmente llegó a controlarlo para usos como

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la fundición de metales, cocción de cerámica y otras muchas aplicaciones que
supusieron nuevos avances y tecnologías para hacer la vida más confortable.

El uso y mantenimiento del fuego ha sido probablemente un factor fundamental en el


fin del nomadismo y en el desarrollo de las instituciones sociales y políticas en el
marco de un tipo de sociedad cuyos miembros habitan en hogares estables.

1.1.1. Conceptos básicos:

• Fuego: Proceso de combustión de un cuerpo, con absorción de oxigeno y


desprendimiento de energía, capaz de emitir calor y luz

• Inflamable: Aquellas substancias combustibles que a al temperatura ambiente


normal emiten vapores, y en presencia de una fuente de calor fácilmente
entrar en combustión.

• Amago: Fuego incipiente descubierto y extinguido oportunamente.

• Incendio: Fuego ya declarado que provoca daños.

• Siniestro: Incendio de grandes proporciones, que afectan al activo físico de


una empresa o habitación (edificio, instalaciones, etc.).

• Punto de Inflamación: Es la mínima temperatura a la cual un líquido


inflamable/combustible emite vapores en cantidad suficiente como para formar
mezclas inflamables con el aire, cerca de la superficie del líquido.

• Límite y rango de Inflamabilidad o Explosividad: Los líquidos inflamables


tienen una concentración mínima de vapor en el aire por debajo de la cual no se
produce la propagación de la llama en contacto con una fuente de ignición,
debido a que la mezcla es demasiado pobre; esto es lo que se conoce como el
límite inferior de inflamabilidad. Hay también una proporción máxima de vapor
o gas en el aire, sobre la cual no se produce la propagación de una llama en
contacto con una fuente de ignición, debido a que la mezcla es demasiado rica;
esto se conoce como límite superior de inflamabilidad. El rango de
inflamabilidad o Explosividad, es la diferencia que hay entre los límites
inferiores y superiores de la inflamabilidad expresados en porcentajes de
vapor de gas, por volumen de aire.

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• Punto de incendio: La temperatura más baja a que un líquido contenido en un
recipiente abierto comienza a emitir vapores con suficiente velocidad para
propiciar la combustión continuada, se llama punto de incendio. El punto de
incendio está generalmente a unos pocos grados por encima del punto de
inflamación.

• Punto de Autoinflamación: Es la menor temperatura a cual una mezcla de gas


inflamable y aire van a originar una llama, sin necesidad de una fuente externa
de calor. Ejemplo: La gasolina de 56 a 76 octano su punto de Autoinflamación
es de 280 ºC.

1.1.2. Tetraedro del fuego:

COMBUSTIBLE CALOR
(Agente

Reductor)

REACCIONES EN OXIGENO
CADENA (Agente Oxidante)

El tetraedro del fuego viene a formar parte de la teoría moderna de la combustión, la


cual se consolida en 1962 cuando el Sr. Walter Haesler adelanta estudios sobre los
mecanismos de extinción de incendios con el polvo químico seco de uso múltiple ABC.
En todo proceso de combustión hay liberación de energía, representada por una serie
de reacciones entre los radicales libres O (oxígeno), C (carbono), H (hidrógeno) y OH
(Oxidrilo), estas reacciones en cadena tanto ramificadas como no ramificadas pueden
llamarse la vida del fuego y materialmente están representadas por la llama. Lo mismo
que el cuerpo humano necesita aire, alimentos, temperatura, ambiente y un sistema

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circulatorio, el fuego necesita aire, combustible, fuente de calor y las reacciones en
cadena para poder existir, de tal manera que el fuego según la teoría moderna de la
combustión tiene cuatro elementos los cuales forman el tetraedro del fuego.

• Combustible: Es el cuerpo que se quema, pudiéndose encontrarse en estado


sólido, liquido o gaseoso. En estado sólido el peligro es mayor cuando el
material se halla finamente subdividido, por ejemplo, en forma de aserrín, polvo
o pelusa. Las masas compactas arden lentamente. Los líquidos no arden. Lo que
arden son los gases que desprenden sobre su superficie; ello explica la
importancia de mantenerlos en recipientes cerrados o expuestos, lo menos
posible, al aire o al calor. El peligro aumenta proporcionalmente con la cantidad
de vapor emitido, del área expuesta a la atmósfera y del grado de volatilidad
del líquido. El estado gaseoso es mayor el riesgo de incendio, debido a un mayor
contacto de sus moléculas con el oxigeno (comburente) del aire, lo que propicia
fenómenos de explosiones y deflagraciones. Los ambientes saturados de
cuerpos sólidos pulverizados en suspensión, debido también a la gran superficie
de contacto con el aire, son propensos de violentas combustiones. Entre los
materiales combustibles más usados se encuentran:
• Materiales combustibles sólidos que contienen celulosa, como: papeles, maderas
textiles, cartones, etc.
• Combustibles líquidos, que se caracterizan por contener gran cantidad de
carbono e hidrógeno, tales como: bencina, aceites, lubricantes, solventes, etc.
• Elementos no metálicos, de fácil combustión como: azufre, fósforo.
• Elementos metálicos tales como: aluminio. titanio. zirconio y los metales
alcalinos como: sodio, potasio.

• Comburente: El oxigeno, que forma parte del aire que respiramos, es el


comburente por excelencia. Existen, asimismo, sustancias que para arder necesitan
de otro tipo de comburente. El elemento comburente puede hallarse en mayor o
menor proporción que la necesaria para que el cuerpo arda. Cuando se halla en
proporción exacta o mayor, el combustible puede arder con llama y producción de
luz, consumiéndose en su totalidad (combustión completa). Cuando la proporción de
aire es menor, la combustión se efectúa en forma defectuosa (combustión
incompleta).

• Calor: Temperatura necesaria para que el combustible, en presencia del


comburente, pueda empezar a arder. Ciertos cuerpos pueden arder con solo
acercarles un fósforo encendido (como papel, solvente, etc.); pero otros, como el

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carbón, es necesario calentarlos a cierta temperatura (temperatura de ignición)
para iniciar la combustión. Resumiendo, se ha producido un fuego cuando estamos
en presencia de un fenómeno químico que sustentado por un combustible,
comburente y calor nos da cierta temperatura, llamas o brasas, humos y cenizas.
Como se ha dicho que para producir el fuego es necesaria la combinación de los 3
componentes básicos, se pude producir que eliminando uno de ellos se logra
extinguirlo.
• Retirado el combustible ( por segregación)
• Excluyendo el oxígeno (por sofocación).
• Reduciendo la temperatura ( por enfriamiento)

• Reacción en Cadena: Es la disociación del combustible en partículas más


sencillas. El hidrógeno (H), el oxígeno (O), el carbono (C) y el radical hidróxido
(OH) son fragmentos moleculares llamados radicales libres, portadores de la
cadena, y cuyo intercambio energético al desprenderse produce la reacción en
cadena. El proceso de combustión puede ocurrir de dos formas: con llama
(incluyendo explosión) y sin llama (incluyendo incandescencia y brasas
incandescentes asentadas en el fondo). El modo de llama se caracteriza por
índices de combustión más o menos alto. En general, este modo se asocia con
niveles de calor alto e intenso.

Los modos con llama o sin llama no son mutuamente excluyentes; la combustión
puede involucrar uno o ambos modos. A menudo, la combustión puede presentarse
en el modo de llama y poco a poco, efectuar la transición hacia el modo
inflamable. En un punto de este proceso, ambos modos pueden aparecer de
manera simultánea. La complejidad de los procesos de combustión va a la par del
desarrollo de nuevos productos y sustancias y éstas, se combaten también de
manera muy diferente. Los agentes ignisores han variado también para
convertirse en elementos que no sólo pueden generar combustión por chispa, sino
también combustión por reacción química o generación de calor.

1.1.3. Productos de la combustión: Son cuatro las categorías de los productos de


combustión: (1) gases del fuego, (2) Llamas, (3) Calor y (4) Humo. Todos estos
productos se producen en diversos grados en todos los fuegos. El material o
materiales que participan en el incendio y las reacciones químicas resultantes
producidas por el fuego, determinan los productos de la combustión.

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• Gases del Fuego: La principal causa de pérdidas de vidas en los incendios es la
inhalación de gases y humo caliente, tóxicos y deficientes en oxigeno. La
cantidad y el tipo de gases del fuego que se encuentran presentes durante y
después de un incendio, varían en gran medida de acuerdo con la composición
química del material quemado, la cantidad de oxigeno disponible y la
temperatura. El efecto de los gases tóxicos y el humo en las personas
dependerán del tiempo que éstas permanezcan expuestas a ellos, de la
concentración de los gases en el aire y de la condición física de la persona. En
un incendio suele haber varios gases. Los que comúnmente se considera letales
son: monóxido de carbono, bióxido de carbono, sulfuro de hidrógeno, bióxido de
azufre, amoniaco, cianuro de hidrógeno, cloruro de hidrógeno, bióxido de
nitrógeno, acroleína y fosgeno.

• Llama: La combustión o quemado de los materiales en una atmósfera rica en


oxigeno suele ir acompañada de llamas. Es por esto que las llamas se consideran
un producto propio, característico de la combustión. Las quemaduras pueden
ser consecuencia del contacto directo con las llamas o del calor irradiado de las
mismas. Son raras las ocasiones en que las se separan una distancia apreciable
de los materiales de combustión.

• Calor: El calor es el producto de la combustión que es más responsable de la


propagación del fuego. La exposición al calor de un incendio afecta a las
personas en proporción directa a la distancia de la exposición y a la
temperatura del calor. Los peligros de exponerse al calor de un incendio varían
desde las lesiones menores hasta la muerte. La exposición al aire caliente
aumenta el pulso cardíaco y provoca deshidratación, cansancio, obstrucción del
tracto respiratorio y quemaduras.

• Humo: El humo es una materia que consiste en partículas sólidas muy finas y
vapor condensado. Los gases del fuego provenientes de combustibles comunes,
como la madera, contienen vapor de agua, bióxido de carbono y monóxido de
carbono. En condiciones normales de poco oxigeno para una combustión
completa, también existe la presencia de metano, metanol, formaldehído, así
como ácidos fórmicos y acéticos. Estos gases suelen salir del combustible con
la velocidad suficiente para acarrear gotitas de alquitrán inflamables que
parecen humo. Las partículas de carbón se forman a partir de la
descomposición de estos alquitranes, éstos también se encuentran presentes

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en los gases del fuego provenientes de quemar productos del petróleo, en
particular de aceites y destilados pesados.

1.2. CLASES DE FUEGO


Los fuegos se clasifican de acuerdo al tipo de combustible que se encuentra en
combustión, en presencia de la corriente eléctrica. La National Fire Protection
Asosiation ha agrupado los fuegos en cuatro clases basándose en los elementos
extintores necesarios para combatir cada uno de ellos.

1.2.1. Fuegos de Clase A: Son los que ocurren con materiales sólidos como la
madera, el papel, la viruta de madera, los trapos y los desperdicios. La acción de
sofocamiento y enfriamiento del agua o de soluciones que la contengan en porcentajes
altos, son de importancia principal en esta clase de fuegos. Hay agentes de polvos
químicos secos especiales (de multiuso) que extinguen rápidamente las llamas y forman
una capa que retrasa la combustión. Si fuese imperiosa una extinción total se
recomienda continuar con agua o con otro agente de la clase A.

1.2.2.Fuegos de clase B: Son los que ocurren debido a la presencia de una mezcla de
vapor aire sobre la superficie de un líquido inflamable, como gasolina, aceite, grasa,
pinturas y algunos disolventes. El limitar el oxígeno e inhibir los efectos de la
combustión son de importancia principal en ésta clase de fuegos incipientes. Los
chorros de agua favorecen la propagación del fuego, aunque en ciertas condiciones las
boquillas de niebla de agua han demostrado ser eficientes. Generalmente, se usan
polvos secos comunes, polvos secos de multiusos, anhídrido carbónico, espuma e
hidrocarburos halogenados.

1.2.3. Fuegos de clase C: Son los que ocurren en equipos eléctricos, o cerca de
ellos, en los cuales se deben usar agentes extintores no conductores. El polvo seco, el
anhídrido carbónico y los líquidos evaporables son agentes extintores aptos para esta
clase de fuegos. No debe usarse espuma ni chorro de agua, ya que estos agentes son
buenos conductores de la electricidad y pueden exponer a quien lo usa a recibir una
fuerte descarga eléctrica. En fuegos de equipos eléctricos, como transformadores, a
veces puede usarse una niebla muy fina ya que el agua pulverizada es peor conductora
que el chorro de agua sólido.

1.2.4. Fuegos clase D: Los fuegos que ocurren en metales combustibles como el
magnesio, el titanio, el zirconio, el litio y el sodio, se clasifican como la clase D. Para
controlar y extinguir fuegos de esta clase se han desarrollado técnicas, agentes

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extintores y equipos de extinción especiales. En general no debieran usarse agentes
extintores comunes sobre fuegos metálicos, ya que existe el peligro, en la mayoría de
los casos, de aumentar la intensidad del fuego debido a una reacción química entre
algunos de los agentes extintores y el metal que se está quemando.

1.2.5. Otros fuegos: Los fuegos que se forman en ciertos combustibles metálicos o
reactivos químicos requieren, en algunos casos, agentes extintores y técnicas
especiales.

1.3. TIPOS DE FUEGOS


Desde el punto de vista de la forma en que se exteriorizan, los fuegos pueden ser
tipificados en dos grupos a saber:

1.3.1. De superficie o sin llamas: este tipo de fuego también recibe el nombre de
brasa, superficie al rojo, incandescencia, rescoldo, etc., su característica fundamental
es la ausencia de llamas.

1.3.2. De llamas: son la evidencia directa de la combustión de gases o vapores de


líquidos inflamables que a su vez pueden ser luminosas y no luminosas.

Dentro de esta clasificación podemos determinar como los líquidos hacen parte
importante de este grupo, por eso los podemos agrupar de la siguiente manera:

1.3.3. Líquidos Inflamables: Líquidos con punto e inflamación inferior a 37.8 ºC y una
presión de vapor absoluta que no exceda 277 Kpa, subdivididos en la siguiente forma:

• Clase I: Incluye los líquidos con punto de inflamación menor que 37.8 ºC
• Clase IA: Líquidos con punto de inflamación menor que 22.8 ºC y punto de
ebullición menor que 37.8 ºC.
• Clase IB: Líquidos con punto de inflamación menor que 22.8 ºC y punto de
ebullición igual o mayor que 37.8 ºC.
• Clase IC: Líquidos con punto de inflamación mayor o igual a 22.8 ºC y punto de
ebullición menor que 37.8 ºC.
1.3.4. Líquidos Combustibles: Líquidos con punto de inflamación igual o mayor que
37.8 ºC, subdivididos de la siguiente forma:
• Clase II: Líquidos con punto de inflamación igual o mayor a 37.8 ºC y punto de
ebullición menor que 60 ºC.

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• Clase IIIa: Líquidos con punto de inflamación mayor o igual de 60 ºC y punto de
ebullición menor que 93.3 ºC.
• Clase IIIb: Líquidos con punto de inflamación mayor o igual a 93.3 ºC.

Algunos líquidos conocidos se clasifican de la siguiente manera:


Alcohol desnaturalizado Clase IB
Aceite combustible Clase II
Gasolina Clase IB
Queroseno Clase II
Aceite de Cacahuate Clase IIIb
Turpentina Clase IC
Cera parafinada Clase IIIb

1.4. PRINCIPALES CAUSAS DEL FUEGO


1.4.1. Generales:
• Fósforo y cigarrillos: Estas es un de las causas mas comunes de incendios y
ocurren por los exclusivos malos hábitos y descuidos de las personas. De debe
advertir al personal de los lugares peligrosos para fumar, y disponerles o
indicarles lugares que no ofrezcan este riesgo.
• Equipos e instalaciones eléctricas defectuosas: Los incendios originados a
causa de la electricidad se deben el sobrecalentamiento de instalaciones y
equipos, a cortocircuitos, etc. Por lo tanto es necesario revisar y efectuar una
manutención periódica de las instalaciones y equipos eléctricos.
• Sobrecalentamiento de equipos y artefactos: Estos equipos cerca del
combustible de fácil combustión, son peligrosos. Eliminar este riesgo debe
mantener alejados del combustible inflamable.
• Chispas mecánicas: Estas chipas se producen al golpear materiales ferrosos con
otros elementos. Son partículas que por efecto del impacto y fricción se
calientan lo necesario para generar fuego. Se deben aislar suficientemente o
proteger las maquinarias, además de retirar materiales de los alrededores que
deben entrar en combustión, con facilidad.
• Fricción: En las partes móviles de las maquinarias si no se lubrican
constantemente, el roce que se produce por el mismo movimiento genera altas
temperaturas, dispersando chispas que pueden ser causa de incendios. Deben
inspeccionarse para evitar la fricción a través de una manutención apropiada.
• Ignición espontánea: Este fenómeno se presentan en ambientes que reúnen
ciertas condiciones, una de las cuales es que se produzca la oxidación sea más

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rápido que su disipación por lo tanto que esta acumulación de calor será capaz
de llegar la temperatura de inflación. Entre algunos de los materiales usados
comúnmente, que pueden llegar a calentarse a temperatura normales, esta los
aceites vegetales, aceites animales, sólidos como el carbón, fibras vegetales y
animales, etc. Se debe tener bastante precaución en el almacenamiento de este
tipo de materiales.
• Superficies calientes: El calor que irradian los tubos de vapor y agua a alta
temperatura, tubos de humos, basuras, calderas, etc. Son cusas comunes de
incendios industriales. En estos sitios no se deben permitir el almacenamiento o
el trabajo con materiales cuya temperatura de inflamación sea mas baja que la
temperatura que alcanza el equipo en operación.
• Llamas abiertas: Son una fuente constante de inflamación, esta causa de
incendios se produce por equipos industriales que generan calor y los
quemadores portátiles, estos últimos son los más peligrosos, por llevarse de un
lugar a otro.
• Orden y aseo: A esto se suma la distribución y almacenamiento de los
diferentes tipos de combustible. Muchos de los incendios se deben
exclusivamente a la falta de orden y aseo. Una preocupación constante, en este
sentido además de evitar incendios, hace más expedito los trabajos, puesto
que la pérdida de tiempo por el desorden es considerable.
• Estufas: En la época de invierno son muy comunes los incendios por esta causa;
se produce al debido recalentamiento de la estufa y la radiación resultante
que enciende los materiales combustible cercanos, falta de aislamiento entre
las estufas y los pisos y otras bases combustible. Las estufas en sala y
ambientes cerrados sin ventilación debieran descargar los productos de la
combustión hacia fuera por medio de una campana o de un conducto, a fin de
eliminar los componentes tóxicos y el gas sin quemar.

1.4.2. Industriales: Para eliminar las causas de un incendio se deben conocer en


primer lugar las distintas formas en las cuales éste pueda empezar, especialmente las
más comunes. Un estudio realizada por la ASOCIATED FACTORY MUTUAL FIRE
INSURANCE COMPANY sobre 25,000 incendios industriales durante un período de 10
años indica que la mayoría de los incendios se pueden atribuir a cuatro fuentes
generales ignición: La electricidad, el fumar, la fricción y el recalentamiento de los
materiales.

• Fuegos en equipos eléctricos: Los equipos eléctricos debieran ser instalados y


mantenidos de conformidad con las leyes o con otras reglamentaciones vigentes

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en el país. El recalentamiento de los equipos eléctricos y los arcos resultantes
de cortos circuitos debidos a una instalación o un mantenimiento deficiente son
las dos causas principales de esta clase de incendios.
• El fumar: Los cigarrillos, los rescoldos de una pipa y los puros dejados o
arrojados descuidadamente son causas principales de incendios.
• Fricción: El excesivo calor generado por la fricción causa un porcentaje elevado
de incendios industriales. Un programa de mantenimiento preventivo de
máquinas industriales puede prevenir incendios resultantes de una lubricación
inadecuada, una incorrecta alineación de los cojinetes y equipos rotos o
torcidos. Con frecuencia se producen incendios debido al recalentamiento de
cojinetes y ejes de transmisión mecánica en donde se acumulan polvo e hilazas,
como son los elevadores de grano, los molinos de cereales, las fabricas de
textiles, las carpinterías y las plantas donde se trabaja con plástico y metales.
Debieran efectuarse inspecciones frecuentes para asegurarse que los
cojinetes se mantienen bien lubricados y que no giran en caliente. Debiera
reducirse a un mínimo la acumulación de polvo e hilazas inflamables sobre estos
componentes mecánicos. Para evitar que el aceite gotee en el suelo o sobre
materiales inflamables deberán colocarse bandejas de goteo debajo de los
cojinetes, las cuales se habrán de vaciar frecuentemente. Los orificios de
lubricación de los cojinetes deberán mantenerse cubiertos para evitar que
entre polvo y sustancias abrasivas que causarían recalentamientos.

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2. PROTECCION CONTRA INCENDIOS

La ingeniería de protección contra incendios es una ciencia altamente desarrollada y


especializada que se basa en técnicas especiales. La solución de muchos problemas de
protección contra incendios necesita una combinación especial de adiestramiento, más
el aporte de un ingeniero experimentado en la protección contra incendios. Si una
organización no cuenta con tal especialista, el encargado de seguridad, a falta de
conocimientos de toda la tecnología, debería estar familiarizado con las fuentes de
información disponibles. Las compañías de seguro y algunas asociaciones del ramo
publican información sobre peligros de incendios y presentan recomendaciones para la
prevención y protección de incendios en sus campos respectivos. El profesional de
seguridad que debe afrontar problemas especiales de incendios puede lograr
asesoramiento específico consultando a estas asociaciones, a la compañía aseguradora
de su empresa, a una junta local de inspección de incendios, al servicio de bomberos.

2.1. QUÍMICA DEL FUEGO


Un fuego ordinario (el que se puede combatir por medios de extinción comunes) surge
de la combinación de un combustible, calor oxígeno. Cuando una sustancia combustible
se calienta a cierta temperatura crítica, que se denomina temperatura de inflamación
dicha sustancia se inflamará y continuará quemándose mientras haya combustible,
temperatura adecuada, suministro de oxígeno, reacción en cadena (tetraedro del
fuego). El conocimiento de la reacción química de un fuego es la base que se necesita
para extinguirlo. El calor se puede eliminar por enfriamiento; el oxígeno, por exclusión
de aire; y el combustible, llevándolo a un lugar donde haya calor insuficiente para su
inflamación. En cuanto a la reacción química, esta se puede detener inhibiendo la
oxidación rápida del combustible.

2.1.1. Enfriamiento: Para extinguir un fuego por enfriamiento es necesario sólo


absorber una parte pequeña del calor total que éste está produciendo. El agente más
común y práctico es el agua, aplicada en forma de chorro, niebla o chorro de agua con
espuma. Sus calores específicos y latentes son más altos que los de los otros agentes
extintores comunes (lo cual significa que se necesita más calor para calentarla y
evaporizarla). El agua, además, tiene la propiedad de penetrar y llegar a fuegos
ubicados en sitios recónditos. Esto hace que sea un medio eficaz de enfriamiento y un
excelente agente de dilución.

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2.1.2. Eliminación del combustible: El retirar combustible de un fuego es,
frecuentemente, difícil y peligroso, aunque hay excepciones. Sin embargo los tanques
de almacenamiento de líquidos inflamables se pueden disponer de tal manera que en
caso de un incendio, su contenido se puede trasvasar hacia un tanque vacío que esté
alejado. Cuando los gases inflamables se incendian mientras recorren una cañería, el
fuego se apagará si se corta el combustible. Además en cualquier mezcla de gases o
vapores combustibles y aire, el agregar aire en exceso produce el efecto de diluir la
concentración de combustible por debajo del punto mínimo de concentración.

2.1.3. Limitación del oxígeno: La extinción del fuego por separación del oxígeno
puede lograrse sofocando la zona prendida con un material incombustible, por ejemplo,
cubriéndolo con una manta húmeda (asegurándose que la manta no sea de fibras de
alta combustión), arrojando sobre el fuego tierra o arena, o cubriéndolo con espuma
química o mecánica. El fuego quedará apagado si el manto se mantiene el tiempo
necesario para que el material combustible se enfríe por debajo de su punto de
inflamación y si ya no hay fuente de ignición. El terreno de la prevención de incendios,
el principio de separación del oxígeno de un combustible se aplica cuando se usa un gas
inerte para desalojar vapores, polvos y otros materiales combustibles de lugares
cerrados donde podría existir una fuente de ignición.

2.2. EXTINTORES
Extintor, llamado en algunos países extinguidor, dispositivo portátil que se utiliza
para apagar fuegos o incendios de pequeña magnitud. Los tipos de fuego están
clasificados en cuatro clases según el tipo de material que se quema. Los fuegos
secos son los que afectan a materiales combustibles ordinarios, como madera, ropa y
papel. Los fuegos grasos son los que se producen en líquidos inflamables, aceites y
grasas. Los fuegos en instalaciones eléctricas constituyen una categoría aparte,
sobre todo si están en funcionamiento, y la última categoría es el fuego de metales
combustibles como magnesio, potasio y sodio. Cada tipo de fuego requiere un tipo de
extintor diferente. Hay una serie de normas para la selección, colocación y
comprobación de los extintores de incendios que establecen los requisitos mínimos
respecto al tipo y al tamaño en función de la modalidad de fuego que con más
probabilidad se pueda producir en un lugar determinado. Ciertos extintores se
pueden utilizar sólo para un tipo de fuego, otros se usan para dos o tres tipos, pero
ninguno es adecuado para todas las clases de incendio.

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Los extintores pueden no utilizarse durante años, por lo que deben mantenerse
revisados y preparados. Por esta razón se realizan inspecciones periódicas en
lugares públicos; también se comprueba que están en los sitios adecuados.

2.2.1. Extintores portátiles: Tanto los reglamentos municipales, estatales y


nacionales como las compañías de seguros exigen que la mayoría de las plantas
cuenten con extintores portátiles. Si se cuenta con personal capacitado en el uso
adecuado de los extintores para apagar incendio incipientes pequeños, los extintores
pueden resultar útiles para evitar conflagraciones mayores y más devastadoras. Las
limitantes de los extintores, como lo son las exposiciones de las personas al fuego y
al humo, sus límites de capacidad, la selectividad y la disponibilidad, exige que, para
que pueda resultar eficaces, se proporciona la capacitación correspondiente.

La norma NFPA 10 Portable Fire Extiguishers, prevé la clase y cantidad de extintores


necesarios para los tipos de incendios específicos. Los tipos de extintores s más
comunes son los de agua presurizada, bióxido de carbono o sustancias químicas secas
multiuso. Otros extintores de uso habitual son los tanques de bomba de agua, el halon
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Identificación de Extintores Portátiles según el tipo de Incendio


Norma NFPA 10, Standard for Portable Fire Extinguishers

COMBUSTIBLES
Los Extintores adecuados para los incendios de
clase A deberán marcarse con un triángulo que
contenga la letra “A”. En caso de que se coloree el
triángulo deberá ser de color verde.

A Agua a presión
Espuma
Soda- acido
ORDINARIOS

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LÍQUIDOS
Los Extintores adecuados para los incendios clase B
deberán marcarse con un cuadrado que contenga la

B
letra B. En caso de que se coloree el cuadrado,
deberá ser en color rojo.

Anhídrido carbónico
Polvo químico

INFLAMABLES

EQUIPO
Los Extintores adecuados para los incendios clase C
deberán marcarse con un círculo que contenga la
letra C. En caso de que se coloree el círculo, deberá
ser en color azul.

C Anhídrido carbónico
Polvo químico seco

ELÉCTRICO

METALES

Los Extintores adecuados para los incendios de clase


D deberán marcarse con una estrella de cinco picos
que contengan la letra D. En caso de que se coloree la
estrella, deberá ser en color amarillo.
D

COMBUSTIBLES

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Los extintores portátiles han sido clasificados de manera tal que indiquen su
adecuación para clases y tamaños específicos de fuegos. Esta clasificación es
necesaria debido al desarrollo constante de agentes y equipos de extintores nuevos y
mejores, como también que hay extintores portátiles mas grandes. Los rótulos de los
extintores indican la clase y el tamaño relativo del fuego que se podría extinguir.

• Extintores clase A: Son apropiados para utilizarse en fuegos de materiales


combustibles corrientes, tales como madera, papel y textiles, en los que se
necesita una extinción eficaz por enfriamiento y sofocación. La numeración
indica la eficacia extintora relativa de cada unidad.
• Extintores clase B: Son apropiados para fuegos de líquidos y gases inflamables,
como gasolina, pintura y grasa, en los que es esencial un efecto de exclusión de
oxígeno o interrupción de las llamas. La numeración indica la superficie, en pies
cuadrados, de fuego en un líquido inflamable que puede extinguir un operario
sin adiestramiento, durante una emergencia.
• Extintores clase C: Son apropiados para utilizarse en incendios de equipo e
instalaciones de energía eléctrica en los que la no conductividad dieléctrica del
agente extintor es de suma importancia, debido al peligro de electrocución que
entrañan los extintores a base de agua. Estas unidades no se clasifican
numéricamente, ya que los fuegos de clase C son esencialmente de clase A o de
clase B, pero también se vinculan con equipos o instalaciones de energía
eléctrica. Consiguientemente, la protección se debe basar en el combustible
que se está quemando.
• Extintores clase D: Son apropiados para usarse en incendios de metales
combustibles, tales como el magnesio, potasio, polvo de aluminio, cinc, sodio,
titanio, zirconio y litio. Las personas que trabajan en lugares en donde hay
peligros de incendio de clase D deben conocer los peligros que encierra el uso
de extintores clase A, B o C en fuegos clase D, como también la forma correcta
de extinguirlos. Estas unidades no se clasifican numéricamente, y tienen por
objeto únicamente, brindar protección contra peligros especiales.

Cuando se coloquen letreros sobre paredes, etc., cerca de extintores, aquellos


deberán ser de tal tamaño y forma que puedan leerse de una distancia de 7.60 metros.
La NFPA da las siguientes recomendaciones a modo de guía para marcar los
extintores, como también su ubicación, con el objeto de indicar su adecuación para la
clase de fuego correspondiente. Los extintores aptos para más de una clase de fuego
se pueden identificar mediante varios símbolos, según se indico anteriormente. Las
marcas que se apliquen directamente en el extintor deberán colocarse en la parte

16
delantera del recipiente extintor, por encima o por debajo de la placa siendo de tal
tamaño y forma que sean fácilmente legibles un metro de distancia.

2.2.2. Tipos de extintores portátiles:

• Extintores de agua a presión.


Aplicación: únicamente para fuegos clase “A” (madera, papel, etc.)
Descripción: consiste en un estanque de agua y un cartucho con bióxido de carbono a
presión. Al ser usado este extintor, el cartucho de bióxido de carbono se rompe
mediante un mecanismo, expandiéndose e impulsando el agua hacia fuera.
Manejo: el chorro de agua debe ser dirigido hacia la base del fuego.
Manutención: hágase recargar inmediatamente después de usado.

Extintores de soda-ácido
Aplicación: se usan para extinguir fuegos clase “A”
Descripción: consiste en un estanque que contiene una solución de bicarbonato de
sodio en agua y un frasco de vidrio que contiene ácido sulfúrico sobre el cual va
colocado un percutor.
Manejo: para usar este extintor debe golpearse el percutor contra el suelo, con lo
cual se rompe el frasco con acido sulfúrico poniéndose de esta forma en contacto el
ácido con el bicarbonato y produciéndose así bióxido de carbono que presiona el que
sale en forma de chorro. Se debe dirigir el chorro hacía la base del fuego.
Precauciones: al usarlo, el operador debe dar la espalda al viento.
Úsese sólo para fuegos clase “A”, cortando antes la energía eléctrica
Manutención: inspecciónese una vez al año. Cámbiese la carga cada 1 año, si antes no
ha usado

• Extintores de espuma
Aplicación: se emplean para apagar fuegos clase “A” y “B”. Excepto alcohol y éter.
Descripción: consiste en un estanque que contiene una solución de bicarbonato de
sodio con un material espumante (quillay u otros, y un tuvo de plomo cerrado abajo y
perforado arriba, fijo dentro del estanque y lleva u a solución de sulfato de aluminio.
Manejo: para usar este extintor se debe invertir. Así se ponen en contacto el
bicarbonato con la solución de sulfato de aluminio, produciéndose una espuma que se
arroja al exterior por la presión producida por el bióxido de carbono que se forma el
extintor se descarga completamente. Dirigir el chorro de espuma sobre el área
incendiada tratando de formar una llovizna sobre el material inflamado. El operador
debe estar de espaldas al viento.

17
Precauciones: .no usar este tipo de extintor en clase “C”
Manutención: revisar cada 6 meses.
Lavar y cargar luego de usarlo, o cada año.

Extintor de bióxido de carbono (CO2)


Aplicación: se usa para combatir fuegos clase B y C (eléctricos). También puede
usarse en incendios clase A si no hay otros, sin dejar de cerciorarse después, de la
extinción completa de las brasas.
Descripción: este extintor consiste en un tubo de paredes gruesas, que está llena de
bióxido de carbono líquido a una presión de 850 libras por pulgada cuadrada.
Manejo: retirando el pasador que asegura la válvula, oprimir la válvula, dirigir el gas
carbónico hacia la zona del fuego.
Precauciones: cuidar que el chorro (muy helado) no toque a las personas
Manutención: pesar cada 4v meses el extintor. Si el peso ha disminuido en más de 10%
se debe recargar.

Extintores de polvo químico seco


Aplicación: se usan para combatir fuegos clase “A” y “B” y especialmente clase “C”
pero tiene la desventaja de que es muy oxidante y al apagar fuegos en presencia de la
electricidad, los equipos con costra de oxido muy difícil de sacar.
Descripción: este extintor consiste en un estanque que contiene oxígeno o nitrógeno a
una alta presión mezclado con algún polvo químico seco.
Manejo: accionar la válvula y hacer que el polvo caiga como llovizna sobre el área
encendida
Precauciones: el operador debe dar la espalda al viento.
Manutención: controlar la presión periódica y el peso cada seis meses. (Generalmente
poseen un manómetro para controlar la presión).

En resumen, para la selección del tipo de extintor debe considerarse la clase de fuego
podría producirse en cada lugar.

2.2.3 Ubicación: Los extintores deben ubicarse cerca de los peligros probables, pero
no tan cerca como para que un fuego pudiera aislarlos o dañarlos. Si es posible deben
colocarse en los pasillos que normalmente se usan para la entra da y salida del edificio.
Donde se almacenan materiales de alta combustibilidad, en cuartos pequeños o en
espacios encerrados, los extintores deben colocarse afuera en la puerta, nunca
adentro donde quedarían inaccesibles. El relativo peligro de un espacio ocupado, la
naturaleza de fuegos que se prevean y la protección contra peligros espaciales, habrán

18
de determinar el número y clase de extintores portátiles que se instalaran en cada
piso o zona.

2.3. SISTEMAS DE PREVENCION

2.3.1 Sistemas de agua: Para una extinción eficiente los sistemas rociadores
necesitan un suministro seguro de agua y que tengan suficiente capacidad y presión. El
diseño del suministro de agua debiera armonizar con la protección de rociadores, de
manera tal que haya un sistema hidráulicamente equilibrado al menor costo posible.
Por ejemplo, para suministrar agua a todos los rociadores que podrían abrirse, sumado
al consumo de chorros de agua. La necesidad precisa depende de la clasificación que
reciba el contenido del edificio. El agua puede suministrarse desde las fuentes
siguientes:

• Red pública subterránea de distribución de agua.


• Bombas controladas automática o manualmente que se alimentan de lagos,
estanques, ríos, tanques de almacenamiento de superficie, depósitos
subterráneos o fuentes similarmente adecuadas.
• Tanques de presión que contienen aproximadamente dos tercios de agua y un
tercio de aire comprimido para expulsar el agua dentro de la red de
alimentación.
• Tanques o depósitos elevados que dependen de la gravedad para impulsar el
agua a través de la red.

En general, debiera haber disponibles, por lo menos, dos de estas fuentes


independientes como recursos primarios y secundarios para proveer de agua a los
equipos de extinción de incendios. En caso de incendio la fuente primaria suministra
inmediatamente agua al sistema, es apoyada por la secundaria, que también actúa como
auxiliar, en caso de que se interrumpa el servicio de la fuente primaria. Como fuente
primaria es preferible una conexión. Como fuente primaria es preferible una conexión
a una red pública confiable. La conexión debiera realizarse sobre dos líneas principales
distintas, a fin de contar con un volumen mayor y tener más confiabilidad en el caso de
fallo de una línea principal. Como fuente secundaria es preferible una bomba que
suministra agua a alta presión durante un período considerable. Esta bomba debiera
ubicarse en un lugar en donde no existan peligros de fuego, y debiera tener una
provisión de energía independiente del sistema de planta. Debe tenerse cuidado que
las conexiones no contaminen al agua potable, especialmente cuando el suministro
proviene de un río o de otras fuentes de agua no potable. El agua almacenada para la

19
protección de incendios de una planta no debiera usarse para otros fines. El empleo
cotidiano de agua almacenada necesita una provisión constante, con el peligro que se
acumulen sedimentos que circulen en el sistema de hidrantes y rociadores. Las
variaciones de nivel en el tanque se pueden reducir además la duración de un tanque de
madera o hacer un tanque de hierro requiera ser pintado con frecuencia.

2.3.2. Rociadores automáticos: De los sistemas fijos de extinción, los rociadores


automáticos son los que más se usan. Estos sistemas son fundamentales y han
demostrado ser tan eficaces que la mayoría de los ingenieros de protección contra
incendios los consideran como el equipo más importante para evitarlos. De los medios
disponibles de protección contra incendios, los rociadores automáticos son los mas
versátiles y confiables. Esto ha quedado demostrado con los años y una amplia
variedad de incendios. A pesar de haberse desarrollado otras clases de protección
para enfrentar con eficacia peligros especiales, los rociadores en general, también no
recomiendan como protección de apoyo. El costo de protección de los rociadores
automáticos es relativamente bajo, comparado con la inversión total de una planta.
Básicamente hay dos sistemas de rociadores automáticos:

• Sistemas de cañería con agua: En éste sistema, que es el que mas se usa, toda
la cañería esta llena de agua a presión hasta los picos rociadores. Por efecto
del calor, el pico rociador inmediatamente rocía el lugar que esta debajo de él.
• Sistema de cañería seca: Este sistema en general sustituye al sistema de
cañería con agua en lugares en donde éste podría exponerse a temperaturas de
congelación. Es esencial que la válvula de la cañería seca y la línea de suministro
de agua estén ubicadas en un lugar donde haya calefacción. En el sistema de
cañería seca, la cañería contiene aire comprimido que retiene el agua por medio
de una válvula de cañería seca. Al abrirse un pico rociador, el aire se descarga,
la presión desciende y se abre la válvula de la cañería seca para permitir la
entrada de agua al sistema.
• Sistemas de Inundación: Estos sistemas se reservan para ciertos tipos de
situaciones de riesgo extremo. Todos los aspersores se mantienen abiertos en
todo momento de modo que, cuando el agua llega, toda el área se inunda de
agua.

2.3.3 Bombas contra incendios: Son en esencia iguales a las bombas normales usadas
para el suministro de agua. Las consideraciones adicionales se presentan en la norma
de la National Fire Codes (NFPA) número 20, Installation of Centrifugal Fire Pumps.
Se usan en capacidades de 500, 750, 1000, 1500 y en ocasiones de 2000 ó 2500

20
galones por minutos, las más comunes son las de 750 y 1000 gal/min. Los factores que
deben tomarse en cuenta con relación a este tipo de bombas, son:
• Uso del equipo señalado para bombas contra incendio.
• Uso de accesorios aprobados.
• Capacidad adecuada para satisfacer las demandas de propagación contra
incendio.
• Elección de un impulsor para la bomba contra incendios, con base en la
confiabilidad, suficiencia, economía y seguridad de la fuente de energía.
• Operación automática.
• Ubicación segura para que el servicio sea interrumpido.
• Pruebas anuales y semanales.
• Mantenimiento.

2.3.4 Alarmas automáticas: Las alarmas que funcionan con el flujo de agua que pasa
a través del sistema deberían de formar parte de cualquier instalación de rociadores
convencionales. Estas alarmas se pueden conectar a una estación central de alarma o
al servicio municipal de bomberos, o consistir en una señal de alarma local. Tiene por
objeto avisar rápidamente que el sistema de rociadores está en funcionamiento.
También advierte sobre pérdidas de agua o descarga ajenas a los incendios. El sistema
de alarma automática debe ser probado e inspeccionado frecuentemente y ser
mantenido por personas que estén familiarizadas con su funcionamiento.

2.3.5. Hidrantes, mangueras y boquillas: En plantas grandes donde hay lugares que
están a considerable distancia de los hidrantes públicos, o donde no los hay, los
hidrantes debieran instalarse en los lugares convenientes de los patios de la planta. La
cantidad necesaria depende de los peligros de incendio y de alcance de las mangueras
hasta lugares donde hay construcciones o equipos a protegerse. Las conexiones
externas para los servicios de bomberos y que provean agua a los sistemas de
rociadores o las mangueras debes ser accesibles y estar libres de obstrucciones.

• Mangueras: Al igual que cualquier otro equipo de extinción de incendios, en el


establecimiento deberá haber mangueras para uso inmediato, y el lugar donde
estas se guardan deberá conservarse libre de obstrucción y ser accesible.
Alrededor de las estaciones de mangueras y de las válvulas de control deberá
haber un espacio libre. Los equipos estarán visibles y se les indicará con
claridad; los trabajadores tendrán que conocer donde se encuentran y cómo
usarlos. Los pasillos y los accesos y las puertas deberían de mantenerse libres
ser lo suficientemente amplias para permitir el paso de carros con carrete de

21
manguera u otro equipo móvil. Las mangueras de incendio debieran ser fuertes
y confiables, apta para llevar agua a presiones considerables, y a la vez
flexibles fáciles de manejar. Las mangueras de incendio por lo tanto, debieran
ser de una calidad adecuada y habrán de ser cuidadas debidamente cuando se
usan y mantenerse bien conservadas cuando se almacenan. Las mangueras de
exteriores debieran de ser almacenadas en casillas estándar para protegerlas
contra la acción del tiempo.
• Boquillas: La efectividad del agua para combatir un incendio se controla por el
tamaño y la clase de boquilla. La boquilla, a su vez debe recibir la cantidad y
presión correcta de agua conforme su diseño. Las boquillas se diseñan para
producir chorros sólidos o niebla o una combinación de estos dos patrones de
irrigación. También hay boquillas para agentes extintores especiales, como son
la espuma y el polvo seco. Los chorros sólidos se designan de acuerdo a la
cantidad de agua que descargan a una presión de 7 kg/cm. Las boquillas de
niebla se usan ampliamente tanto para la protección pública como privada de
incendios, y hacen que la aplicación de agua sea más efectiva en distintas
circunstancias. Hay tres clases generales:

Boquillas abiertas (no registrables), de patrón fijo, generalmente unidas a


la válvula de cierre.

Boquillas ajustables que permiten descargas y patrones variables. Pueden


producir desde un chorro bien definido, hasta un abanico totalmente
abierto.

Boquillas combinadas que brindan la alternativa de poder conseguir desde


un chorro definido y una niebla fija y ajustable hasta un cierre total. La
selección, generalmente, puede ser hecha mediante una válvula de control
de doble o triple acción.

2.3.6. Sistemas y agentes especiales: Algunos peligros especiales requieren


métodos de extinción o control sin agua. Cada uno de estos diversos métodos
disponibles ofrece ciertas ventajas y limitaciones que deben considerarse al elegirlos.
Estos sistemas, en general, se instalen para complementar a los sistemas de
rociadores automáticos más bien, que para reemplazarlos. Estos sistemas y agentes
debieran adaptarse químicamente al peligro en particular. Es costumbre instalarlos en
forma tal que su funcionamiento detenga otros equipos (como son bombas y
transportadores), que podrían intensificar el fuego.

22
• Sistemas de espuma: Los equipos fijos de extinción con espuma pueden ser
automáticos o manuales. Pueden consistir simplemente en uno o varios
extintores portátiles de espuma, colgados de tal manera que la llama o el calor
corte una cuerda o accione un eslabón fusible para que el extintor se incline y
actúe automáticamente. Los sistemas mas avanzados consisten en una cañería
fija por la cual las soluciones espumogéneas van hacia una cantidad de salidas
que tienen reflectores o ensanchamientos. Los sistemas de espuma se usan
frecuentemente para proteger tanques de inmersión, salas de almacenamiento
de pintura y tanques de asfalto para revestimiento. También se han
desarrollado sistemas de espuma por debajo de la superficie del líquido.
• Espuma química: Hay dos clases generales de quipos para producir espuma
química; Las unidades auto contenidas, el generador cerrado, los generadores
de tolva y los sistemas de soluciones almacenadas. En la unidad auto contenida,
en un solo recipiente se almacenan, independientemente, dos soluciones que
producen espuma al ponerse en contacto. Estas dos son soluciones que se
mezclan en una forma manual o automáticas. La cantidad de espuma producida
está dada por la cantidad de materiales espumogéneo que hay dentro del
recipiente.
• Espuma mecánica o aerospuma: Esta espuma se produce al agarrarse, por acción
mecánica, la cantidad adecuada de un líquido concentrado a una corriente de
agua por medio de un dosificador. Esta solución concentrada luego se mezcla
con aire. La espuma mecánica está paulatinamente reemplazando a los equipos
de espuma química. Loa concentrados espumógenos se clasifican en proteínsicos
y en no proteínsicos o sintéticos.

2.3.7 Sistemas de halones: Se están usando sistemas automáticos de halón 1301 en


lugares tales como centros electrónicos computadores de datos y las salas de archivo,
donde los sistemas a base de agua son indeseables. En concentraciones bajas (menores
a 7%), el agente no es tóxico. Es un gas incoloro, inodoro y no conductor, que extingue
fuegos inhibiendo la reacción química entre el combustible y el oxígeno.

23
3. PREVENCIÓN CONTRA INCENDIOS

Abarca todas las medidas relacionadas con la defensa de la vida humana y la


preservación de la propiedad mediante la prevención, la detección y la extinción de
incendios. Es, principalmente un arreglo de orden físico compuesto de sistemas
rociadores, suministro de agua y extintores de incendio.

3.1 LA PREVENCIÓN DE INCENDIOS


No debiera ser considerada como sinónimo de protección contra incendios, si no como
un término que indica las medidas que están dirigidas, específicamente, a prevenir el
comienzo de los incendios incluye los procedimientos de prevención de incendios.
Ambos términos están orientados hacia la protección de los trabajadores, de la
propiedad y hacia la continuidad de las operaciones.
Un programa efectivo para controlar pérdidas por incendios debe incluir estos
objetivos:
• Prevenir pérdidas de vidas y lesiones personales
• Proteger la propiedad
• Lograr operaciones sin interrupciones
• Prevenir el comienzo de un incendio

3.1.1 Medidas para prevenir incendios: Para tener la certeza que los equipos de
prevención de incendios son mantenidos debidamente es necesario lograr la
cooperación de todo el personal y establecer un vínculo de comunicación entre los
departamentos de producción, ingeniería y compras. Estos departamentos pueden
considerar aspectos de prevención y combate de incendios en todos los nuevos
diseños, métodos y fabricación.
• Inspecciones: El momento más oportuno para controlar incendios es antes que
empiecen. Aún cuando los edificios estén correctamente diseñados y provistos
de equipos de protección, y aun cuando estén construidos con materiales de
relativa resistencia al fuego, solamente inspecciones que realizan las compañías
de seguros y las compañías de seguridad. Además de las inspecciones que
realizan las compañías de seguro y las dependencias oficiales de prevención de
incendios, toda planta industrial debiera incluir inspecciones propias en su
programa de seguridad. En muchas plantas la responsabilidad de localizar e
informar peligros de incendios recae en la comisión de seguridad o en alguna de
sus subcomisiones especiales. La función de estas comisiones es inspeccionar
para descubrir causas comunes de incendios, tales como orden y limpieza
ineficaz, almacenamiento incorrecto de materiales inflamables, violaciones de

24
reglas que prohíben fuma y acumulaciones excesivas de polvo de materiales
inflamables. El inspector, jefe de bomberos u otra persona responsable de la
prevención y protección contra incendios debe tener una lista completa de
todos los elementos que se deben inspeccionar periódicamente. Siesta
responsabilidad recae en los miembros de las brigadas contra incendios, estas
personas deben recibir instrucciones especiales. La inspección de los grupos de
protección contra incendios debe incluir los siguientes elementos:

• Válvula de control del sistema de protección de incendios


• Bocas de incendio
• Bombas de incendio
• Equipos que hay en las casillas para mangueras
• Suministro de agua al sistema de rociadores
• Protecciones especiales (sistemas automáticos de anhídrido carbónico,
espuma y otros sistemas automáticos)
• Equipos portátiles de extinción
• Mangueras pequeñas
• Puertas contra incendios
• Peligros especiales
Además de los equipos contra incendio, deben controlarse periódicamente los
equipos eléctricos, máquinas y equipos de producción, el estado del orden y la
limpieza, así como también otras causas de incendios

Será necesario inspeccionar diariamente los lugares de alta peligrosidad. En los demás
lugares será aceptable realizar inspecciones semanales o mensuales, especialmente si
la comisión de seguridad de la planta realiza inspecciones buscando solamente las
causas de incendios.
Siempre que se hagan cambios en la planta, y después que se hayan completado,
deberán hacerse inspecciones especiales. Antes del invierno y con suficiente
anticipación, deben inspeccionarse por completo aquellos equipos que están expuestos
a temperaturas de congelamiento. Para lograr mayores beneficios es esencial llevar
registros.
El formulario a usarse debe ser especialmente diseñado para cada planta en
particular, de manera que facilite la inspección, y habrá de ser lo suficiente completo
para que no se descuide ninguna parte del sistema. Deberá ayudar al inspector a hacer
comentarios y presentar recomendaciones a quienes sean responsables.
Podrá ayudar a proteger su casa de la causa principal de incendios invernales. "Los
Estados Unidos tiene uno de los índices más altos de muertes provocadas por

25
incendios, de todo el mundo, a pesar de nuestra capacidad para combatir incendios y
salvar vidas", comenta la doctora Elaine Josephson, del Colegio Americano de Médicas
de emergencia (ACEP). "Aquellos con el mayor riesgo de morir debido al fuego y el
humo son los mayores de 70 años, y los niños menores de 5". ACEP ofrece las
siguientes sugerencias efectivas para salvar vidas, que usted podrá poner en práctica
para asegurarse un invierno seguro.

3.2. DENTRO DE LA CASA


Instale alarmas de detección de humo en todos los niveles de su vivienda. Pruébelas
mensualmente y cámbieles las baterías por lo menos una vez al año. Considere la
instalación de nuevas alarmas de detección de humo de larga vida.

3.2.1 Velas:
• Evite usar velas encendidas. De usarlas, asegúrese que reposen en soportes
estables y colóquelas donde no puedan ser fácilmente tumbadas.
• Nunca salga de su casa con velas ardiendo. Las velas encendidas nunca deberían
ser colocadas en mesas laterales o en otras áreas donde puedan ser tumbadas.
• Mantenga las velas encendidas alejadas de los alféizares de las ventanas o de
cualquier otro lugar donde una cortina o artículo de tela pudiera hacerlas caer
o quemarse.
• Mantenga las mechas cortas a un largo de entre un cuarto de pulgada y media
pulgada por encima de la vela.

3.2.2. Seguridad en el uso de la calefacción.


• Mantenga cualquier objeto que pudiera incendiarse a una distancia de por lo
menos tres pies de la fuente de la calefacción.
• Nunca use los hornillos de la estufa para calentar su vivienda. No sólo es un
peligro de incendio, sino que también puede despedir gases tóxicos.
• Asegúrese de que los calefactores tengan "tip switches", interruptores con la
función de apagarlos, si se vuelcan.
• Use sólo el combustible recomendado por el fabricante del calefactor. Los
calefactores deberán ser recargados sólo cuando estén apagados y fríos.
• Siempre llene el calefactor de combustible fuera de la casa.
• Nunca desatienda un fuego en la chimenea. Para apagar el fuego, apáguelo antes
de salir de la casa o acostarse.
• Use sólo maderas bien secas en su chimenea. Las maderas blandas o húmedas
hacen que la creosota se acumule en la chimenea.

26
• Inspeccione y limpie regularmente su chimenea.
• Nunca queme cajas de cartón, papel de envolver o basura; éstos podrían
provocar un incendio en la chimenea.
• Instale termómetros en las tuberías de su calefactor para vigilar la
temperatura del combustible, en el caso de estufas que utilizan la madera como
combustible, y así para poder ajustar sus procedimientos de combustión, según
el caso lo requiera.

3.3. PREVENCIÓN EN ALMACENES CON PRODUCTOS INFLAMABLES


• Limitar la cantidad de líquidos combustibles almacenados.
• Conservarlos en recipientes metálicos cerrados o en recipiente seguridad.
Nunca en envases de vidrio.
• Mantener a su alrededor un espacio suficiente, libre de o materiales y de
fuentes de ignición.
• Establecer procedimientos seguros de manipulación. Evitar los trasvases a
recipientes más pequeños en el interior del almacén.
• Si fuera necesario trasvasarlos, deberá disponerse de bombas trasvases. Se
eliminará la electricidad estática por medio de conectar los recipientes entre
sí y a tierra, y se dispondrá de bandejas para recoger eventuales derrames o
goteos, así como de buena aspiración de los vapores o ventilación general.
• La instalación eléctrica será antideflagrante (arder sin explosión).
• El suelo del almacén dispondrá de drenaje.

3.4. NORMAS GENERALES DE PREVENCION


• Utilice matafuegos adecuados a la clase de fuegos que correspondan.
• En caso de fuegos sobre conductores eléctricos bajo tensión, no use
matafuegos en base de agua, emplee extintores a base de anhídrido carbónico
o polvo químico seco.
• Conozca la ubicación y el manejo de los elementos de extinción.
• No obstruya las instalaciones de protección contra incendios.
• No acumule residuos en puestos de trabajo.
• Almacene pinturas e hidrocarburos en lugares seguros.
• No practique reparaciones eléctricas improvisadas.
• No sobrecargue la instalación eléctrica, puede constituirse una fuente de inicio
de un incendio.
• Si su edificio posee pileta o estanque de agua, derive una cañería aprovechable
para el combate de incendio.

27
• Si su edificio tiene una superficie cubierta de más de 1500 m2, cumpla con la
condición especifica de extinción E1*.
• En bancos, hoteles, casas de pensión, oficinas, escaleras, pasillos y corredores
deberán poseer iluminación de emergencia y señalización conforme lo establece
la legislación vigente.
• Si su deposito supera los 600 m2 de superficie y almacena sustancias muy
combustibles, cumpla con la condición especifica de extinción E1*.
• Si su depósito supera los 1000 m2 de superficie y almacena sustancias muy
combustibles, cumpla con la condición específica de construcción C3, según la
legislación vigente de protección.
• Si su garaje supera los 500 m2 de superficie, deberá cumplir con la condición
de extinción E1*.

*Prevención E1: Establece la cantidad de hidrantes que lleva el edificio, como así
también la capacidad de agua para reserva de incendio, y posibles fuentes de abasto.
*Prevención C3: Establece una superficie máxima para un sector de incendio de 1000
m2, o 2000 m2 con una instalación de rociadores automáticos.

• Los trapos, estopas, etc., impregnados en aceite o grasas, deben ser


depositados en recipientes metálicos con tapa y diariamente enviados al
exterior.
• El acceso a matafuegos y salidas, normales y de emergencia, deben estar
libres de todo obstáculo.
• Los materiales inflamables deben ser guardados en recipientes cerrados y
depositados en lugares habilitados para ello; solo pequeñas cantidades, las
necesarias para las prácticas diarias, pueden hallarse en los lugares de trabajo.
• Manejar sustancias volátiles, inflamables, etc., lejos de llamas y fuentes de
chispas. Toda destilación o calentamiento de material inflamable debe
considerarse como una operación con riesgo de incendio.
• Señalización: Utilización de las señales normalizadas en puntos
específicos de los locales donde pudiera existir riesgo de incendio.
• Formación del personal:
• Equipo humano de seguridad contra incendios:
• Formación suficiente sobre protección, prevención y primeros
auxilios.
• Dominio del plan de evacuación.

28
• Practicas de Extinción del fuego en colaboración con el parque de
bomberos correspondiente.
• Conocimiento de la normativa.
• Todo el personal de la empresa:
• Debe conocer el plan de evacuación.
• Tiene que controlar los medios de extinción a su alcance.
• Método de trabajo
• Coordinar las acciones con los departamentos implicados.
• Separa aislar o proteger los materiales combustibles de los
puntos de ignición.
• Establecer normas precisas de actuación.
• Proveer de los equipos de extinción necesarios y adecuados para
las sustancias combustibles existentes.
• Controlar las chispas o llamas producidas durante el trabajo.
• Establecer vigilancia permanente durante el trabajo.
• Inspección de la instalación contra incendios y puntos de riesgo.
• Plan preventivo de inspecciones programadas de revisión de áreas de
riesgo y de los equipos de instalaciones automáticas contra incendios:
• En áreas de riesgo:
o Comprobar las señalizaciones.
o Verificar que se cumplan las normas establecidas.
• En las instalaciones y equipos contra incendios:
• Ausencia de obstáculos que posibilite el uso adecuado de los
equipos
• Aspecto general externo del sistema o aparatos del sistemas,
incluida lectura del manómetro, así como la fecha de
comprobación de recarga.
• Estado de funcionamiento cuando ello sea posible.

3.4.1. Si el incendio se declara en su casa:


• Abandone lo más pronto posible, junto con su familia, su casa y avise de
inmediato a los bomberos. No exponga indebidamente su vida.
• Cierre la puerta de la habitación donde se ha iniciado el fuego, ya que aunque
esta sea de madera, podrá evitar la propagación del siniestro algún tiempo más.

29
• En caso de que las llamas se propaguen, moje su ropa y cúbrase con una frazada
gruesa.
• Protéjase la cara y las manos y si lo toma el fuego no corra, ruede por el piso.
• Antes de abandonar su hogar, no olvide cortar la luz y el gas. Evitara
inconvenientes mas graves.

3.5. NORMAS TÉCNICAS ACERCA DE LA PREVENCIÓN


3.5.1. Objetivo: La presente nota técnica pretende establecer los criterios
técnicos, en que pueden basarse los cálculos para evaluar las condiciones de
aislamiento precisas ante situaciones o riesgos que no sean contemplados en la
citada NBE.
3.5.2. Medidas de aislamiento: El aislamiento de riesgos se puede conseguir
situando los mismos a una distancia conveniente o separándolos por elementos
resistentes al fuego (RF), combinados con cortinas de agua.
3.5.3. Separación por distancia: La distancia mínima que debe separar dos riesgos
se calculará multiplicando la dimensión menor, ancho o alto de la pared radiante,
por el coeficiente C que se deduzca de la tabla adjunta. Al producto se sumará
siempre 1,5 metros (Tabla 1)

30
Cuando existan cantidades sustanciales de productos inflamables se tomarán siempre
densidades de fuego severas o altas. Cuando no exista una brigada competente de
bomberos de empresa o bomberos profesionales en la localidad, la distancia debe
aumentarse hasta tres veces la obtenida por el método indicado.

3.5.4. Separación por elementos resistentes al fuego: La resistencia al fuego de


los elementos de separación será función de la carga térmica QT mayor de entre
los riesgos a separar, obteniéndose por:
RF (minutos) = 1/4 QT (Mcal/m2)
La carga térmica QT se calculará por:
Siendo:
Pi: El peso en Kg de cada una de las diferentes materias combustibles.
A: la superficie en m2.
Hi: El poder calorífico de cada una de las diferentes materias en Mcal/Kg.
(Hi se puede obtener de la NTP 47.83 sobre "valores de parámetros de interés
respecto al riesgo de incendio de las sustancias químicas más usuales").
Las aberturas de los elementos de separación deben estar protegidas por cierres de
una RF equivalente.
Cuando los riesgos estén protegidos por medios de lucha contra el fuego, el valor
obtenido puede multiplicarse por el coeficiente reductor obtenido por aplicación del
método K (3) (Tabla 2) o similar.

3.5.5. Reducción de distancia/RF: La distancia o resistencia al fuego obtenida en los


puntos anteriores puede disminuirse con las siguientes combinaciones hasta:
Distancia (m)

1. Pared exterior o elementos estructurales combustibles


a. Sustituida por pared RF obtenida según 4................... 0
b. Protección total de la pared por cortina de agua (de accionamiento
automático)
 sin aberturas o
 aberturas protegidas por vidrio armado o
 aberturas protegidas RF 45 minutos............................ 2
c. Pared con aberturas protegida totalmente por cortina de agua (de
accionamiento automático) 0,50 D

31
32
TABLA 2

TABLA 3

2. Pared exterior incombustible


a. Sustituida por pared RF obtenida según 4................... 0
b. Sin aberturas o aberturas RF 45 minutos.................... 0,50 D
c. Protección total de la pared por cortina de agua (de accionamiento
automático)
 - sin aberturas o
 - aberturas protegidas por vidrio armado o
 - aberturas protegidas RF 45 minutos............................ 2
d. Aberturas normales y cortina de agua (de accionamiento automático)
sobre las mismas 0,50 D
3. Pared exterior con RF necesaria según 4
Sin aberturas................................................................. 0
Aberturas protegidas a RF 1/2 de la necesaria............. 0,25 D (máx.3)
Aberturas protegidas a RF 1/4 de la necesaria............. 0,5 D (máx.6)
Aberturas sólo protegidas por cortina de agua............. 0,5 D

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3.6. SEGUROS CONTRA INCENDIOS
SEGURO DE INCENDIOS
Seguro contratado por los propietarios de bienes inmuebles para evitar los daños
provocados por incendios fortuitos; a cambio, hay que pagar una prima, es decir, una
cantidad de dinero —mensual o anual— para poder beneficiarse del seguro. Sin
embargo, algunas empresas se auto aseguran, es decir, crean fondos para poder
hacer frente a los costos de los daños provocados por un incendio.

HISTORIA
El primer sistema para destinar fondos a la prevención de daños por incendios se
creó tras el gran incendio que arrasó Londres en 1666, destruyendo 13.000
edificios. El sistema, diseñado al año siguiente, consistía en reunir pequeñas sumas
de dinero aportadas por muchos individuos, creándose así un fondo para hacer
frente a los posibles daños que pudiera causar un incendio. Este sistema se fue
generalizando en todos los países durante los siglos XIX y XX.

PÓLIZAS DE SEGUROS CONTRA INCENDIOS


El seguro contra incendios más simple cubre los gastos de los daños causados
directamente por el fuego o por un rayo. Existen pólizas de seguros contra incendios
ampliadas, que permiten cubrir los gastos de los daños causados por huracanes,
granizadas, explosiones, conflictos sociales, accidentes aéreos, de tránsito y otros. La
prima también se puede ampliar para cobrar mayores indemnizaciones. Las pólizas
establecen las primas de dos formas: por clases o por riesgos. Las primas de seguros
contra incendios para viviendas suelen determinarse según la clase de inmueble, el tipo
de construcción y quien la habita (el propietario o un inquilino). Según estos criterios,
se cobra la misma prima para todas las viviendas que estén dentro de una misma
categoría. Los locales comerciales y las fábricas tienen distintos tipos de riesgos, por
lo que las primas dependen de cuales sean éstos. Para determinar los posibles riesgos
se tienen en cuenta el tipo de construcción, las medidas de seguridad y prevención de
incendios de que disponen, así como las características de los edificios que rodean al
inmueble que se quiere asegurar.

Hay pólizas de seguros combinadas para las viviendas, que aseguran contra el robo, los
incendios y otros riesgos, con lo que se consigue evitar que se tengan que suscribir
varias pólizas para una misma vivienda. Este tipo de seguros combinados pueden
aplicarse también a los negocios.

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CAUSAS MÁS COMUNES DE LOS INCENDIOS
• Electricidad 18 %
• Fricción, rozamiento 14 %
• Chispas metálicas 12 %
• Fumar, fósforos 9 %
• Corte y soldadura 8 %
• Superficies calientes 7%
• Chispas de combustión 6%
• Llamas abiertas 5%
• Ignición espontánea 4%
• Materiales recalentados 3%
• Indeterminados 12 %

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