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Mucha agonía humana se debe a errores en genes: codescubridor del

ADN

Por: DEBBIE PONCHNER / LA NACIÓN DE COSTA RICA | 9:20 p.m. | 16 de


Febrero del 2011

Foto: Archivo Particular


James D. Watson, habla del recorrido de la ciencia desde que se dio a
conocer dicho descubrimiento.

James Dewey Watson, el biólogo de 82 años de edad reconocido mundialmente


por su aporte a la genética moderna y su papel impulsor del Proyecto del
Genoma Humano, también es famoso por sus pensamientos radicales,
calificados por algunos como racistas, que en el 2007 le costaron su puesto
como director del Cold Spring Harbor Laboratory, en Long Island, Nueva York,
donde laboró por cuatro décadas.

El Premio Nobel de Medicina de 1962 conversó con La Nación sobre el recorrido


que ha hecho la ciencia desde cuando, en un breve reporte científico publicado
en abril de 1953 en la revista Nature, él y Francis Crick plantearon una posible
estructura para la molécula de la vida.

En la discusión sobre si lo que determina a las personas es la


naturaleza o el entorno, ¿dónde está usted?
Es una conjunción de la naturaleza y el entorno, pero algunas personas, la
mayoría de izquierda, quieren echar por la borda la naturaleza, quieren decir
que es todo el entorno, porque el comunismo quería que todo lo malvado
proviniera de la sociedad (...) Quienes tenemos un conocimiento de genética
sabemos que, si uno nace con fibrosis quística, esa es una vida difícil; y si nace
con una enfermedad mental, de cierto modo, es aún peor.

Entonces, ¿es mitad y mitad?


Es más o menos mitad y mitad, pero prefiero no dar una cifra. En lo que no
existe discusión en torno al peso de la genética es en la aparición de
devastadoras enfermedades que ocurren al heredar un solo gen dañado o por
una mutación espontánea. Una vez la clonación de genes fue posible, las
personas querían aislar el gen responsable de estas enfermedades genéticas,
con la esperanza de que se pudiera dar con las herramientas para curarlas.
Ahora, la forma romántica de curarlas era a través de terapia génica: usted
reinsertaría un gen bueno y con ello curaría el mal, pero el asunto es: ¿cómo
meter los genes de vuelta dentro del ser humano? Hasta ahora, esto ha
resultado imposible. Algunos individuos prometieron terapia génica (...) pero
nunca ha sido una parte prioritaria de la biología, porque nunca hemos sabido
cómo hacerlo.

¿Usted cree que en el campo de la proteómica, al estudiar las


proteínas que se expresan en un sistema y no solo los genes, eso
pueda ser posible?
Muchos de los genetistas lo que queremos es prevenir enfermedades, en lugar
de curarlas.

El cáncer y los 'perdedores'


Otro aspecto que ha ocupado a Watson es el cáncer. "No es un daño en las
células germinales, sino en las células del cuerpo. Hemos pasado los últimos
40 años estableciendo las bases del cáncer, no solo en principio, sino en
identificar todas las mutaciones que pueden hacer que las células se vuelvan
cancerosas. Una vez que iniciamos ese proceso ese fue el incentivo para iniciar
el Proyecto del Genoma Humano.
Empezamos a hablar de ello en 1983, yo me involucré en 1986 y terminé
tomando las riendas del proyecto en 1988, y 15 años después lo teníamos. El
Proyecto del Genoma Humano ha tenido un éxito sin precedentes en
permitirnos identificar las causas genéticas del cáncer".

¿Cuál fue la mayor sorpresa que le trajo el Proyecto del Genoma


Humano?
Probablemente, la pequeña cantidad de genes. No eran 100.000, son 20.000.
Pero, para compensar toda esta aparente simplicidad está todo este ARN
regulador, que lo hace igual de complicado. Y también ha resultado que el ADN
basura (el que no codifica genes) no es tan basura después de todo. La
mayoría de él es basura, pero parte de él no lo es. Pero déjeme contarle de
nueva evidencia que está relacionada con esa basura. Ahora han secuenciado
un trío, que es un niño, su papá y mamá, y han hallado una serie de nuevas
mutaciones. La respuesta parece ser que ocurren unas 50 nuevas mutaciones.
Como mucho de nuestro ADN es basura, muchas de estas mutaciones ocurren
sin ninguna consecuencia.
Decimos que cerca del 2 por ciento de nuestro ADN codifica, está asignado a
hacer un específico aminoácido (los bloques con los que se forman las
proteínas), pero usted puede hacer algunos cambios en unas proteínas que
igual van a funcionar, otras son muy importantes. Así que todos nacemos con
50 cambios. ¿Cuántos de ellos son realmente malos?

Ahora, por primera vez tenemos algunos datos: empezaron a secuenciar


exones (la parte del gen que codifica proteínas) de niños con retraso mental.
Estos son niños cuyos padres tienen coeficientes intelectuales normales, pero
ellos tienen retrasos muy severos. Secuenciaron siete y encontraron nuevas
mutaciones en cinco de ellos. Así que se podría decir que la mayoría de los
niños que nacen con retraso mental son resultado de nuevas mutaciones.

Tengo un hijo que tiene una esquizofrenia. Él, simplemente, no puede cuidar de
sí mismo. En Johns Hopkins secuenciaron cuatro casos de esquizofrenia en los
que los padres eran normales y, de repente, sale uno malo, y encontraron la
probable causa del cambio en cada uno de ellos. Lo que puede ser cierto es
que todos los casos nuevos de esquizofrenia se deben a nuevas mutaciones,
solo a un cambio en una letra. Hay una teoría alternativa que señala que la
esquizofrenia ha estado recolectando una serie de mutaciones que no hacen
daño, pero que, si se ponen en cierta combinación, aparece la enfermedad.
¿Qué fracción de personas tiene nuevas mutaciones genéticas que las ponen
en desventaja?
Probablemente sería el 5 por ciento. Si en cada generación el 5 por ciento va a
cargar una mutación que los pone en desventaja, lo que usted llama
"perdedores", ¿cuántos son los "ganadores"?
Estoy empezando a decirle a la gente que la religión cristiana surgió para
cuidar a los perdedores (se ríe).

Pero, ¿cuidar de los otros es parte de la naturaleza humana?


Lo es. Sin ello no podríamos subsistir. La sociedad tiene que tener eso. Ahora
hay este debate en Estados Unidos, de cómo debemos distribuir la riqueza para
que la gente pobre tenga acceso a servicios de salud. Una redistribución. Hay
quienes dicen que eso es socialismo y yo les digo que es cristianismo (se ríe).

¿Es usted creyente?


No, soy un seguidor de Jesús. Creo que debemos cuidar de los perdedores.
Tengo un perdedor, mi hijo, pero lo amo.

Pero, ¿es un hombre religioso?


No, nunca he estado en una iglesia. Lo que quiero decir es que la biología ha
llegado a solidificar algo: que la causa de mucha de la agonía humana se debe
a errores en la replicación del ADN, no a maldad heredada por los seres
humanos. Es algo que la gente no quiere oír, porque significa que no hay forma
de prevenirlo. Siempre vamos a tener esquizofrenia, así que tenemos que
encontrar fármacos para tratarla mejor.

¿Debería todo el mundo secuenciar su código genético?


Diría que sí. Creo que a todo el mundo se le debería sacar su huella genética al
nacer. La gente puede decir que eso puede ser usado de forma perversa. La
mayoría de las personas, me imagino, piensan que van a necesitar hacer
trampa en algún momento y no van a querer que el ADN se imponga en su
camino.

Usted conoce su genoma, fue secuenciado en el 2007. ¿Qué fue lo que


más aprendió de él?
Confirmé que no digiero muy bien la leche y descubrí que no digiero varios
fármacos importantes en la medicina: los betabloqueadores y los
antipsicóticos. Así que, si fuera esquizofrénico y me administraran un fármaco,
me podrían matar, porque me darían una dosis normal.

¿Hay algo que aprendió que hubiera preferido no saber?


Yo dije que no quería saber nada sobre la estructura de mi alzhéimer. No
quería saber cuál era mi predisposición. Así que eso no se ha publicado.

¿Y usted no lo ha revisado?
No. Mi padre murió debido al cáncer de pulmón y mi mamá, debido a
problemas cardíacos, así que no vivieron lo suficiente para desarrollar la
enfermedad. No sé si yo lo heredé, pero mi abuela materna tuvo alzhéimer, lo
desarrolló en sus ochenta. Si supiera que me va a dar alzhéimer, yo
rápidamente pondría fin a mi vida.

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