Sei sulla pagina 1di 1

Un ruido Secreto

José Luis Brea


(Segunda Parte)

La segunda parte del texto de José Luis Brea, presenta en sí una complementación de las ideas
planteadas en su parte anterior, profundizando de esta manera los problemas tratados con
anterioridad y de la misma manera logrando indagar más en estos factores que provocan cada vez
una mayor perdida de cultura e identidad dentro de la sociedad de hoy en día.

Presentando de esta manera al hombre como un ser ególatra, comenzando desde el narcisismo
planteado por Sigmund Freud en su concepto de un “yo ideal”, mostrando como esta veneración
por sí mismo que va brotando desde la niñez, se expande en adelante, y la que, a pesar de ser una
característica muy común dentro del ser humano es capaz de crear una limitación para el artista
con su espectador, provocando una obra más para sí que para un público.
De la misma manera se provoca una controversia dentro del sentido del arte, ya que a pesar de
que el ser ególatra provoque una limitación dentro de la comunicación de si mismo para-con el
espectador y su obra, de la mima manera crea una conexión de la obra-artista mayor, lo que causa
una expresión más profunda provocando así más interés.

A través de los medios de comunicación y del aumento (cada vez mayor) de la privatización del
arte dentro de las clases sociales, debido a su afán por ser cada vez más y más introducido dentro
del mercado, buscando un fin más mercantil que de propia expresión, causando de esta manera
una perdida de su idea fundamental, por lo tanto de su valor. La masificación del mismo, se
convierte en una de las actividades más comunes para la sociedad, por lo que la obra cada vez va
perdiendo su propia seriedad, y se va convirtiendo en una forma de entretenimiento con un sentido
banal.
Puede que exista algún tipo de crecimiento a través de su masificación y comercialización, pero lo
mismo provoca una perdida aún más importante, como aparecía dentro del texto de “Walter
Benjamin”, “La obra en su época de reproductibilidad técnica”, donde el autor hace ver que la
cantidad esta superando a la calidad, volviendo el arte una obra comercial, sin un fin más allá que
de multiplicación y venta, perdiendo así como ha sido ya mencionado, su capacidad de expresar,
su fundamento, su espacio y tiempo.
De la misma manera, reiterándolo nuevamente se puede decir que existen además un sin fin de
factores capaces de causar la deterioración del arte y la cultura, provocando una importante
perdida de sentido y valor para sí, tomando un ideal capitalista, anti-revolucionario y fascista, todo
lo que contrario a lo que esta forma de expresión a querido entregar a través del tiempo, se
encuentra presente en este momento.

Potrebbero piacerti anche