Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
1.- Detección en la BIOS de los discos instalados. Entra en la BIOS y busca información sobre los
dispositivos que hay conectados en cada conector IDE de la placa.
Apunta el tamaño del disco y su geometría, es decir, el número de cilindros, cabezas y sectores
en que se divide.
Con estos tres últimos datos, calcula la capacidad del disco
3.- Lee y resume el siguiente texto: Problemas con los dispositivos IDE
Una vez instalados los dispositivos IDE hemos de entrar en la BIOS y comprobar si el sistema
los reconoce. Si no los reconoce revisaremos los jumpers y las conexiones con la placa base y la
fuente de alimentación. Si tras revisar las conexiones el problema persiste, puede ocurrir que: el
cable de datos esté dañado (probaríamos con otro cable) o que la unidad de disco duro esté
defectuosa porque se haya estropeado el motor del eje.
Puede ocurrir que durante el montaje de un PC, estemos intentando instalar un disco con mayor
capacidad de la que es capaz de soportar la placa base. Tenemos varias posibles soluciones:
Conectar un disco duro con una capacidad que pueda soportar la placa base.
Algunos discos duros (normalmente los de gran capacidad) pueden ser configurados para adoptar
una menor capacidad, de forma que se pueda instalar en muchas placas base. La configuración se
realiza sobre los jumpers, a través del puente que se explica vienen en las instrucciones.
Consultar la página web del fabricante para ver si es posible la actualización de las BIOS de la
placa para el reconocimiento del nuevo HW.
4.- Investiga: Existe en el mercado un nuevo formato de discos duros llamados SSD (Solid State
Drive). Describe sus características y compáralas con las de los discos IDE y SATA.
Estos nuevos discos duros se diferencian fundamentalmente en el sistema de almacenamiento de
datos que consiste en guardar la información en baterías de chips de memorias tipo flash, de forma
similar a los pendrive con lo cual no es necesario que incluyan la parte mecánica de los discos
convencionales, es decir el disco con su motor y los cabezales de lectura escritura con su
controladora.
Los discos SSD que hay en la actualidad tienen mucha menos capacidad que los discos
convencionales y además son mucho más caros. La tendencia comercial es que aumentará la
capacidad de los mismos y bajará su precio, por lo que serán una buena alternativa para los discos
actuales IDE o SATA.