Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
cc c
î î A
Pedagogo de los oprimidos y transmisor de la pedagogía de la esperanzac «AUA
CATIîA»c
ccc
© Enrique Martínez-Salanova Sánchez c c
î î A
«FIGUAS D
c
A
PDAG GÍA» c
c
Aula creativa/Home/Cine y educación/Metodología didáctica/Periódico en las aulas/l puntero de don Honorato c
J render de cine/Temas de educación en el cine/Grandes temas en el cine/Cosas de cine/Unidades didácticas/Figuras de cine/Haciendo cinec
Jutor/Ma a del sitio/Bibliografía/Enlaces/Glosario de cinec
c
Paulo Freire c
c
aulo Freire (1921-1997) fue uno de los mayores y más significativos edagogos del siglo XX. Con su rinci io del
diálogo, enseñó un nuevo camino ara la relación entre rofesores y alumnos. Sus ideas influenciaron e influencian los
rocesos democráticos or todo el mundo. Fue el edagogo de los o rimidos y en su trabajo transmitió la edagogía de
la es eranza. Influyó en las nuevas ideas liberadoras en Jmérica Latina y en la teología de la liberación, en las
renovaciones edagógicas euro eas y africanas, y su figura es referente constante en la olítica liberadora y en a
educación. Fue emigrante y exilado or razones olíticas or causa de las dictaduras. or mucho tiem o, su domicilio
fue el Consejo Mundial de las Iglesias en Ginebra, Suiza.c c
c
c
Deshumanizaciónc
c
La «deshumanización» es la consecuencia de la o resión, y afecta a
los o rimidos y a quienes o rimen. c
Los o rimidos, en reacción contra los o resores, a quienes
idealizan, desean convertirse a su vez en o resores. Es una gran
contradicción, que desafía al o rimido ro oniéndole una nueva
fórmula, transformarse en los restauradores de la libertad de ambos.
c
c c
c
la realidad. La educación bancaria es, or tanto, un instrumento de
o resión.c
liberación humanizándose. c
c c
a dialogicidad: sencia de la educación como práctica de
libertadc
c
El diálogo es un fenómeno humano or el cual se nos revela la
alabra, de la que odemos decir que es el diálogo mismo. or ello
hay que buscar la alabra y sus elementos constitutivos. Descubrimos
así que no hay alabra verdadera que no sea una unión
inquebrantable entre acción y reflexión y, or ende, que no sea
raxis. De ahí que decir la alabra verdadera sea transformar el
mundo. c
La alabra inauténtica no uede transformar la realidad, ues
rivada de su dimensión activa, se transforma en alabrería, en mero
verbalismo, alabra alienada y alienante, de la que no hay que es erar c
la denuncia del mundo, ues no osee com romiso al no haber
acción. Sin embargo, cuando la alabra hace exclusiva referencia a
la acción, se convierte en activismo, minimiza la reflexión, niega la
raxis verdadera e im osibilita el diálogo. c c
Los hombres no se hacen en el silencio, sino en la alabra, en el «a noche de los pobres», de Diego
trabajo, en la acción, en la reflexión. El diálogo im lica un encuentro ivera c
de los hombres ara la transformación del mundo, or lo que se c
convierte en una exigencia existencial. c
Y no odemos dejar de recordar que ara Freire, la alabra tiene
dos fases constitutivas indisolubles: acción y reflexión. Jmbas en
relación dialéctica establecen la raxis del roceso transformador. La
reflexión sin acción, se reduce al verbalismo estéril y la acción sin
reflexión es activismo. La alabra verdadera es la raxis, orque los
hombres deben actuar en el mundo ara humanizarlo, transformarlo
y liberarlo.c
c
c
c
c