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Indicaciones relacionadas con el uso del tubo Karsten.

Este sencillo instrumento que permite evaluar la capacidad de absorción de agua en


paramentos verticales no constituye norma alguna, y tiene más bien un carácter comparativo
(superficies impregnadas vs. superficies sin tratar). Se acostumbra a ubicar él o los tubos en los
encuentros de llagas y tendeles, ya que en albañilerías a la vista estas zonas son las más
susceptibles de absorber el agua de lluvia (ver foto adjunta). Una vez colocado el tubo
mediante una masilla plástica, se vierte agua dentro de él hasta que el nivel superior alcance
una altura de 5 cm., medidos a partir del centro de la base o campana circular. La altura de
columna de agua de 5 cm. ejerce sobre la zona evaluada una presión equivalente a la
producida por una lluvia acompañada de vientos con una velocidad de 100km/h. Como Ud.
comprenderá, este tipo de solicitaciones no se produce prácticamente nunca en la Región
Metropolitana. Pasados unos 15 minutos, se mide el descenso experimentado por el nivel
superior del agua dentro del tubo leyendo directamente de la escala adjunta.

La altura de columna de agua correspondiente es necesario medirla independiente de la


escala grabada sobre el tubo, la cual como se acaba de indicar sólo puede utilizarse para
evaluar el descenso eventual del nivel superior del agua contenida dentro de él. El aumentar la
columna de agua por sobre el valor recomendado origina solicitaciones que no representan
situaciones reales.

Adicionalmente, es necesario hacer notar que el hidrofugante de silicona reacciona


completamente en las paredes de poros y capilares del material tratado luego de transcurridas
dos semanas. En consecuencia, el realizar ensayos antes de que ese cumpla dicho plazo
puede conducir a resultados negativos. Igualmente, el ubicar los tubos sobre fallas
constructivas (p. ej. agujeros o grietas) también conducirá a resultados poco satisfactorios. Por
lo tanto, este tipo de fallas deben ser corregidos antes de realizar la hidrofugación. En relación
al punto anterior, resulta claro que una persona con poca experiencia puede llegar a
conclusiones erróneas al evaluar un muro de fachada empleando tubos Karsten.

Métodos de Ensayo
a)El Método Karsten
Se fija un tubo de vidrio graduado sobre la superficie a ensayar. Este ensayo
induce sobre la superficie una presión de agua inicial que puede ser de 113 mm,
equivalente a la acción estática de lluvia con viento de 150 km/h. Cada mm de
altura del agua en el tubo corresponde a una presión de 1 kgf/m2. Hay tubos con
un codo para aplicar sobre superficies verticales.
El tubo se llena con agua hasta la graduación máxima (0). La distancia entre dos
marcas numeradas corresponde a un ml (un gramo).
Se mide y registra el descenso del nivel del agua a través del tiempo.
La diferencia entre el nivel inicial y el nivel al momento de la medición
representa los ml de agua que han penetrado en la superficie del hormigón.
Este ensayo presenta la ventaja de permitir la realización de mediciones en obra.

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