EVOLUCIÓN DE LA EDUCACIÓN A DISTANCIA.

RELACIÓN CON LA
EVOLUCIÓN DE LAS TIC.
Por Miguel Ángel Maldonado

Mi madre me contaba que fue hasta 2º grado de EGB. Vivía en un pueblo de la Alpujarra
Almeriense de la posguerra y caminaba por la montaña un par de horas para llegar a la escuela.
Lógicamente, se cansó de ir.

La idea de la necesidad de formar a la población no entraría con fuerza hasta mucho después en
España. Mientras eso ocurría, en todo el mundo la formación sólo estuvo al alcance de los hombres
con dinero. Para las mujeres también habría que esperar aún.

A mediados del s.XIX, la industrialización europea ya había dado paso a una sociedad más próspera
que demandaba nuevos servicios y que se proponía nuevos retos. Era preciso preocuparse por la
educación de la población adulta. Pero por entonces, como antes, la educación sólo estaba al
alcance de unos pocos afortunados. Hubo que crear un sistema educativo adecuado al perfil de un
trabajador que disponía de poco tiempo y escasos recursos, pero que deseaba medrar y adquirir
nuevos y mejores conocimientos; nuevas y mejores habilidades y aptitudes.

La Educación a Distancia (EaD) clásica nace para satisfacer esa demanda. Mediante material
escrito enviado por correo, una comunicación epistolar o a través de teléfono y un tutor guiando el
proceso, hombres y mujeres alejados de los centros educativos, con pocos recursos y con poco
tiempo para poder acudir a clases convencionales tuvieron finalmente acceso a la formación que
demandaban.

Se crearon textos específicos para atender a alumnos que no estaban presentes y tenían que ir
descubriendo las materias a través de una lectura en solitario. Lógicamente, la capacidad de
comunicación de la época se basaba en el teléfono y la correspondencia. Es importante resaltar que
la evolución de la EaD está íntimamente ligada a la evolución de la capacidad del ser humano para
transmitir información. A la lejanía en el espacio debemos añadir la lejanía en el tiempo, pues
alumno y profesor se comunicaban por medios que hoy día consideramos lentos.

Por esta época, la formación se orientaba hacia el formador, que disponía la organización de la
información y la forma en que el alumno accedía a ella.

La evolución de la sociedad y la tecnología sigue a lo largo de la Historia un modelo exponencial.

De este modo, vemos que el siguiente peldaño del desarrollo de la EaD lo encontramos en los años
80.

Los derechos humanos, la igualdad sin distinción de sexo, raza o religión, la tecnologización de la
economía, el acceso de la mujer al mercado laboral...mucho ha pasado desde los primeros pasos de
la EaD. Ha nacido una nueva tecnología: la informática. A lo largo del s.XX se ha ido
perfeccionando un artefacto capaz de hacer cálculos gigantescos en microsegundos: de ocupar
naves enteras ha pasado a ser usado como un electrodoméstico más. Es el ordenador personal.

La EaD no fue indiferente a este aparato y vio las posibilidades que almacenaba. Siendo capaz de
reproducir texto, audio y video, aparte de almacenarlo en reducidos espacios (CD-ROM), la entrega
de material al alumnado se hizo más intensa. Mucho más allá, se pudieron crear materiales en los
que el ordenador no sólo mostraba la información al alumno, sino que demandaba de él una
interacción, una pulsación de tecla, una respuesta. Había nacido la EaD interactiva.
Finalmente, aparejado con el desarrollo del revolucionario sistema de interconexión de ordenadores
llamado Internet en los años 90, tuvo lugar una nueva evolución de la EaD. Dicha interconexión
permite el acceso directo a materiales didácticos de todo tipo (escritos, sonoros, videográficos...)
presentes en los servidores. Pero no sólo eso. También permite la intercomunicación instantánea
tanto síncrona (directa: chat) como asíncrona (distanciada en el tiempo: e-mail, foros...). De este
modo, ya es posible no sólo el acceso a los nuevos materiales didácticos creados por la EaD
interactiva, sino que se fomenta la intercomunicación entre alumnos y profesores y entre los
mismos alumnos, creando una comunidad virtual que suple muchas de las carencias comunicativas
de la EaD. Es el nacimiento de la EaD colaborativa, base de lo que hoy día llamamos e-Learning.

La evolución no sólo es tecnológica. Estamos hablando de un cambio radical en los métodos y

objetivos de la EaD, que partiendo de una concepción basada en el formador, acaba estando pensada
por y para el alumno. Se han modificado los paradigmas, la forma de crear y transmitir los
conocimientos.

Hemos visto cómo a lo largo de la Historia, los cambios sociales y tecnológicos modificaron
radicalmente los fundamentos de la Formación, como no podía ser de otra forma al estar hablando
de una ciencia eminentemente humanista.